Una procesión española del Domingo de Ramos, Fiesta de Interés Turístico Internacional

El palmeral de Elche, Alicante, es Patrimonio de la Humanidad y famoso por su uso para la confección artesanal de Palmas Blancas, por las cuales su procesión del Domingo de Ramos es Fiesta de Interés Turístico Internacional. El Ayuntamiento de Elche regala Palmas Blancas a los Reyes de España y a sus nietos, como también al Presidente del Gobierno cada año. Unas palmas lisas se destinan a los varones mientras que las mujeres reciben palmas rizadas, preciadas por su valor artístico. También regalan palmas rizadas al Papa, al Nuncio apostólico en España y al Obispo, por ejemplo. Las familias Serrano Valero y Carbonell Galiano son las dos únicas que han continuado esta tradición artesanal a través de los siglos.

Este vídeo muestra ejemplos de Palmas Blancas enviadas a la Familia Real en 2008:

¿Cuántos profundizarán en esa “Fiesta de Interés Turístico Internacional” lo que se celebra el Domingo de Ramos, el Domingo de la Pasión de Cristo? Jerusalén le acogió al Señor con palmas cuando entró en ella sobre un asno, pero poco después nos dice el evangelio del Domingo de Ramos que: “llevaron a Jesús al Gólgota” (Mc. 15,22). De camino al Calvario, terriblemente herido y profundamente humillado, Jesús recuerda a las mujeres de Jerusalén que le lloran que si eso se hace con la rama verde, ¿qué se hará con la seca?

Los que se apuntan al Taller de Artesanía de la Palma Blanca en Elche (una iniciativa del Pacto Local por el Empleo en su XII edición este año) saben que se trabajan las palmas mientras no están secas y para conservar su frescor en el transporte se les moja y cubre con plástico. Este cuidado final es sólo uno tomado en la larga producción de Palmas Blancas artesanales.

Con mucho cuidado, se tapan las ramas de algunas palmeras, las que producen dátiles de poca calidad, dejando la parte superior abierta para que cuando se abra el ‘caporutxo’ nueve meses después, se encuentren palmas blancas. Las cortan, cepillan y clasifican según su calidad y largura antes de conservarlas en cámaras especiales con vapores sulfurosos.

¡Con mayor esmero cuida Dios de los hombres a pesar de la poca calidad que mostramos al pecar! Como resalta S. Pablo, Cristo murió por nosotros mientras éramos pecadores. ¿Qué más podría haber hecho por nosotros? ¡Cuántas oportunidades nos da para que luzcamos lo mejor en el Cielo, trabajando nuestras almas para decorarlas de virtudes! Mientras tanto, ¿con qué cuidado conservamos nuestras almas sin mancha?

Los que se dejan bendecir por los Sacramentos y se mantienen empapados de la Gracia Divina tendrán larga vida como las Palmas benditas que los fieles colocan en lugares de honor en sus casas, un fin infinitamente mejor que el de los que no se acercan nunca a la Iglesia. Por eso les dijo Jesús a las mujeres de Jerusalén: “no lloréis por mí; llorad más bien por vosotras y por vuestros hijos” (Lc. 23, 28). No dejemos que nuestras almas se sequen y con lágrimas de verdadera contrición por nuestros pecados vivamos la mejor Semana Santa posible este año.

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Estación VIII del Vía Crucis: Jesús encuentra a las mujeres de Jerusalén
[Vía Crucis del Coliseo (2008) por el Cardenal Joseph Zen Ze-Kiun, S.D.B., Obispo de Hong Kong]

V. Adoramus te, Christe, et benedicimus tibi.
R. Quia per sanctam crucem tuam redemisti mundum.

Del Evangelio según san Lucas 23, 27-28
Le seguía una gran multitud del pueblo y mujeres que se dolían y se lamentaban por él. Jesús, volviéndose a ellas, dijo: «Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí; llorad más bien por vosotras y por vuestros hijos».

Meditación
El amor infunde a las mujeres, a las madres, una inmensa capacidad de aguante en el sufrimiento. Sufren por culpa de los hombres, sufren por sus hijos. Recordemos a las madres de tantos jóvenes perseguidos y hechos prisioneros por causa de Cristo. ¡Cuántas largas noches de insomnio han pasado llorando esas madres! Recordemos a las madres que, corriendo el riesgo de ser arrestadas o perseguidas, han perseverado en la oración en familia, cultivando en el corazón la esperanza de tiempos mejores.

Oración
Jesús, al igual que, a pesar de tus sufrimientos, te preocupaste de dirigir tu palabra a las mujeres en la vía de la cruz, haz que también hoy se escuche tu voz llena de consuelo y de luz para tantas mujeres que sufren. Tú las exhortas a no llorar por ti, sino por ellas mismas y por sus hijos.

Llorando por ti, lloran sufrimientos que traen la salvación a la humanidad y son, por tanto, causa de gozo. En cambio, deberían llorar por los sufrimientos causados por los pecados, que las convierten a ellas, a sus hijos y a todos nosotros en leños secos que merecen ser echados al fuego.

Tú, Señor, enviaste a tu Madre a Lourdes y a Fátima para recordarnos este mismo mensaje: «Haced penitencia y rezad para apaciguar la ira de Dios». Haz que acojamos de una vez con corazón sincero esta invocación llena de dolor.

Preguntas del día [Puede dejar su respuesta en los comentarios]: ¿Qué tradiciones observará esta Semana Santa?

Mañana – Vía Crucis, Estación IX: Jesús cae por tercera vez - “Y lo sacaron para crucificarlo” (Mc. 15, 20)