"Silencio cómplice" (Gil Tamayo. CEE, Madrid).
Perdón por seguir con el tema, aunque sí cambia el ámbito y la persona, pero la actualidad lo reclama.
Esta misma semana, el todavía “portavoz” de la CEE, don José María Gil Tamayo, próximo obispo de Ávila, lo ha dicho alto y claro: la Iglesia en España ha guardado un “silencio cómplice”, referido en concreto al tema de la pederastia. Y lo ha denunciado en una entrevista publicada obligado, qué duda cabe, porque el tema está candente: de una actualidad más rabiosa que nunca: dos días antes el obispado de Salamanca animaba a las víctimas a denunciar cualquier asunto, por antiguo que fuera..
Con estas declaraciones del Portavoz sigue lloviendo sobre mojado; y más que lo hará; porque las cosas han llegado ya a un punto en la Iglesia Católica que es imposible seguir ocultándolas: esto no hay quien lo pare, se pongan como se pongan las autoridades jerárquicas, competentes o incompetentes, que de todo hay..
Con todo, bien está lo que bien está. Pero esta “confesión” de parte, esta “accusatio non petita“, ni puede quedarse aquí, ni puede limitarse a este tema; que, en el fondo, podrá ser el más “escandalosamente espectacular", pero es el MENOR de los problemas que existen en el interior de la Iglesia; eso sí, alimentados en su mayor parte y en su dimensión más sustancial por Ella misma.
Una aclaración necesaria antes de seguir: cuando digo “Iglesia Católica", prácticamente en todos los casos me refiero a las PERSONAS que la gobiernan a un nivel u otro. Nunca a la Iglesia como Instituión, que es Una, Santa, Católica, Apostólica y Romana.
Y sigo. Mientras desde la misma Iglesia no se le quiera entrar y se le entre de frente y a fondo, a los REMEDIOS -y no solo en el tema de la homosexualidad y de la consiguiente pederastia y demás abusos-, la mera “denuncia” no significa prácticamente nada.
Y me explico con un ejemplo sacado de las msimas palabras de Gil Tamayo:.
“La `inacción´ de la Iglesia ante la pederastia ha sido la misma que la de toda la sociedad española. “compartíamos esa cultura".
¿Aún no se ve, o no se quiere ver, dónde está el verdadero problema? Lo acabo de escribir tomado de la misma boca del Portavoz, que es voz más que autorizada, pública, de la CEE: “compartíamos esa cultura". No se puede decir más claramente. Ni reconocer del modo más explícito el inmenso FRACASO de la Iglesia Católica en España, y en todo el mundo Occidental.
Esta es la explicación de la DESERTIZACIÓN de países enteros con más de 2000 años de religión, cultura y sociedad católicas; como dice el mismo Portavoz: no somos de ayer, ·"estamos aquí desde los tiempos de los romanos". Y la Iglesia, ahí, en todo el mundo occidental, en y desde Europa, estaba siendo -era- el “alma de la sociedad", es decir: de la cultura, de la política, del ordenamiento jurídico, del orden social y económico, de la familia, del arte, etc. Ahí y así ha estado durante más de dos milenios. Pero ahora y, en concreto, desde el Vaticano II: “compartíamos esa cultura".
O sea: la Iglesia Católica ha dejado de ser lo que era -un miembro de la Jerarquía en Norteamérica acaba de decir que la Iglesia está para salvar almas, no para ocuparse del calentamiento global-, para acabar asumiendo LAS MISMAS, exactamente las mismas “DIRECTRICES” de la sociedad actual; que, por decirlo ya claramente, de entrada es de una inhumana crueldad con la mujer, con el hombre, con los niños, con los fetos, con los ancianos, con la cultura, con la inteligencia, con el arte…, y con todo lo que se le ponga por delante.
Son los frutos, no maduros sino podridos, del “DIÁLOGO” con el mundo, tomado de igual a igual. Es la misma “imbecilidad” que pretender que los alumnos “enseñen” a los profes, porque son estos los que tienen que aprender de los primeros; que los que no creen “enseñen” a los que tienen Fe: que los católicos no-practicantes -o sea: fracasados- a las gentes de piedad viva y vivificante; los enfermos a los médicos; los criminales a los jueces; los arrejuntados a los casados; los arcoiris al resto…, y, a este paso, los muertos a los vivos; con el “pequeño detallito": que los muertos ya no pueden decir nada. Ni queriendo. Y lo mismo todos los demás que he enumerado en primer término respecto a los segundos: porque es el mundo al revés. Mundo en el que se ha metido, de hoz y coz, la misma Iglesia Católica. Inexplicablemente, excepto si se acude al famoso seréis como dioses, que da mucho de sí.
La Iglesia, en España y en todo el Occidente, hace muchos años que ha dejado de hablar, especial y específicamente de lo que tenía que hablar; y se ha convertido en “sorda y muda" poseida por un demonio, como leemos en el Evangelio de aquel oersonaje incapaz de oir y hablar, al que Jesús -Él, sí- libera. Un endemoniado que, en otra ocasión, no habían podido librar -se ve que intentar lo intentaron; y no debería ser la primera vez que habían obtenido buenos resultados con otro tipo de endemoniados-: pero esta vez, no; fracasan. Y cuando le preguntan a Jesús por qué, les contestó: esta clase de demonios no se sacan si no es con oración y ayuno.
En esta “iglesia en salida", paradigma de la “nueva iglesia” -la “antigua", la que salió de las manos de Cristo, solo servía para salvar a los hombres de ellos mismos, y de los embates del demonio, y llevárselos al Cielo-, se ha cumplido al pie de la letra lo que recogen los Evangelios -luego, avisados estábamos- con las tentaciones a Jesús, su Fundador: se el presenta el demonio y le dice sin cortarse un pelo: Todo esto te daré si, postrándote ante mí, me adoras. Pero Jesús -y esta misma respuesta la tenía la Iglesia Católica ante el embite de “compartir la misma cultura", ya que es depositaria y transmisora de la Palabra de Dios- le respondió: Apártate de Mí, satanás, porque escrito está: “Al Señor, tu Dios adorarás y a Él solo servirás”.
