La Escuela Intranscendente del Nuevo Paradigma
Hay muchas escuelas supuestamente católicas (digo muchas, no todas) que han sido las abanderadas del modernismo o, lo que es lo mismo, de la Iglesia del Nuevo Paradigma, desde hace más de cincuenta años. Los religiosos neoparadigmáticos no dudaron en cambiar la tradición y el carisma de sus fundadores por las novedades de la modernidad. La mayoría de esas órdenes religiosas (no todas) languidecen en una muerte lenta que prolongará su decadencia y su agonía hasta que desaparezcan. Hoy en día estas órdenes religiosas tienen más jubilados que miembros activos. Es lo que pasa cuando el sarmiento se separa de la Vid Verdadera, que es Cristo: que el sarmiento se seca y no sirve ya más que para echarlo al fuego.
Estos colegios modernistas – un día católicos – no molestan al mundo porque son del mundo. Son colegios intranscendentes en todos los sentidos de la palabra: intranscendentes por irrelevantes o insignificantes; e intranscendentes porque, en la mejor línea de la modernidad nietzscheana, han “enterrado” a Dios. Lo “católico” ya no es sustantivo y sustancial, sino adjetivo y cosmético. En poco o en nada se diferencian de cualquier colegio laico. En su lucha contra su propio pasado, contra su identidad y contra el sentido común, desprecian la tradición y abrazan cuantas novedades de última hora ofrecen las modernas corrientes pedagógicas. Lo moderno, la última moda, la última novedad psicopedagógica es acogida con fe de converso: el constructivismo, la enseñanza cooperativa, las experiencias de meditación orientalistas del estilo del yoga, el mindfulness o incluso el reiki; las inteligencias múltiples, la educación emocional, la eliminación del libro de texto y la incorporación de las tabletas (ya me dirán cómo se puede estudiar en una pantalla sin dejarse la vista en el intento)… Todo lo que suene a nuevo y moderno, es bueno. Todo lo tradicional, hay que eliminarlo por obsoleto. “La educación de antes ya no vale”. “Hay que adaptarse a los nuevos tiempos”. “No se puede seguir educando como hace cien años”.
¿Seguro? ¿Lo que tenemos ahora es mejor que la escuela que teníamos hace cien años? Por sus frutos los conoceréis.
La escuela modernista neoparadigmática no es católica. Es kantiana, marxista, fenomenológica o nietzscheana, pero no católica: no cree que se pueda conocer mediante la razón a Dios, al mundo o al hombre. Y si no se puede conocer la realidad porque tenemos la sospecha de que la realidad ni siquiera existe, ¿qué demonios vamos a enseñar? “Cada uno construye su propio conocimiento” porque la realidad es una construcción mental que cada persona va elaborando subjetivamente en su propia mente. Lo único que podemos conocer son los “fenómenos”.
Hay que fomentar experiencias (fenomenología) para que se pueda “sentir” a Dios. Nada de enseñar doctrina. Antiguamente, el Catecismo se enseñaba y se aprendía. Ahora prefieren que los niños no sepan nada y coloreen dibujitos fotocopiados. ¿Por qué? Porque no creen que haya nada que enseñar, porque no creen en la Santa Doctrina de la Iglesia, porque desprecian la Tradición. Porque “eso era antes”. “Ahora eso ya no vale para los nuevos tiempos”.
Pero dice San Pío X en la Pascendi (4):
Porque el concilio Vaticano decretó lo que sigue: «Si alguno dijere que la luz natural de la razón humana es incapaz de conocer con certeza, por medio de las cosas creadas, el único y verdadera Dios, nuestro Creador y Señor, sea excomulgado»(4). Igualmente: «Si alguno dijere no ser posible o conveniente que el hombre sea instruido, mediante la revelación divina, sobre Dios y sobre el culto a él debido, sea excomulgado»(5). Y por último: «Si alguno dijere que la revelación divina no puede hacerse creíble por signos exteriores, y que, en consecuencia, sólo por la experiencia individual o por una inspiración privada deben ser movidos los hombres a la fe, sea excomulgado»(6).
Lo llamativo es que muchos de los experimentos que se han puesto en marcha los últimos años en nombre de la “nueva evangelización” parten de ese aserto explícitamente condenado en el Vaticano I y en la Pascendi de San Pío X. “Hay que suscitar experiencias de encuentro personal con Cristo, porque el cristianismo no es una doctrina ni una moral, sino un acontecimiento, un encuentro existencial…”.
