No se trata de quién es Jesús para mí
Al igual que los espejos retrovisores de los coches, cada época tiene sus puntos ciegos. Son cuestiones, circunstancias o situaciones que, simplemente, esa época es incapaz de percibir. No se trata de que las discuta, las niegue o las rebata. Simplemente, no las ve, como si no existieran.
Los cristianos, incluidos sacerdotes, religiosos y obispos, somos hombres de nuestro tiempo y esos puntos ciegos nos afectan también, sobre todo si nos alejamos de la Tradición y la enseñanza de la Iglesia, que son anclas seguras para no apartarse de la realidad en toda su riqueza y complejidad.
A mi juicio, la lectura del evangelio de este domingo es un ejemplo muy claro de esos puntos ciegos de nuestra época.
Como recordarán los lectores, se trata del pasaje evangélico en que Cristo pregunta a los apóstoles: “¿Quién dice la gente que soy yo?”. Y ellos responden: “Unos que Juan Bautista, otros que Elías y otros que Jeremías o uno de los profetas”. Entonces Jesús vuelve a preguntar: “Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?”. Impulsivo como siempre, Simón Pedro responde: “Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo”. Así gana el elogio de Cristo, porque eso no se lo ha revelado ni la carne ni la sangre, sino el Padre que está en los cielos, e inmediatamente después escucha al Señor decirle que él es Pedro y sobre esa piedra edificará su Iglesia.
En mis ya numerosos años de vida, todas las homilías que he escuchado sobre este evangelio se centraron en que lo importante era que los fieles se preguntaran quién era Jesús para ellos y en que cada uno debía tener su propia respuesta, diferente de la de los demás. Este último domingo, el sacerdote añadió a todo eso que lo que en ningún caso había que hacer era dar una respuesta fácil, del catecismo, como que Cristo es el Hijo de Dios o algo similar, sino encontrar cada uno su respuesta particular. No me sorprendió, porque también lo había oído multitud de veces.
Por supuesto, habrá excepciones y, también por supuesto, estas cosas se dicen con buena intención. Son, simplemente, la consecuencia de uno de los puntos ciegos de nuestra época, para la que no existe la verdad, y si existe no la conocemos, y si la conocemos no podemos estar seguros de ella. Es la época del relativismo en filosofía, del subjetivismo en moral y del modernismo en teología, aunque apenas nos damos cuenta de ello, porque esos letales ismos son para nosotros como el agua para un pez. Es la época, en definitiva, que sólo puede fijarse obsesivamente, año tras año, en “quién es Jesús para mí”, porque es incapaz de imaginar siquiera otra cuestión más importante.
A poco que reflexionemos, sin embargo, nos daremos cuenta de que esta coincidencia casi-universal es muy llamativa porque, en realidad, lo que dice la lectura es exactamente lo contrario. Este evangelio no dice algo ligeramente diferente, ni algo más amplio ni más profundo de lo que se predica este día en innumerables púlpitos de todo el mundo: dice exactamente lo contrario.
Fijémonos, en primer lugar, en el hecho de que en la lectura no aparece cada apóstol dando su opinión sobre quién es Jesús “para él”, con el fin de formar una lista de doce opiniones diferentes y personalísimas de Juan, Santiago Tomás, Bartolomé, Felipe, Judas, etc. Sólo habla una voz, la de Pedro, proclamando lo que Dios ha revelado a los hombres, es decir, la verdad. Y sobre esa enseñanza de la doctrina verdadera, inmediatamente después, Cristo anuncia que va a fundar su Iglesia.
No importa nada qué opino yo ni qué opina mi vecino de enfrente sobre quién es Cristo. No se trata de quién es Cristo “para mí” o “para ti”. Lo que importa es quién es Cristo de verdad. Opiniones hay mil, verdad sólo una. De lo que habla la lectura es de la fe católica, es decir, de la verdad sobre Cristo, que el Padre ha revelado a los hombres en su Iglesia. Él es el Hijo del Padre eterno, Dios de Dios, luz de luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado no creado, de la misma naturaleza que el Padre. Eso es lo que debe interesarnos, porque ahí es donde está la vida eterna, la libertad que nos falta, la salvación que necesitamos desesperadamente.
