(Luis F. Pérez/InfoCatólica) Al presentar el nuevo Plan pastoral, el presidente de la Conferencia Episcopal Española ha recordado que "no fue hasta 1983, cuando, con ocasión de la primera visita del beato Juan Pablo II a España, se elaboró y publicó el primero de esos planes" y, por tanto, "no perdemos, pues, de vista que la Conferencia ha funcionado y podría funcionar sin estos instrumentos de trabajo".
Aun así, el cardenal ha resaltado que "todos nuestros planes pastorales han estado orientados de uno u otro modo por el programa de la nueva evangelización" y "algo semejante sucede también ahora con el nuevo plan que estudiamos".
En relación a la nueva evangelización, que fue propuesta por el Beato Juan Pablo II, Papa, el arzobispo de Madrid ha señalado que Benedicto XVI la ha retomado "con un vigor especial; hasta el punto de que en 2010 crea un nuevo Pontificio Consejo al que ha dado el encargo específico de promoverla".
"El plan pastoral que estamos estudiando", ha añadido el purpurado, "prosigue con el programa de la nueva evangelización sin perder de vista la situación por la que atraviesa nuestra sociedad, pero, ante todo, poniendo el acento en algunas oportunidades que se nos presentan en estos años como providenciales en orden a la renovación del alma de la Iglesia y, por tanto, de su vigor misionero".
Crisis y caridad
El cardenal Rouco ha tenido palabras para la crisis que vive España. "En cuanto a la situación general de la sociedad española", ha explicado, "a nadie se le oculta que la crisis que nos azota desde hace ya varios años es el factor más preocupante y al que hay que prestar la más cercana atención".
"No es nuestra misión", ha asegurado el cardenal Rouco, "entrar en el análisis ni en las soluciones propiamente económicas y políticas. El Plan pastoral no lo hará. Pero sí es nuestro deber de pastores de la Iglesia ayudar al análisis cultural y moral necesario para llegar al fondo de las causas de la situación dificilísima que vivimos".
Sin embargo, el cardenal no ha dudado en afirmar que "si no se sigue el camino que hace posible la caridad no será posible una buena solución de la crisis. Sin la caridad, es decir, sin la generosidad sincera, movida en último término por el amor de Dios y del prójimo, será imposible introducir los cambios necesarios en el estilo de vida y en las costumbres sociales y políticas que han conducido a la crisis".
En ese sentido, el prelado ha afirmado que "es necesario apartarse de la codicia, que da alas a la ilusoria identificación de la felicidad con la mera acumulación de bienes, a la búsqueda irresponsable del enriquecimiento rápido, así como a la cultura del endeudamiento exagerado que amenaza el presente y lastra a las generaciones jóvenes".
El cardenal ha destacado la labor social de la Iglesia al decir que "nunca exhortaremos lo suficiente a ayudar a los que sufren más duramente las consecuencias de la crisis mediante el voluntariado o la aportación económica en Cáritas y otras instituciones de asistencia y prevención".
El Concilio Vaticano II y el Año de la fe
El presidente de la Conferencia Episcopal Española ha tenido palabras para recordar que este año se cumplen los cincuenta años del comienzo del Concilio Vaticano II.
El cardenal ha explicado que "al convocar recientemente el Año de la fe para el próximo 11 de octubre, día del cincuenta aniversario de la apertura del Concilio Vaticano II, el Papa vuelve a decir que la ocasión ha de ser aprovechada pastoralmente para «comprender que los textos dejados en herencia por los Padres conciliares, según las palabras del beato Juan Pablo II, “no pierden su valor ni su esplendor”. Es necesario leerlos de manera apropiada y que sean conocidos y asimilados como textos normativos del Magisterio, dentro de la Tradición de la Iglesia»".
El prelado ha constatado que "la falsa recepción del Concilio tiene también que ver con la crisis de la fe: con la fe el Dios vivo, revelado en Jesucristo y con el misterio de la Iglesia. La vana pretensión de constituir una «nueva» Iglesia, distinta de la «preconciliar», denota una grave crisis de fe en la Iglesia".
Nuevo Catecismo para niños y adolescentes
El cardenal ha anunciado un nuevo catecismo para los más jóvenes: "Compartiendo la preocupación del Papa por la recta confesión de la fe y, en particular, por que la iniciación cristiana sea íntegra y fructífera, la Conferencia Episcopal Española espera poder ofrecer al Pueblo de Dios durante el Año de la fe un nuevo catecismo para la iniciación de los niños y adolescentes".
El mismo llevará por título "Testigos del Señor, y se concibe como continuación del catecismo Jesús es el Señor, que tan buenos resultados está dando cuando es utilizado como referencia básica y segura de la formación doctrinal en la catequesis de los niños que se preparan para recibir la primera comunión".