Abadesa Gertrudis Nin: "Me gustaría que una mujer pudiera llegar a ser sacerdote"
Escribo este artículo el día 16 de noviembre, fecha en la que el santoral nos recuerda que se celebra la fiesta de Santa Gertrudis. ¡Que casualidad! Porque mi escrito va a ir dedicado a otra Gertrudis que también es religiosa y para más señas abadesa del monasterio de Sant Pere de les Puel·les en Barcelona. Su nombre ha aparecido en casi todos los medios de comunicación por haber mandado un comunicado en que comenta y matiza algunos aspectos de la celebración de la Santa Misa que nuestro Romano Pontífice celebró en la basílica de la Sagrada Familia.
Coincide su escrito con un cierto revuelo que se ha creado en los medios de comunicación catalanes (prácticamente todos afines al progresismo gobernante), sobre todo porque al feminismo militante le ha parecido humillante que unas religosas limpieran el altar después de haber sido consagrado con el óleo santo. La cuestión es que la mayoría de medios se equivocaron al identificar a esas religiosas y dijeron que eran del monasterio del que es abadesa la Madre Gertrudis Nin. Así que la buena mujer se ha encargado de desmentir el error, pero ha aprovechado para decir que "no se dio una imagen adecuada al papel de la mujer en la Iglesia" y que en la celebración papal "se desaprovechó una ocasión única".
Las siete religiosas que realizaron este servicio fueron realmente las de Cristo Sacerdote que cuidan admirablamente de la sacristía y de que todo esté a punto en las celebraciones de la Catedral de Barcelona. Los medios las han buscado intentanto convencerlas de que lo que hicieron fue denigrante como mujeres, pero ellas lo único que han dicho es que estuvieron "encantadas" de hacer lo que hicieron y que se lo tomaron como un gran "regalo". Pero no piensan lo mismo las religiosas de Sant Pere de les Puel.les, por eso han emitido ese comunicado para que quede claro que ellas nunca harían algo semejante, porque según comentó la Abadesa Gertrudis en TV3: "la mujer podía haber hecho muchas otras cosas" en la celebración.
De hecho la abadesa se encontraba en el interior del templo de la Sagrada Familia y vio en directo todo lo que allí sucedió. Cuando aparecieron las religiosas de Cristo Sacerdote para limpiar el altar, la monja que la Madre Gertrudis tenía a su lado le comentó: "parece que las mujeres sólo sirven para limpiar". Preguntada por el entrevistar Josep Cuní si ella estaba de acuerdo con lo que le dijo su compañera, no lo dudó: "Yo pienso lo mismo". Ahondando en la cuestión la abadesa afirmó: "la mujer en la Iglesia está pero no se la visibiliza. No se la tiene demasiado en cuenta".
Está afirmación auguraba la pregunta siguiente y es si según ella la mujer debería poder llegar a ejercer el sacerdocio, la respuesta fue bien clara: "Me gustaría que una mujer pudiera llegar a ser sacerdote, y tienen que darse pasos en este sentido. La mujer tiene que tener un papel más significativo en la Iglesia". El argumento es bien tópico: "la mujer cada día tiene un papel más importante en la sociedad y en la Iglesia también tendría que ser así". Resumiendo que la Iglesia tiene que hacer lo que hace la sociedad, no lo que diga Cristo.
Como si no tuvieramos bastante con Sor Teresa Forcadas y con Sor Lucía Caram, ahora nos sale toda una abadesa también con el cuento feminista, claro que no llega al nivel del abad de Montserrat diciendo que hay que regular el aborto.
Yo le recomendaría a la Madre Gertrudis que no perdiera tanto el tiempo en enviar comunicados y aparecer en los medios de comunicación para desmarcarse de las admirables religosas de Cristo Sacerdote (que por cierto a diferencia de ellas, sí que tienen vocaciones). Y que lo dedicara a lo que hacía su santa patrona, Santa Gertrudis: a propagar la devoción al Sagrado Corazón y el culto a San José.
Antoninus Pius