¿Quiénes son, en cambio, los que dan cada uno su opinión en la lectura? La gente, los que no creen, los que no pertenecen al grupo de los apóstoles. Cada uno de ellos, ofrece su propia opinión sobre quién es Cristo: Juan Bautista, Elías, Jeremías, uno de los profetas… ¿Y cuál es el resultado? Que se equivocan por completo y no entienden nada de Cristo ni de su Evangelio. Lo mismo nos pasará a nosotros si nos centramos en preguntarnos quién es Jesús para nosotros, en lugar de quién es Jesús de verdad, es decir, qué enseña la Iglesia sobre él, con la fuerza del Espíritu Santo.
Por supuesto, esa verdad no debe quedarse simplemente en el catecismo, sino que como católicos debemos creer la fe de la Iglesia, meditarla, estudiarla, profundizar en ella y vivirla con todas sus consecuencias. A poco que le dejemos actuar, Dios nos dará gracia tras gracia para que la comprendamos cada día mejor, para que la amemos cada vez más, para que nos empapemos gradualmente de ella, para que disfrutemos de su belleza e incluso para que la experimentemos en nuestra propia vida en la medida en que Dios quiera concedérnoslo. Pero siempre, siempre, siempre nuestra fe será la fe de la Iglesia, que nos gloriamos de profesar en Cristo Jesús, y no mi propia opinión sobre “quién es Jesús para mí”.
Entonces, con sorpresa, nos daremos cuenta de que la fe católica rompe las cadenas del relativismo, el subjetivismo y el modernismo que nos sofocan a todas horas. Sólo la Tradición de la Iglesia nos libera de la tiranía de las modas y del pensamiento de nuestra época. Al dejar de pensar que nosotros y nuestras opiniones somos el centro del universo, entenderemos por fin tanto el cielo como la tierra, comprenderemos las Escrituras como deben ser comprendidas y conoceremos a Dios como Él es y no como nosotros nos lo imaginamos con nuestra escasísima imaginación. Sólo la fe católica nos permite ir más allá de nuestra debilidad, de nuestros pecados y de nuestro mismo yo, para alcanzar el esplendor de la Verdad divina, que es el verdadero cimiento del mundo, la Roca firme que da sustento a nuestra vida y a todo lo que existe.
Que Dios nos regale a todos esa fe, que vale más que el universo y cuanto hay en él.
75 comentarios
Efectivamente, dentro de los límites visibles de lo que se conoce como Iglesia Católica está la Iglesia de Cristo, pero para nada todo lo que hay en la Iglesia Católica es Iglesia de Cristo. Casi habría que decir que, más que subsiste, sobrevive a duras penas.
Porque claro, quienes son incapaces de predicar decentemente sobre ese pasaje del evangelio, ¿a cuento de qué van a ser verdadera Iglesia de Cristo? Lo es mucho más el protestante calvinista que está errado en materia sacramental pero al menos profesa una cristología ortodoxa.
Por cierto, en la lectura según la nueva versión de la CEE creo, de lo de “Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo” sólo se leyó lo de “Tú eres el Mesías", sonándome un poco arriano.
La jerarquía, la disciplina y el orden en la Iglesia se ven con malos ojos, pues la nueva ley que debe regular todo es la del "consenso democrático", donde predomina la "igualdad" de todos, que arrasa los conceptos de mérito, excelencia y esfuerzo, y se relativiza así el conocimiento que debe tener un sacerdote de la Fe, tras años de seminario y estudio. La gente corriente cree que el sacerdote no tiene porqué saber más que ellos, y que la Escritura es sólo una especie de guión o de boceto de lo que debe ser la fe "para cada uno". Preguntas a la gente la misma cosa sobre temas religiosos y cada uno tiene su opinión, pero nadie se ha leído la Biblia, ni el Catecismo, ni ninguna encíclica.
Me cuesta mucho trabajo y no pocas decepciones acudir a misa, pues en pocos sacerdotes veo de verdad a quien hay que ver. Con observar cómo visten, cómo manejan los vasos sagrados y cómo se arrodillan ante el Señor se hace uno buena idea de la profundidad espiritual con la que viven la Santa Misa, así que ¿cómo van a transmitir la Fe de manera correcta?
Me has alegrado el día con lo de la teología paramista, me lo quedo.
Deberías hacer un post exclusivo sobre esa idea de la Iglesia de Cristo dentro de la Iglesia Católica.
Se utiliza el relativismo para atacar las razones de otros pero nunca para sostener las propias, pues su naturaleza, siendo útil para la demolición, se muestra impotente para edificar. Por eso, en el lugar en donde deberíamos encontrar un hogar, no hallamos más que un chamizo. La Verdad nos convierte en hijos amados, la mentira en bastardos abandonados.
