(Efe/InfoCatolica) Para el presidente del Pontificio Consejo, las facultades de comunicación están obligadas a "darse cuenta de la responsabilidad y del compromiso que tienen", ya que, a su juicio, "deben tener siempre la responsabilidad de ser presencia y anunciadora de la Palabra".
De ahí y tras significar que estos centros "no deben ser escuelas de proselitismo religioso", Celli ha abogado por "educar a los jóvenes en una cultura de diálogo y de respeto", pero sin olvidar "lo que somos", ha añadido.
En este sentido, ha desterrado los términos de "escuelas de tipo parroquial o catequético" y ha considerado que una universidad católica "tiene que acostumbrarse a educar a los jóvenes a redescubrir cuál es el sentido de la vida y el de la verdadera cultura".
"Aquí no se dan recetas -ha añadido- y la gran tarea está en hacer encontrar un diálogo profundo entre razón y ser", un encuentro que es "el gran desafío y la gran tarea de la universidad hoy en día".
Asimismo, ha lanzado un "mensaje positivo" en relación con las nuevas tecnologías, ya que, según ha opinado, "ofrecen al hombre de hoy unas posibilidades insospechadas de comunicación y para nosotros (La Iglesia) una perspectiva cristiana también de comunión".
En este sentido, ha aludido al mensaje del Papa Benedicto XVI con motivo de la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, que se celebrará el próximo domingo, en el sentido de que el Pontífice "invita a los jóvenes a entrar en esta cultura y a animarla desde dentro llevando los valores fundamentales".
En su opinión, las nuevas tecnologías "ayudan a la persona a superar las barreras nacionales" y le ofrecen la posibilidad de dialogar y relacionarse "llegando siempre más cerca -ha continuado- a aquella visión que tiene la Iglesia de una gran familia humana".
Sin embargo y a pesar de estas ventajas, Celli ha reconocido que el Papa ha abordado algunos de los problemas que conllevan las nuevas tecnologías, unos inconvenientes que tienen que ver con "la menor preocupación de dar contenido a nuestras convicciones" porque a veces, según ha concluido, "tenemos miedo de vivir en silencio".
El I Congreso de Facultades Católicas de Comunicación pretende aunar los esfuerzos de sus decanos para poder cumplir con el mandato de la Iglesia y formar a los comunicadores en la búsqueda constante de la verdad.
Las sesiones de trabajo finalizaron ayer sábado, aunque este domingo, día 24, con motivo de la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, el obispo de Lleida y presidente de la Comisión Episcopal de Medios de Comunicación Social, Joan Piris Frígola, ha oficiado una misa.
Ambas actividades están enmarcadas dentro de la programación especial que la Facultad de Comunicación de la UPSA desarrolla con motivo de su vigésimo aniversario.