La Iglesia Católica como elemento decorativo de la Europa apóstata
Cuando Hilarión de Volokolasmk, presidente del Departamento de Relaciones Exteriores Eclesiásticas del Patriarcado de Moscú, dijo hace un par de días en Madrid que “la crisis moral es muy actual en los últimos años” y que se observa en todo el mundo, sobre todo en Occidente, cómo “se derrumban” los fundamentos morales tradicionales, quizás se quedó corto. Esos fundamentos ya han sido aniquilados por completo y solo quedan algunos vestigios en las familias cristianas que se resisten a dejarse llevar por la corriente de apostasía que se ha instalado, ¡quién sabe si para quedarse!, en el Viejo Continente.
El último bastión en caer ha sido Malta. La muy católica Malta. La por siempre católica Malta. Ayer acaba de aprobar la equiparación de las uniones homosexuales al matrimonio, con derechos de adopción incluidos. Es posible que muchos católicos tibios -especie muy abundante en esta época- crean que basta con no llamar matrimonio a ese engendro para que sea aceptable. Es ese tipo de católicos que, en su versión española, se convierten en proselitistas de leyes abortistas como la que quiere aprobar el gobierno del señor Rajoy. Es ese tipo de católicos que son cómplices del príncipe de este mundo, que gobierna ahora bajo el disfraz de democracia liberal. Viven más o menos felices en medio de la Sodoma y Gomorra y se conforman con decir cuatro obviedades de vez en cuando.
Dijo también el prelado ortodoxo ruso que el relativismo provoca “hechos inaceptables para un creyente” como “las uniones entre personas del mismo sexo, la prostitución, el aborto y la eutanasia” y abogó por trabajar junto a la Iglesia Católica en España para enfrentar “las amenazas del mundo moderno“.
Las palabras del metropolita Hilarión indican, según mi parecer, varias cosas:
1- Que los ortodoxos rusos no tiene miedo de llamar a las cosas por su nombre.
2- Que saben perfectamente lo que está en juego en Occidente. Y en no pocas ocasiones avisan con más contundencia, al menos en la terminología, que la propia Iglesia Católica. Creen que Moscú es la tercera Roma y actúan como si verdaderamente lo fuera.
3- Que vista la deriva moral de Europa es lógico que, cuestiones nacionalistas y políticas aparte, no quieran que su país tenga nada que ver con ese engendro en que se ha convertido la Unión Europea. Ese factor es más importante de lo que pueda parecer en la crisis ucraniana.
¿Cuál es la alternativa que ofrece la Europa “conservadora"? Pues decir que uno de los logros de la Unión Europea es el fácil acceso a la pornografía. Esos son los valores que nos transmite el Partido Popular Europeo. La derecha “moderada".
Es mi opinión que la Iglesia Católica en Europa debería convertirse en profeta de calamidades. Sé que afirmar esto es ir contracorriente dentro de la propia Iglesia, pero es que, ¡qué quieren que les diga!, mi madre me parió así. Creo que una vez constatado -el que diga otra cosa delira- que se equivocó el Papa que afirmó esto…
En nuestro tiempo, sin embargo, la Esposa de Cristo prefiere usar la medicina de la misericordia más que la de la severidad. Ella quiere venir al encuentro de las necesidades actuales, mostrando la validez de su doctrina más bien que renovando condenas. No es que falten doctrinas falaces, opiniones y conceptos peligrosos, que precisa prevenir y disipar; pero se hallan tan en evidente contradicción con la recta norma de la honestidad, y han dado frutos tan perniciosos, que ya los hombres, aun por sí solos, están propensos a condenarlos, singularmente aquellas costumbres de vida que desprecian a Dios y a su ley, la excesiva confianza en los progresos de la técnica, el bienestar fundado exclusivamente sobre las comodidades de la vida. Cada día se convencen más de que la dignidad de la persona humana, así como su perfección y las consiguientes obligaciones, es asunto de suma importancia. Lo que mayor importancia tiene es la experiencia, que les ha enseñado cómo la violencia causada a otros, el poder de las armas y el predominio político de nada sirven para una feliz solución de los graves problemas que les afligen.
… es hora de que muchos cambien de discurso. No podemos profundizar en ese buen rollismo oficialista, que consiste en cumplir el expediente afirmando las verdades pero sin la energía suficiente como para preocupar demasiado a los gobernantes apóstatas. Una de las cosas buenas que tiene el papa Francisco es que le gusta llamar a las cosas por su nombre cuando habla de la pobreza, el drama de la inmigración, la delincuencia organizada, el aborto, etc. Ese es el camino. No podemos consentir que la Iglesia sea un elemento decorativo más en la Europa apóstata. Y mucho menos podemos consentir, como ocurre en algunas iglesias de países centroeuropeos, que esa apostasía se convierta en un cáncer que destroce el catolicismo, con la pretensión además de infectar al resto de la Iglesia en todo el mundo. Ese peligro es hoy latente. No hace falta que les diga ningún nombre. Ustedes saben de qué y de quién hablo. Que las iglesias más secularizadas, entregadas al adulterio espiritual con la Europa de la pornografía, el aborto y el lobby gay, pretendan marcar el paso de la pastoral al resto de la Iglesia es una locura. No lo permita Dios.
Luis Fernando Pérez Bustamante
55 comentarios
No creo que haya gran distancia en lo sustancial entre los papas, sucesores de San Pedro a quien dijo Jesús "sobre esta piedra edificaré mi Iglesia". En lo accidental, evidentemente hay diferencias. Pero no creo que debamos caer en la tentación de contraponer "buen rollismo oficialista" o "afirmación enérgica de las verdades"; justicia o misericordia; pastoralismo o defensa de la fe y la moral...
En el mismo discurso que citas, Juan XIII no desconocía que el combate de la fe se ha de librar a lo largo de toda la historia, hasta la segunda venida de Nuestro Señor.
"No sin razón el anciano Simeón dijo a María, la Madre de Jesús, aquella profecía que ha sido y sigue siendo verdadera: "Este Niño será puesto para ruina y para resurrección de muchos en Israel y como señal de contradicción". Y el mismo Jesús, ya adulto, fijó muy claramente las distintas actitudes del mundo frente a su persona, a lo largo de los siglos, en aquellas misteriosas palabras: "Quien a vosotros escucha a mí me escucha"; y con aquellas otras, citadas por el mismo Evangelista: "Quien no está conmigo, está contra mí; quien no recoge conmigo, desparrama".
El gran problema planteado al mundo, desde hace casi dos mil años, subsiste inmutable. Cristo, radiante siempre en el centro de la historia y de la vida; los hombres, o están con El y con su Iglesia, y en tal caso gozan de la luz, de la bondad, del orden y de la paz, o bien están sin El o contra El, y deliberadamente contra su Iglesia: se tornan motivos de confusión, causando asperezas en las relaciones humanas, y persistentes peligros de guerras fratricidas.
El supremo interés del Concilio Ecuménico es que el sagrado depósito de la doctrina cristiana sea custodiado y enseñado en forma cada vez más eficaz. Doctrina, que comprende al hombre entero, compuesto de alma y cuerpo; y que, a nosotros, peregrinos sobre esta tierra, nos manda dirigirnos hacia la patria celestial. Esto demuestra cómo ha de ordenarse nuestra vida mortal de suerte que cumplamos nuestros deberes de ciudadanos de la tierra y del cielo, y así consigamos el fin establecido por Dios".
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LF:
Yo me limito a constatar lo que ha ocurrido en Europa desde ese discurso hasta hoy. No veo eficacia por ninguna parte. Veo iglesias locales -o nacionales- secularizadas, secas, pisoteadas por el liberalismo teológico, en constante adulterio con el espíritu de este mundo. Y no te digo en qué ha quedado eso de que "los hombres, aun por sí solos, están propensos a condenarlos, singularmente aquellas costumbres de vida que desprecian a Dios y a su ley". Uno lee una frase así y no puede hacer otra cosa que decir: San Agustín de Hipona, ora pro nobis.
En el mismo discurso que citas, Juan XIII no desconocía que el combate de la fe se ha de librar a lo largo de toda la historia, hasta la segunda venida de Nuestro Señor.
"No sin razón el anciano Simeón dijo a María, la Madre de Jesús, aquella profecía que ha sido y sigue siendo verdadera: "Este Niño será puesto para ruina y para resurrección de muchos en Israel y como señal de contradicción". Y el mismo Jesús, ya adulto, fijó muy claramente las distintas actitudes del mundo frente a su persona, a lo largo de los siglos, en aquellas misteriosas palabras: "Quien a vosotros escucha a mí me escucha"; y con aquellas otras, citadas por el mismo Evangelista: "Quien no está conmigo, está contra mí; quien no recoge conmigo, desparrama".
El gran problema planteado al mundo, desde hace casi dos mil años, subsiste inmutable. Cristo, radiante siempre en el centro de la historia y de la vida; los hombres, o están con El y con su Iglesia, y en tal caso gozan de la luz, de la bondad, del orden y de la paz, o bien están sin El o contra El, y deliberadamente contra su Iglesia: se tornan motivos de confusión, causando asperezas en las relaciones humanas, y persistentes peligros de guerras fratricidas.
El supremo interés del Concilio Ecuménico es que el sagrado depósito de la doctrina cristiana sea custodiado y enseñado en forma cada vez más eficaz. Doctrina, que comprende al hombre entero, compuesto de alma y cuerpo; y que, a nosotros, peregrinos sobre esta tierra, nos manda dirigirnos hacia la patria celestial. Esto demuestra cómo ha de ordenarse nuestra vida mortal de suerte que cumplamos nuestros deberes de ciudadanos de la tierra y del cielo, y así consigamos el fin establecido por Dios".
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LF:
Yo me limito a constatar lo que ha ocurrido en Europa desde ese discurso hasta hoy. No veo eficacia por ninguna parte. Veo iglesias locales -o nacionales- secularizadas, secas, pisoteadas por el liberalismo teológico, en constante adulterio con el espíritu de este mundo. Y no te digo en qué ha quedado eso de que "los hombres, aun por sí solos, están propensos a condenarlos, singularmente aquellas costumbres de vida que desprecian a Dios y a su ley". Uno lee una frase así y no puede hacer otra cosa que decir: San Agustín de Hipona, ora pro nobis.
16/04/14 11:00 AM
La sodomía es una aberración de cualquier modo, pero es más grave cuando roba el nombre a algo SAGRADO como es el Matrimonio. Creo que debemos cuidar ambas cosas.
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LF:
Lo del nombre es el último peldaño de una escalera que lleva a la equiparación total de esas uniones con el matrimonio. Da casi lo mismo subirlo que no. Se llega igual desde el penúltimo.
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LF:
Lo del nombre es el último peldaño de una escalera que lleva a la equiparación total de esas uniones con el matrimonio. Da casi lo mismo subirlo que no. Se llega igual desde el penúltimo.
16/04/14 11:09 AM
Estoy de acuerdo con LF en que la Iglesia católica en Europa debería convertirse en un profeta de calamidades, pues es claro que cada vez avanza más la apostasía en Europa; y el avance de la apostasía no puede traernos, nos los está trayendo ya, sino grandes males en todos los sentidos y no solamente, aunque sí principalmente, en el plano espiritual o sobrenatural.
Cuando la expansión de cosas tan aberrantes como la pornografía, el divorcio, el aborto, la sodomía, el gaymonio, la adopción de niños por parejas homosexuales, la eutanasia, etc. se consideran como signos de avance y progreso social, es que vamos sin frenos y cuesta abajo directos al precipicio.
El liberalismo de distinto pelaje, ya sea de derechas, de izquierdas o de centro, está haciendo un enorme daño a Europa en el plano sobrenatural y también en el temporal y a la vista están las consecuencias.
Este LF profeta de calamidades, como un nuevo Jeremías u Oseas, y contrario al buen rollismo oficialista concita todo mi interés y adhesión.
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LF:
Yo no soy profeta. Al menos no lo soy más allá de lo que pueda ser cualquiera por el bautismo. Escribo lo que muchos otros piensan. No creo que haga falta ser profeta para darse cuenta de dónde venimos, dónde estamos y hacia dónde vamos si seguimos por la misma senda.
Cuando la expansión de cosas tan aberrantes como la pornografía, el divorcio, el aborto, la sodomía, el gaymonio, la adopción de niños por parejas homosexuales, la eutanasia, etc. se consideran como signos de avance y progreso social, es que vamos sin frenos y cuesta abajo directos al precipicio.
El liberalismo de distinto pelaje, ya sea de derechas, de izquierdas o de centro, está haciendo un enorme daño a Europa en el plano sobrenatural y también en el temporal y a la vista están las consecuencias.
Este LF profeta de calamidades, como un nuevo Jeremías u Oseas, y contrario al buen rollismo oficialista concita todo mi interés y adhesión.
