(Aica/InfoCatólica) «Así como en el fútbol no pueden ir los visitantes a una cancha, también en la política todo se hace muy difícil para acordar y consensuar», aseguró el arzobispo en declaraciones a Radio Corazón (Fm 104.1 Mhz).
El prelado consideró que este clima enrarecido de la política «es un llamado a los argentinos para empezar una etapa de mayor diálogo».
Al ser consultado si le causaba sorpresa el actual clima político del país, Mons. Puiggari respondió: «No me sorprende. Es una continuidad de todo lo que venimos viviendo… Nos cuesta dialogar, nos cuesta ceder».
«Pensando en el Bicentenario, esto es una invitación a los argentinos a dialogar más, a vivir en paz y darnos cuenta de que un país unido puede superar todas las dificultades mientras que un país dividido siempre va a marchar con muchas complicaciones, y cuando estamos con muchas complicaciones los que sufren son los pobres», concluyó.
Hechos
Desde la victoria de Mauricio Macri en las pasadas elecciones presidenciales ha sido patente la falta de sintonía y de acuerdo entre la todavía presidenta, Cristina Fernández, y el futuro dirigente del gobierno.
La presidenta saliente ni siquiera asistirá a la toma de posesión de Macri, en la que se le entregará el bastón y la banda presidencial.
El equipo del presidente electo pidió a la Justicia una medida cautelar para que el mandato de Cristina Fernández venza en la medianoche de este jueves, una decisión que un funcionario kirchnerista comparó con un «golpe de Estado». Lo cierto es que la jueza María Servini de Cubría aceptó dicha medida, indicando que durante las doce horas que transcurran entre el fin del mandato de Fernández y el juramento de Macri la jefatura del Estado quedará en manos del presidente provisional del Senado.
La pelea ha llegado incluso hasta la cuenta de Twitter de la Casa Rosada, medio oficial de comunicación de la sede de gobierno, que este miércoles cambió su foto por una de la actual mandataria y se declaró abiertamente «kirchnerista».