(SIC/ACI/InfoCatólica) En el momento actual, añadió el portavoz vaticano, se abren muchas posibilidades a las comunicaciones sociales de la Iglesia, que debe orientarse «sobre todo a un servicio al Evangelio de Jesucristo".
Tras comentar también en su ponencia que existen periodistas de todas las tendencias y que no se debe partir del “presupuesto de que son insidiosos o malintencionados”, el P. Lombardi resaltó que es importante cooperar a su trabajo “ayudándolos a que puedan avanzar en la dirección justa: de nuestra parte, debemos colaborar para que estén en condiciones de dar una buena información”.
Tras comentar que el Magisterio de la Iglesia es un punto de referencia crucial para los comunicadores católicos, el sacerdote jesuita alentó a “no dejar nunca de insistir en el uso de un lenguaje claro, simple y comprensible, no abstracto ni complicado ni técnico”, así como recordar que “decir siempre la verdad es la premisa fundamental para afrontar incluso la situación más difícil”.
El P. Lombardi animó también a responder de manera oportuna “a las preguntas por teléfono o por e-mail” porque “mientras más pronto se dé la respuesta o la información correcta, mejor es”. Como regla general, agregó, si no podemos hacerlo, es “mejor ser nosotros quienes orientamos la información, dándola primeros, antes que permitir que se corra detrás de información incorrectas”.