“Magisterio” viene de “magister”: maestro. E implica que un maestro (el catequista) enseña y el discípulo (el catecúmeno) aprende. Y también se supone que hay algo que enseñar y algo que aprender. Pero los modernistas niegan la Doctrina porque niegan la razón como vía de conocimiento de la fe de la Iglesia. Ahora la fe se transmite a través de la “pastoral”, que debe suscitar experiencias, sentimientos: todo subjetivo, todo emotivo, todo vivencial. Porque para transmitir la fe hay que tener una experiencia de encuentro personal con Jesús. Pero, claro… ¿Cómo, cuándo, dónde? Y se organizan campos de trabajo, convivencias, meditaciones pseudobudistas tipo New Age… ¡Y no saben que Cristo está realmente presente en el Sagrario! Nadie se lo ha dicho: no lo saben. Porque quienes deberían enseñar a los niños a adorar a Cristo en el Santísimo Sacramento no tienen la fe de la Iglesia Católica y no creen en el dogma de la transubstanciación. Y para ellos, adorar al Jesús Sacramentado es perder el tiempo: ¡Con la cantidad de cosas que hay que hacer!
En muchos colegios neoparadigmáticos la apostasía ha llegado a suprimir la capilla o a prescindir de la presencia del Señor en el Sagrario de sus oratorios: “¿Para qué?”. En muchísimos casos, la Capilla del Colegio se arrincona en el lugar más inaccesible del edificio o se convierte en aula multiusos instalando ingeniosos sistemas de puertas correderas. “Así se aprovechan mejor los espacios”. “Es más práctico”. “Resulta más útil”: a una hora es capilla y a la siguiente se cierran las puertas correderas y ya tenemos una sala de conferencias, una clase polivalente o un salón de baile para impartir extraescolares. Así que más vale que el Señor no esté en esos Sagrarios (si es que queda Sagrario). Las puertas correderas son un invento del Maligno para despreciar a Dios, Nuestro Señor.
Cuando Cristo no es el centro del Colegio y no ocupa un lugar igualmente central en las dependencias del centro educativo, esa escuela deja de ser católica para ser otra cosa. Lo más importante no es Dios: es la persona, el alumno. Y así tenemos colegios “antropocéntricos”, puramente inmanentes, neoarrianos: creen que Jesús es un “modelo de persona”, un ideal a quien parecerse (aunque inalcanzable); pero no el Cristo de la fe: verdadero Dios y verdadero hombre.
Son pelagianos: ni creen en el pecado original ni en la necesidad de la gracia. Nosotros vamos a cambiar el mundo: ni más ni menos. Ahí es nada… Lo importante es “comprometerse” y realizar muchas campañas y apoyar a muchas ONGs. La gracia de Dios… ¿Para qué la necesitamos? Nosotros somos tan buenos que Dios no nos hace falta para nada. En todo caso, seguimos su ejemplo. Pero la Gracias de Dios, la acción del Espíritu Santo, que nos santifica… Eso era antes: cuando se confesaban los niños, cuando se les llevaba a misa regularmente, cuando se hablaba de Mandamientos y de esas cosas. Pero ahora ya no hace falta confesarse ni cumplir los mandamientos ni ir a misa ni nada de todo eso. Esto está anticuado. No es nada moderno. Antes era pecado divorciarse, pero ahora se divorcia todo el mundo y ya ha dejado de ser pecado. Lo importante es el compromiso social, el voluntariado, el comercio justo y la opción preferencial (política) por los pobres. Y así de los colegios neoparadigmáticos salen generaciones enteras de militantes comunistas, dispuestos a cambiar el mundo por la vía revolucionaria. Pero creyentes católicos, ni uno. Bueno… Tal vez salgan uno o dos que tienen padres católicos y los educan como Dios manda.
En la escuela modernista se ha cambiado la dirección espiritual por el coaching y el vivir en gracia, por un manual de autoayuda o un protocolo de calidad EFQM o ISO.
