Paguemos el IBI
Fuenlabrada es una ciudad dormitorio cercana a Madrid de poco más de 200.000 habitantes. Se da la circunstancia de que es la población con más porcentaje de jóvenes (+65%) de toda España. A principios de los años 70 era un pueblecito con apenas 2.000 residentes, lo cual sirve para hacerse una idea de cuál ha sido su crecimiento tras la llegada de la democracia a España.
En las últimas elecciones municipales, Fuenlabrada fue una de las pocas alcaldías que el PSOE conservó en la Comunidad de Madrid. Aunque perdió 4 concejales y la mayoría absoluta, pudo mantenerse en el poder gracias al apoyo de Izquierda Unida. O sea, de la extrema izquierda.
Si el PSOE es ya de por sí un partido con grandes dosis de anticlericalismo corriendo por sus venas, cuando se tiene que “arrejuntar” con Izquierda Unida deja de lado cualquier atisbo de moderación en cuestiones religiosas. Lo acabamos de ver precisamente en Fuenlabrada. No sé bien cuáles serán los problemas de esa población, pero estoy convencido de que entre los mismos no está el hecho de que las parroquias católicas no paguen el IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles). Y sin embargo, a comunistas y socialistas no se les ha ocurrido otra cosa mejor que aprobar una moción de petición al gobierno para que obligue a la Iglesia a pagar ese impuesto.
Dice la vicealcaldesa comunista que si las parroquias católicas pagaran el IBI, el ayuntamiento ingresaría unos 50.000 euros al año. Dado que, según las cifras oficiales del propio ayuntamiento, el presupuesto de este año hace una previsión de ingresos por impuestos de 75 millones de euros, el porcentaje de lo que piden a la Iglesia representaría un 0.06% del total. Es decir, una birria.
Es por tanto evidente que no hay un interés económico en esa propuesta. Fuenlabrada no necesita del dinero que la Iglesia pagaría por el impuesto del IBI para subsistir. No habrá una sola acera de la ciudad que no se arregle por culpa de los curas. No habrá un solo funcionario que acabe en la calle por falta de fondos de procedencia católica para pagar su sueldo. Y sin embargo, estoy seguro de que la labor social de la Iglesia en la población ahorra una cantidad importantísima a los servicios sociales estatales, autonómicos y municipales.
Sinceramente creo que es legítimo pedir que la Iglesia pague el IBI de sus edificios. También lo es el pedir que desaparezca la X de la declaración de la Renta. Y ya que nos ponemos, podemos pedir que los partidos políticos y los sindicatos no reciban un euro de las arcas públicas. Que se financien con las cuotas de sus afiliados. Igualmente, como no es plan de aceptar que se discrimine al hecho religioso en relación al hecho cultural o deportivo, podemos pedir que se acaben las ayudas al cine y las becas a los deportistas olímpicos. Total, apenas hay gente que vea películas españolas y no todo el mundo practica deporte pero casi todo el mundo quiere que le case y le entierre un cura.
Si el clamor social para que la Iglesia no tenga “privilegios” a la hora de pagar impuestos crece exponencialmente, propongo que ella, de motu proprio, opte por pagarlos. La cosa es bien fácil. Cuando toque recoger la colecta para Cáritas en las parroquias, se puede introducir el siguiente mensaje: “Queridos hermanos, de la colecta para Cáritas sacaremos el dinero necesario para poder pagar los impuestos que nos exigen comunistas y socialistas“. Y si llega el caso de que desaparece la X o con la misma no se alcanza a pagar el sueldo de nuestros sacerdotes, el mensaje puede ser así: “Queridos hermanos, como la primera misión de la Iglesia es dar culto a Dios y predicar el evangelio, del dinero destinado a la obra social se sacará la cantidad necesaria para garantizar un sueldo digno a nuestros sacerdotes“. De hecho, sospecho que antes o después vamos a llegar a eso.
Ahora bien, si luego la Iglesia no puede desarrollar la labor social que realiza hoy, pues que se encarguen el PSOE e IU de llevarla a cabo. Por ejemplo, convirtiendo sus sedes en comedores sociales o dedicando a sus empleados a atender a los más necesitados.
Luis Fernando Pérez Bustamante
16 comentarios
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LF:
Seguirámos muy lejos de estar como están los cristianos en China, Egipto, etc.
Eso sí, que aquellos que apoyan a esos partidos se olviden de formar parte de la Iglsia. No puedes ir a Misa si votas a quienes quieren cargarse a la Iglesia.
En realidad, creo que lo que queda del paquete anticlerical y de ingeniería social de la izquierda llegará la próxima vez que les toque gobernar el país. Veremos si lo de Rajoy es cosa de una o dos legislaturas.
Bueno, alegrías aparte, es preocupante un dato: Que la alta tasa de jóvenes coincida con una mayoría de izquierdas. Ya sabemos donde hay que poner el énfasis de culturización - y de evangelización - los próximos años: En Fuenlabrada.
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LF:
Hay un claro factor local en ese resultado. Así se explica que para las elecciones autonómicas, celebradas el mismo día, el PP sacara 5000 votos más que el PSOE.
Es decir, para el ayuntamiento el resultado fue:
PSOE 35.284
PP 32.977
Para la comunidad:
PP 35668
PSOE 30276
Eso ocurre en muchos pueblos y ciudades. Se vota más a los candidatos que a las siglas.