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LF:
Yo no soy profeta. Al menos no lo soy más allá de lo que pueda ser cualquiera por el bautismo. Escribo lo que muchos otros piensan. No creo que haga falta ser profeta para darse cuenta de dónde venimos, dónde estamos y hacia dónde vamos si seguimos por la misma senda.
16/04/14 11:21 AM
Cuando vence el ministerio de la iniquidad es porque la Esposa está perdiendo autoridad.Y ha perdido autoridad por culpa de dos cosas que no se quieren ver:
1-La herejía progre postconciliar que no se ha sabido combatir y habría que ir a una nueva Nicea para quitarla y recuperar símbolos que se quitaron y recuperar la solemnidad y el respeto perdido en la misa por parte de los fieles.
2-La educación.La asignatura de religión en la que no se enseña lo que hay que enseñar por miedo y yo lo entiendo pero sólo en el caso de la escuela pública,en el caso de la concertada no lo entiendo.Los conciertos económicos son el origen de todo.Pero pensemos, los colegios católicos han estado siglos sin concierto y había monjas y comían todas,iban alumnos pobres con beca e iban ricos pagando, y ahora que llegó el concierto los alumnos no salen católicos y por lo tanto no hay monjas.Pues blanco y en botella.
1-La herejía progre postconciliar que no se ha sabido combatir y habría que ir a una nueva Nicea para quitarla y recuperar símbolos que se quitaron y recuperar la solemnidad y el respeto perdido en la misa por parte de los fieles.
2-La educación.La asignatura de religión en la que no se enseña lo que hay que enseñar por miedo y yo lo entiendo pero sólo en el caso de la escuela pública,en el caso de la concertada no lo entiendo.Los conciertos económicos son el origen de todo.Pero pensemos, los colegios católicos han estado siglos sin concierto y había monjas y comían todas,iban alumnos pobres con beca e iban ricos pagando, y ahora que llegó el concierto los alumnos no salen católicos y por lo tanto no hay monjas.Pues blanco y en botella.
16/04/14 12:19 PM
Creo que el problema no viene de los Papas, como alguno pueda pensar, sino sobre todo de la dejación de algunos obispos en sus respectivas diócesis. Por supuesto, no son los únicos culpables (eso lo somos todos en mayor o menor medida) pero son los que están al frente del rebaño y a veces parecen contemporizar demasiado con el Enemigo (en mayúsculas). Creo que muchos fieles se sienten como ovejas sin pastor porque nadie se atreve a llamar las cosas por su nombre. Al metropolita Hilarión se le entiende todo y seguro que en su diócesis no saldrá un Pagola de turno con aval de su Iglesia. Un saludo.
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LF:
Si en su diócesis sale un Pagola, no dura ni cinco minutos. Pero es casi impensable que salga un Pagola. En sus seminarios no han enseñado basura teológica liberal durante décadas.
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LF:
Si en su diócesis sale un Pagola, no dura ni cinco minutos. Pero es casi impensable que salga un Pagola. En sus seminarios no han enseñado basura teológica liberal durante décadas.
16/04/14 12:41 PM
El origen de todos los males morales actuales en Europa es solo uno: la anticoncepción. Verdaderamente el Papa Pablo VI (de él se acuerdan poco, no sé por qué) fue profético con la Humanae vitae. La separación de sexo y procreación ha conducido a: banalización del sexo y consiguiente desprecio del matrimonio, aceptación de la homosexualidad como normal (si el sexo es de todas maneras no-fecundo, qué más da cómo se practique), extensión y legalización del aborto (como "red de seguridad" porque los anticonceptivos fallan). Es el ejemplo más palmario de cómo ir en contra de la ley natural en algo aparentemente menor (hay familias con muchos hijos... poco dinero... la salud de las madres... blabla) conduce inevitablemente al desastre.
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LF:
Tan cierto como que prácticamente nadie en la Iglesia le hizo caso. Ni obispos -salvo algunos-, ni sacerdotes -¿cuántos predican sobre eso?-, ni fieles.
Claro, que el propio Pablo VI se cubrió de gloria cuando desautorizó al obispo norteamericano que osó suspender a un sacerdote que habló públicamente contra la Humanae Vitae.
Es decir, como Papa escribes una encíclica magistral. Un cura te pone a parir y dice que no hay que hacerte caso. Su obispo va y le retira del sacerdocio, ¿y qué haces como Papa? ¡¡¡Desautorizar al obispo!!! ¡¡¡Ole, ole y OLÉ!!!
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LF:
Tan cierto como que prácticamente nadie en la Iglesia le hizo caso. Ni obispos -salvo algunos-, ni sacerdotes -¿cuántos predican sobre eso?-, ni fieles.
Claro, que el propio Pablo VI se cubrió de gloria cuando desautorizó al obispo norteamericano que osó suspender a un sacerdote que habló públicamente contra la Humanae Vitae.
Es decir, como Papa escribes una encíclica magistral. Un cura te pone a parir y dice que no hay que hacerte caso. Su obispo va y le retira del sacerdocio, ¿y qué haces como Papa? ¡¡¡Desautorizar al obispo!!! ¡¡¡Ole, ole y OLÉ!!!
16/04/14 12:45 PM
¡En todo de acuerdo contigo Luis Fernando! ... editado
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LF:
Pues eso. Ya sabes por qué he editado el resto. Obviamente no andas muy desencaminado
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LF:
Pues eso. Ya sabes por qué he editado el resto. Obviamente no andas muy desencaminado
16/04/14 1:08 PM
El monstruo liberal se saca cada vez más su careta "moderada", mostrando al fin sus babeantes y asquerosas fauces.
Ciertamente, apelar a la confianza en la bondad humana y a la omnicomprensión, cuando lo que se exigía era la condena tajante y recia ante un enemigo envalentonado y ensoberbecido, ha sido un error. Error que ha sido entusiastamente acogido por la propia tropa que buscaba una excusa para la claudicación ante el mundo, capitulando sin lucha.
Necios seríamos si no aprendiésemos de la experiencia, que más amarga no podía ser: se ha acabado ya el tiempo de la condescendencia, porque el enemigo se acerca con sus estandartes desplegados.
Ciertamente, apelar a la confianza en la bondad humana y a la omnicomprensión, cuando lo que se exigía era la condena tajante y recia ante un enemigo envalentonado y ensoberbecido, ha sido un error. Error que ha sido entusiastamente acogido por la propia tropa que buscaba una excusa para la claudicación ante el mundo, capitulando sin lucha.
Necios seríamos si no aprendiésemos de la experiencia, que más amarga no podía ser: se ha acabado ya el tiempo de la condescendencia, porque el enemigo se acerca con sus estandartes desplegados.
16/04/14 1:49 PM
Un papa que no nombraré, a fin de que nadie me acuse de injuriarlo, dijo aquello de que el humo de Satanás había entrado en la Iglesia. Acto seguido, se arrellanó cómodamente en una butaca y miró hacia otro lado, sin hacer nada.Su falta de carácter y sus dudas le hicieron un daño enorme a la Iglesia.Y así está la situación.
16/04/14 2:46 PM
Alguno culpa a los Obispos, y vale. Pero también tienen la culpa de estos desastres "globales" la inmensa mayoría de los votantes, especialmente aquellos a los que les queda algo de cristianos. Y los políticos, a los que les queda menos.
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LF:
Tienes toda la razón.
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LF:
Tienes toda la razón.
16/04/14 3:03 PM
El que fuera Cardenal de Bologna, Giacomo Biffi, había señalado la ingenuidad de las advertencias del próximo Santo Juan XXIII, respecto a los "profetas de calamidades". Dicho Cardenal hacía notar que no había profeta alguno, que no hubiera anunciado "calamidades".
Es un defecto de este gran santo, como no faltan en las vidas de otros cristianos canonizados.
Pero también es verdad, que el "laissez faire ,laissez passer", que han practicado cantidad de obispos, es lo que ha permitido el dialogar petulante de tanta ansia de "protagonismo teológico", ansioso de un cuarto de hora ante las cámaras. Era penoso comprobar cómo todo lo "odioso", lo relegaban a Roma (teología de la liberación,posturas tolerantes en demasía en teología moral,sacerdotes rebeldes en contra del celibato, y un prolongado etc.)
Da profunda pena que Europa, difusora tan fecunda otrora del Evangelio (Francisco Javier, misioneros que cristianizaron América, y tantas otras regiones del mundo) se vea ahora presa del hedonismo, y de todo lo opuesto por el diámetro al Evangelio.
Roguemos y mucho, para que el próximo Sínodo de Obispos devuelva la sensatez necesaria a toda la Iglesia de Cristo.
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LF:
Fue conmovedor que hablara de ingenuidad. Pero conociendo el corazón de Juan XXIII, no se puede pensar en otra explicación.
Es un defecto de este gran santo, como no faltan en las vidas de otros cristianos canonizados.
Pero también es verdad, que el "laissez faire ,laissez passer", que han practicado cantidad de obispos, es lo que ha permitido el dialogar petulante de tanta ansia de "protagonismo teológico", ansioso de un cuarto de hora ante las cámaras. Era penoso comprobar cómo todo lo "odioso", lo relegaban a Roma (teología de la liberación,posturas tolerantes en demasía en teología moral,sacerdotes rebeldes en contra del celibato, y un prolongado etc.)
Da profunda pena que Europa, difusora tan fecunda otrora del Evangelio (Francisco Javier, misioneros que cristianizaron América, y tantas otras regiones del mundo) se vea ahora presa del hedonismo, y de todo lo opuesto por el diámetro al Evangelio.
Roguemos y mucho, para que el próximo Sínodo de Obispos devuelva la sensatez necesaria a toda la Iglesia de Cristo.
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LF:
Fue conmovedor que hablara de ingenuidad. Pero conociendo el corazón de Juan XXIII, no se puede pensar en otra explicación.
16/04/14 3:04 PM
Habiendo constatado la bajada de brazos de la Iglesia respecto del combate intelectual y moral contra el liberalismo como fundamento político, y defendiendo la libertad religiosa, el carácter ornamental de la Iglesia en las instituciones es la consecuencia más lógica.
16/04/14 3:35 PM
Tengo la impresión de que los laicos estamos empezando a reaccionar, y que los que más temen esta reacción son la mayoría de nuestros propios clérigos.
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LF:
Yo tengo la impresión de que muchos seglares no son conscientes de que esto no se soluciona echando la culpa a sacerdotes y obispos. Y que tan malo es el clericalismo del pasado como el anticlericalismo disfrazado de "... y tú más".
O sea, no se puede ir de un extremo al otro.
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LF:
Yo tengo la impresión de que muchos seglares no son conscientes de que esto no se soluciona echando la culpa a sacerdotes y obispos. Y que tan malo es el clericalismo del pasado como el anticlericalismo disfrazado de "... y tú más".
O sea, no se puede ir de un extremo al otro.
16/04/14 3:52 PM
Salvo excepciones, los Pastores han sido débiles para condenar las relaciones homosexuales, llamando al mal y al bien por su nombre, sin ambigüedades, sin disociar verdad y misericordia, y sin confundir el pecado con el pecador.
Esta falta de claridad y fortaleza se puede apreciar incluso en las mejores apologías del matrimonio: "A la Iglesia le interesa particularmente la realidad de las uniones de hecho, que no desconoce ni condena..." (Defensa del matrimonio ante el Congreso, Conferencia Episcopal de Chile, 8 de enero del 2013) ¿Que ni condena? ¿Cómo que no? Si la Iglesia siempre ha condenado el pecado, incluso las uniones de hecho.
Esta falta de claridad y fortaleza se puede apreciar incluso en las mejores apologías del matrimonio: "A la Iglesia le interesa particularmente la realidad de las uniones de hecho, que no desconoce ni condena..." (Defensa del matrimonio ante el Congreso, Conferencia Episcopal de Chile, 8 de enero del 2013) ¿Que ni condena? ¿Cómo que no? Si la Iglesia siempre ha condenado el pecado, incluso las uniones de hecho.
16/04/14 4:51 PM
Lo que hace falta es otro gobierno militar que imponga los valores necesarios y se haga cargo de quienes quieren llevar a na nación lejos de los valores de Cristo.
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LF:
La fe se puede proteger de quienes quieren destruirla, pero nunca se puede imponer por la fuerza.
Esa no es solución.
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LF:
La fe se puede proteger de quienes quieren destruirla, pero nunca se puede imponer por la fuerza.
Esa no es solución.
16/04/14 5:01 PM
Hay una serie de conceptos medulares en la predicación milenaria de la Iglesia, que habiendo sido abandonados desde el CVII han precipitado la situación calamitosa a la que te refieres en tu magnífico post, con el que no puedo estar más de acuerdo.