Las Escuelas Neoparadigmáticas, si no vuelvan a poner a Cristo en el centro, acabarán desapareciendo. Si las escuelas católicas no evangelizan, no sirven para nada. La escuela católica tiene que recuperar su sentido, si no quiere resultar irrelevante y perfectamente prescindible. Para recuperar su relevancia, la Escuela Católica tiene que volver a injertarse en Cristo, que es quien le da sentido y es su razón de ser. La Escuela Católica debe ser un lugar privilegiado de encuentro con Cristo, debe enseñar el camino de la santidad, debe educar en la piedad: amor a Dios y amor al prójimo. Sólo así volverá a encontrar su identidad: una escuela de santidad para conducir a los niños a Cristo.
Si no, mejor que cierren cuanto antes.
59 comentarios
Yo conozco un caso cercano.
Un colegio bien dotado de medios de una congregación conocida.
Solo hay tres miembros de esa congregación en el colegio, porque como no hay vocaciones. Hay algunos profesores laicos católicos, pero unos pocos. La mayoría pasan por ahí a ganarse la vida e incluso a veces llegan a tener poder de decisión.
La capilla no es multi usos, pero le falta algo, no sabría decir.
Y la enseñanza, aparte de la religión, esta en lo que quieran esos profesores contratados que son mayoría. Al final el adjetivo católico del colegio es casi intrascendente, o si no llega a serlo se le acerca mucho.
Los sacerdotes del colegio no son malos, pero son modernos, y no dan la impresión de que esta situación les preocupe. Parece como si pensasen que todo va bien.
Pero el mismo espíritu que les mueve a despreciar la enseñanza del magisterio, les hace huir de la adoración y los sacramentos.
Al final es quedarse en una experiencia de Cristo que es puro sentimiento y en una enseñanza de Cristo que es pura cursilería. O pura desesperanza y conformismo, como la frase tan repetida de que los jóvenes no aguantan más de quince minutos escuchando, y por tanto todo lo que se les explique tiene que ser en ese formato reduccionista.
Gracias por ese post valiente e ilustrativo, es la pura realidad que nos ha tocado vivir.
El Señor le bendiga.
Me indigna que señores tan doctos como los que he visto publicar en infocatólica no tengan más cobertura y promoción...pero ya sabemos cómo está "el patio"...
El segundo mandamiento que nos enseñó Jesucristo: "Ama al prójimo como a ti mismo" está vinculado al primero y sin él carece de sentido, sin embargo muchos sacerdotes hoy en día se van directamente al segundo porque van de los pobres a Dios y no de Dios a los pobres.
"En los pobres verás a Dios" dicen y dejan el primer mandamiento que es la Shemá: "Amarás a Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas" como un trasto inservible. Todo aquello de no tomarás el Nombre de Dios en vano, santificarás las fiestas, descansarás el Séptimo Día, etc..., es decir la adoración debida a Dios, Uno y Trino (en el caso de los cristianos), ya no tiene importancia porque, al volvernos antropocéntricos, Dios es el hombre deificado y, por lo tanto no tiene más imagen que la del hombre mirándose al espejo.
Un desastre teológico de primera magnitud.
803 § 1. Se entiende por escuela católica aquella que dirige la autoridad eclesiástica competente o una persona jurídica eclesiástica pública, o que la autoridad eclesiástica reconoce como tal mediante documento escrito.
§ 2. La enseñanza y educación en una escuela católica debe fundarse en los principios de la doctrina católica; y han de destacar los profesores por su recta doctrina e integridad de vida.
§ 3. Ninguna escuela, aunque en realidad sea católica, puede adoptar el nombre de «escuela católica» sin el consentimiento de la autoridad eclesiástica competente.
804 § 1. Depende de la autoridad de la Iglesia la enseñanza y educación religiosa católica que se imparte en cualesquiera escuelas o se lleva a cabo en los diversos medios de comunicación social; corresponde a la Conferencia Episcopal dar normas generales sobre esta actividad, y compete al Obispo diocesano organizarla y ejercer vigilancia sobre la misma.
§ 2. Cuide el Ordinario del lugar de que los profesores que se destinan a la enseñanza de la religión en las escuelas, incluso en las no católicas, destaquen por su recta doctrina, por el testimonio de su vida cristiana y por su aptitud pedagógica.
805 El Ordinario del lugar, dentro de su diócesis, tiene el derecho a nombrar o aprobar los profesores de religión, así como de remover o exigir que sean removidos cuando así lo requiera una razón de religión o moral.
