(Fides) La reunión contó con la presencia del gobernador de Homs, Sheikh Ahmad, varios líderes tribales, representantes de todos los grupos étnicos y religiones, líderes de la comunidad árabe, autoridades civiles de la ciudad de Homs, líderes de la sociedad civil, entre ellos Akram Qalish, el sacerdote siro-católico p. Michael Naamán, el jeque Habib Fendi, profesionales y ciudadanos comunes de buena voluntad.
Todos han demostrado el deseo de «tender la mano a la reconciliación para detener la hemorragia de las heridas en Siria» y para «unir a los hijos de Siria en el amor y la reconciliación». La Asamblea ha hecho hincapié en el rechazo del sectarismo, expresando el deseo de construir una «civilización del amor y la convivencia» entre los hijos de un mismo país. Los participantes reafirmando la prioridad de la amistad y la fraternidad, han insistido en la urgencia de detener la violencia, y promover la reconciliación del país, para reconstruir un tejido social deshilachado, basandose en el perdón y la comprensión.
El Ministro Ali Haider ha respondido a las peticiones de la sociedad civil diciendo que tiene sus «puertas abiertas» y que se encuentran en un proyecto de reconciliación nacional, agregando que el ministerio tiene una visión y una estrategia que pronto se harán públicas. El Ministro Haidar ha pagado un alto precio personal por el conflicto, su hijo, Ismael Haidar, fue asesinado el pasado mes de mayo. Su ministerio, ha anunciado, creará un sitio web interactivo, con líneas telefónicas directas para recibir informes de los ciudadanos. El Ministerio para la Reconciliación, ha concluido Haidar, es «la morada de todos los sirios, sin excepción», asegurando que su comisión de trabajo «estará compuesta por 23 millones de sirios».