"Santo temor de Dios", "obediencia de la fe", "juicio particular y final", "cielo, infierno, purgatorio", "salvación", "condenación", "pecado mortal": ¿quién los menciona hoy?. El resultado, una pastoral y predicación de tipo moralista, sin la profundidad necesaria, por no confrontar al hombre con las consecuencias últimas de sus actos. Y la consecuencia es que el cristiano se acomoda, cree firmemente -porque nadie le explica lo contrario- que todos al cielo, porque Dios es muy bueno, y al cabo de unos pocos decenios, como quien no quiere la cosa, ya hay un par de generaciones de indiferentes o apóstata. Porque ¿qué falta me hace a mí la Iglesia si tengo a los partidos, a los sindicatos, y a papá Estado que me soluciona la vida?
Creo sinceramente que tanto Juan Pablo II como sus sucesores han estado a la altura en este terreno, no stricto senso como profetas de calamidades, pero sí en el sentido, cada uno en su estilo, de señalar muy clarito a qué conduce una sociedad sin Dios.
En buena parte, el problema ha estado, en mi opinión, en muchos obispos y en muchos seminarios, reconvertidos para su ignominia y para des-gracia del pueblo cristiano, en agentes activos de secularización y apostasía. Trataron no de aggiornarse, sino de conformarse al mundo, olvidando que éste "yace en poder del Maligno".
Y lo peor es que resulta urgente avisar de la que se avecina. Los signos de los tiempos están ahí, y el Señor nos pide que los leamos correctamente. Y como sus pastores están como están y la Reina de los Profetas lo sabe, tiene que tomar cartas en el asunto y hablar claro...
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LF:
¿Qué hicieron tanto Juan Pablo II como Benedicto XVI para poner fin a la secularización interna de la Iglesia que heredaron?
"Santo temor de Dios", "obediencia de la fe", "juicio particular y final", "cielo, infierno, purgatorio", "salvación", "condenación", "pecado mortal": ¿quién los menciona hoy?. El resultado, una pastoral y predicación de tipo moralista, sin la profundidad necesaria, por no confrontar al hombre con las consecuencias últimas de sus actos. Y la consecuencia es que el cristiano se acomoda, cree firmemente -porque nadie le explica lo contrario- que todos al cielo, porque Dios es muy bueno, y al cabo de unos pocos decenios, como quien no quiere la cosa, ya hay un par de generaciones de indiferentes o apóstata. Porque ¿qué falta me hace a mí la Iglesia si tengo a los partidos, a los sindicatos, y a papá Estado que me soluciona la vida?
Creo sinceramente que tanto Juan Pablo II como sus sucesores han estado a la altura en este terreno, no stricto senso como profetas de calamidades, pero sí en el sentido, cada uno en su estilo, de señalar muy clarito a qué conduce una sociedad sin Dios.
En buena parte, el problema ha estado, en mi opinión, en muchos obispos y en muchos seminarios, reconvertidos para su ignominia y para des-gracia del pueblo cristiano, en agentes activos de secularización y apostasía. Trataron no de aggiornarse, sino de conformarse al mundo, olvidando que éste "yace en poder del Maligno".
Y lo peor es que resulta urgente avisar de la que se avecina. Los signos de los tiempos están ahí, y el Señor nos pide que los leamos correctamente. Y como sus pastores están como están y la Reina de los Profetas lo sabe, tiene que tomar cartas en el asunto y hablar claro...
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LF:
¿Qué hicieron tanto Juan Pablo II como Benedicto XVI para poner fin a la secularización interna de la Iglesia que heredaron?
16/04/14 5:30 PM
Bueno, parece que ya estamos viendo el problema que tenemos, ahora sólo falta identificar las causas como única manera de hacerle frente al deterioro, demolición que no lleva pinta de frenar, sino de acelerarse en estos tiempos. ¿por qué será?
16/04/14 5:43 PM
Comentario de LP
Cuando vence el ministerio de la iniquidad es porque la Esposa está perdiendo autoridad. Y ha perdido autoridad por culpa de dos cosas que no se quieren ver:
1-La herejía progre postconciliar...
2-La educación...
Existe un libro interesante de Giorgio Agamben titulado "El misterio del mal. Benedicto XVI y el fin de los tiempos".
Trata sobre la composición bipartita y permixta de la Iglesia (Cuerpo Místico de Satanás y Cuerpo Místico de Cristo), estudiada por Benedicto XVI del teólogo Ticonio (s. IV) -el cual influyó a San Agustín en las dos ciudades Jerusalén-Babilonia-, en relación con el Mysterium Iniquitatis, el hijo de la anomía o Anticristo, el Mesías y la Iglesia como el que retiene de la Segunda Epístola de San Pablo a los Tesalonicenses.
Afirma que la gran discessio (Benedicto XVI) de la Iglesia, la apostasía, procederá, siguiendo la tesis de Ticonio, de la parte oscura, pecadora y satánica del mismo interior de la Iglesia -el pecado interno de la Iglesia-, que protagonizará la gran apostasía previo a la revelación del "sin ley que se cree Dios".
Es decir, la Iglesia ortodoxa es "lo que/el que retiene", y cuando sea el momento, el pueblo de Dios de la apostasía se revelará como tal y seguirá al inicuo. La Iglesia del Anticristo será la parte oscura de la misma Iglesia, ahora todavía no apartada.
Cuando vence el ministerio de la iniquidad es porque la Esposa está perdiendo autoridad. Y ha perdido autoridad por culpa de dos cosas que no se quieren ver:
1-La herejía progre postconciliar...
2-La educación...
Existe un libro interesante de Giorgio Agamben titulado "El misterio del mal. Benedicto XVI y el fin de los tiempos".
Trata sobre la composición bipartita y permixta de la Iglesia (Cuerpo Místico de Satanás y Cuerpo Místico de Cristo), estudiada por Benedicto XVI del teólogo Ticonio (s. IV) -el cual influyó a San Agustín en las dos ciudades Jerusalén-Babilonia-, en relación con el Mysterium Iniquitatis, el hijo de la anomía o Anticristo, el Mesías y la Iglesia como el que retiene de la Segunda Epístola de San Pablo a los Tesalonicenses.
Afirma que la gran discessio (Benedicto XVI) de la Iglesia, la apostasía, procederá, siguiendo la tesis de Ticonio, de la parte oscura, pecadora y satánica del mismo interior de la Iglesia -el pecado interno de la Iglesia-, que protagonizará la gran apostasía previo a la revelación del "sin ley que se cree Dios".
Es decir, la Iglesia ortodoxa es "lo que/el que retiene", y cuando sea el momento, el pueblo de Dios de la apostasía se revelará como tal y seguirá al inicuo. La Iglesia del Anticristo será la parte oscura de la misma Iglesia, ahora todavía no apartada.
16/04/14 6:15 PM
LFPB, normalmente estoy de acuerdo contigo pero hoy disiento radicalmente. Parece que piensas que Rusia es poco menos que un paraíso de sólida doctrina y fe cristiana...y nada más lejos de la verdad. En lo que a apostasía se refiere, Rusia está igual o peor que nosotros. La cifra de práctica religiosa es bajísima, en torno al 7-8 por cien de asistencia a misa semanal(es decir, menos que en la secularizadísima Francia, en tanto que en España estamos en torno al 30 por cien), la cifra de ateísmo anda en torno al 30 por cien (bastante más que en España) y la cifra de abortos es mucho peor que la española (en torno al millón anual, téngase en cuenta que la población rusa es como el triple de la española, con lo que esa cifra equivaldría a más de 300000 abortos anuales en nuestro país).
Y no culpemos de todo al Beato (futuro San) Juan XXIII con su famoso discurso. Él sabía muy bien que las condenas y las profecías de desventuras que tanto te gustan y que tanto se prodigaban en los años anteriores al Concilio tenían un efecto escaso o nulo. Y que la actuación del Santo Oficio no impedía que se difundiera la heterodoxia pero sí que se desarrollara un pensamiento que pudiera oponerse a la marea marxista y existencialista que lo invadía todo. Lo único que tenía entonces la Iglesia "oficial" que oponer a eso era una escolástica rígida y apolillada, y pretender que con eso se podía combatir la marea de errores, herejías y falsas filosofías que bullía por debajo de la brillante superficie de la Iglesia de entonces es como intentar combatir tanques con arcos y flechas.
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LF:
No, no, Rusia no es un paraíso. Yo no he dicho eso. Lo que digo es que los obispos ortodoxos rusos no tienen pelos en la lengua.
Al beato no le culpo de nada. No estuvo él en la barca de Pedro tras el Concilio. Pero esa parte del discurso no hay por dónde cogerla.
Eso de que las condenas anteriores tenían un efecto nulo es absurdo. Los seminarios permanecían protegidos de esa marea. Luego, quedaron en manos de los heterodoxos.
Y no culpemos de todo al Beato (futuro San) Juan XXIII con su famoso discurso. Él sabía muy bien que las condenas y las profecías de desventuras que tanto te gustan y que tanto se prodigaban en los años anteriores al Concilio tenían un efecto escaso o nulo. Y que la actuación del Santo Oficio no impedía que se difundiera la heterodoxia pero sí que se desarrollara un pensamiento que pudiera oponerse a la marea marxista y existencialista que lo invadía todo. Lo único que tenía entonces la Iglesia "oficial" que oponer a eso era una escolástica rígida y apolillada, y pretender que con eso se podía combatir la marea de errores, herejías y falsas filosofías que bullía por debajo de la brillante superficie de la Iglesia de entonces es como intentar combatir tanques con arcos y flechas.
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LF:
No, no, Rusia no es un paraíso. Yo no he dicho eso. Lo que digo es que los obispos ortodoxos rusos no tienen pelos en la lengua.
Al beato no le culpo de nada. No estuvo él en la barca de Pedro tras el Concilio. Pero esa parte del discurso no hay por dónde cogerla.
Eso de que las condenas anteriores tenían un efecto nulo es absurdo. Los seminarios permanecían protegidos de esa marea. Luego, quedaron en manos de los heterodoxos.
16/04/14 6:15 PM
El enemigo no esta afuera si no que adentro de la iglesia: religiosos heterodoxos, liberales, complacientes, tibios, cobardes, amigos de los aplausos. Este tipo de gente que va a andar evangelizando? A quien van a convertir? Enseñan los conceptos de amor, igualdad, derechos humanos al gusto del mundo secularizado.
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LF:
También está fuera.
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LF:
También está fuera.
16/04/14 6:19 PM
¿Impidió la condena del nazismo que Austria se echara en brazos de Hitler, que los obispos franceses apoyaran en masa a Pétain, que los croatas apoyaran el régimen filonazi de Ante Pavélic? ¿Impidió la condena del comunismo el diálogo cristiano-marxista, que había alcanzado tales cotas en 1948 que Pío XII tuvo que decretar excomunión contra los comunistas? ¿Impidió la "Humani Generis" que Teilhard de Chardin siguiera difundiendo sus desatinos teológicos? ¿Frenó la actuación del Santo Oficio en los años 50 a Karl Rahner y sus discípulos? ¿Hizo caso alguien a Pío XII cuando denunció el exterminio de la Iglesia china por Mao Tse Tung? Podría aportar ejemplos semejantes a kilos para demostrarte la inutilidad de las condenas en las dos o tres décadas anteriores al Concilio.
Comprendo que resulta muy cómodo culpar de todo a Juan XXIII y su discurso (que yo considero, por el contrario, brillante: de hecho es una condena disfrazada al secularismo, el ateísmo filosófico y el materialismo), al Concilio y a Pablo VI a la par que se es nostálgico de lo que había antes. Pero yo sostengo que las cosas no son tan simples y que antes del Concilio por debajo de la superficie esplendorosa de la Iglesia había un caldero hirviendo de problemas y fermentos de crisis que empezaron a bullir ferozmente durante el Concilio y que estallaron justo al terminar éste, pringándolo todo de porquería.
Puede que los obispos ortodoxos hablen sin pelos en la lengua, pero ¿es eso siempre lo más adecuado para que te escuchen y mejor aún para que te hagan caso? Porque es de eso de lo que se trata, a fin de cuentas. ¿De qué sirve, p.e., que nos desgañitemos condenando las uniones homosexuales si nadie nos hace caso salvo una pequeña minoría? No conseguimos nada salvo irritarnos y frustrarnos. Otro ejemplo más claro aún es el del aborto. Las condenas papales y episcopales han sido continuadas durante estas últimas décadas. Resultados: cero. O el de la eutanasia: tampoco se ha conseguido nada en absoluto, todo lo contrario (cada vez se están dando más facilidades).
¿Que qué propongo yo? No propongo nada, sólo digo que las cosas no son tan simples como parecéis creer.
---
LF:
Una cosa es cierta. Ni todo lo que había antes del Concilio era color de rosa ni hay un solo texto del concilio que justifique la crisis post-conciliar. Pero...
¿Impidió la predicación de Jeremías la desafección de Israel? ¿Cuántos reyes de Israel o de Judá siguieron los pasos de Ezequías (Judá) y atendieron a las admoniciones que se les daban? ¿acaso hubo algún profeta al que hicieran caso en todo? ¿y por ello dejaron de hablar?