806 § 1. Compete al Obispo diocesano el derecho de vigilar y de visitar las escuelas católicas establecidas en su territorio, aun las fundadas o dirigidas por miembros de institutos religiosos; asimismo le compete dictar normas sobre la organización general de las escuelas católicas; tales normas también son válidas para las escuelas dirigidas por miembros de esos institutos, sin perjuicio de su autonomía en lo que se refiere al régimen interno de esas escuelas.
§ 2. Bajo la vigilancia del Ordinario del lugar, los Moderadores de las escuelas católicas deben procurar que la formación que se da en ellas sea, desde el punto de vista científico, de la misma categoría al menos que en las demás escuelas de la región.
Como bien dices, Pedro, desgajada de Cristo la educación católica es intranscendente. Es más, sin no confiesa a Cristo y la doctrina de Cristo, se vuelve un simple apéndice de la modernidad.
Una gran parte de la educación católica se ha vuelto por tanto, como bien dices, fenomenológica, experiencialista, experta en valores inspirados en el humanismo cristiano, pero no en cristianismo.
Son muy necesarios estos artículos, porque casi nadie escribe sobre ello.
Hay que volver a la claridad expresiva para denunciar sin rodeos el secuestro de una Iglesia a la que han abocado --y en esto se expresa de maravilla el sacerdote italiano que no marca la X en la renta-- a un estado enteramente patológico.
Por qué soy católico de G. K. Chesterton
"Es imposible ser justo con la Iglesia católica. Basta con dejar de hacer fuerza contra ella para sentir el tirón, basta con dejar de gritarle que se calle para comenzar a oír lo que dice con placer. Y basta con empezar a ser justo para encariñarse con ella".
"Sólo mediante un inconfundible e incluso deliberado estrechamiento de la mente podemos conseguir mantener la religión al margen de la educación".
"El más profundo deseo de conocimiento es el conocer para qué existe el mundo y cual es la razón de nuestra existencia. Y a los que creen poder contestar esta pregunta se les tendría que permitir hacerlo por lo menos en primer lugar y no en el último. Un hombre quien no sabe contestarla estaría en su derecho de negarse a hacerlo, aunque puede que esté demasiado inclinado a consolarse con el muy dogmático dogma de que nadie sabrá contestarla si él no sabe hacerlo. Pero es que hoy a nadie se le otorga el derecho de contestarla, o incluso de hacer posible que fuese contestada; como si se tratara de una especie de pregunta extraña y pedante de segunda orden que sólo se le ocurriría hacer a un alumno también extraño y pedante. La educación secular es más sensible que aquello de hacer de la religión un complemento más de la índole del aprender el calado o el Portugués. En el marco de la controversia sobre la educación religiosa este es un importante principio, porque incluye la tan relevante pregunta sobre qué es el " ambiente ". Y este principio significa que cualquiera con derecho de contestar esta pregunta tiene también el derecho de contestarla partiendo desde lo que realmente es: una pregunta que afecta la esencia de todo el mundo y la razón de ser de cada aspecto de la vida humana. Si alguien va a enseñar religión, es absurdo pedirle que la enseñe de manera como si fuese algo aparte, como si no tuviera que ver con la vida del ser humano".
Con estos colegios y en casa con familias de católicos a la carta - tomo lo que me apetece, y eso sí, todos se creen muy buenos - no pueden salir chicos católicos. Me parece que lo más coherente es que salgan chicos ateos, como salen. Pero si se matienen católicos, siendo capaces de ir por la vida con la doctrina que les enseñan y ser católicos, entonces es que son unos getas de la vida, peor que tibios. Para eso se dejó Cristo crucificar?
Al contrario que algunos lectores de este foro, a los que respeto, yo no soy "tradicionalista" en el sentido de creer que reponer la misa tridentina vaya a solucionar algo, pero sí que creo en el valor sagrado de una tradición que por ser divina no se puede reducir a lo meramente humano. Y ese es, a mi entender, el tema: desde hace siglos y cada vez más el hombre tiende a creer solo en sí mismo y, si admite a Dios, lo hace al estilo de Renán: es solo el ideal de uno mismo proyectado en el cielo. Como todas las mentiras del diablo esto contiene una parte de verdad: Jesús es el modelo del ser humano, pero el veneno infiltrado hace prescindir de Jesús para afirmar solo al hombre "medida de todas las cosas". Si se admiten las premisas la conclusión es inevitable; se conservarán los sagrarios y demás por sentimentalismo pero al final es inevitable que solo sean chatarra vieja.