La iglesia ha salido tan a toda máquina de donde estaba y de con Quíen estaba, que se le ha olvidado hasta la Palabra de Dios; como a las vírgenes necias el aceite. Y así les fue a estas, y así le está yendo a Ella.
Lo que Gil Tamayo ha querido presentar -y ha presentado- como excusa, o como “explicación", no solo indulgente sino exculpatoria, no es más que la confesión de la inanidad de la propia Iglesia construida con el silencio cómplice de sus jerarcas y el abandono de sus ovejas. por haber abandonado antes a su Dios y Señor.
La SOLUCIÓN, por tanto, la tienen los jerarcas en su mano: volver a Cristo, volver al Evangelio, volver a la Gracia, volver a su Misión, volver a lo que han abandonado tan innecesaria como incomprensiblemente: arrepentirse, hacer una buena Confesión, con examen de conciencia, dolor de los pecados, propósito de enmienda y cumplir la penitencia adecuada, que no puede ser un mero padrenuestro. Y lo mismo tantas cabezas de Instituciones católicas que ha perdido el “oremus” hace ya tantos años. Y están tan “en salida” que ya no queda casi nadie donde antes lo lenaban todo.
Esto es lo que la Iglesia debe recuperar a toda prisa si pretende poner remedio a esta connivencia, cuando no entrega incondicional al mundo. Porque, como nos dice a todos Jesucristo: No podéis servir a dos señores.
Pero mucho menos a uno: al MUNDO.
¡A rezar tocan! Y fuertemente. Con Fe: como hay que rezar.
20 comentarios
En cuanto a lo que dice el portavoz de la CEE ''de que la inacción de la Iglesia , en el tema de la pederastia, era lo mismo que el resto de la sociedad española'', NO ESTOY DE ACUERDO, porque , personalmente, nunca compartí éso, así que, a mí que no me meta en ese lodazal.
Seguiré, seguiremos rezando por la Iglesia.
Mi oración, también para vd.
Rezaremos porque la jerarquía que no ve descubra los verdaderos caminos de Dios que, como expresaba bellamente Isaías, son diferentes de los caminos de los hombres
Eres muy libre. Pero m da q t quedas con un hecho inexplicable; algo así como el big-bang, o como s escriba...
Su explicación, estimado Padre Aberasturi, me parece más fundamentada y realista.
Un abrazo en Cristo
Sobrenatural será la cura , entonces.
Sinceramente, no sé qué significa que "el Evangelio no tiene cultura propia que caiga del cielo".
Pero el Evangelio no viene a "compartir" nada: el Evangelio se nos entrega; precisamente para que donde habia "miedos y dudas" haya paz, tranquilidad, seguridad y Verdad, que traen la relativa felicidad en este mundo, y la Vida Eterna.
Magnífica apostilla que resume el verdadero sentido de la Verdad que se nos ha revelado. ¿Cómo es posible que no lean así tantos equilibristas empeñados en contentar a un mundo que aborrece los valores cristianos? ¿Acaso pueden creer sinceramente que están contribuyendo a desarrollar y mantener el pueblo de Dios, estando como están advertidos de que los caminos de Dios no son los caminos de los hombres?
Saludos cordiales.
Marx, el cardenal, ha celebrado en su catedral la jornada de oración por las víctimas de la pedofilia y nos confiesa: ‘hemos fracasado, ahora ya basta, ha llegado para la iglesia la hora de la verdad’. Lo del ‘hemos’ nos suponemos que es la forma mayestática de plural al que la jerarquía está volviendo de un modo masivo. Hace muchos años que no veíamos a sus eminencias usarlo de forma tan generosa. Los temas de los que hablamos , no nos casaremos de decirlo, son delitos gravísimos y totalmente intolerables en un consagrado. Las responsabilidades por acción , por encubrimiento, por omisión, son siempre personales. Ya está bien buscar culpables en el mundo indeterminado metafísico. Ha llegado la hora de la verdad y parece que algunos no terminan de enterarse. Italia baja posiciones en la protección de los menores y esto sucede por la tolerancia de la justicia con los casos de abusos de menores. No podemos estar viviendo todos los días con este bombardeo de escabrosos casos en los que la jerarquía está sumergida hasta la coronilla. No es creíble que quien ha creado el problema quiera vendernos la solución. Mejor la verdad y apear cuanto antes el plural mayestático.
Siempre leo lo que escribe porque me identifico con lo que dice y me animo al ver que usted y otros como usted tienen claro que es ser Iglesia de Cristo y lo que hay que hacer. Gracias por atreverse a decir lo que va mal y como ir bien. Es muy necesario. Con ayuno y oración pedimos ayuda al cielo, pero hay que resistirse a la propaganda del mundo propagando la Verdad de Dios. Que Dios le bendiga y le de larga vida.
Muchas gracias, Martinna.
Algo empieza a moverse en la enseñanza parroquial.
En mi parroquia del sur de Andalucía hay una renovación, se hacen retiros de oración, cursos bíblicos... Y lo mismo en mi parroquia de Castilla-Leon... Me parece que no es casualidad sino que se proponen hacer las cosas mejor. Dios quiera que así sea y nos recupere.
Pido al Espíritu Santo que no cese de proyectar su santísima luz sobre personas como Vd. ¡Estos son los testimonio que nos fortalecen ante las contradicciones de este mundo!
¡Dios le bendiga P. Aberasturi!
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