Ah, pues mira, sí hubo uno al que hicieron caso: Jonás. ¿Y quién le hizo caso? No el pueblo elegido, no. La pagana Nínive.
¿Qué vamos a decir? ¿Que porque el mundo sigue siendo mundo y renuncia a aceptar la luz del evangelio, hemos de apagar esa luz para que no brille demasiado, porque en caso de brillar mucho "molesta" a los ojos acostumbrados a las tinieblas del pecado y la miseria espiritual? ¿acaso los apóstoles procuraron la amistad del mundo para así poder expandir pacíficamente el evangelio? ¿Quién nos ha engañado para hacer que nuestra sal no sale y nuestra luz no ilumine?
Se abrieron las ventanas y entró el humo de Satanás. ¿Y queréis que sigamos respirando ese humo dentro de los atrios de la propia Iglesia?
Pues no. Algunos no nos resignamos a que sea así. Y rogamos para que el Señor envíe profetas y santos que reformen esta Iglesia debilitada por una pastoral de connivencia con el error y que tengan incluso el valor, como santa Catalina de Siena, de hablar con claridad y sin remilgos ante el Vicario de Cristo.
Comprendo que resulta muy cómodo culpar de todo a Juan XXIII y su discurso (que yo considero, por el contrario, brillante: de hecho es una condena disfrazada al secularismo, el ateísmo filosófico y el materialismo), al Concilio y a Pablo VI a la par que se es nostálgico de lo que había antes. Pero yo sostengo que las cosas no son tan simples y que antes del Concilio por debajo de la superficie esplendorosa de la Iglesia había un caldero hirviendo de problemas y fermentos de crisis que empezaron a bullir ferozmente durante el Concilio y que estallaron justo al terminar éste, pringándolo todo de porquería.
Puede que los obispos ortodoxos hablen sin pelos en la lengua, pero ¿es eso siempre lo más adecuado para que te escuchen y mejor aún para que te hagan caso? Porque es de eso de lo que se trata, a fin de cuentas. ¿De qué sirve, p.e., que nos desgañitemos condenando las uniones homosexuales si nadie nos hace caso salvo una pequeña minoría? No conseguimos nada salvo irritarnos y frustrarnos. Otro ejemplo más claro aún es el del aborto. Las condenas papales y episcopales han sido continuadas durante estas últimas décadas. Resultados: cero. O el de la eutanasia: tampoco se ha conseguido nada en absoluto, todo lo contrario (cada vez se están dando más facilidades).
¿Que qué propongo yo? No propongo nada, sólo digo que las cosas no son tan simples como parecéis creer.
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LF:
Una cosa es cierta. Ni todo lo que había antes del Concilio era color de rosa ni hay un solo texto del concilio que justifique la crisis post-conciliar. Pero...
¿Impidió la predicación de Jeremías la desafección de Israel? ¿Cuántos reyes de Israel o de Judá siguieron los pasos de Ezequías (Judá) y atendieron a las admoniciones que se les daban? ¿acaso hubo algún profeta al que hicieran caso en todo? ¿y por ello dejaron de hablar?
Ah, pues mira, sí hubo uno al que hicieron caso: Jonás. ¿Y quién le hizo caso? No el pueblo elegido, no. La pagana Nínive.
¿Qué vamos a decir? ¿Que porque el mundo sigue siendo mundo y renuncia a aceptar la luz del evangelio, hemos de apagar esa luz para que no brille demasiado, porque en caso de brillar mucho "molesta" a los ojos acostumbrados a las tinieblas del pecado y la miseria espiritual? ¿acaso los apóstoles procuraron la amistad del mundo para así poder expandir pacíficamente el evangelio? ¿Quién nos ha engañado para hacer que nuestra sal no sale y nuestra luz no ilumine?
Se abrieron las ventanas y entró el humo de Satanás. ¿Y queréis que sigamos respirando ese humo dentro de los atrios de la propia Iglesia?
Pues no. Algunos no nos resignamos a que sea así. Y rogamos para que el Señor envíe profetas y santos que reformen esta Iglesia debilitada por una pastoral de connivencia con el error y que tengan incluso el valor, como santa Catalina de Siena, de hablar con claridad y sin remilgos ante el Vicario de Cristo.
16/04/14 6:53 PM
Estimado Luis Fernando,
yo no entro a este blog, sino por mi lector de feeds RSS. Es un programa que cada día pasa por toda una larga lista de blogs que yo sigo, y me trae los artículos nuevos.
Hoy el RSS de este blog me spameó con 15 artículos de Infocatólica, entre los que no se encuentra este suyo.
Si continúa el spam voy a tener que dar de baja mi suscripción.
Saludos.
Andrés B.
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LF:
Pues es que yo no tengo ni idea de esas cosas técnicas. Se lo diré a Juanjo, nuestro director técnico.
yo no entro a este blog, sino por mi lector de feeds RSS. Es un programa que cada día pasa por toda una larga lista de blogs que yo sigo, y me trae los artículos nuevos.
Hoy el RSS de este blog me spameó con 15 artículos de Infocatólica, entre los que no se encuentra este suyo.
Si continúa el spam voy a tener que dar de baja mi suscripción.
Saludos.
Andrés B.
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LF:
Pues es que yo no tengo ni idea de esas cosas técnicas. Se lo diré a Juanjo, nuestro director técnico.
16/04/14 7:18 PM
A tu pregunta de qué hicieron tanto JPII como BXVI para acabar con la secularización interna de la Iglesia contesto que hicieron algo importante: ir corrigiendo poco a poco la política de nombramiento de obispos, privilegiando a los de doctrina segura y relegando a los de veleidades progresistas. Esa nueva línea ha sido muy importante para corregir el rumbo, aunque evidentemente los nuevos obispos han tenido en la mayoría de los casos que remar contra corriente, ya que se encontraron diócesis completamente infectadas del virus progresista.Pero al menos la buena semilla ha vuelto a ser sembrada, y aunque la cizaña no la deje crecer fácilmente, confiemos y recemos para que se abra paso.
Ese cambio de línea (perceptible aunque a veces vacilante)es obra de los dos últimos Papas, y ha sido y es fundamental para tener esperanza en el futuro. Sin esa reorientación, la situación sería mucho peor.
---
LF:
Eso fue así en no pocos países. En otros, la cosa no fue a mejor. O al menos no todo lo "mejor" que podría haber sido.
Ese cambio de línea (perceptible aunque a veces vacilante)es obra de los dos últimos Papas, y ha sido y es fundamental para tener esperanza en el futuro. Sin esa reorientación, la situación sería mucho peor.
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LF:
Eso fue así en no pocos países. En otros, la cosa no fue a mejor. O al menos no todo lo "mejor" que podría haber sido.
16/04/14 9:07 PM
Estimado Luis:
Una vez más te animo a ser totalmente sincero, sabedor de que en cualquier momento, por imitar al Precursor (todo bautizado debiera hacerlo; más los pastores)puedes recibir el premio a tu fidelidad: hachazo sobre tu garganta, porque desde el interior corrupto de la Iglesia pretendan hacerte callar y te descalifiquen, y desfiguren tu verdadero rostro, como a Cristo en la 6ª estación del Viacrucis. Alégrate entonces, pues bien sabes lo que dice la 8ª Bienaventuranza.
Quien viendo tantas calamidades y cómo se cierne la Apostasía sobre la Iglesia -imposible de conseguirla con enemigos externos; los Primeros Cristianos, con ellos se multiplicaron- no se sienta llamado a imitar al Profeta Jeremías, puede estar aquejado de una peligrosa ceguera, paranoia, o empanada mental para emplear otro lenguaje. Viene al pelo desde hace décadas el capítulo 5 de Jeremías: “Tus hijos se han apartado de Mí y juran por lo que no es Dios. Yo los harté y se dieron a adulterar; se fueron en tropel a casa de la prostituta. Sementales bien gordos y lascivos, relinchan ante la mujer de su prójimo. ¿No habré de pedirles cuentas de todo esto?” (Jer 5, 7-9).
Pero que no te hagan callar los abanderados de la inquisición liberal, que no admiten que "los laicos, como todos los fieles,... tienen el Derecho, e incluso a veces el deber,de expresar su opinión acerca de lo que mira al bien de la Iglesia" (LG, 37).
Y en mi opinión, Roma no es hoy precisamente la fuente de donde debiera manar el agua que, saliendo del lado derecho del Templo, corre hasta purificar el mar de las aguas salobres(Ez 49,1-9. 12.
Alejandro
Una vez más te animo a ser totalmente sincero, sabedor de que en cualquier momento, por imitar al Precursor (todo bautizado debiera hacerlo; más los pastores)puedes recibir el premio a tu fidelidad: hachazo sobre tu garganta, porque desde el interior corrupto de la Iglesia pretendan hacerte callar y te descalifiquen, y desfiguren tu verdadero rostro, como a Cristo en la 6ª estación del Viacrucis. Alégrate entonces, pues bien sabes lo que dice la 8ª Bienaventuranza.
Quien viendo tantas calamidades y cómo se cierne la Apostasía sobre la Iglesia -imposible de conseguirla con enemigos externos; los Primeros Cristianos, con ellos se multiplicaron- no se sienta llamado a imitar al Profeta Jeremías, puede estar aquejado de una peligrosa ceguera, paranoia, o empanada mental para emplear otro lenguaje. Viene al pelo desde hace décadas el capítulo 5 de Jeremías: “Tus hijos se han apartado de Mí y juran por lo que no es Dios. Yo los harté y se dieron a adulterar; se fueron en tropel a casa de la prostituta. Sementales bien gordos y lascivos, relinchan ante la mujer de su prójimo. ¿No habré de pedirles cuentas de todo esto?” (Jer 5, 7-9).
Pero que no te hagan callar los abanderados de la inquisición liberal, que no admiten que "los laicos, como todos los fieles,... tienen el Derecho, e incluso a veces el deber,de expresar su opinión acerca de lo que mira al bien de la Iglesia" (LG, 37).
Y en mi opinión, Roma no es hoy precisamente la fuente de donde debiera manar el agua que, saliendo del lado derecho del Templo, corre hasta purificar el mar de las aguas salobres(Ez 49,1-9. 12.
Alejandro
16/04/14 10:08 PM
Los ortodoxos rusos-porque los demás no pintan nada- tienen dos caras: la buena y la mala.
La primera es que ellos, que prácticamente siguen igual que hace quinientos años, no han hecho concesión alguna al liberalismo, han dejado la teología a un lado y se han centrado en la adoración y la liturgia. No tienen el problema que nosotros hemos generado confundiendo a Dios con los pobres, tienen muy en cuenta el primer mandamiento:«Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas»
La segunda es que están totalmente atados al poder político, como siempre, con esas exageraciones de hacer santo al Zar Nicolás II y, con el tiempo, a Putin si se tercia. Además son nacionalistas radicales, no es lo mismo Roma que Moscú. Moscú va unida al alma rusa como garrapata al perro con lo que la universalidad de la Iglesia es imposible. Iglesias nacionales bajo la tutela de la Santa Rusia. Son cabezotas y se cierran en banda, ni el calendario lo quisieron reformar, siguen con el juliano.La racionalidad no es lo suyo, lo suyo es el misterio.
Naturalmente en tiempos difíciles tienen el atractivo de un ancla que sujeta firme la barca, y eso es lo que les hace hablar claro y lo que hace que dirijamos hacia ellos la mirada.
La primera es que ellos, que prácticamente siguen igual que hace quinientos años, no han hecho concesión alguna al liberalismo, han dejado la teología a un lado y se han centrado en la adoración y la liturgia. No tienen el problema que nosotros hemos generado confundiendo a Dios con los pobres, tienen muy en cuenta el primer mandamiento:«Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas»
La segunda es que están totalmente atados al poder político, como siempre, con esas exageraciones de hacer santo al Zar Nicolás II y, con el tiempo, a Putin si se tercia. Además son nacionalistas radicales, no es lo mismo Roma que Moscú. Moscú va unida al alma rusa como garrapata al perro con lo que la universalidad de la Iglesia es imposible. Iglesias nacionales bajo la tutela de la Santa Rusia. Son cabezotas y se cierran en banda, ni el calendario lo quisieron reformar, siguen con el juliano.La racionalidad no es lo suyo, lo suyo es el misterio.
Naturalmente en tiempos difíciles tienen el atractivo de un ancla que sujeta firme la barca, y eso es lo que les hace hablar claro y lo que hace que dirijamos hacia ellos la mirada.
16/04/14 10:15 PM
Que esperabas, acaso no hemos tenido paganos entre nosotros o tibios fariseos?
Si los pastores quieren ser ovejas a la ovejas quienes las pastorearán?
Estoy de acuerdo contigo.
---
LF:
La verdad es que en España no tenemos malos pastores en estos momentos. Yo solo de pensar lo que pasaría si tuviéramos algunos de los alemanes...
Si los pastores quieren ser ovejas a la ovejas quienes las pastorearán?
Estoy de acuerdo contigo.