Lo que es increíble aquí, es que se deje entrar a trollazos como tú que no tienen nada que aportar, más que sus monerías sin gracia alguna. ¿El perdón de Dios? Siiii, claaaroooo...¿te has confesado hoy monín? ¿has cumplido tu penitencia? ¿Estás arrepentido de todos los pecados mortales contra el Espíritu Santo que ya llevas acumulados? Espero que si, porque de lo contrario, y si sigues pecando gravemente de PRESUNCIÓN: te deseo "buena suerte" en tu juicio, que me parece a mí que no va a salir como tú te piensas, campeón.
Lector:
Quien se pica, ajos come. No puedes quejarte de que aquí se denuncie una infiltración en la Iglesia, que -lejos de "conspiranoía"- es un hecho más que probado, sin dejar claro que defiendes esa misma posición.
Casi cuela....Casi...pero no.
Dejalo tio, tu estas en otra liga, es como si eres de STAR TREK y te metes en u foro de STAR WARS. Te lo digo así para que lo entiendas. Te parecerá que es lo mismo, pero no tiene nada que ver.
Lo que tu llamas tu "dios" no es DIOS, es otra cosa, no es divinidad. Si lo fuese y tu lo conocieses no podrías afirmar eso. Perdona que no te aclare mas, pero es que creo que no te va a aprovechar.
El martes me fusilan
A las 6 de la mañana.
Por creer en Dios eterno
Y en la gran Guadalupana.
Me encontraron una estampa
De Jesús en el sombrero.
Por eso me sentenciaron
Porque yo soy un cristero.
Es por eso me fusilan
El martes por la mañana.
Matarán mi cuerpo inútil
Pero nunca, nunca mi alma.
Yo les digo a mis verdugos
Que quiero me crucifiquen
Y una vez crucificado
Entonces usen sus rifles.
Adiós sierras de Jalisco,
Michoacán y Guanajuato.
Donde combatí al Gobierno
Que siempre salió corriendo.
Me agarraron, de rodillas,
Adorando a Jesucristo.
Sabían que no había defensa
En ese santo recinto.
Soy labriego por herencia,
Jalisciense de naciencia.
No tengo más Dios que Cristo
Por que me dio la existencia.
Con matarme no se acaba
La creencia en Dios eterno.
Muchos quedan en la lucha
Y otros que vienen naciendo.
Es por eso me fusilan
El martes por la mañana.
¡Pelotón, prepareeen, apunteeen
Viva Cristo Rey y fuego.!
Algunos, que no quiero nombrar, dirigen su objetivo de odio precisamente a gentes como este cristero, pero no se puede ser ultraortodoxo, porque no hay nada más allá de la ortodoxia, o se es ortodoxo o no se es nada. Estos cristeros no tenían nada de fanáticos, como presumía Calles, pero no toleraban adorar a nadie que no fuera Dios, y Plutarco Elías Calles, como presidente del Gobierno de México, tenía derecho a cobrar los impuestos, a exigir obediencia a las leyes, pero no tenía derecho a quitarles los sacramentos, ni la Adoración al Santísimo, ni sus creencias católicas. Ahora ya ni siquiera los masones se atreven a defender a Calles (su famosa ley está missing porque resulta impresentable) pero hubo un tiempo en que los cristeros fueron acallados por completo: "para Dios no hay héroe anónimo". Ahora los héroes anónimos están en China.
Como se ve este cristero, en 1926, todavía era cristocéntrico a pesar del viraje que dio el humanismo en el Renacimiento, no miraba a los pobres, porque él era pobre, ni miraba a los ricos, miraba a Cristo.
Así que tenemos a un general luchando en nombre de la libertad que conducía un ejército que combatía por su fe. Da que pensar ¿no?
No me extraña nada lo que dices. Entre los progres en general y especialmente en los curas o frailes progres suele haber un desconocimiento histórico enciclopédico.
