Pecadores orgullosos
«Los afeminados recorrían las calles de Cartago con cabello ungido, rostros maquillados, cuerpos relajados y andares mujeriles, exigiendo a la gente los medios para mantener sus vidas ignominiosas.»
San Agustín (Civ. Dei VII,26)
Como ven ustedes, lo del Orgullo Gay no es cosa nueva. Pecar y hacer exhibición del pecado es propio de los que van camino del infierno. San Pablo lo explicó muy bien en Romanos:
Dios los entregó a pasiones deshonrosas, pues sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contrario a la naturaleza, y del mismo modo los varones, dejando el uso natural de la mujer, se abrasaron en deseos de unos por otros, cometiendo torpezas varones con varones y recibiendo en sí mismos el pago merecido por sus extravíos. Y como demostraron no tener un verdadero conocimiento de Dios, Dios los entregó a un perverso sentir que les lleva a realizar acciones indignas, colmados de toda iniquidad, malicia, avaricia, maldad; llenos de envidia, homicidio, riñas, engaño, malignidad; chismosos, calumniadores, enemigos de Dios, insolentes, soberbios, fanfarrones, inventores de maldades, rebeldes con sus padres, insensatos, desleales, desamorados, despiadados. Ellos, aunque conocieron el juicio de Dios -que quienes hacen estas cosas merecen la muerte-, no sólo las hacen, sino que defienden a quienes las hacen.
Rom 1,26-32
No hay mejor apoyo para el pecador que otro que peca en lo mismo. Siempre encuentran una razón para justificar su iniquidad. En el caso de los adúlteros , amancebados y parejas homosexuales, la excusa suele ser el amor. “Si nos amamos, Dios, que es amor, no puede estar en contra".
En todo caso, es prácticamente imposible que quien vive voluntariamente alejado de la gracia de Dios se dé cuenta de su error y se arrepienta. El verdadero drama para el alma no es que peque, sino que se cierre las puertas al arrepentimiento. Dios salva al pecador que busca el perdón y la gracia de la conversión. Dios condena irremisiblemente a quien justifica sus pecados y no busca cambiar de vida.
Hay, sin embargo, ciertos sujetos para los que está reservado la zona más calurosa del infierno. Son aquellos que, teniendo el deber y el ministerio de conducir a las almas a la salvación, son instrumentos de Satanás que empujan al abismo de la condenación a los pecadores, negándoles el acceso a la verdad, a la gracia, al arrepentimiento y al perdón.
Uno de ellos fue Lutero, que dijo aquello de “peca fuertemente pero cree fuertemente". El inventor del solafideísmo tenía una concepto de la gracia de Dios absolutamente patético, pues la consideraba incapaz de provocar un cambio radical en la vida del fiel. Por eso enseñaba que con creer era suficiente. Pero como dice la epístola de Santiago, los demonios también creen y tiemblan.
Hoy los siervos de Lucifer, esos que se disfrazan como apóstoles de Cristo, ofrecen una misericordia bastarda, falsa, inicua. “No te preocupes, que Dios te ama, hagas lo que hagas". Llaman bien al mal. Se burlan de la advertencia que Dios dio por medio del profeta Ezequiel:
Si digo a un malvado. «Vas a morir» y tú no le adviertes ni le insistes para que se convierta de su mal camino y viva, el impío morirá por su culpa, pero demandaré su sangre de tu mano.
Ez 3,18
Les prometen a sus prosélitos el cielo mientras les llevan de la mano al infierno. Les esconden la puerta estrecha que lleva a la salvación mientras adornan con discursos buenistas y llenos de falsedad el dintel de la puerta ancha que lleva a la condenación.
Orgullosos de pecar. Orgullosos de fomentar y justificar el pecado. Orgullosos y soberbios como su padre, Satanás. Con él pasarán la eternidad en el infierno.
Mas nosotros no estamos para ceder ante el mal. Seamos testigos de la verdad que nos salva. No seamos tibios ni de palabra ni de obra. Pidamos a Dios gracia para ser obreros de su Reino. Roguemos a nuestra Madre que interceda por nosotros para que seamos librados de todo mal.
Laus Deo Virginique Matri
Luis Fernando Pérez Bustamante
39 comentarios
"¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios"
La sodomía es pecado, como también la embriaguez. ¿Ni qué decir de aquellos católicos de café, copa y puro que se embriagan sin siquiera pensar que la borrachera es pecado tan mortal como el nefando de varón con varón, o de mujer con mujer?
Condenemos el pecado, no al pecador fulanito o menganito. Porque pecadores públicos que no se arrepienten, católicos de parroquia, no solo hay afeminados, que dice san Pablo.
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LF
Sí, pero no existe el Día del Orgullo alcohólico
Hay pecados de los que nadie está orgulloso, yo diría que todos menos éste.
Este post no habla de ningún pecador en concreto sino de un pecado, así que no hay por qué insistir en qué no se señale al pecador.
El problema de los ignorantes es que no llaman mucho la atención, y no nos damos cuenta de hasta que punto la Iglesia está llena de curas que no estan ni enterados de qué va la fe católica. Comparando con otros países en los que estuve, me parece que mi país, Bolivia, tiene uno de los cleros peor formados de la Iglesia... y no por eso son más humildes, porque si reconocieran su propia ignorancia, fácilmente tendrían los medios para salir de ella.
"¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios"
No nos riamos porque de los que van en carroza o incluso de quienes son de lobbys orgullosos y engañadores de los fieles, hablamos de Crishom, o similares cual olaizolas y jamesmartianos, nadie les toma en serio, salvo los que tienen tentación, que se dejan persuadir desgraciadamente. Por eso claro que acierta don Luis Fernando, porque hacen daño a los que dirigen el mensaje, que son quienes tienen tentaciones. Eso es innegable, y James Martin no es un cualquiera.