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LF:
La verdad es que en España no tenemos malos pastores en estos momentos. Yo solo de pensar lo que pasaría si tuviéramos algunos de los alemanes...
16/04/14 10:16 PM
De que sirve una iglesia secularizada a una Europa apóstata: De nada. agua solamente cuando en verdad deberia ser vino como el de Cana. Creo que los papas anteriores han trabajado duro ante esta situación pero el mundo va mucho más rapido. No es facidl atajarlo de manera que hemos de anunciar los males que corroen la sociedad. En esto considero que los anteriores papas como el actual han trabajado y trabajan pero ellos no pueden hacer más si toda la iglesia toma conciencia de su misión de ser sal y luz del mundo en este caso de Europa. Desde luego Luis Fernando que la misericordia hay que anunciarla es parte del mensaje del Evangelio asi como el peligro de la condenación.
17/04/14 12:09 AM
Que Europa ha dejado de ser cristiana, es más que evidente, y que los principios morales son un valor a la baja, también.
Hoy he estado de excursión con un grupo de amigos, la mayoría de ellos se confiesan católicos y son personas de buen nivel academico, con estudios universitarios. Me ha preguntado uno de ellos, reciente en el grupo, por mi estado civil, le he contestado que estoy separada. El ha entendido que estoy divorciada, y le he contestado que no soy divorciada porque soy católica y la Iglesia no permite el divorcio, a lo que me ha contestado que la Iglesia permite el divorcio y el matrimonio civil. Y "ha amenazado" con informarse y volver de nuevo a la conversación.
El desconocimiento que hay con todos estos temas, es increible a estas alturas. No estamos hablando de jovencitos, sino de personas maduras que han estudiado en tiempos en dónde se estudiaba religión desde la escuela. Realmente creo que sería muy bueno empezar a proponer seriamente la nueva evangelización de adultos. Luego está el tema de los "emparejamientos". En este mismo grupo abundan las personas separadas o viudas, unos casados por lo civil y otros emparejados. Y viven tan tranquilos. Para mí que esto esté pasando en esta sociedad y no solo entre las parejas jóvenes, es un auténtico escándalo. Es como si de repente todo el mundo hubiera perdido el temor de Dios y con él la vergüenza; incluso quienes haciéndolo, siguen llamándose cristianos. Y vuelvo a repetir, el grupo es de lo mejorcito en cuanto a educación, respeto, incluso galantería. Pero así está la sociedad. De los que se confiesan cristianos y llevan una vida desordenada, unos actuarán por tibieza, otros por desconocimiento y otros (los más) porque creen en un Dios que todo lo perdona, y más los pecados que van contra el sexto.
Enhorabuena Luis Fernando por su comentario, con el que estoy totalmente de acuerdo. Como estoy de acuerdo con la valentía de la Iglesia ortodoxa de no tener miedo a llamar a las cosas por su nombre.
Buena y provechosa espiritualmente Pascua.
---
LF:
Cuando su amigo se informe y vuelva a la conversación, nos cuenta.
Mucho me temo que leerá que la Iglesia está a punto de admitir el divorcio y el recasamiento.
Hoy he estado de excursión con un grupo de amigos, la mayoría de ellos se confiesan católicos y son personas de buen nivel academico, con estudios universitarios. Me ha preguntado uno de ellos, reciente en el grupo, por mi estado civil, le he contestado que estoy separada. El ha entendido que estoy divorciada, y le he contestado que no soy divorciada porque soy católica y la Iglesia no permite el divorcio, a lo que me ha contestado que la Iglesia permite el divorcio y el matrimonio civil. Y "ha amenazado" con informarse y volver de nuevo a la conversación.
El desconocimiento que hay con todos estos temas, es increible a estas alturas. No estamos hablando de jovencitos, sino de personas maduras que han estudiado en tiempos en dónde se estudiaba religión desde la escuela. Realmente creo que sería muy bueno empezar a proponer seriamente la nueva evangelización de adultos. Luego está el tema de los "emparejamientos". En este mismo grupo abundan las personas separadas o viudas, unos casados por lo civil y otros emparejados. Y viven tan tranquilos. Para mí que esto esté pasando en esta sociedad y no solo entre las parejas jóvenes, es un auténtico escándalo. Es como si de repente todo el mundo hubiera perdido el temor de Dios y con él la vergüenza; incluso quienes haciéndolo, siguen llamándose cristianos. Y vuelvo a repetir, el grupo es de lo mejorcito en cuanto a educación, respeto, incluso galantería. Pero así está la sociedad. De los que se confiesan cristianos y llevan una vida desordenada, unos actuarán por tibieza, otros por desconocimiento y otros (los más) porque creen en un Dios que todo lo perdona, y más los pecados que van contra el sexto.
Enhorabuena Luis Fernando por su comentario, con el que estoy totalmente de acuerdo. Como estoy de acuerdo con la valentía de la Iglesia ortodoxa de no tener miedo a llamar a las cosas por su nombre.
Buena y provechosa espiritualmente Pascua.
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LF:
Cuando su amigo se informe y vuelva a la conversación, nos cuenta.
Mucho me temo que leerá que la Iglesia está a punto de admitir el divorcio y el recasamiento.
17/04/14 12:12 AM
Me ha parecido acertadísima la semblanza de los ortodoxos rusos que hace Palas Atenea.
17/04/14 12:59 AM
Ni tan poco ni tan mucho.
En occidente (Europa,América) también hay obispos que hablan claro, y se ve como se escuecen los que se dan por aludidos, o levantan ronchas a los que quisieran no hubiera pronunciamiento de la Iglesia sobre ciertos temas.
La peor apostasía es la del silencio y de la indiferencia. La rebeldía y la protesta indican, aunque confusamente que algo queda, y que se remueve.
No se si en Rusia, la Iglesia ortodoxa habla sin pelos en la lengua, y provoca protestas o tumultos verbales, o si calladamente la sociedad va por otro lado.
Cuando tal sucede ahí si corresponde hablar de una Iglesia decorativa, que ha hecho carpa para vivir eternamente contemplando a Jesús transfigurado, pero no quiere o no sabe vivir su Pasión, Muerte y Resurrección.
En occidente (Europa,América) también hay obispos que hablan claro, y se ve como se escuecen los que se dan por aludidos, o levantan ronchas a los que quisieran no hubiera pronunciamiento de la Iglesia sobre ciertos temas.
La peor apostasía es la del silencio y de la indiferencia. La rebeldía y la protesta indican, aunque confusamente que algo queda, y que se remueve.
No se si en Rusia, la Iglesia ortodoxa habla sin pelos en la lengua, y provoca protestas o tumultos verbales, o si calladamente la sociedad va por otro lado.
Cuando tal sucede ahí si corresponde hablar de una Iglesia decorativa, que ha hecho carpa para vivir eternamente contemplando a Jesús transfigurado, pero no quiere o no sabe vivir su Pasión, Muerte y Resurrección.
17/04/14 2:37 AM
En cuanto a Ucrania, ver el artículo de Religión en Libertad: "El Patriarca de Moscú, normalmente aliado de Putin, molesto y perjudicado por la anexión de Crimea"
17/04/14 3:55 AM
Comentario de LP
Cuando vence el ministerio de la iniquidad es porque la Esposa está perdiendo autoridad. Y ha perdido autoridad por culpa de dos cosas que no se quieren ver:
1-La herejía progre postconciliar...
2-La educación...
Comentario de Jordi
Existe un libro interesante de Giorgio Agamben titulado "El misterio del mal. Benedicto XVI y el fin de los tiempos".
Trata sobre la composición bipartita y permixta de la Iglesia (Cuerpo Místico de Satanás y Cuerpo Místico de Cristo), estudiada por Benedicto XVI del teólogo Ticonio (s. IV) -el cual influyó a San Agustín en las dos ciudades Jerusalén-Babilonia-, en relación con el Mysterium Iniquitatis, el hijo de la anomía o Anticristo, el Mesías y la Iglesia como el que retiene de la Segunda Epístola de San Pablo a los Tesalonicenses.
Afirma que la gran discessio (Benedicto XVI) de la Iglesia, la apostasía, procederá, siguiendo la tesis de Ticonio, de la parte oscura, pecadora y satánica del mismo interior de la Iglesia -el pecado interno de la Iglesia-, que protagonizará la gran apostasía previo a la revelación del "sin ley que se cree Dios".
Es decir, la Iglesia ortodoxa es "lo que/el que retiene", y cuando sea el momento, el pueblo de Dios de la apostasía se revelará como tal y seguirá al inicuo. La Iglesia del Anticristo será la parte oscura de la misma Iglesia, ahora todavía no apartada.
Mi comentario
El padre Alfredo Sáenz básicamente dice lo mismo cuando explica la obra de San Agustín De civitate Dei.
Las dos mujeres del apocalipsis, la mujer vestida de sol, y la ramera, es la misma Iglesia, son los verdaderos católicos y los apostatas.
Muy recomendable la conferencia del padre Alfredo Sáenz
Cuando vence el ministerio de la iniquidad es porque la Esposa está perdiendo autoridad. Y ha perdido autoridad por culpa de dos cosas que no se quieren ver:
1-La herejía progre postconciliar...
2-La educación...
Comentario de Jordi
Existe un libro interesante de Giorgio Agamben titulado "El misterio del mal. Benedicto XVI y el fin de los tiempos".
Trata sobre la composición bipartita y permixta de la Iglesia (Cuerpo Místico de Satanás y Cuerpo Místico de Cristo), estudiada por Benedicto XVI del teólogo Ticonio (s. IV) -el cual influyó a San Agustín en las dos ciudades Jerusalén-Babilonia-, en relación con el Mysterium Iniquitatis, el hijo de la anomía o Anticristo, el Mesías y la Iglesia como el que retiene de la Segunda Epístola de San Pablo a los Tesalonicenses.
Afirma que la gran discessio (Benedicto XVI) de la Iglesia, la apostasía, procederá, siguiendo la tesis de Ticonio, de la parte oscura, pecadora y satánica del mismo interior de la Iglesia -el pecado interno de la Iglesia-, que protagonizará la gran apostasía previo a la revelación del "sin ley que se cree Dios".
Es decir, la Iglesia ortodoxa es "lo que/el que retiene", y cuando sea el momento, el pueblo de Dios de la apostasía se revelará como tal y seguirá al inicuo. La Iglesia del Anticristo será la parte oscura de la misma Iglesia, ahora todavía no apartada.
Mi comentario
El padre Alfredo Sáenz básicamente dice lo mismo cuando explica la obra de San Agustín De civitate Dei.
Las dos mujeres del apocalipsis, la mujer vestida de sol, y la ramera, es la misma Iglesia, son los verdaderos católicos y los apostatas.
Muy recomendable la conferencia del padre Alfredo Sáenz
17/04/14 6:00 AM
Editado:
Es de todo punto imposible que a usted se le publique en este portal -no digo solo en este blog- un comentario que contenga la primera frase que ha usado. La razón, aquí:
http://infocatolica.com/blog/reforma.php/1402040101-257-infocatolica
Se lo digo para que no pierda más el tiempo arremetiendo contra el Papa.
Es de todo punto imposible que a usted se le publique en este portal -no digo solo en este blog- un comentario que contenga la primera frase que ha usado. La razón, aquí:
http://infocatolica.com/blog/reforma.php/1402040101-257-infocatolica
Se lo digo para que no pierda más el tiempo arremetiendo contra el Papa.
17/04/14 10:07 AM
Estimado Luis: dices en este artículo verdades como puños, y ninguna novedad, ciertamente. El tono sí parece más acre.
Me atrevería a decir que eso es por la reacción que suscita leer al metropolita Hilarion proclamar abiertamente y sin miedo las verdades evangélicas más públicamente violentadas en la (in)moralidad contemporánea occidental: temas como el feticidio, la sexualidad rectamente ordenada, el matrimonio natural o el homicidio de moribundos y enfermos crónicos.
Creo que el contraste con las medias tintas y declaraciones políticamente correctas de la mayoría de nuestros pastores es tan evidente que uno no puede dejar de pensar "que sí, que se pueden decir las cosas claramente, sin medias tintas, como ha hecho el obispo Hilarion". ¿Por qué nuestros obispos no pueden hablar tan claro? ¿por qué no pueden ser proféticos, y se empeñan en ser terapeutas sociales?
¿Tal vez por eso tu indignación?
---
LF:
Indignación, no. Pena.
Me atrevería a decir que eso es por la reacción que suscita leer al metropolita Hilarion proclamar abiertamente y sin miedo las verdades evangélicas más públicamente violentadas en la (in)moralidad contemporánea occidental: temas como el feticidio, la sexualidad rectamente ordenada, el matrimonio natural o el homicidio de moribundos y enfermos crónicos.