Y Jesucristo es exactamente como nos lo ha transmitido la Iglesia Católica, a través de la Escritura, la Tradición y la doctrina teológica ortodoxa, y sólo en la Iglesia Católica se nos da íntegramente al mismo Jesús a través de sus signos de gracia. Y Jesucristo es el mismo, ayer, hoy y siempre, por lo que lo mejor que podemos hacer cuando recemos, meditemos o simplemente pensemos en el misterio de Dios hecho carne por nosotros, es evitar ser hijos de nuestro tiempo y dejarnos atrapar por el subjetivismo imperante.
"A ver cuéntame...¿Como experimentas a Jesús en tu día a día?"
Uf... como no sepas responder.
Lo mejor es citarles el Catecismo recordándoles ak mismo tiempo que "el justo vivirá de la Fe", ni de obras y mucho menos de emociones o sensaciones:
2005 La gracia, siendo de orden sobrenatural, escapa a nuestra experiencia y sólo puede ser conocida por la fe.
ni va hoy,
ni irá mañana
hacia Dios
por este mismo camino
que yo voy.
Para cada hombre guarda
un rayo nuevo de luz el sol...
y un camino virgen
Dios.
Leon Felipe
Amén
Desde luego, no es un ataque a los sacerdotes que enfocaron así su homilía ni nada por el estilo. El artículo sólo intenta mostrar cómo nos afectan a todos (incluido yo, por supuesto) los puntos ciegos de nuestra época, de manera que, incluso con buena intención, podemos perdernos lo importante de verdad, distraídos con lo que nuestra época considera importante.
Con todo, ya en la filosofía más clásica, se enseñaba que, "quidquid recipitur ad modum recipientis recipitur" (= todo lo que se recibe, se lo recibe según el modo de quien lo recibe). De modo que, dentro de la innegable objetividad (siempre hay un "quidquid", algo independiente de "mí", de "ti", de "él"), no deja de darse un enfoque personal. Francisco de Asís subrayó al Cristo pobre, Domingo de Guzmán al maestro, Margarita de Alacocque, al misericordioso, y así por el estilo, a la verdad variadísimo.
Pero, todos los santos católicos o los demás cristianos de a pie, que somos cada uno de nosotros, no deben quedarse con "sus" impresiones de la infinitamente rica persona divina del Hijo de Dios encarnado, sino que, no menos han de captar su innegable realidad, no creada por "mi apreciación", sino dada por su eterno nacimiendo del Padre, su encarnación en María y los misterios y sucesos históricos de su venida al mundo, su salida del mismo y su eterno reinado hasta que vuelva.
"Pues distintas parroquias, y mismo resultado"
Sí, mi experiencia a lo largo de los años es de multitud de parroquias distintas, así que no me extraña.
"Por cierto, en la lectura según la nueva versión de la CEE creo, de lo de “Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo” sólo se leyó lo de “Tú eres el Mesías", sonándome un poco arriano".
No es cosa de la traducción, sino de los diversos evangelistas. El domingo se leyó la versión de Lucas, que sólo recoge "Tú eres el Mesías". La versión de Mateo es más larga e incluye varios detalles más, como lo de "el Hijo de Dios vivo".
"Me cuesta mucho trabajo y no pocas decepciones acudir a misa, pues en pocos sacerdotes veo de verdad a quien hay que ver. Con observar cómo visten, cómo manejan los vasos sagrados y cómo se arrodillan ante el Señor se hace uno buena idea de la profundidad espiritual con la que viven la Santa Misa, así que ¿cómo van a transmitir la Fe de manera correcta?"
Es un tema importantísimo, al que apenas se presta atención. No hay nada que ayude más a vivir bien la Misa que un sacerdote que celebre "como quien ve al Invisible" y que se de cuenta de que, en el altar, está pasando lo más importante del mundo.
No soy más que un laico, pero, si me permiten la osadía, a esos sacerdotes beneméritos que están desesperados por lograr que los fieles acudan a la parroquia e inventan todo lo inventable para conseguirlo (y hacen muy bien), me gustaría aconsejarles esto: empieza por celebrar la Misa como si estuvieras en el Calvario y no sólo cambiará tu vida, sino que antes o después los fieles sedientos de Dios acudirán a millares.