El que ese impresentable profesor afirmase que celebrar la fiesta de Cristo Rey era hacer política puede que fuese por que le sonaba el nombre de los guerrilleros del Cristo Rey, de la Transición de Sánchez Covisa, que era un grupo armado ilegal de tipo político sin ninguna relación con la Iglesia. O puede que lo dijese porque los asesinados mártires en la guerra civil solían acabar diciendo al ser fusilados viva Cristo Rey. Probablemente ese impresentable no sepa que eso no era un grito político, sino una oración, una invocación exclusivamente religiosa. La única política que había en el asunto es que los asesinos eran republicanos, bien anarquistas o marxistas. Hay que ser un canalla para afirmar que celbrando esa fiesta se hace política, pero por desgracia no me extraña.
*Suelo emplear esta expresión argentina porque me parece muy expresiva, para los españoles es algo así como "terreno libre", puede que haya otra más contundente pero no la recuerdo en este momento.
Yo fui a una escuela católica "de las de antes" en los años '70, más o menos como se describe en el artículo, detalle arriba o abajo. Lo más heterodoxo que había eran un par de curas rojillos al estilo de la época, pero ni siquiera rojazos. El resto, al menos tal como yo lo recuerdo (han pasado muchos años...) era bastante ortodoxo y a veces pecaba de rígido.
De todos los antiguos alumnos con los que mantengo contacto o me he encontrado después, creo que soy el único católico practicante. Casi todos viven, piensan y hablan "al estilo actual." A veces, más que gente que se educó en el colegio público del barrio.
No es ninguna garantía. No lo es.
También es verdad que en los años en que yo me eduqué, desde el año 50 que comencé la Educación General Básica con 6 años, porque no fui a preescolar, hasta 1963 en que acabé la carrera de Magisterio, había sacerdotes o canónigos que impartían clases de religión y todos ellos eran tomistas (cosa de la que me di cuenta años después). También recuerdo a la profesora de Filosofía de la Escuela Normal, mujer muy católica, que se centraba en Aristóteles. No tengo ni idea de lo que estudiaron otras en colegios de monjas, lo que sí sé es que parecían tener lagunas importantes.
Lo mismo le pasó a mi hermano que se sabe de memoria todas las herejías habidas y por haber y suele bromear mucho con los nombres de los herejes, que si Arrio, que si Miguel Cerulario y el que le da más grima de todos: Melanchthon, según su opinión cualquiera que siga a alguien con ese nombre yerra antes de saber lo que va decir (es muy bromista). Conversaciones sobre religión eran muy frecuentes en mi casa, pero jamás he hablado de tal cosa con mis compañeras cuyas referencias eran puramente anecdóticas y si intentaba profundizar me encontraba con un vacío notable.
Pero también es sorprendente que mis abuelos y padres, que solo terminaron la primaria, y estudiaron con los antiguos catecismos, como el de Ripalda-independientemente de que hubieran estado en colegios religiosos o no-sabían contestar perfectamente a preguntas como ¿cuáles son los pecados capitales? ¿cuáles son las virtudes teologales y cardinales? ¿cuál es el culto que recibe la Virgen?.
Recuerdo que mi madre le dijo a un emigrante sudamericano, al que notó que le rondaba alguna secta protestante y miraba con recelo a la Virgen María, lo siguiente:
"Tú crees que ponemos a la Madre a la altura del Hijo y la adoramos también, no es así? ¿has oído eso? Pues que sepas que Adoración y Gloria sólo se debe a Dios, Santísima Trinidad, el culto a la Virgen y a los Santos no es adoración. Te están diciendo algo que no es cierto, siéntate y yo te lo explicaré". Se sentó, se lo explicó, y luego yo fui su madrina en día de su Confirmación (estaba bautizado en la Iglesia Católica) y pidió expresamente al sacerdote que yo fuera su madrina porque mi madre estaba impedida. Tal cosa jamás la he visto hacer a mis amigas educadas en colegios católicos porque, seguramente, no sabrían por dónde empezar.
Los padres nunca escapan al juicio de los hijos, porque ya sabía yo que mi abuelo era un cascarrabias, mi abuela bastante pasota, mi madre estricta y mi padre se tomaba las cosas a beneficio de inventario pero, para justificar defectos no hay por qué alterar la doctrina, para justificar pecados sí.