Pero qué decir de no pocos católicos de borrachera diaria, semanal, mensual o anual, que ni siquiera piensan que es pecado. Por eso no les hace falta su día, África, lo tienen todo el año. No hay que juzgar ni a unos ni a otros, más si pecado de embriaguez o acto negando, en uno, otro o ambos pecados hemos caído o podremos caer, pero que no se nos olvide jamás la máxima de San Pablo, no vaya a ser que nos pase lo mismo que a los mencionados afeminados.
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LF:
A ver, tampoco vamos a decir que da igual emborracharse continuamente que no:
Lo que os escribí es que no os mezclaseis con quien, llamándose hermano, fuese fornicario, avaro, idólatra, injurioso, borracho o ladrón. Con éstos, ni comer siquiera.
1 Cor 5,15
Es obvio que ha de tratarse de una condición permamente. Beber más de la cuenta ocasionalmente no es pecado mortal.
“Así pues, todos los pecados contra naturaleza, como fueron los de los sodomitas, han de ser detestados y castigados siempre y en todo lugar, los cuales, aunque todo el mundo los cometiera, no serían menos reos de crimen ante la ley divina, que no ha hecho a los hombres para usar tan torpemente de sí, puesto que se viola la sociedad que debemos tener con Dios cuando dicha naturaleza, de la que él es autor, se mancha con la perversidad de la lascivia” .
San Juan Crisóstomo:
“Todas las pasiones llevan consigo un carácter vergonzoso, pero nada más ignominioso que el delirio por personas del mismo sexo, por el cual el alma se degrada más, se cubre más de oprobio, que el cuerpo por las enfermedades físicas.
Los hombres, dice San Pablo, han cambiado los placeres legítimos de la unión conyugal por placeres abominables, rechazando la unión de los sexos conforme a la naturaleza.
Pensad en aquella lluvia que hizo arder a Sodoma. Es imagen en este mundo del fuego real que quema al impúdico en el infierno. ¡Cuán enorme debe ser el pecado que trae el infierno sobre la tierra! ¡Oh hombre! ¡Hasta qué punto degradas tu nobleza!” .
Y San Gregorio Magno:
“Es por haber ardido en deseos perversos venidos de una carne fétida por lo que los sodomitas merecieron perecer a la vez por el fuego y por el azufre, a fin de que un justo castigo les mostrase lo que habían hecho por sus deseos infames” .
Si muchos pecan, entonces no es pecado, entonces es costumbre y las costumbres de los pueblos, nos cuentan los mentidores de nuestro tiempo, es cultura y la cultura no es fiscalizable porque "son sus costumbres"
Roguemos por lo tanto por el alma del arzobispo Vigano, para que perciba el mal del orgullo.
Bendiciones!
Hemos perdido el sentido del pecado.
Hay un ataque frontal a los Sacramentos.
Y sin límites...
"Porque si persistimos voluntariamente en el pecado después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda un sacrificio por los pecados, sino una temible perspectiva de juicio, y una furia de fuego que consumirá a los adversarios. Quien ha violado la ley de Moisés muere sin piedad "por el testimonio de dos o tres testigos". ¿Cuánto peor castigo crees que merecerán los que han despreciado al Hijo de Dios, han profanado la sangre de la alianza por la que fueron santificados y han ultrajado al Espíritu de la gracia?. Hebreos 10:26-31
Aquí lo relevante es el orgullo y no otra cosa. Todos los que hablan de otros pecados o adicciones están desviando la cuestión porque es evidente que ningún otro pecado es motivo de orgullo para nadie. Es más, hay un número no pequeño de homosexuales a los que les repugna ese orgullo y no se sienten representados por las insistentes banderas que cuelgan de edificios oficiales porque tampoco existe ningún otro pecado que tenga una bandera representativa. Este es un caso muy particular porque se ha constituido en lobby y el que empiece a hablar de otros pecados no ha calado en lo que el post quiere decir.
El señor 1 se salvará porque confía en Dios, sabe que es una cuestión de tiempo -y penitencia- que el Señor lo saque de ese tormento. El señor 2, en cambio, si sigue por ese camino inevitablemente se condenará, ni se arrepiente de su pecado, y encima, quiere llevarse con él al abismo a sus conocidos.
Desgraciadamente la iglesia está dirigida desde "arriba" por una serie de "señores 2" que van camino de la perdición de no existir el arrepentimiento por fomentar un pecado gravísimo que no es, por cierto, el de la ludopatía.
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Jajaja, muy bueno...
Creo que se ha entendido.
Saludos en Cristo.
Solo un comentario para hacer énfasis que los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados, lo que significa que todos y cada uno de ellos desde el principio de la humanidad lo son. No es el caso de todos los pecados, por ejemplo mentir, depende de intención con que se haga, algunas veces se le miente a un niño afirmando que una medicina no sabe tan fea, con el propósito que se la tome, aunque sabemos que sabe a rayos.
Dios nos asista.
Aunque, como bien señalas en el artículo, son orgullosos y soberbios como su padre, no tienen temor de Dios, se revuelcan en el fango de su iniquidad. Y cuentan con el apoyo de los amos del mundo, la élite financiera globalista, que es consciente de que su dominio sobre las naciones terminará cuando nos volvamos a Dios y nos sujetemos a Su ley; por eso nuestros gobernantes aprueban leyes cada vez más malvadas, para alejar de nosotros a Aquel que puede salvarnos.
Mola mazo, que diría Camile VI, la letra y la musiquilla. Si la poderosa idustria discográfica y sus idol@s reguetoneros sacaran canciones de esta naturaleza el poder de Satanás entre la juventud se acabaría en un mes.
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