"Se utiliza el relativismo para atacar las razones de otros pero nunca para sostener las propias, pues su naturaleza, siendo útil para la demolición, se muestra impotente para edificar. Por eso, en el lugar en donde deberíamos encontrar un hogar, no hallamos más que un chamizo."
Una frase que vale por todo un post y que, tristemente, diagnostica a la perfección nuestra situación.
"Cuando se dice que cada uno debe responder no es para dar una respuesta relativista"
Como he señalado en el artículo, estoy convencido de que estas homilías se pronuncian de buena fe. No se trata de agentes infiltrados de la Organización Relativista Mundial, sino de sacerdotes bienintencionados que, como nos pasa a todos, están influidos por las ideas que forman el ambiente intelectual de nuestra época. Por supuesto, unos más y otros menos.
"sino para manifestar el carácter personal de la fe. Eso no es relativismo"
Si eso se convierte en lo principal, sí lo es. De hecho, es la definición de relativismo. Por eso he intentado mostrar en el artículo que, de forma muy llamativa, lo que claramente es lo principal de la lectura evangélica no lo menciona prácticamente nadie en sus homilías. En cambio, aunque para ello tengan que retorcer la lectura, todo el mundo se centra en lo secundario, que casualmente es la idea que concuerda con el relativismo ambiente. Lo siento, pero no creo en las casualidades. Aparte de que, muchas veces, como en la homilía que escuché este domingo, se dice con total claridad que vale cualquier respuesta, excepto repetir la fe de la Iglesia.
Obviamente, la fe la tiene una persona. Pero lo importante de esa fe, como dice el evangelio, es que sea verdadera, no que sea la mía. Porque era igualmente "personal" la idea de la gente de que Jesús era Juan el Bautista o Elías. Pero no era verdad.
Dicho de otra forma, estamos llamados a hacer nuestra la fe de la Iglesia, que precede ontológica y temporalmente a nuestra fe. De otro modo, lo que tendremos serán opiniones y no fe.
"Si Jesús no es para mí hoy mi Mesías entonces no es nadie"
Jesús es quien es, al margen de lo que sea "para mí" o "para ti". El centro no soy yo, como en el relativismo. El centro es Dios.
"La fe es totalizante y debe responder a mi vida hoy"
No entiendo esto.
"Pedro lo que hace es dar la pauta para no desviarse de la confesión verdadera, como dice el autor"
Pedro lo que hace es proclamar la fe católica verdadera en nombre de la Iglesia. Y eso, que es lo fundamental de la lectura como he mostrado, según mi experiencia ni se menciona en las homilías.
"Pero no creo que las homilías vayan por camino relativista".
Ciertamente, no de forma intencionada.
Saludos.
Como bien dice Mons. Barriola, esto viene de lejos, de tolerar desvíos filosóficos intolerables, que tenían en sí el germen de la herejía.
Una de mis intenciones de oración es que la Iglesia condene de una vez a las satánicas ideologías que campan impunemente. A todas, no solamente a algunas como sí ha hecho.
Estamos hasta la mollera de herejías en las enseñanzas y en las homilías.
Herejías materiales muy probablemente pero, ¿quién se anima a limpiar de herejías el campo ante tal profusión?
Nos asombramos y alarmamos de escuchar desde los altos niveles ambigüedades que rozan la herejía, pero vamos, que ese árbol venenoso ha crecido sobre suelo abonado para el mal.
No es coherente que nos hagamos cruces por lo que se dice ahora en el Vaticano, al tiempo que consumimos sin indigestarnos lo que nos vienen propinando nuestros párrocos y catequistas, y desde hace décadas.
Salvando las honrosas y valientes excepciones, claro, pero que son tan escasas que no pesan.
La necesidad de una REFORMA en la Iglesia es perentórea. ¿No será eso lo que Dios estará queriendo? ¿No será por eso que nos manda revulsivos para que reaccionemos de una buena vez y pongamos manos y corazón a la obra?
Caso contrario, la APOSTASÍA nos devorará.
"En realidad se trata de amar a Cristo, abandonarse a el y no a tus opiniones o experiencia".
Eso es. Cristo trasciende nuestras opiniones y nuestra experiencia.
Cosas que estas que dices, son perfectamente acordes a la predicación de los Santos Padres y Doctores, para nada afines al "giro copernicano" humanista del mundo moderno. Y ¡cuán necesario es recordar esto!