Creo que el contraste con las medias tintas y declaraciones políticamente correctas de la mayoría de nuestros pastores es tan evidente que uno no puede dejar de pensar "que sí, que se pueden decir las cosas claramente, sin medias tintas, como ha hecho el obispo Hilarion". ¿Por qué nuestros obispos no pueden hablar tan claro? ¿por qué no pueden ser proféticos, y se empeñan en ser terapeutas sociales?
¿Tal vez por eso tu indignación?
---
LF:
Indignación, no. Pena.
17/04/14 10:15 AM
editado
Por cierto, ¿cuanto hablas de ciertos obispos alemanes que afortunadamente no tenemos en España, te refieres a G. Múller, Koch, R. Burke o el mismísimo Ratzinger? Es que también son alemanes o cuanto menos del ámbito germánico.
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LF:
Burke es de EE.UU. Koch es suizo. Müller no es obispo en Alemania. Y Ratzinger, que tengo entendido que es Papa emérito, tampoco.
Cualquiera entiende que cuando hablo de obispos alemanes hablo de obispos de diócesis alemanas. Es como si hablara de obispos españoles. Evidentemente no referiría a todos los obispos españoles que hay repartidos por todo el mundo, que son muchos, sino solo a los de acá.
Por cierto, ¿cuanto hablas de ciertos obispos alemanes que afortunadamente no tenemos en España, te refieres a G. Múller, Koch, R. Burke o el mismísimo Ratzinger? Es que también son alemanes o cuanto menos del ámbito germánico.
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LF:
Burke es de EE.UU. Koch es suizo. Müller no es obispo en Alemania. Y Ratzinger, que tengo entendido que es Papa emérito, tampoco.
Cualquiera entiende que cuando hablo de obispos alemanes hablo de obispos de diócesis alemanas. Es como si hablara de obispos españoles. Evidentemente no referiría a todos los obispos españoles que hay repartidos por todo el mundo, que son muchos, sino solo a los de acá.
17/04/14 12:28 PM
El creyente cristiano tiene las verdades muy claras y las quiere llevar a su vida práctica, ya que se juega la vida eterna lo definitivo.
El relativismo es lo que no podemos aceptar, pero impera en las sociedades que Europa acepta como sociedad civil y de Estado ,ya que perdió las raices católicas como naciones que fueron cristianas.
Ahora queda la Iglesia con sus fieles y esta Iglesia nuestra no puede cambiar, ya que la vida esta dada redimida y eterna, tal cual nos la enseñó el Señor.
Somos pecadores, sí, pero nos arrepentimos y volvemos a EL,pero no podremos aceptar el aborto, que va contra la vida no nacida,la eutanasia que va contra los más débiles enfermos,y esta realidad es para todos los hombres,el matrimonio entre hombre y mujer es el matrimonio cristiano establecido por El Creador en su origen y el Amor de Cristo a su IGLESIA ESPOSA AMADA Y REDIMIDA CON SU SANGRE.
La sociedad civil ha aceptado uniones de hecho y uniones civiles entre iguales, el grave error es llamar matrimonio a una asociación civil de iguales, que si no son cristianos conviven como han decidido y además el Estado aprueba,eso que la ley civil ha aprobado no será aprobada por la Iglesia, mientras no clarifiquen el sexo y dejen de hacer público los deseos sexuales privados.
Creo que si el asunto de dos iguales fuera convivir y hacer una asociación para adoptar y educar niños con fines establecidos, no que recurran a inseminación artificial, vientres de alquiler o FIV,sería una realidad aceptable,pero al llamar matrimonio a lo imposible, ya que los fines del matrimonio es comunidad de vida, amor y procreación,eso es lo que los iguales quieren, pero no cumplen los fines matrimoniales por eso no pueden llamarse matrimonio, ni siquiera en lo civil.
Así que la Iglesia debe ser fiel a su enseñanza, educar en la fe que no cambia y cerrar la puerta a los errores sociales,que no corresponden a la corporeidad real,el asunto no es sólo las ideas, es que se quiere cambiar el cuerpo y eso no es posible y como sociedad debemos saber a quién tenemos delante como norma de convivencia y como hijos en la escuela,un asexuado no existe,ideológicamente es un género, pero su sexuación real corporal-que no su sexualidad-es varón o mujer.
El relativismo es lo que no podemos aceptar, pero impera en las sociedades que Europa acepta como sociedad civil y de Estado ,ya que perdió las raices católicas como naciones que fueron cristianas.
Ahora queda la Iglesia con sus fieles y esta Iglesia nuestra no puede cambiar, ya que la vida esta dada redimida y eterna, tal cual nos la enseñó el Señor.
Somos pecadores, sí, pero nos arrepentimos y volvemos a EL,pero no podremos aceptar el aborto, que va contra la vida no nacida,la eutanasia que va contra los más débiles enfermos,y esta realidad es para todos los hombres,el matrimonio entre hombre y mujer es el matrimonio cristiano establecido por El Creador en su origen y el Amor de Cristo a su IGLESIA ESPOSA AMADA Y REDIMIDA CON SU SANGRE.
La sociedad civil ha aceptado uniones de hecho y uniones civiles entre iguales, el grave error es llamar matrimonio a una asociación civil de iguales, que si no son cristianos conviven como han decidido y además el Estado aprueba,eso que la ley civil ha aprobado no será aprobada por la Iglesia, mientras no clarifiquen el sexo y dejen de hacer público los deseos sexuales privados.
Creo que si el asunto de dos iguales fuera convivir y hacer una asociación para adoptar y educar niños con fines establecidos, no que recurran a inseminación artificial, vientres de alquiler o FIV,sería una realidad aceptable,pero al llamar matrimonio a lo imposible, ya que los fines del matrimonio es comunidad de vida, amor y procreación,eso es lo que los iguales quieren, pero no cumplen los fines matrimoniales por eso no pueden llamarse matrimonio, ni siquiera en lo civil.
Así que la Iglesia debe ser fiel a su enseñanza, educar en la fe que no cambia y cerrar la puerta a los errores sociales,que no corresponden a la corporeidad real,el asunto no es sólo las ideas, es que se quiere cambiar el cuerpo y eso no es posible y como sociedad debemos saber a quién tenemos delante como norma de convivencia y como hijos en la escuela,un asexuado no existe,ideológicamente es un género, pero su sexuación real corporal-que no su sexualidad-es varón o mujer.
17/04/14 12:53 PM
Respuesta a Enrique G.B.A: Sí, está molesto pero no será tan contundente como lo es en otros casos. Los greco-católicos y los ortodoxos deberían dejar claro que el contencioso que tienen en Ucrania es político, no religioso, por lo tanto la presencia de rosarios, iconos y otros objetos de culto no hacen más que provocar desasosiego en los cristianos.
Esta no es la guerra cristera, que fue-guste o no-una revuelta contra un gobierno anticatólico cuyas leyes impedían el culto.
Esta no es la guerra cristera, que fue-guste o no-una revuelta contra un gobierno anticatólico cuyas leyes impedían el culto.
17/04/14 1:34 PM
Por ahí pienso que el "Papa Bueno" (sin ironía) decía eso en su momento porque quizá en muchos casos en el afán apostólico se podría caer en la extrema dureza y en la impiedad. De vez en cuando se me presenta aquella frase: "Puras como ángeles, soberbias como demonios". Pienso que, como hombres caídos que somos, hemos yendo en poquísimos años al extremo opuesto de la absoluta liberalidad, que ha desembocado en el desastre actual.
17/04/14 2:04 PM
"que sí, que se pueden decir las cosas claramente, sin medias tintas, como ha hecho el obispo Hilarion". ¿Por qué nuestros obispos no pueden hablar tan claro?
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Estimado Luis Ignacio, creo que la diferencia la hace la presión del poder político.
Rusia se ha liberado de la asfixiante opresión de la Masonería gracias en buena medida a los ímprobos esfuerzos del B JPII, mientras que en Occidente esa secta no ha parado de aumentar su poder.
No hay que olvidar que un milenio largo Cristiandad ha conformado una Iglesia Romana muy ligada al poder político, muy interdependiente (recordar lo de "París bien vale una misa" del francés Enrique IV). Sin llegar a tanto como llega la Ortodoxa, al día de hoy la Iglesia continúa básicamente con ese esquema, apenas retocado por fuerza de las circunstancias (la famosa cuestión de la separación Iglesia-Estado).
La tendencia es por ahora intentar recuperar la influencia perdida, lo cual yo deduzco por ejemplo de la instauración de la fiesta de Cristo Rey, de la excelentísima DSI que nadie lee, o del mismísimo CVII, aureolado de primaverales entusiasmos tan dolorosa y rápidamente desmentidos.
En fin, el tema da para mucho, pero básicamente me parece que el planteo de la Jerarquía sigue siendo "no confrontar", y de ahí todo lo que vemos y padecemos.
De lo cual buena parte de culpa tenemos los laicos por la ingenuidad, torpeza y desidia conque nos movemos en las arenas de la política.
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Estimado Luis Ignacio, creo que la diferencia la hace la presión del poder político.
Rusia se ha liberado de la asfixiante opresión de la Masonería gracias en buena medida a los ímprobos esfuerzos del B JPII, mientras que en Occidente esa secta no ha parado de aumentar su poder.
No hay que olvidar que un milenio largo Cristiandad ha conformado una Iglesia Romana muy ligada al poder político, muy interdependiente (recordar lo de "París bien vale una misa" del francés Enrique IV). Sin llegar a tanto como llega la Ortodoxa, al día de hoy la Iglesia continúa básicamente con ese esquema, apenas retocado por fuerza de las circunstancias (la famosa cuestión de la separación Iglesia-Estado).
La tendencia es por ahora intentar recuperar la influencia perdida, lo cual yo deduzco por ejemplo de la instauración de la fiesta de Cristo Rey, de la excelentísima DSI que nadie lee, o del mismísimo CVII, aureolado de primaverales entusiasmos tan dolorosa y rápidamente desmentidos.
En fin, el tema da para mucho, pero básicamente me parece que el planteo de la Jerarquía sigue siendo "no confrontar", y de ahí todo lo que vemos y padecemos.
De lo cual buena parte de culpa tenemos los laicos por la ingenuidad, torpeza y desidia conque nos movemos en las arenas de la política.
17/04/14 2:17 PM
No cabe duda de que el más grande de los profetas de calamidades fue Jeremías. Mientras los reyes,los sacerdotes y demás autoridades de Judea en su tiempo ponían su confianza en el templo y los sacrificios, él sabía que venían encima una catástrofe tremenda de manos del rey Nabocodonosor de Babilonia. Sin embargo, su mensaje no fue meramente de calamidades, aunque también. En la víspera de la caída de Jerusalén y la destrucción del templo adquirió un terreno en su pueblo natal Anatot en herencia, señal de esperanza a futuro. Por ello, sí hay que denunciar calamidades, pues el tinglado montado que hay ahora va a caer como el Reino de Judea en tiempos de Jeremías. La Iglesia tiene que estar allí con toda la fuerza interior y la esperanza que viene de Jesucristo por acción del Espíritu Santo para dar una nueva esperanza a los pueblos apóstatas europeos.
17/04/14 4:59 PM
"Una de las cosas buenas que tiene el papa Francisco es que le gusta llamar a las cosas por su nombre".
Más o menos. Con ciertas escepciones, en muchas homilías del papa no se puede saber a ciencia cierta a qué se está refiriendo. Y no incluyo entrevistas. Hay otra cosa, pero mejor espero a que el papa venga a la Argentina.
Más o menos. Con ciertas escepciones, en muchas homilías del papa no se puede saber a ciencia cierta a qué se está refiriendo. Y no incluyo entrevistas. Hay otra cosa, pero mejor espero a que el papa venga a la Argentina.
17/04/14 8:02 PM
¿Que los ortodoxos han abandonado teología?
Que se lo digan a Juan Luis Lorda, de la Universidad de Navarra, quien en su libro Antropología Teológica cita varios teólogos ortodoxos contemporáneos en los temas como "divinización por el espíritu santo", etc.
Simplemente, siguen la patrística y no hacen excursiones.
Esa "actividades" más bien hay que decir a nuestros pastores que se estén quietos, y que no hagan cosas prohibidas por San Pablo y por nuestra cabeza: no se puede echar incienso a los ídolos. En 1997 echó incienso a un dios pagano hindú el Arzobispo de Bombay, Ivan Dias creo que era su nombre.
A partir de esa, "confusión", no sigamos más, siguen todas las demás. Si no está claro el primer mandamiento, no busques más. Es lo que está pasando.
Yo soy de la opinión de que Dios, en su gran bondad hacia la Iglesia, mantiene la potestad de orden incluso en esos casos. Por ejemplo, al sacerdote Aarón no le fue quitado sacerdocio por haber echado incienso al becerro de oro, pero todo el pueblo de Dios fue castigado por ello.
Si los pastores no están en su lugar, luego todos al desierto.
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LF:
Los teólogos ortodoxos son más epígonos que teólogos.
Que se lo digan a Juan Luis Lorda, de la Universidad de Navarra, quien en su libro Antropología Teológica cita varios teólogos ortodoxos contemporáneos en los temas como "divinización por el espíritu santo", etc.
