(Natalia Sánchez/La Opinión de Zamora) Sor Lucía Caram, religiosa dominica, ofrece hoy una charla-coloquio en el hotel Horus de Zamora a partir de las 22.00 horas. Para asistir a la charla hay que pagar una entrada de 7 euros. La monja es entrevistada por la Opinión de Zamora:
Usted defiende un cambio en el orden actual, ¿de qué manera aboga por realizarlo?
No podemos mirar hacia otro lado pues el capitalismo ha fracasado. Íbamos en un tren de alta velocidad que nos conducía al abismo y en el que nos decían que la felicidad estaba en el consumir o en velar solo por los míos y para el resto estaba el Estado. Ese tren ha descarrilado que es lo que se llama crisis. Mientras que nosotros estamos intentando construir un nuevo sistema, edificar nuevas comunidades y luchar por un trabajo digno, los poderes macroeconómicos están tratando de que este tren vuelva a la vía para continuar hacia el abismo. Son los dictámenes del Gobierno a través de los macropoderes económicos que nos dicen que tenemos que consumir para reactivar la economía y volver a lo mismo de antes e incluso tapan la pobreza.
Niegan las cifras de estudios sobre pobreza infantil
Eso pasa porque los gobernantes han entrado en la dinámica de beneficiar a los grandes poderes porque cuando acaben en su cargo pasarán a ocupar un sitio en los consejos de administración de las grandes empresas y para eso les molestan los pobres y los hacen invisibles. Montoro dice que no es realidad la pobreza infantil, que son estadísticas. Para nosotros las estadísticas tienen rostros y son historias concretas, mientras que a los políticos las estadísticas les sirven para hacer el juego de trilero. Dicen que se han creado más puestos de trabajo, claro porque previamente han destruido cinco y han generado dos precarios. Se ha creado una gran diferencia entre los que tienen y los que no tienen. Lo que tenemos que hacer es denunciar la situación y poner en marcha una alternativa. No hay que conformarse con el sistema. No obstante, hay que entender que a veces hay falta de voluntad política y a veces falta de voluntad de los ciudadanos. Tenemos que conjugar la justicia con el verbo compartir y desterrar fenómenos como el de la corrupción.
El caso Pujol es un ejemplo claro
Jordi Pujol ha hecho un discurso, ha reconocido que lo ha hecho mal teniendo un dinero sin declarar, pero cada uno de su clan tendrá que asumir sus responsabilidades. Además no declarar a Hacienda es muy grave. Yo creo que la Justicia tiene que actuar para que cada uno de los Pujol asuma su responsabilidad. No me vale que él se haya inmolado por los hijos, quienes se han aprovechado de sus influencias para estafar miles de millones.
Usted que reside en Cataluña, ¿cómo percibe el pulso existente entre el gobierno de la Generalitat y el del Estado?
Creo que ha sido un problema que han creado a nivel político. Cataluña ha tenido un proceso de movilizaciones pacíficas y lo que se tiene que hacer es escuchar y que no se acabe ninguneando desde el Gobierno central. Si hace dos años se hubiera realizado la consulta no hubiera ganado la independencia, pero el maltrato que está dando el señor Rajoy y su corte está haciendo que aumenten los independentistas. Tendría que buscarse una salida pactada y legal para que pueda hacerse la consulta y a partir de ahí dialogar. Además tanto estamos peleando por el tema de la consulta que nos hemos olvidado qué modelo de país se quiere y si no se hace la consulta cómo va a reaccionar la gente que se sienta decepcionada. Este conflicto actúa de cortina de humo ante una situación social gravísima, el problema de la sanidad que la destruyen con los recortes y una severa precariedad laboral. Todos estos temas están aparcados porque el único problema que hay en el estado español es el problema catalán, cuando hay gente que no tiene ni para comer, ni para comprar los libros dado que han cambiado por la entrada en vigor de una nueva ley educativa.
¿La ley Wert la hubiera parado?
Sin duda. Me parece un despropósito, pero cuanto más arriba en el poder están, más alejados de la realidad se encuentran. Están en otro mundo y la foto es muy clara, por un lado un presidente del Gobierno que hace ruedas de prensa a través de un plasma, lo que me sugiere que es un cobarde, un mediocre y no quiere dar la cara. Y Montoro, cuando se burla de la ciudadanía y niega la evidencia, muestra una falta de respeto. Estamos en manos de una banda que difícilmente nos sacará de la situación en la que nos han metido.