Yo también recuerdo haber oído algún sermón así, y creo que es porque el sacerdote no se prepara bien la homilía pensando lo que dice. A veces se sueltan frases de esas que quedan muy bonitas y parecen muy espirituales, que en realidad no tienen un significado realmente católico. En este caso el cura puede confundir la necesidad de interiorizar a Cristo, y de vivirlo en lo mas profundo de nosotros, con la idea de un cristo personal, y distinto para cada uno. Los que somos distintos somos nosotros y nuestras sensibilidades, pero esta claro y lo expones muy bien que Cristo es Uno, como no puede ser de otra manera. Además al final el mismo nos dice que tenemos que hacer algo parecido todos para llegar arriba, hacernos como niños.
Nuestro afán de meter el mundo en una caja de zapatos -es decir, nuestra inteligencia- agradece la "teología paramista" en acertada expresión de mi , con ese nick, supuesto paisano ( ¡Caramba, este portal está lleno de vascos!)
Podía haber rematado su escrito, pasando de los puntos ciegos a los ciegos que quieren marcarnos los puntos. Quizás la más dolorosa realidad de la Iglesia.
Pero bueno... recordando a Blaine/Bogart de Casablanca:
We' ll always have InfoCatólica.
Y que le habra los ojos a los Católicos que están como ovejas sin pastor, es el alma, la que tenemos comprometida.No es poca cosa, la eternidad.Que Dios te bendiaga y lo haga con la Iglesia.El Conocimiento de uno, no es una instropeción penosa nos lleva al conocmiento de dios, hasta poder decir Dios en en Mi, como San Pablo, la oración experimental!!!!Atreverse!!!Vamos!!!!
Un Abrazo, saludos a los niños,seguimos sumisos, que bien se está!!!!
Recuerda el chiste del que quería ir a la taberna a la hora de Misa Mayor y tenía miedo de que su mujer le preguntara por la homilía y le cogiera en renuncio. Quedó de acuerdo con un amigo para que le contara lo más fundamental y cuando el amigo llegó a la taberna después de oír misa le preguntó:
-¿De que ha hablado hoy el cura en el sermón? (eran otros tiempos).
-Del pecado.
-¿Y qué ha dicho?
-No es partidario.
Pues eso, filosofía paramista o escultura de Txillida: a lo fundamental.
Gracias Bruno
Muchísimas gracias, Bruno. Que el Espíritu Santo te siga iluminando.
Lo del "subsiste" es una concesión ecuménica verdaderamente equívoca.
Muestra una absoluta desconfianza a la entrega del Señor. Con los santos de la Iglesia Católica hemos de estar. Ahí no hay riesgo de defección. ¡Ánimo a todos en el Señor! ¡Él no nos abandona!
Con los santos de la Iglesia Católica hemos de estar.
LF:
Por supuesto, pero no con "esos falsos hermanos que se infiltraron para espiar la libertad que tenemos en Cristo Jesús y esclavizarnos" (Gal 2,4) al error, llamado bien a la relación adúltera, abriendo la puerta a la profanación Eucarística e intentando destrozar lo que queda de Iglesia.
De esos, de quienes son "murmuradores y amigos de querellas que proceden como les da la gana y hablan pomposamente adulando a la gente en beneficio propio" (Jud 16), solo toca alejarnos lo más posible. Porque como dijo el apóstol "aunque nosotros mismos o un ángel del cielo os predicara un evangelio distinto del que os hemos predicado, ¡sea anatema! Lo he dicho y lo repito: Si alguien os anuncia un evangelio diferente del que recibisteis, ¡sea anatema!" (Gal 1,8-9)
¡Cuánto nos gusta escucharte con esa fe que nos fortalece!
No te nos venga abajo.
La comunión de los santos es tal cual.
El Señor nos asiste en estos momentos de tribulación.
Esto, el poderío del señor del mundo, no ha hecho más que comenzar,
Gracias a Dios por Infocatolica
Entiendo que esto forma parte del gran atropello que se perpetró contra la Iglesia en el post-concilio.
¿Quién mandó que las misas se celebraran de espaldas al Santísimo? Nadie.
¿Quién mandó que se desmantalara la maravillosa imaginería de tantos templos, incluídos retablos de valor artístico inmenso? Nadie.
¿Quién mando que los fieles comulgasen solamente de pie? Nadie.
¿Quién mandó abrogar absolutamente el latín, y hasta el bellísimo griego de los Kiries? Nadie.
¿Quién mandó que la comunión se diese en la mano y no en la boca? Nadie.
