Raíces cristianas de Europa
Una raíz procura alimento para la planta que sostiene y, por lo tanto, sin la misma se produce, lógicamente, la muerte.
Analógicamente, Europa también tiene unas raíces que alimentan su existencia, que la vieron nacer como tal y que, en un mundo cambiante como el que nos ha tocado vivir, la mantienen, mal que bien, en pié.
Hace, más o menos, 1200 años, el Papa León III coronó a Carlomagno como emperador. Se entiende que tal momento supone el nacimiento de Europa como tal y aunque se pretenda olvidar, sin razón, tal acontecimiento, las cosas son como son.
Benedicto XVI ha tenido que implorar que “El Viejo Continente nunca olvide las raíces cristianas que son la base de su camino y siga afianzando en el Evangelio los valores fundamentales que aseguran la justicia y la concordia”. Porque el Evangelio es la savia que provee de vida al árbol de la existencia común.
Poco a poco, legislación tras legislación y norma tras norma Europa está dejando atrás su mismo origen. Pierde su ser y rompe el cordón umbilical que la une con Dios. Acumula vacío donde debiera haber riqueza de espíritu.
Conocedor del origen de Europa, en su Exhortación Apostólica Postsinodal “Ecclesia in Europa”, Juan Pablo II Magno dejó escrito que “Si dirigimos la mirada a los siglos pasados, no podemos por menos de dar gracias al Señor porque el Cristianismo ha sido en nuestro Continente un factor primario de unidad entre los pueblos y las culturas, y de promoción integral del hombre y de sus derechos” (EE 108), porque nada se construye de la nada ni se puede hacer como si eso fuera posible. Olvidar es, aquí, dejar de ser, expirar poco a poco, morir.
¿Qué quedará de Europa si se deja caer en manos del relativismo? ¿Qué si se dedica, en exclusiva, a pisar la tierra sin mirar al cielo? ¿En qué fosa de la que hablara el salmista nos harán caer?
Desde que se elaboró la denominada Constitución Europea se ha intentado, desde su mismo Preámbulo (llámese así, por ejemplo) que el cristianismo y lo que supone su realidad no apareciera reflejado, en el texto de la misma. Todo es genérico, amorfo, ciego. Todo es para que nada sea, en interés disgregador y olvidadizo.
¿Qué tiene de verdad una Europa que pretiere, con facilidad, el mismo contenido de su bandera? ¿Doce estrellas que quedan huecas? ¿Las mismas que las que recoge el Apocalipsis, 12,1 refiriéndose a María: “Una gran señal apareció en el cielo: una Mujer, vestida del sol, con la luna bajo sus pies, y una corona de doce estrellas sobre su cabeza”?
Una memoria así es nada; una raíz, así, se pudre.
Eleuterio Fernández Guzmán
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12 comentarios
Pero nuestros políticos no tienen intención de fundamentar Europa en sus raíces. Para ellos Europa no es nada más que un acuerdo económico que necesita de leyes comunes para funcionar.
Eso si, algunos políticos si han defendido la raíces cristianas de Europa... pero son pocos. Nos toda a la sociedad civil revindicar la cristiandad fundamento y semilla de la europeidad.
Dios le bendiga :)
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EFG
A mí, sin embargo, lo que más que agrada es que, a lo mejor, muchos de los politicos que tanto se oponen a lo cristiano, ignoran el origen de la bandera de Europa. Al menos así está a cubierto de malas acciones en contra de ella.
Pero, en el fondo, es bien triste que la clase política, casi toda, viva en la inopia de los orígenes de lo que tanto defienden.
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Eleuterio: A fin de ver más claro las raices, completemos el versículo. Que dice: Estando en cinta, gritaba con dolores de parto,..Parió un varón que ha de apacentar a todas las naciones con vara de hierro,..
Y mira cómo dos mujeres hay. Una, la de la gran señal. Que quiere decir la que siendo mujer y virgen parió un varón Mesías. Y otra mujer la que "con dolores de parto" parió ese varón Elías que pronto muy pronto ya, gobernará a todas las naciones con la misma vara de ley que hasta la fecha, "Egipto y Roma", hayan gobernado.
Recemos para que la sociedad europea no sea tan hedonista,nihilista,no mate a los bebes en el seno de la madre,DESPERTEMOS o en el futuro bien se la podrá llamar Eurabia.
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EFG
Pues ya hay que rezar...
claro es mucho más comodo,y ha sido sustituido por el materialismo,el consumismo.Exhortacion del Papa a los jovenes en Bellahouston Park."Os apremio a llevar una vida digna de nuestro Señor y de vosotros mismos.Hay muchas tentaciones que debéis afrontar cada día,droga,dinero,sexo,pornografia,alcohol y que el mundo os dice que os darán felicidad,cuando en verdad son destructivas y crean división busacad a Jesus y El os liberará de la esclavitud de la existencia deslumbrante,pero SUPERFICIAL que propone frecuentemente la sociedad actual".
Siga usted empeñada en que la Constitución Europea especifique que Europa tiene "raíces cristianas", pero medite: ¿Eso hará cambiar la opinión que los europeos tienen de las religiones cristianas?. Alguien tan poco sospechoso como Raniero Cantalamessa, lo tiene mucho más claro:
"Otro error consistiría en dirigir todo hacia leyes del Estado para defender los valores cristianos. Los primeros cristianos, como hemos visto, con sus costumbres cambiaron las leyes del Estado; no podemos esperar hoy en cambiar las costumbres con las leyes del Estado"
http://www.cantalamessa.org/es/articoloView.php?id=266
Y No hay término medio en la adversidad, o nos hunde o nos levanta.La adversidad es la hora de la prueba, en la que cada persona da el sonido del METAL que lleva dentro, esperemos que salgan las raices Cristianas de Europa ,esas raices que de momento estan aletargadas .
¿Que opinion tienen los europeos de las religiones cristianas? Vaya,usted cree saberlas,hay poca informacion en primer lugar,solo se informa cuando es para criticar o ridiculizar a la I.Catolica,ya lo dije en un comentario anterior, pero estos "valientes"se callan cuando del Islam se trata,en los paises arabes existe un Ministerio de la religion,en Europa quieren que nos dejemos la religion en el armario bien guardadita.Pero vamos que ya me esperaba esto de tu parte,y no pienso meterme en el enlace así que no te molestes en poner ninguno.
¿No sabe quién es Raniero Cantalamessa?. Es el Predicador de la Casa Pontificia, el que predicó durante el último cónclave. El enlace es a su página oficial, pero da la impresión de que no se fían de los suyos.
Noto en sus palabras sobre los países islámicos como un cierto deseo de que Europa se pareciese a ellos, que hubiese una religión oficial, que esta fuese la fuente principal del derecho, que sólo los que profesen esa religión tuviesen derechos plenos,...
¡Basta ya de leyendas negras!
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