(Efe) La diócesis aclaró que el sacerdote retirado carecía de permiso para continuar oficiando y que el exobispo dejó de tener cualquier cargo de responsabilidad en la región hace años. Los detenidos son Peter Ball, de 80 años, que dimitió como obispo de Gloucester en 1993 por un episodio sexual, y Vickery House, sacerdote retirado de 67 años, a los que la policía de Sussex (sur de Inglaterra) investiga de forma separada, según indicó un portavoz policial.
La Iglesia Anglicana facilitó a la policía datos que favorecieron el arresto de ambos religiosos procedentes de una investigación interna sobre el cuidado a menores de la Diócesis de Chischester -dentro de la jurisdicción de Ball - entre los ochenta y los noventa.
En esa zona, House acumula denuncias por presuntos abusos de dos adolescentes entre 1982 y 1983, mientras que Ball, que dimitió en 1993 tras recibir una amonestación policial por un episodio sexual con un joven de 19 años, afronta un número más elevado de acusaciones.
Pese al tiempo transcurrido, la policía de Sussex señaló que «siempre se tomarán en cuenta» acusaciones de este tipo, que se tratarán «con la misma seriedad que cualquier denuncia reciente».
La diócesis de Chischerter aseguró en un comunicado que la cooperación policial «continuará durante el tiempo que sea necesario para traer cualquier asunto criminal ante las autoridades públicas, y para asegurar que la Diócesis es un sitio seguro para la comunidad e inseguro para aquellos que quieran abusar de ella».