Y podríamos seguir.
¿Nadie? Yo no me lo trago. Considero absolutamente imposible que esos cambios relevantes y significativos se hayan concretado espontáneamente, sin una voluntad planificadora mediante. En primer lugar, porque se dieron de manera simultánea y coordinada, de tal forma que hiciese posible generar la "masa crítica" que sería imitada por el resto. En segundo lugar, porque todos esos cambios responden a una intencionalidad coincidente.
Pero hete aquí que ninguna autoridad formal se hace cargo de esos cambios.
¡Pero tampoco ninguna autoridad formal los condena ni los revierte!
¿Debemos por tanto concluir que existe una autoridad informal en la Iglesia?
¿Quién mandó que las misas se celebraran de espaldas al Santísimo? El Concilio Vaticano II. Nuevo Ordo. Con todo, ya era un signo contradictorio que se celebre estando el Santísimo Presente. Es en la Eucaristía donde se hace presente para ser partido y repartido. Es la Pascua de Jesucristo que nos arrastra hacia el Cielo.
¿Quién mandó que se desmantalara la maravillosa imaginería de tantos templos, incluídos retablos de valor artístico inmenso? Hoy , donde la gente sabe leer y escribir, la fe se transmite por la predicación y el testimonio, no por imágenes. Es cosa de gustos solamente.
¿Quién mando que los fieles comulgasen solamente de pie? Esto no es así, es posible comulgar tanto de rodillas como de pie.
¿Quién mandó abrogar absolutamente el latín, y hasta el bellísimo griego de los Kiries? Esto tampoco es así. Con todo, Jesucristo no hablaba en latín.
¿Quién mandó que la comunión se diese en la mano y no en la boca? Esto no es así, ambas formas son correctas.
El artículo de Bruno nada tiene que ver con lo que planteas. La renovación litúrgica es un bien para la Iglesia y ello no tiene nada que ver con que el mundo moderno efectivamente se ha construido en Jesus a su medida y que no tiene nada que ver con el Jesus real que Pedro confiesa. Es el Cristo, el Hijo de Dios Vivo. La Paz.
La ha clavado.
Esos "nadie" tienen nombres y apellidos ; y en la sombra se está muy bien, mientras se parten de risa viendo el hundimiento de la Iglesia y la sociedad hedonista, egoísta, abortista, homosexualista, esterilista y todo adjetivo repugnante que acabe en "ista".
Como bien nos informa Palas Atenea, hoy celebramos la memoria de Thomas Moro y John Fisher. Que estos santos que fueron hombres ( sí, hubo una época en que había HOMBRES en el mundo) intercedan por todos nosotros.
Es evidente que la convición es más Grande!!,y en cuanto a los ejemplos de la moral de situación que da el Padre Iraburu, yo tambien en una circunstancia, que fui una bomba molecular, pero siempre trate de agradar DIOS,probablente estuve mas cerca de El.Creo que es San Juan de la Cruz, que explica esto, en ese momento consulte a la que fue la Madre Superiora del Carmelo, y me dijo escuetamente es la Cruz!!Je!!!!Je!!!
Que Dios te bendiga y lo haga con la Iglesia, ANIMARSE!!!!!
A juzgar por lo mucho que ha logrado, parecería que sí.
A juzgar por el respeto que le profesa la autoridad formal, impotente para oponerse a ninguno de sus muchos "logros", parecería que sí.
A juzgar por la cantidad de bautizados que le responden incondicionalmente, parecería que sí.
A juzgar por las adhesiones que concita entre grandes bonetes curiales, parecería que sí.
La Iglesia se muestra como un reino dividido, y es por eso que he planteado mi pregunta. Porque un reino sólo se divide cuando hay más de una autoridad.
1. El CVII jamás ordenó cambio alguno en la Liturgia, sólo hizo sugerencias o mandó revisiones, pero nunca nada concreto. El Novus Ordo no es fruto del Concilio (al menos, no es fruto directo), sino de los organismos encargados de "aplicar" las directrices conciliares (sobre cuya labor, intenciones y demás, mucho se puede decir). Sacrosanctum Concilium fue escrita en el contexto de, y para, el Rito Tridentino (hoy llamado "Extraordinario"). Todo lo que se dice allí sobre la Liturgia, se dice del Rito Latino tal como se lo conocía entonces (no caigamos en un absurdo anacronismo).
