(ACI/EWTN) Según informó la agencia Fides, en ese debate Rehman defendió a Bibi y explicó su propuesta para que el Parlamento revise la ley de blasfemia a fin de evitar abusos. Sin embargo, tras el asesinato de Salman Taseer y de Shahbaz Bhatti, la parlamentaria que también estaba en peligro de muerte, retiró la moción. La policía retiró las acusaciones y un tribunal de Lahore rechazó la denuncia de Akhtar Gull.
Sin embargo, el recurso de casación fue admitido por el Tribunal Supremo y se ha reabierto el caso.
Fuentes de Fides advirtieron que los extremistas quieren definir el significado de "blasfemo" para así poder procesar a cualquiera que se oponga o cuestione la ley sobre la blasfemia.
Antes de asumir su cargo diplomático, Rehman fue Presidenta del Jinnah Institute de Karachi, centro de investigación formado por intelectuales musulmanes liberales que el año pasado publicó un informe donde advierte que Asia Bibi había sido juzgada por un tribunal "bajo la evidente presión de los extremistas islámicos", y "por una venganza personal".
También denuncia irregularidades en el proceso, como la falta de abogado durante la investigación y en los interrogatorios previos al juicio, por lo que podría ser declarado invalidado.