Porque bienes exentos de IBI entre otros son: estaciones de tren, hospitales, colegios públicos y concertados, cárceles, cuarteles, comisarías de policía, centros de asociaciones religiosas y confesionales no católicas, bienes de la Cruz Roja, embajadas, algunos montes, bienes de interés cultural, monumentos, conjuntos históricos, zonas arqueológicas, entidades sin fines lucrativos...
En cualquier caso, de acuerdo en lo fundamental. Que la Iglesia católica renuncia a cualquier tipo de bonificación o exención, y los demás lo mismo: sindicatos, partidos políticos, cine... Y cada cual a vivir de los suyos.
Y lo de garantizar un sueldo digno a nuestros sacerdotes, yo no lo tengo tan claro. Al menos que me dejen elegir a qué sacerdote va a ir destinado mi dinero. Y a mas de un cura tampoco le interesará porque si tengo que pagarle un sueldo, le exigiré que trabaje, que por ahí hay curas que ni se planchan las camisas.
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LF:
Le recuerdo que es el obispo, y no los fieles, quien decide cómo reparte el dinero a sus sacerdotes. Y es él quien tiene también la responsabilidad de que sus sacerdotes trabajen. La mayoría lo hacen la mar de bien.
Tenemos los políticos que votamos, incluidos los catolicos.
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Sí, hombre. ¿Y qué sacerdote va a querer tenerte a ti de patrón? Con fieles com o tú, despidámonos de tener sacerdotes.
¿Tú te crees que tu párroco va a ser tu mayordomo? ¿O que la Iglesia se gobierna como la Casa de Alba?
¿Esta excomunión es una fatwa suya personal? Si no lo es, ¿qué otra alta autoridad eclesial ha decidido excomulgar a los votantes de PSOE e IU? Sería una noticia importante de divulgar, dada la cercanía de las elecciones generales.
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LF:
Esa frase es lo que yo opino. Pero de hecho, es una mera cuestión de sentido común. Si uno es católico y vota a quienes atacan a la Iglesia Católica, o tiene un problema mental severo o es que su catolicismo están por detrás de su querencia política. Y entonces no es un buen católico.
Si usted es capaz de contra-argumentar a eso, hágalo. Y si no, mejor cállese.
Recuerdo que José Borrell (PSOE), cuando fue secretario de Estado de Hacienda, exigió a la Iglesia que calificase como pecado el impago de impuestos o el fraude fiscal. ¡Un militante del partido de la corrupción, los GAL y la Expo! Los obispos, callados, en vez de hacer catequesis.
¿Qué dice la doctrina social al respecto?
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LF:
Si ese ciudadano tiene que pedir ayuda para pagar su hipoteca, ¿a quién acude primero? ¿a los servicios sociales de su ayuntamiento o a Cáritas? Si hace lo primero, le enviarán a los segundos.
Estoy de acuerdo en que no hay que excomulgar a nadie por su voto. Más bien, a los católicos de Misa que voten al PSOE o a IU, habría que someterles a un severo tratamiento contra la esquizofrenia.
Pero bueno, esta gente va a ladrar mientras exista el mundo, y siempre para despistar. A esa gentuza no se le ocurre otra cosa ahora que están matando a los cristianos en Egipto, que lloriquear por lo de siempre. Jamás les oirás decir algo al respecto, pero ofender a Cristo y lo santo, siempre en primer lugar.
Si, como dice outsider, existen locales a nombre de la Iglesia que no hacen una labor de culto o asistencia, sino que sirven para obtener beneficios, veo lógico que se les cobre el IBI. Habría que estudiar el tema, porque tampoco entiendo muy bien que la Iglesia o ciertas órdenes religiosas se dediquen al negocio del arrendamiento urbano. Para tener locales sin utilidad a la comunidad, mejor venderlos y dedicar ese dinero a cosas necesarias (desde comedores sociales, arreglo de templos que se caen a pedazos o ayuda a la Iglesia necesitada en otras partes del mundo).
En cuanto a la X del IRPF, yo más que pedir que la quiten, pediría que la ampliaran a muchos otros conceptos y subvenciones públicas que el contribuyente puede no desear pagar, y que en la actualidad está soportando pese a estar en contra (en efecto, sindicatos, partidos, ONG, asociaciones culturales, económicas, patronales, religiosas no católicas, etc). La famosa X es libertad, ampliémosla.
Pero sí, puede pasar que llegue un momento en que el estado procure evitar cualquier tipo de ayuda a la Iglesia pese a los beneficios no-espirituales de todo tipo que reporta a la sociedad, sea esta creyente o no. Estemos preparados, porque como bien dices, LF, todavía estaremos mejor que en China, en Irán o en Egipto. A rascarse el bolsillo tocarán. Por desgracia, es un mal momento para pedir eso a los feligreses, porque la crisis nos toca a los católicos como a los demás.
Eso sí, vale la pena contestar en frío, y no calentarse. Al histerismo papanatas y cerril de los progresistas-socialistas no podemos contestar con otro en sentido contrario. Ante la memez, sensatez; ante la exageración y la imparcialidad, mesura. Cuando se llega a estos extremos de crítica injustificada y manía claramente causada por odio, muchos más españoles de los que pensamos respaldarían a los católicos, siempre que sepamos dar testimonio de paciencia y defensa de la justicia.
Ojalá todo el martirio que se nos pida sea este.
En la España actual resulta francamente difícil sostener que uno no sabe que ciertos partidos se apoyan en ideologías materialistas que niegan lo trascendente, porque lo expresan por activa y por pasiva continuamente.
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