2.Hoy la gente no sabe leer ni escribir. Prácticamente ningún libro, de ninguna editorial, evita algún error de tipeo. Las escuelas fracasan estrepitosamente en la enseñanza de la lectura y la escritura. La cultura audiovisual actual no favorece para nada las capacidades lectivas. La juventud, sobre todo (lo digo como parte de ella, puesto que solo tengo 25 años), padece serios problemas de comprensión de textos, e incluso a nivel profesional se encuentran inconvenientes de vocabulario, estilo, ortografía, etc. Por lo tanto, más que nunca las imágenes sagradas son útiles. El problema pasa porque hoy, además, se ha perdido la sensibilidad artística y religiosa, y por ello no se aprecian esas imágenes. El arte moderno, ruidoso, subjetivo, absurdo, no favorece, y muy poco de él puede comunicar las realidades sagradas con la misma eficacia que el arte medieval (fundado en la objetividad, en la belleza como trascendental y en una profunda piedad, para nada sentimentaloide como la actual). No es "cosa de gustos solamente".
3. Es cierto que, en la teoría, comulgar de pie o de rodillas son alternativas igualmente válidas. Sin embargo, en no pocas parroquias, los fieles son adoctrinados para no arrodillarse, e incluso puedo testimoniar de sacerdotes que han obligado a fieles a ponerse de pie so pena de no administrarles la Eucaristía. Así como lo lees. De modo que bien puede pensarse, no en una ley escrita, pero sí en una orden tácita, de combatir la práctica de comulgar de rodillas a favor de comulgar en la mano (contra toda la tradición patrística).
4. Jesucristo hablaba latín, como cualquier otro ciudadano culto de Palestina en ese tiempo, y también griego, además del arameo y el hebreo propios de su nación. Como sucede con el punto anterior, la teoría dice una cosa, y la práctica otra: pocos sacerdotes admiten algo siquiera de latín en las celebraciones, a pesar de que el CVII dice explícitamente que el latín es la lengua principal, y debe tener prioridad.
5. Añado que la comunión en la mano fue un ardid modernistas (como tantos otros), impuesto sin consulta alguna y contra la piedad de los fieles. Como ya dije, esta forma de comulgar, que estuvo presente en la Iglesia primitiva, fue abrogada por los Padres de la Iglesia, con motivos suficientes que aun hoy son válidos. No es este el espacio, y por eso no abundo más sobre el tema. Artículos que lo tratan se encuentran fácilmente en páginas católicas (tradicionales, es una pena que haya que aclarar).
El latín es la lengua de la Iglesia por razones que todos podemos comprender, pero no de Jesucristo. Salvo rara avis, como el historiador Flavio Josefo, hasta San Pablo prefería el griego y tampoco sabemos si sabía latín aunque fuera ciudadano romano.
Sobre la comunión en la mano, tal vez quieras disentir con los Padres de la Iglesia, a propósito de su "validez". Yo prefiero adherir a las disposiciones tomadas por ellos y aceptadas por la Iglesia entera durante más de un milenio y medio.
Nuestro Señor ciertamente hablaba latín. De otro modo le hubiera sido imposible comunicarse, por ejemplo, con el centurión a quien le curó el sirviente (me atrevo a suponer que su diálogo con Poncio Pilato también fue en latín, como se muestra en la película "La Pasión", pero es una mera suposición, porque Pilato, como gobernador de esa región, evidentemente aprendió arameo para tratar con sus súbditos). Pareces creer que el hecho de que el latín haya sido adoptado por la Iglesia como lengua "oficial" es algo puramente fortuito y no responde para nada a la Providencia divina. Pues no creo que tengas muchos argumentos para sostener esa idea. Por mi parte, sé de exorcistas que han declarado que Satanás odia el latín, y además el latín es la lengua en la que se ha profundizado la fe durante más tiempo, es la lengua de las grandes misiones, de innumerables Santos. Por lo tanto, perdona si no creo que sea solo una cuestión "política".
Los templos del Novus Ordo son, en su grandísima mayoría, realmente feos, faltos de belleza y armonía, y rinden tributo a la subjetividad de la arquitectura moderna, que no sabe nada de trascendencia. Pocas excepciones. Sin mencionar la terrible mutilación de los antiguos santuarios, cuyos retablos y comulgatorios fueron salvajemente (lo resalto) arrancados y destruidos, muchos quemados y rotos a hachazos, o vendidos en mercados negros para adornar impúdicos recintos (triste destino, también, de ornamentos e imágenes).
