Ejercicios en Alcalá: fin de fiesta con el credo legionario
Horario sencillo. Laudes, desayuno, meditación, tiempo libre para la oración, misa y comida. Por la tarde, segunda meditación, exposición del Santísimo, reserva y vísperas. Ejercicios en silencio y mucha tranquilidad. Muy grata la visita el miércoles de D. Juan Antonio Reig Pla, obispo diocesano, con el que tuve la oportunidad de charlar largo y tendido y eso que era un “ratito” porque tenía que marchar de nuevo a Alcalá.
Alguna noche nos encontramos para hablar de cosas del día a día, pero poca cosa.
Ya. Que están moscas con lo de credo legionario.
Comprendido. Que qué tiene que ver la legión con los ejercicios espiritiuales de los curas de Alcalá.
Hoy, último día de ejercicios, ya que hemos terminado con la celebración de la santa misa y la comida, he querido que fuera un día “martirial”. El otro día se lo pude decir a D. Juan Antonio: “a ver, señor obispo, que yo sé que el viernes es San Juan Bosco, pero son sacerdotes de Alcalá, sus patronos son los mártires Justo y Pastor y, además, en la diócesis está la catedral de los mártires, Paracuellos. Yo quería en vez de celebrar a san Juan Bosco, que los sacerdotes lo pueden hacer por la tarde, hablar esa mañana del martirtio y celebrar la liturgia, al menos durante la mañana, de los mártires. Le parece bien?” Me parece una excelente idea, me respondió. Sea, pues.
Laudes del común de mártires, meditación sobre el martirio y misa de los mártires. Y ahí viene lo de la legión.
Un punto del credo legionario es sobre la muerte y dice así: “El morir en el combate es el mayor honor. No se muere más que una vez. La muerte llega sin dolor y el morir no es tan horrible como parece. Lo más horrible es vivir siendo un cobarde“. Ya sé que hubiera sido más propio citar a san Justino o a san Ignacio de Antioquía, pero como resulta que ya había hablado de ellos largamente en la meditación, me venía muy bien lo del credo este.
Inicié con el credo legionario la homilía para decir a mis hermanos que dar la vida entera en martirio de una vez, si así lo quiere Dios, o darla cada día gota a gota ofreciendo las incomodidades, los ultrajes, los insultos o vejaciones por fidelidad a Cristo no es tan horrible. Lo horrible es que un sacerdote viva como cobarde, callado, medio escondido, por si le dicen algo, por el qué dirán, por si se meten con él. No merece la pena ser sacerdote cobarde.
Les hablé del ejemplo de algunos martirizados en Paracuellos, en concreto los agustinos, mis hermanos agustinos del Escorial. En una de las sacas el provincial, el hoy beato Avelino Rodríguez, pidió permiso, al pie de la fosa, para despedirse de sus hermanos de hábito. Cuentan los testimonios que abrazó a cada uno de ellos y les fue dando la absolución, absolución innecesaria porque quedarían lavados con su sangre. Perdonó a los milicianos y dijo a los religiosos: “acordaos de para qué entramos en religión. Viva Cristo Rey. Hasta el cielo". Que estos ejemplos nos enseñen a vivir el sacerdocio como donación martirial hasta el fin.
En el momento del ofertorio, tras presentar el pan y el vino en el altar, he pedido a los sacerdotes ponernos un momento de rodillas. Y allí, con la emoción agarrada a la garganta y al corazón, en nombre de todos me he atrevido a decir: “Señor, un día te dijimos sí y te entregamos la vida para ser sacerdotes. Si tu voluntad es que además de la vida ya entregada ahora te regalemos la sangre, bendito seas. Danos fuerza para que en ese momento, si fuese tu voluntad, no desfallezcamos".
La misa se hizo densa. A Cristo entregado en la cruz en la celebración se le unieron las vidas de unos sacerdotes que yo sé no queremos ser cobardes. Él nos auxiliará en la debilidad.
26 comentarios
¡Bendito sea por siempre el Señor!
¡Benditos y valientes sean por siempre sus fieles sacerdotes!
Gracias, D. Jorge.
Aunque en mi caso soy católico seglar también le pido a Cristo serle fiel siempre y que me fortalezca en mis momentos de debilidad o peligro.
Leyendo este emocionante y emotivo post entiendo mejor las palabras de Cristo: "Donde dos o más se reúnen en mi nombre, allí estoy Yo, en medio de ellos"
Muchas gracias..
No solo como sacerdotes, nosotros como bautizados, suplicamos con ustedes.
Que la Virgen y la sangre de su Divino Hijo nos conforte en los momentos de debilidad, que precisamente por esa debilidad, brille con más fuerza la luz de Cristo.
¡Que viva y reine Cristo Rey, por siempre!
El gobierno comunista-socialista de hoy parece calcado al de la Segunda República, por sus falsedades, mentiras y objetivos. Por desgracia, "quien desconoce la historia está condenado a repetirla".
Así que parece bastante probable que comiencen las sacas en el futuro cercano, como la mencionada de Paracuellos.