Puedo decir algo parecido a lo que tu comentas. En mi caso conozco mas gente que sigue siendo practicante pero esta claro que somos minoría. Sin embargo..., muchos de esos que no son practicantes tienen una noción clara del bien y del mal. Algo que los chavales de ahora cuando sean adultos difícilmente van a tener. Aunque solo sea por eso, y por honradez merece la pena.
Pues es que la Fe es un Don que hay que ganarse a base de voluntad, sumisión a Dios, aplicación en las lecturas y en la forma de vida ¿os acordáis de la parábola del sembrador? ( Mt. 13:1-23) nada lo describe de mejor manera que está parábola de Nuestro Señor Jesucristo.
Pues no es de todos alcanzar la Fe.( 2 Ts.3: 1-2).
Y si no da igual que tu familia sea católica o bolchevique es que el hombre también es transmisor de la fe, con la venia del Espíritu Santo, porque de lo contrario queda raro que Jesús enviara a sus discípulos para algo que sólo podía hacer Él.
Y explica porqué la Iglesia, contando con numerosos colegios "católicos" a lo largo y ancho de la geografía española, no es capaz de educar generaciones de jóvenes católicos consecuentes, que salgan de sus aulas con un conocimiento sano y fiel de su doctrina que guíe su vida de forma coherente con su fé.
Un ejemplo sencillo, puntual pero muy elocuente: el colegio de mis hijos organiza todos los años la asistencia de equipos del colegio a torneos deportivos nacionales, en fin de semana. Nunca ha sido capaz de proporcionar a los chavales siquiera la posibilidad de ir a misa el domingo. Para ello, tuve que desplazarme a visitar a mi hijo, sacandole del plan general para llevarle a misa, y después devolverle al hotel donde se alojaban con sus monitores del colegio.
¿Es posible que no tengan el menor interés en fomentar la asistencia a misa de los chavales, al menos como una opción, suponiendo que algunos, aunque sean pocos, de ellos lo hacen con sus padres normalmente?
¿Soy el único padre "fundamentalista" del colegio que ha sentido ésta preocupación?
¿Que futuro espera a la Iglesia Católica en España si deja pasar la oportunidad de educar en la fé?.
Dicho ésto, me siento culpable como padre, pues no he tenido el coraje de expresar ésta preocupación a la dirección del colegio. Probablemente así he contribuido a que las cosas continúen así.
¡Dile eso a Jesucristo! ¡Son sus palabras, querida!...
Conozco a muchos que han nacido de familias ateas e incluso anticlericales que se han convertido y son mucho más creyentes y fieles que otros muchos que sólo lo son de boquilla. Si, como esos, por ejemplo, que en un comentario me acusan de "intolerante" por defender la Fe con todas sus consecuencias, y en otro se quejan porque INTERPRETAN que digo que "no hay que evangelizar" sólo porque citó a LAS SAGRADAS ESCRITURAS...no miro a nadie...Palas...
Aquí hay doble vara de medir y lo llevo diciendo hace tiempo, por algo te tienen tanta estima a ti en tu subjetividad mientras a mí me censuran por hablar claro y defender la Palabra de Dios.
1- La Fe es un Don, y si de verdad eres Católico lo tienes que tener claro.
2- ¡Hay que evangelizar! Por supuesto, pero la predicación no nos garantiza que nos escuchen, por eso antiguamente se hacían conversiones a la fuerza (cosa que yo comprendo y sin embargo otros condenan) y si esto último no se acepta: habrá que hacerse a la idea de que el libre albedrío tiene la última palabra (a menos que Dios intervenga). Si el mundo y el dinero puede más: semilla entre espigas.
3- Mientras la Iglesia y el Sistema estén invadidos de herejes y ateístas infiltrados y otro tanto de tibios que colaboran con el Mundo: olvidáos de que se haga una buena doctrina que llegue a los corazones y a las almas pues esa semilla, como dice la parábola: caerá en mala tierra y se la llevará el demonio.
4- Mientras el Mundo haga apología de las herejías, el libertinaje, todos los vicios y el ateísmo: seguirán robándonos a nuestros jóvenes, seducidos por sus "cantos de sirena", contagiados por sus propios círculos de amistad. Semilla entre las piedras.
¿Se entiende así?
Aconsejo buscar información en internet, preguntando a otros padres, haciendo visitas, consultando su planificación y extraescolares ...etc.