Simplemente, siguen la patrística y no hacen excursiones.
Esa "actividades" más bien hay que decir a nuestros pastores que se estén quietos, y que no hagan cosas prohibidas por San Pablo y por nuestra cabeza: no se puede echar incienso a los ídolos. En 1997 echó incienso a un dios pagano hindú el Arzobispo de Bombay, Ivan Dias creo que era su nombre.
A partir de esa, "confusión", no sigamos más, siguen todas las demás. Si no está claro el primer mandamiento, no busques más. Es lo que está pasando.
Yo soy de la opinión de que Dios, en su gran bondad hacia la Iglesia, mantiene la potestad de orden incluso en esos casos. Por ejemplo, al sacerdote Aarón no le fue quitado sacerdocio por haber echado incienso al becerro de oro, pero todo el pueblo de Dios fue castigado por ello.
Si los pastores no están en su lugar, luego todos al desierto.
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LF:
Los teólogos ortodoxos son más epígonos que teólogos.
17/04/14 9:24 PM
Agarrémonos al rosario. Roguemos sin cesar. Vistámonos de saco. Cubrámonos de ceniza.
Enseguida nos ponemos los hombres a arreglarlo todo con planes humanos, pastorales, nombramientos y ceses, neoevangelizaciones y demás. Oremos sin cesar. Y confiemos en que Él no abandonará a su enferma Iglesia. Por otra parte...¡¡¡ven, Señor, no tardes!!! (Que esto no hay quien lo aguante)
Ánimo, Luis Fernando. Eres nuestra voz.
Enseguida nos ponemos los hombres a arreglarlo todo con planes humanos, pastorales, nombramientos y ceses, neoevangelizaciones y demás. Oremos sin cesar. Y confiemos en que Él no abandonará a su enferma Iglesia. Por otra parte...¡¡¡ven, Señor, no tardes!!! (Que esto no hay quien lo aguante)
Ánimo, Luis Fernando. Eres nuestra voz.
18/04/14 12:52 AM
Estimado Joaquín,
Con las condenas de la Iglesia hacia las doctrinas heréticas y anticristianas se conseguía, nada más y nada menos que preservar la integridad de la fe católica, algo de lo que no se puede presumir desde que se aplica la doctrina de la libertad religiosa, que iguala la verdad y el error, momento desde el cual la gente (católicos practicantes incluidos) se encuentra desorientada ante la multitud de mensajes contradictorios recibidos. Y como parece que ya nadie se lee (ni nadie predica) los textos de dos siglos atrás, dichas condenas deberían renovarse para evitar que caigan en el olvido.
Un ejemplo bien claro: como nadie habla del demonio, ya pocos en la Iglesia creen en el demonio, ni por ende, en la condenación y, en breve, ni en el pecado.
Con las condenas de la Iglesia hacia las doctrinas heréticas y anticristianas se conseguía, nada más y nada menos que preservar la integridad de la fe católica, algo de lo que no se puede presumir desde que se aplica la doctrina de la libertad religiosa, que iguala la verdad y el error, momento desde el cual la gente (católicos practicantes incluidos) se encuentra desorientada ante la multitud de mensajes contradictorios recibidos. Y como parece que ya nadie se lee (ni nadie predica) los textos de dos siglos atrás, dichas condenas deberían renovarse para evitar que caigan en el olvido.
Un ejemplo bien claro: como nadie habla del demonio, ya pocos en la Iglesia creen en el demonio, ni por ende, en la condenación y, en breve, ni en el pecado.
18/04/14 8:08 AM
Muy buen comentario de Palas Atenea... me gustó mucho "no confundir a Dios con los pobres".
Dios está en el prójimo, ¡ pero no es el prójimo !
Dios está en el prójimo, ¡ pero no es el prójimo !
18/04/14 10:38 AM
Aunque entiendo que no se debe confundir a Dios con los pobres, no vayamos a olvidar lo que dijo Cristo:
"En verdad os digo que cuantas veces hicisteis eso a uno de estos mis hermanos menores, a mí me lo hicisteis". (Mt 25,40)
18/04/14 10:45 AM
Yo no creo que sea un problema de si la Iglesia (y las iglesias) hablan así o hablan asá. La cuestión de fondo es que el mundo ha cambiado. Hay quien dirá que es la obra del maligno. Yo pienso que es, simplemente, el signo de los tiempos.
No nos engañemos. El "formato tradicional" de las religiones que conocemos se desarrolló y perfeccionó en otra era. Básicamente, durante la Edad Media. En aquella época, la (mayoría de la) gente vivía de otra manera. Su vida era corta, sus aspiraciones eran pequeñas, su fe era "la fe del carbonero." No había televisión, ni Internet, ni vuelos intercontinentales, ni siquiera radio. Nacías labrador (o lo que fueses) y morías labrador. Nacías católico (o lo que fueses) y morías católico. De algún modo, tu vida estaba "programada", en un entorno muy pequeño, predominantemente rural, con poca interacción exterior, tradicional de siglos. Todo giraba en torno a tu iglesia (o mezquita, o sinagoga, o lo que sea). En ese contexto, la herejía, la apostasía, incluso las dudas eran raras. Era un mundo ordenado, de la cuna a la tumba, que giraba en torno a la fe, una fe perfectamente descrita y delimitada.
Pero ese mundo murió. Fue un proceso complejo: el progreso de la ciencia y la técnica que dieron lugar a la Revolución Industrial, la desaparición del feudalismo rural en favor de las burguesías urbanas (en las ciudades, las cosas nunca estuvieron tan claras), el desarrollo del naturalismo filosófico que daría lugar a las dos grandes ideologías materialistas (capitalismo y socialismo), las revoluciones sociopolíticas y tecnológicas que las extendieron junto a nuevas ideas de democracia, libertad, nuevo individualismo (en el caso del capitalismo) y nuevo colectivismo (en el caso del socialismo)... mil cosas.
Y nació el mundo moderno. Un mundo donde, en los países desarrollados, la gente ha duplicado e incluso triplicado su esperanza de vida y ha multiplicado sus opciones. Un mundo mucho más complejo, donde todo el mundo sabe leer, tiene televisión y ahora también Internet, y está "expuesto" a múltiples otras formas de vida, de pensamiento, de fe. El labrador que antes nacía y moría en el mismo pueblo ahora se va a Punta Cana de viaje de novios, ve la tele y se conecta a Internet todas las tardes. Por sus ojos y su cabeza fluyen miles de "tentaciones", de ideas distintas, de opciones vitales de todo tipo.
Y hace lo normal, lo que ha ocurrido en todas las civilizaciones que vivieron procesos parecidos: sincretizar. Toma de aquí y de allá lo que le parece mejor, lo que mejor le suena, lo que más se acopla a su vida cotidiana. Eso, por supuesto, se extiende a su fe. Y si su "iglesia de siempre" no le sigue, la abandona. Hoy en día ya no la quema; simplemente se aleja, la ignora, y como mucho mantiene las formas sociales y la utiliza para los cuatro ritos básicos: bodas, bautizos, comuniones y funerales. Ritos eminentemente sociales que se remontan a mucho antes de la Cristiandad o de cualquier religión que conozcamos hoy en día.
Para la Iglesia es un problema muy complejo, porque en un mundo así cada vez más y más gente se aleja. La Iglesia no puede seguirles, porque eso significaría aceptar todas esas herejías sincréticas. Pero si no lo hace, cada vez se va convirtiendo más y más en una "secta" de "cavernícolas" (con mis mejores saludos a los de Infocatólica ;) ) disociada del mundo y de los lugares donde se mueven las cosas (que son los más globalizados, materialistas y sincretizados). Y eso, sin ni siquiera entrar a hablar del avance del secularismo y el escepticismo.
Ese dilema no tiene solución posible. ¿Te abres, aunque sólo sea un poco? Te disuelves en el mar del sincretismo, igual que si abres una vía de agua en un barco. ¿Cierras todas las compuertas, de tal modo que no entre ni una gota de agua? Bienvenido al aislamiento y la progresiva irrelevancia, hasta desaparecer en el horizonte. Mientras tanto, lo que dice Luis Fernando: un bonito elemento decorativo, un bonito yate en el puerto que la gente visita de vez en cuando porque es chulo y queda bien (eso, a los que les gusta) pero ni en broma están dispuestos a vivir en él, o acorde a él. Tienen otras cosas que hacer con sus cada vez más largas vidas.
Menudo rollo me ha salido. :)
---
LF:
El hombre caído es hoy exactamente igual que hace 4-5 milenios y que en tiempos de Cristo. ¿Que ahora vive más años en muchas partes del mundo? Sí. ¿Que ahora tiene más elementos que le llevan a no querer pensar siquiera en la existencia de Dios, y no digamos nada a pensar en seguir sus caminos? Sí... pero también tiene más posibilidades de conocer dichos caminos, precisamente gracias a instrumentos como internet.
Lo del aislamiento y progresiva irrelevancia es... irrelevante. El cristiano conoce bien cuál será el fin de la historia, previo al cual no viviremos precisamente un cuento de hadas. Si la Escritura profetizó que el Mesías llegaría y llegó, también ha profetizado que antes de su regreso habrá un periodo de gran apostasía... y lo habrá. Puede que empecemos a vislumbrar ese periodo. Mayor razón para permanecer fieles y no dejarse llevar por el torrente de impiedad que nos rodea. Y si todavía no estamos en esos prolegómenos de la Parousía, pues igual hay que permanecer fieles.
No nos engañemos. El "formato tradicional" de las religiones que conocemos se desarrolló y perfeccionó en otra era. Básicamente, durante la Edad Media. En aquella época, la (mayoría de la) gente vivía de otra manera. Su vida era corta, sus aspiraciones eran pequeñas, su fe era "la fe del carbonero." No había televisión, ni Internet, ni vuelos intercontinentales, ni siquiera radio. Nacías labrador (o lo que fueses) y morías labrador. Nacías católico (o lo que fueses) y morías católico. De algún modo, tu vida estaba "programada", en un entorno muy pequeño, predominantemente rural, con poca interacción exterior, tradicional de siglos. Todo giraba en torno a tu iglesia (o mezquita, o sinagoga, o lo que sea). En ese contexto, la herejía, la apostasía, incluso las dudas eran raras. Era un mundo ordenado, de la cuna a la tumba, que giraba en torno a la fe, una fe perfectamente descrita y delimitada.
Pero ese mundo murió. Fue un proceso complejo: el progreso de la ciencia y la técnica que dieron lugar a la Revolución Industrial, la desaparición del feudalismo rural en favor de las burguesías urbanas (en las ciudades, las cosas nunca estuvieron tan claras), el desarrollo del naturalismo filosófico que daría lugar a las dos grandes ideologías materialistas (capitalismo y socialismo), las revoluciones sociopolíticas y tecnológicas que las extendieron junto a nuevas ideas de democracia, libertad, nuevo individualismo (en el caso del capitalismo) y nuevo colectivismo (en el caso del socialismo)... mil cosas.
Y nació el mundo moderno. Un mundo donde, en los países desarrollados, la gente ha duplicado e incluso triplicado su esperanza de vida y ha multiplicado sus opciones. Un mundo mucho más complejo, donde todo el mundo sabe leer, tiene televisión y ahora también Internet, y está "expuesto" a múltiples otras formas de vida, de pensamiento, de fe. El labrador que antes nacía y moría en el mismo pueblo ahora se va a Punta Cana de viaje de novios, ve la tele y se conecta a Internet todas las tardes. Por sus ojos y su cabeza fluyen miles de "tentaciones", de ideas distintas, de opciones vitales de todo tipo.
Y hace lo normal, lo que ha ocurrido en todas las civilizaciones que vivieron procesos parecidos: sincretizar. Toma de aquí y de allá lo que le parece mejor, lo que mejor le suena, lo que más se acopla a su vida cotidiana. Eso, por supuesto, se extiende a su fe. Y si su "iglesia de siempre" no le sigue, la abandona. Hoy en día ya no la quema; simplemente se aleja, la ignora, y como mucho mantiene las formas sociales y la utiliza para los cuatro ritos básicos: bodas, bautizos, comuniones y funerales. Ritos eminentemente sociales que se remontan a mucho antes de la Cristiandad o de cualquier religión que conozcamos hoy en día.
Para la Iglesia es un problema muy complejo, porque en un mundo así cada vez más y más gente se aleja. La Iglesia no puede seguirles, porque eso significaría aceptar todas esas herejías sincréticas. Pero si no lo hace, cada vez se va convirtiendo más y más en una "secta" de "cavernícolas" (con mis mejores saludos a los de Infocatólica ;) ) disociada del mundo y de los lugares donde se mueven las cosas (que son los más globalizados, materialistas y sincretizados). Y eso, sin ni siquiera entrar a hablar del avance del secularismo y el escepticismo.
