Nueva novela: Yo fui secretario de León XIV
Últimamente, me encuentro cada dos por tres con las mismas preguntas de los lectores: ¿y si las cosas siguieran igual de mal en la Iglesia en lugar de arreglarse? ¿Y si se pusieran aún peor? Son preguntas más que comprensibles en estos tiempos de crisis eclesial, sobre todo cuando uno va viendo que pasan los años y no parece que se vislumbre una solución en el horizonte.
Esas preguntas me preocupan tanto como a los lectores, así que he escrito una novela para hablar de ellas: Yo fui secretario de León XIV. Memorias de un futuro próximo.
En un futuro más o menos cercano, a cuatro o cinco desastrosos pontificados del presente, la Iglesia no solo no ha mejorado sino que ha ido cayendo más y más bajo, hasta el punto de que humanamente está agonizante, el Vaticano se encuentra en bancarrota y el papado está completamente desprestigiado. Claro que el mundo no está mucho mejor. El estancamiento del progreso, la desorientación moral y la crisis demográfica han hecho que Occidente pierda el liderazgo mundial y vegete en la irrelevancia, la desunión y el paganismo. Mientras tanto, en Oriente y África, tres grandes bloques guerrean entre sí de forma casi permanente.