Arturo San Agustín se queda a gusto con el cardenal Sistach

Las críticas a n.s.b.a. cardenal Martínez Sistach le llueven de todas partes, la última proviene del conocido periodista Arturo San Agustín, que desde su columna del 18 de julio, en las páginas de El Periódico de Cataluña deja bonito a nuestro arzobispo.

En su escrito titulado “El cardenal” el Sr. San Agustín explica con detalle lo que sucedió antes del programa “El club” de TV3 que dirigía Albert Om, cuando su eminencia decidió marcharse y no participar del programa si no era el primero en salir, algo que no consiguió a pesar de sus amenazas y malos modos.

Pero la historia de la airada marcha del cardenal Sistach del plató de TV3, calificada por San Agustín como un “olvido de la humildad cristiana” no es el detalle más significativo del artículo, porque el periodista realiza una comparación entre los arzobispos Jubany (R.I.P.), Pujol (de Tarragona) y Sistach, donde nuestro actual pastor queda muy mal parado. Después de elogiar a Don Narcís, añade nada menos que: “Sistach es demasiado indeciso para ser cardenal de Barcelona". Y al compararlo con Don Jaume dice: “Jaume Pujol, el señor arzobispo de Tarragona, nunca hubiese dejado tirado a Albert Om. Estoy seguro". Y yo también.

El periodista San Agustín no es sospechoso de pertenecer a la “carcundia derechona eclesial” o de tener simpatías hacia páginas como la nuestra. Lo cual demuestra que nuestro cardenal se está ganando mala fama en todos los sectores, o lo que es lo mismo no queda bien ni con los unos ni con los otros.

Esto llama la atención en un arzobispo que ha intentado pasar a la historia como “el pacificador", el obispo del que todo el mundo hable bien, el hombre que finalice el periodo de críticas y divisiones que provocó el pontificado de Don Ricardo Carles. Pero a la luz está que no lo está consiguiendo sino todo lo contrario. Sólo hace falta ir a una reunión sacerdotal para darse cuenta que el progresismo y el tradicionalismo unen sus manos en la crítica conjunta contra el cardenal. Mérito tiene que el cardenal haya conseguido el consenso, pero es una unidad en contra de su gestión aunque sea por motivos diferentes.

Lo que pasa es que los progresistas critican en privado, no alzan la voz en los medios de comunicación propios (El Pregó, Foc Nou, Laeto Animo…) o ajenos, eso sería dar carnaza a la “carcundia” y reconocer sus propios errores. Pero críticos lo son. Al cardenal Sistach le quedan ya muy pocos hombres fieles que aplauden y dicen maravillas de su gestión, tan sólo se salvan los Rvdos. Turull, Matabosch, Aymar y muy poca cosa más.

Triste final de pontificado le espera a nuestro arzobispo, ojalá se de cuenta de sus errores y decida rectificar, más vale hacer las cosas correctamente aunque algunos (cada vez menos como recordaba ayer Oriolt en su artículo sobre Girona) se enfaden. Que no intentar pasar evitando las revueltas progresistas, pero manteniendo descontento a todo el mundo.

Antoninus-Pius