No te agobies. Los modernistas que hagan y digan lo que quieran, luego en tu casa, tú misma puedes explicarle a tu hija cómo son las cosas y por qué ocurre lo que ocurre.
Tú "sígueles la corriente" y no digas nada, y dile a tu hija que tampoco discuta con nadie. Como decía S.Pablo: entrar en contienda de palabras no sirve de nada más que para pervertir a los oyentes.
Mientras los fieles nos mantengamos fieles, nada nos perderá.
¿Que no se visten correctamente? dad ejemplo de recato en el vestir.
¿Que no les parece bien respetar los preceptos? Seguidlos igualmente.
¿Que ponen de "castigo" ir a Misa? Hacedlo felices. ¿Que los otros niños no van? Igualmente asistid felices y haz que para tu hija: cada Misa sea inolvidable, y un momento privilegiado para estar con Cristo en familia.
Sobre todo, sonríe y derrocha amor....Nada hace rabiar más al demonio. 😉
¿Estás molesto por algo?
No todo lo que ha nombrado es patrimonio del nuevo paradigma, new age...
La educación emocional es muy importante como cimiento de un adecuado y sano equilibrio psicológico, otra cosa es el enfoque que se le quiera dar, como todo.... lo q pasa es que esta sociedad es excesivamente emotiva y sentimentaloide (las lágrimas de P.Iglesias en el Congreso es una prueba de ello, porque lo que vende es que te vean solidario y sensible con el sufrimiento) , pero una buena regulación y autocontrol emocional hace mucha falta. Tenemos una dimensión emocional!
Abrz.
¿Te molesta que sea "radical" a la hora de tomarme en serio la Fe? Curioso...Te repito que puedes interpretar lo que te venga en gana, mis palabras siguen ahí escritas para el que las quiera leer y entender. No me seas otro Gringo....sin ánimo de ofender (pero con mucho "olor a gato encerrado").
Nadie había hablado de "garantías", de lo único que se había hablado es de "importancia" de familia y escuela.
Pero no voy a seguir atacándote, no es mi estilo, esperaré a que vuelvas a atacarme tú con cualquier excusa y subjetivismo, para volver a responderte de forma clara y concisa (que sí que es mi estilo).
Luís 26/05/18 a la 1:16 AM:
"No es ninguna garantía, no lo es".
Como ves, mentir tampoco es mi estilo, quien quiera que busque aquí mismo ⬆️ en los comentarios, éste mismo que cito. Pues a él iba mi respuesta y en pos de animarle, aconsejarle y motivarle como ya he hecho otras veces con otros usuarios.
Muchas gracias y buenas tardes.
-No he dicho que seas mentiroso, porque lo que has dicho es verdad.
-No he dicho que seas subjetivo.
-No te he comparado con un ateo como gringo.
-No he dicho que te guste la adulación.
Lo único que he podido hacer mal, y en eso te pido perdón, es haber sido demasiado brusca. Lo que está bien en la página de Alonso Gracián porque habla de la Fe, puede no estar tan bien en la página de un profesor que se conduele de la trivialidad de la escuela católica. Si tú en esa página dices que la escuela no es garantía de nada, cosa que él ya sabe, no das demasiados ánimos para continuar.
El chorreón de descalificaciones hacia mi persona te lo podrías haber ahorrado, no por mí que no me importa, sino por ti mismo.
Palas: Todo eso que te he dicho lo he hecho en defensa cada vez que tú me has atacado (y lo sabes), te has estado tomando a mal mis palabras cada vez que he comentado y has ido a por mí como una "walkiria" -no sé por qué-.
No tengo nada contra ti, más bien llevo todo este tiempo pensando que eres tú quien tiene algo personal conmigo.
Por mí mismo, he ejercido la defensa, pues no me gusta que me intenten desmoralizar o ridiculizar cuando defiendo la Fe (y digo la Fe, porque el hecho de que me ridiculicen a mí me da lo mismo, me las he visto con muchos trolls) Quizá me he pasado comparándote con Gringo, pero es que estabas siendo igual de insistente....
Respecto a los Dones: no me siento "especial", cada uno tenemos el nuestro, algunos somos conscientes y los ponemos al servicio de Dios y otros aún tienen que descubrirlos. ¿Crees que no sé que posees el de la Ciencia? 😉
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