El Gobierno de Rajoy acaba de paralizar su prometida ley del aborto
Ha sido un juego político y una estrategia de Rajoy para quitarse de encima a Alberto Ruiz Gallardón, la persona que nos habían vendido como el más «progre» de su partido, pero cuando se dan cuenta de las repercusiones que está teniendo y que el PP hace aguas por todos los lados, dejan solo a Gallardón, quien renuncia porque se siente abandonado por el partido de ahí que la Iglesia no salga a defenderlo. Solo lo han defendido desde algunos medios de derechas pero no ha salido en su defensa el obispo más talibán en estos temas, el obispo de Alcalá de Henares. No lo han defendido porque recuerdan que fue el enemigo de la Iglesia porque casó a homosexuales.
¿Se debe regular el aborto en el caso de las menores?
Hay que promover el diálogo dentro de la familia. Una niña no puede tomar una decisión tan seria. Tenemos que abogar por una sociedad libre y tenemos que buscar espacios de mediación y de diálogo para que la menor no se sienta abandonada y sola ante una decisión sobre un embarazo. El aborto es un fracaso, pero la solución no es penalizarlo, sino que hay que acompañar y escuchar. Nunca hay que condenar tal y como hizo Jesús.
Ámbitos eclesiales y personas cercanas a la Iglesia no ven bien muchas de sus manifestaciones
El Evangelio es muy claro. Jesús dice que tenemos que obedecer antes a Dios que a los hombres y si he hablado mal que me digan en qué. Cuando hago mi denuncia lo hago porque creo que hemos tenido un discurso muy duro en cuestión de moral sexual y no lo hemos tenido con la cuestión social. El salario injusto y los recortes sociales que estamos sufriendo son pecados que claman al cielo y que tendría que denunciar la Iglesia. El papa Francisco desde que es elegido es el papa de los pobres, que denuncia que no se puede aceptar la pobreza y que se cierre el futuro a los jóvenes. Su postura es la que quiere que tenga toda la iglesia. Este papa cree en el Evangelio y está haciendo todo lo posible para que la Iglesia sea fiel a él.
Usted reivindica desde el plano social y Podemos desde el político. Analícenos esta formación
Estamos en un cambio de paradigmas. Pablo Iglesias ha sabido escuchar la insatisfacción existente y el bipartidismo está agotado. Una prueba es que el Partido Popular no es popular y el Partido Socialista no es socialista y si no cómo me explican que la primera entrevista que mantiene la presidenta del Banco Santander, Ana Patricia Botín, sea con Susana Díaz, del PSOE. Yo no me identifico con los nuevos movimientos que están naciendo, pero creo que en las próximas elecciones tendrá representación. Pablo Iglesias no se puede ir rápidamente, pues no tienen el conocimiento a nivel local de quiénes se están apuntado a sus círculos. Para gobernar no hace falta solo estar indignado, hace falta estar preparado y saber de estrategias, de negociar y de buscar salidas.
¿Le han ofrecido formar parte de algún partido?
Sí, pero no voy a decir de cuál. Tengo claro que mi lucha tiene que ser en otros foros. He aceptado dialogar tras las elecciones, pero mi papel es luchar al lado de los más pobres intentando despertar conciencias a través de las redes y de los medios de comunicación para conseguir recursos y poder hablar con quienes tienen el poder. En las redes tengo muchos seguidores y tienes que estar presente para decir algo y dar esperanza. Las redes sociales me han dado una gran visibilidad.
La entrada a su conferencia de esta noche tiene un precio de siete euros ¿por qué?
Cuando me invitaron vi que mi agenda estaba libre y les dije que yo no cobro, algo que no hago por principios. Si me quieren dar algo será para las causas en las que estoy trabajando como una función, la Fundació Rosa Oriol, en la que tenemos un banco de alimentos, un albergue para gentes sin hogar, ocho pisos tutelados y hemos comenzado con una campaña en contra de la pobreza infantil. Todo lo que tengo y lo que recibo lo destino a estos proyectos.