(Aci) Un adolescente -cuya identidad se mantiene en reserva- le dijo a su madre que al momento de tomarse una foto grupal con sus amigos y el Arzobispo, con ocasión de su confirmación, este lo había tocado indebidamente. La madre llevó el relato del menor a un amigo sacerdote y éste lo denunció ante las autoridades sin más pruebas que el testimonio del adolescente y la foto grupal.
La noche de Navidad, las autoridades interrogaron al Arzobispo quien negó las acusaciones y negó recordar al «particular confirmando» que lo acusaba.
En la fotografía que analizó la policía, se ve al Arzobispo en un escalón superior al que se encuentra el muchacho acusador. En la fotografía hay otros once jóvenes, un sacerdote y un diácono.
El martes 10 de marzo, el director de la división penal del condado de Ramsey, Richard Dusterhoft, explicó que no se presentarán cargos por que «es improbable que el Arzobispo haya tomado un momento para tocar sexualmente a un muchacho al azar, frente a otro miembro del clero, un diácono o frente a los numerosos familiares de los confirmandos que en esos momentos documentaban esos instantes con fotografías».
Hubiera sido visto por todos
Dusterhoft dice además que «de acuerdo a lo que se ve en la fotografía, el Arzobispo habría tenido que inclinarse para alcanzar las partes del muchacho y que esa acción habría tenido que ser vista por los otros presentes».
Ante la noticia, la archidiócesis saludó «el anuncio de la fiscalía de Ramsey County de que no van a presentar cargos contra el Arzobispo Nienstedt» y confirmó que reasumirá su ministerio público después de haber sido suspendido del mismo desde el 17 de diciembre, cuando comenzó la investigación.
El arzobispo da las gracias a la policía y la fiscalía
El Arzobispo agradeció además a «la policía de Saint Paul por su aguda investigación, así como a la fiscalía del Ramsey County por su trabajo profesional respecto a este asunto».
«Al volver a mi ministerio público, expreso mi compromiso de trabajar siempre para darle un ambiente seguro a todos los niños y los jóvenes».
«Sigo ofreciendo mis oraciones por todas las víctimas, sus familias y sus comunidades, así como también por quienes han sido dañados por el abuso sexual de miembros del clero. Una vez más ofrezco disculpas a todos los que han sido afectados por estas terribles ofensas».
Cultura de odio contra todo lo católico
Para el presidente de la Liga Católica de Estados Unidos, William Donohue, «lo que ha sucedido con el Arzobispo Nienstedt no ha sido un error. Refleja un problema más profundo. Estamos viviendo en una cultura de odio - odio contra todo lo católico- liderada por aquellos cuyo objetivo es traerse abajo a un obispo. Todo obispo es un objetivo potencial, pero ninguno más que aquellos que son vistos como enemigos de la agenda ‘progresista’».