Ese dilema no tiene solución posible. ¿Te abres, aunque sólo sea un poco? Te disuelves en el mar del sincretismo, igual que si abres una vía de agua en un barco. ¿Cierras todas las compuertas, de tal modo que no entre ni una gota de agua? Bienvenido al aislamiento y la progresiva irrelevancia, hasta desaparecer en el horizonte. Mientras tanto, lo que dice Luis Fernando: un bonito elemento decorativo, un bonito yate en el puerto que la gente visita de vez en cuando porque es chulo y queda bien (eso, a los que les gusta) pero ni en broma están dispuestos a vivir en él, o acorde a él. Tienen otras cosas que hacer con sus cada vez más largas vidas.
Menudo rollo me ha salido. :)
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LF:
El hombre caído es hoy exactamente igual que hace 4-5 milenios y que en tiempos de Cristo. ¿Que ahora vive más años en muchas partes del mundo? Sí. ¿Que ahora tiene más elementos que le llevan a no querer pensar siquiera en la existencia de Dios, y no digamos nada a pensar en seguir sus caminos? Sí... pero también tiene más posibilidades de conocer dichos caminos, precisamente gracias a instrumentos como internet.
Lo del aislamiento y progresiva irrelevancia es... irrelevante. El cristiano conoce bien cuál será el fin de la historia, previo al cual no viviremos precisamente un cuento de hadas. Si la Escritura profetizó que el Mesías llegaría y llegó, también ha profetizado que antes de su regreso habrá un periodo de gran apostasía... y lo habrá. Puede que empecemos a vislumbrar ese periodo. Mayor razón para permanecer fieles y no dejarse llevar por el torrente de impiedad que nos rodea. Y si todavía no estamos en esos prolegómenos de la Parousía, pues igual hay que permanecer fieles.
18/04/14 8:44 PM
He aquí un relato de adoración a Dios por parte de campesinas ortodoxas que me conmovió grandemente y que creo oportuno mirando ya hacia la Pascua de Resurrección.
Cuenta Eugenia Ginzburg en su autobiografía "El vértigo" que, estando más allá de Kolymá en el Ártico asiático, en plena taiga había un lugar de castigo para mujeres, cuyo trabajo consistía en talar árboles, que tenía tres pabellones: el de las presas comunes, el de las políticas y el de las campesinas (kulaks muy perseguidas por Stalin).
Una mañana ella, que era comunista y atea y estaba con las políticas, oyó sonidos extraños y al asomarse a la puerta vio que los guardas arrastraban a las campesinas por el hielo mientras estas gritaban: "Mañana trabajaremos el doble, hoy no podemos, es Pascua de Resurrección". Los guardas las trataban de estúpidas y fanáticas y les recordaban que estaban en una nación atea. Al llegar al lugar donde habían estado cortado árboles el día anterior, las campesinas se sentaron sobre los tocones y los guardas les obligaron a descalzarse y a colocar los pies sobre el permafrost (hielo ártico) diciéndoles: "Ya os levantaréis antes de que se os hielen los pies". Cuando los otros dos grupos de mujeres llegaron y se pusieron a trabajar las campesinas comenzaron los cánticos pascuales que duraron toda la jornada. Al finalizar ésta los guardas arrastraron de nuevo a las campesinas hasta el barracón. Ginzburg acaba así su relato: "A ninguna se le helaron los pies". ¡Gloria a Cristo Resucitado!
Cuenta Eugenia Ginzburg en su autobiografía "El vértigo" que, estando más allá de Kolymá en el Ártico asiático, en plena taiga había un lugar de castigo para mujeres, cuyo trabajo consistía en talar árboles, que tenía tres pabellones: el de las presas comunes, el de las políticas y el de las campesinas (kulaks muy perseguidas por Stalin).
Una mañana ella, que era comunista y atea y estaba con las políticas, oyó sonidos extraños y al asomarse a la puerta vio que los guardas arrastraban a las campesinas por el hielo mientras estas gritaban: "Mañana trabajaremos el doble, hoy no podemos, es Pascua de Resurrección". Los guardas las trataban de estúpidas y fanáticas y les recordaban que estaban en una nación atea. Al llegar al lugar donde habían estado cortado árboles el día anterior, las campesinas se sentaron sobre los tocones y los guardas les obligaron a descalzarse y a colocar los pies sobre el permafrost (hielo ártico) diciéndoles: "Ya os levantaréis antes de que se os hielen los pies". Cuando los otros dos grupos de mujeres llegaron y se pusieron a trabajar las campesinas comenzaron los cánticos pascuales que duraron toda la jornada. Al finalizar ésta los guardas arrastraron de nuevo a las campesinas hasta el barracón. Ginzburg acaba así su relato: "A ninguna se le helaron los pies". ¡Gloria a Cristo Resucitado!
18/04/14 9:40 PM
Anoche leí en este blog el comentario de alguien que por su escrito, es ateo. Y según su pensamiento el cristianismo tiene fecha de caducidad, y esa fecha ha llegado. No fue eso lo que nos dijo Nuestro Señor antes de la Ascensión, que siempre estaría con nosotros hasta el fín del mundo.
Me parece tan grave ese comentario, en el que se niega la fe cristiana comparándola con cualquier divagación subjetiva que puede tener el ser humano, en su anhelo de trascendencia, que produjo en mi un efecto devastador. Sé que puede sonar muy exagerado, pero estoy tan sensible y escandalizada con tantas cosas como estoy viendo durante ya bastantes años y que pasan a mi alrededor, que mi alma está extremadamente sensibilizada, y comentarios como el de ese señor me acaban de destrozar psicológicamente, porque soy así de imbécil que todo me daña. Sé que estamos en una época muy difícil, pero que alguien diga desde esta página católica cosas como las que ha dicho este señor, por ejemplo que nada tiene remedio y que no hay solución posible, me hace caer en el más profundo desánimo, hasta tal punto que esta noche pasada he tenido pesadillas. Y no me consuela que esté profetizada la gran apostasía. No es que no me consuele, sino que me hace abatirme mucho más. Yo creía que a partir de que entró como Papa Juan Pablo II, para mí el mejor de los Papas que he conocido, iba a brillar por fín el sol en la oscuridad que se había hecho en la Iglesia, desde años antes, y en algunos momentos fue así. Pero después vino el declive del Papa por motivos de su salud y con ese declive físico, sentí que también se esfumaban mis esperanzas.
Y si no fuera la apostasía general o el principio de ella, es más horrible todavía, porque si esto que está sucediendo no es apostasía, no quiero ni pensar lo que será cuando llegue. Y tampoco me consuela saber que yo ya no estaré. El simple hecho de imaginarme una humanidad todavía peor que el infierno que tenemos, me angustia terriblemente.
Siento dar esta imagen tan débil, pero es lo que siento. Perdón.
La Paz con vosotros. Paz y Bien.
Me parece tan grave ese comentario, en el que se niega la fe cristiana comparándola con cualquier divagación subjetiva que puede tener el ser humano, en su anhelo de trascendencia, que produjo en mi un efecto devastador. Sé que puede sonar muy exagerado, pero estoy tan sensible y escandalizada con tantas cosas como estoy viendo durante ya bastantes años y que pasan a mi alrededor, que mi alma está extremadamente sensibilizada, y comentarios como el de ese señor me acaban de destrozar psicológicamente, porque soy así de imbécil que todo me daña. Sé que estamos en una época muy difícil, pero que alguien diga desde esta página católica cosas como las que ha dicho este señor, por ejemplo que nada tiene remedio y que no hay solución posible, me hace caer en el más profundo desánimo, hasta tal punto que esta noche pasada he tenido pesadillas. Y no me consuela que esté profetizada la gran apostasía. No es que no me consuele, sino que me hace abatirme mucho más. Yo creía que a partir de que entró como Papa Juan Pablo II, para mí el mejor de los Papas que he conocido, iba a brillar por fín el sol en la oscuridad que se había hecho en la Iglesia, desde años antes, y en algunos momentos fue así. Pero después vino el declive del Papa por motivos de su salud y con ese declive físico, sentí que también se esfumaban mis esperanzas.
Y si no fuera la apostasía general o el principio de ella, es más horrible todavía, porque si esto que está sucediendo no es apostasía, no quiero ni pensar lo que será cuando llegue. Y tampoco me consuela saber que yo ya no estaré. El simple hecho de imaginarme una humanidad todavía peor que el infierno que tenemos, me angustia terriblemente.
Siento dar esta imagen tan débil, pero es lo que siento. Perdón.
La Paz con vosotros. Paz y Bien.
19/04/14 11:05 AM
Menka, eso es muy anterior a la teología, es pura adoración a Jesús Resucitado. Entronca con el Cristianismo primitivo, es la raíz de la Fe. Aquellas mujeres no sabían teología, ni la necesitaban: honraban a Dios, santificaban las fiestas, cumplían el primer mandamiento dado por Jesús. Siendo ellas las pobres elevaban su corazón a Dios por encima de sus necesidades y sus problemas. Ni todas las campanas de la Santa Rusia, ni todo el incienso, ni los vitrales que filtran la luz en las catedrales dan tanta gloria a Dios como aquel día lo hicieron las voces de las campesinas en el desolado Ártico.
19/04/14 12:01 PM
Isabel:
No pierdas la paz y la confianza absoluta en Dios. Reposa tu ser en el tierno, amoroso y protector regazo de Nuestra Madre María.
Cuándo escuches mensajes hostiles como el que mencionas del ateo, piensa que el que expresa tales cosas es el mismo Satanás que intenta debilitar tu fe.
Lee y medita el Evangelio de San Mateo 16, 18-20, el capítulo 21 del Evangelio según san Lucas, y todo el libro del Apocalipsis de San Juan.
Todo a María para Jesús.
No pierdas la paz y la confianza absoluta en Dios. Reposa tu ser en el tierno, amoroso y protector regazo de Nuestra Madre María.
Cuándo escuches mensajes hostiles como el que mencionas del ateo, piensa que el que expresa tales cosas es el mismo Satanás que intenta debilitar tu fe.
Lee y medita el Evangelio de San Mateo 16, 18-20, el capítulo 21 del Evangelio según san Lucas, y todo el libro del Apocalipsis de San Juan.
Todo a María para Jesús.
20/04/14 4:44 AM
Isabel, lo que sí tiene fecha de caducidad, como es lógico, es el pontificado de Francisco, todos lo tienen, y en este caso para disgusto de los poderes del mundo que lo quisiera utilizar, equivocadamente, contra la propia Iglesia, que no es la primera vez que pasa eso en la historia. En cambio la Santa Iglesia seguirá hasta el fin de los tiempos a causa de su constitución divina y por estar guiada por el Espíritu Santo.
Antonio, efectivamente te ha salido un rollo. Fíjate si la Iglesia es influyente en el mundo y cada vez más, contra lo que se pretende hacer creer que cuando en España el gobierno plantea la posibilidad de modificar muy ligeramente una legislación abortista, sus oponentes, en vez de dirigirse a quien tiene el poder de dictar las normas, al PP o a sus sedes, lo que hacen es dedicarse a saquear y profanar iglesias, y agredir y a amenazar obispos con el silencio cuando no el estímulo de los medios de comunicación y del mismo poder político. Unos tendrán poder, que es pasajero, pero la Iglesia Católica tiene autoridad, y eso no se pierde
Antonio, efectivamente te ha salido un rollo. Fíjate si la Iglesia es influyente en el mundo y cada vez más, contra lo que se pretende hacer creer que cuando en España el gobierno plantea la posibilidad de modificar muy ligeramente una legislación abortista, sus oponentes, en vez de dirigirse a quien tiene el poder de dictar las normas, al PP o a sus sedes, lo que hacen es dedicarse a saquear y profanar iglesias, y agredir y a amenazar obispos con el silencio cuando no el estímulo de los medios de comunicación y del mismo poder político. Unos tendrán poder, que es pasajero, pero la Iglesia Católica tiene autoridad, y eso no se pierde
20/04/14 11:37 AM
Editado
Bla, bla, blaaaaa, bla, bla.
Ese discursito rancio, propio de la new age con toques propios de la repugnante teología liberal, está ya pasado de moda. En los ochenta todavía vendía algo. Hoy no.
Y aquí, en este blog, no cuela. No pierda el tiempo escribiendo más comentarios.
Bla, bla, blaaaaa, bla, bla.
Ese discursito rancio, propio de la new age con toques propios de la repugnante teología liberal, está ya pasado de moda. En los ochenta todavía vendía algo. Hoy no.
Y aquí, en este blog, no cuela. No pierda el tiempo escribiendo más comentarios.
20/04/14 12:57 PM
Jorge Cantú y Gonzalo
Muchas gracias por vuestros consejos que voy a seguir.
Que Dios os bendiga.
Feliz Pascua de Resurrección.
Muchas gracias por vuestros consejos que voy a seguir.
Que Dios os bendiga.
Feliz Pascua de Resurrección.
20/04/14 8:32 PM
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