Así mismo, no entiendo que un hombre que haya entregado su vida a Cristo-Dios al ser ordenado sacerdote, se enfade y soliviante ante herejías que atentan contra la fe, es decir, contra el núcleo de su corazón. Esto es ser poco ecuménicoLuterotestigodelevangelioquiensoyyoparajuzgarviva la pachamamista. y así no avanzamos en acogida y apertura.
¡Hala! A sonreír con cara de bobos para intentar gustar a satanás.
Benedicta tu in mulieribus, et benedictus fructus ventris tui, Iesus.
Sancta Maria, Mater Dei, ora pro nobis peccatoribus,
nunc, et in hora mortis nostrae. Amen.
Gracias don Jorge por recordar esa sangre gloriosa.
___________________________VINCEMMO, VINCEREMO. ✠
Ante el monumento legionario, presidido por el Cristo de la Buena Muerte, y desde las filas de la gloriosa Legión, recordamos a quienes murieron con nobleza y honor.
“Un cobarde es incapaz de mostrar amor; hacerlo está reservado para los valientes.” GANDHI
La valentía de la Fe se puede ver en el libro “La Barraca de los sacerdotes, Dachau, 1938-1945”, y ha sido escrito por el periodista Guillaume Zeller, editor en jefe de DirectMatin.fr, destaca“dignidad asombrosa de los sacerdotes, aún en las peores agresiones de los carceleros SS, Dachau es el mayor cementerio de sacerdotes católicos del mundo, estuvieron más de 2500 religiosos y murieron más de 1000.
Dios lo bendiga siempre y lo guarde de todo mal.
Aunque todavía sólo son legionarios los militares de ese noble y aguerrido cuerpo, se acercan tiempos ya no lejanos en que legionarios podremos ser cualquiera que defendamos nuestras convicciones a pesar de la mayoría dominante y dictatorial. Siempre me ha estremecido especialmente el heroísmo de aquellos que aparentemente parecían carecer de las cualidades que lo caracterizan (gran valor, iniciativa, arrojo...), pero que a la hora de la verdad fueron auténticos novios de su fe y sus convicciones, aunque ello les hiciera ser, sin pretenderlo, novios de la muerte.
Me ha recordado Ud. al referirse al Credo Legionario, aquellos versos de Calderón, que también fue soldado y sacerdote, en "El soldado español de los Tercios", y decían así:
"... Aquí, en fin, la cortesía
el buen trato, la verdad,
la firmeza, la lealtad,
el honor, la bizarría,
el crédito, la opinión.
la constancia, la paciencia,
la humildad y la obediencia,
fama, honor y vida son
caudal de pobres soldados;
que en buena o mala fortuna
la milicia no es más que una
religión de hombres honrados"
Le rezo su Avemaría.
PS: Una duda que tengo: ¿Socio fue con usted o lo dejó encarrilado en su pueblo?
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Jorge:
Se quedó con unos buenos amigos. Es que además Socio es de natural poco piadoso. El P. Iraburu lo achaca a la falta de la gracia bautismal, pero la cosa tiene mal arreglo.
Que nuestros hermanos mártires rueguen por nosotros. Viva nuestro Señor Jesucristo, verdadero hombre y verdadero Dios.
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Bueno, pues ya me hizo llorar...
No sabe lo que es para algunos de nosotros saber que aún hay pastores fieles en los que confiar, y más viendo lo que tenemos en nuestras parroquias.
Ave María...
Muy querido D. Jorge:
¡El Cordero degollado nos reconcilia con Dios y con los demás! ¡Aleluya!
Ando tarde en la lectura de sus artículos, pero me alegra muchísimo que les haya dado los Ejercicios Espirituales a los sacerdotes de Alcalá y me alegra muchísimo todo el resto que nos cuenta en este precioso artículo.
Podemos decir acerca de la santa Iglesia de Dios: “¡Qué bella es esta casa de Dios, donde reside su Nombre!”
Podemos decir de los Ejercicios que usted ha dado: ¡qué maravilla eso de que, a Cristo entregado en la cruz, en la celebración se le uniesen, como usted bien señala, “las vidas de unos sacerdotes que yo sé no queremos ser cobardes”!.
¡Qué maravilla que Él nos auxilie en la debilidad!
Un abrazo muy fuerte, muy querido D. Jorge:
José Mari, franciscano
Y otro abrazo muy fuerte a sus queridos comentaristas.
A un amigo, abuelo también, le encargaron sus hijos buscar una catequesis para que la nieta de 7 años, comenzara a prepararse para la Primera Comunión. Fue por un par de parroquias, "tomando el pulso" a la formación que podría esperarse preguntando: "¿van a darle a mi nieta formación suficiente para aceptar el martirio si fuera necesario?"...
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Respecto de Socio, no obstante los insuperables obstáculos para sacramentarlo, queda abierta para él la posibilidad de acceder a la hornacina de los altares, parangonándose con la cierva de San Gil, el cuervo de San Elías, el cochinillo de S. Antón, el lobo de S. Francisco, el pez de S. Rafael, o los peces y avecicas de S. Antronio ... aunque qué duda cabe, que por poco piadoso, Socio quedará como de segunda división ante el perro de S. Roque, que aliviaba las llagas del santo.
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Ave María, gratia plena ....
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