Debo concederte algo, y al mismo tiempo empalmo con este post, al menos indirectamente: la ignorancia sobre Jesucristo no es culpa del Concilio en sí, sino de aquellos que tenían (y tienen) el deber de formar las conciencias, de guardar el depósito y transmitirlo fielmente.
Ahora bien, también es cierto que el CVII tuvo algo que ver en lo que está pasando ahora, pero de la siguiente manera:
El CVII permitió ciertos cambios novedosos.
Y el "espíritu del concilio" los llevó a extremos impensados, los hizo obligatorios y además consiguió imponer muchísimos estropicios totalmente ajenos al CVII. Pero invocando al CVII en todos los casos. O sea mintiendo.
Entre los cuales estropicios se cuenta la perversión semántica y antievangélica que dio motivo al presente artículo de Bruno. Así que bien verás que mal se puede hablar de "culpa del CVII" en este caso.
Podría replantear mi pregunta así: Ese poderosísimo y fantasmal "espíritu del concilio", ante cuya destructiva autoridad de inclinan muchos obispos y cardenales más que ante el Vicario de Cristo, la Tradición y las Escrituras, y que ha logrado cambiar a la Iglesia en pocas décadas lo que ella no cambió en siglos y milenios, ¿de dónde viene concretamente?
¿De la Masonería u otro visceral enemigo de la Esposa de Cristo?
¿Del mismísimo Anticristo?
¿Del diablo, en cuyo caso dicho "espíritu" sería el tan mentado "humo de Satán"?
¿O será que la propia Iglesia, repitiendo lo de Aarón y su novillo dorado, habrá decidido fundir sus tesoros para complacer a la multitud apóstata y desenfrenada?
Yo de lo único que estoy seguro es que ese "espíritu del concilio" existe, es poderoso porque ha hecho cosas terribles, y alguien o algo concreto lo fogonea.
Con ocasión de un sermón muy "subido", me distraigo y dirijo la vista a la cúpula, donde me encontré con la frase de N.S. Jesucristo: YO SOY EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA. Y me quedé prendido de ellas, preguntándome por qué habrían quitado la conjunción "Y" que precede en algunas traducciones a los tres conceptos, y que parece constaban en latín y en griego. Como aficionado a la Filología, me entretuve en ello durante el resto del sermón y aún hoy me acompaña, pues creo que era mucho más rica en el sentido de "no sólo...sino también" o "además de...también". Esto, combinado con un "juego" de trasferencias de núcleo principal por los tres conceptos, nos termina dando tres frases a cual más interesantes: "Yo soy el Camino verdadero de la vida"; "Yo soy el camino de la Verdad vital", y, finalmente, "Yo soy el camino de la verdadera Vida".
¿Es este blog tuyo adecuado para tal disertación? Así lo espero. Y si no, no pasa nada: te seguiré leyendo, que se disfruta mucho ("sapere") contigo y con algunos comentarios.
Cada vez creo más que ese espíritu viene de una alianza JudeoMasónica-Musulmana-Occidental Pagana.
El evangelio mismo nos cuenta que Herodes y Pilatos eran enemigos pero se aliaron contra Cristo. Pues a estos que son enemigos entre sí, los une su odio por Cristo y su Iglesia.
Mas no tengo más pruebas que una conclusión muy particular.
"Exactamente, Bruno, lo que dijo mi párroco o encargado de Unidad Pastoral local que se llama ahora. Y todo es quitar la divinidad de Xto, "desmitififcar" los milagros la anterior -multiplicación den panes y peces, donde dijo que vaya chollo para quitar el hambre del mundo si fuera tan fácil ( me recordó a lo de "baja de la cruz" o "i eres Hijo de Dios...") o la Resurrección como no recuerdo que nombre le dio a lo que se negó a considerar " San Pio X, y tratan de reducir a la Persona de Cristo a una mera persona, se van a Llevar un Chasco!!!!!!!Cuando se Mueran Dirán Uhhh, SEÑOR TU EXISTES, y se presentararan como todos, yo tiemblo al SEÑOR de Terrible Majestad, no jesucito, otra forma de disminuirlo , con las canciones.verdaderos engendros de protestización en la iglesia.Y aparte los offas que quieren quedar bien con Dios y con el Demonio, sabes como me dado cuenta en la Defensa de la Verdad, no aparcen ninguno, seguro, que están haciendo carrera, el entorno de Nerón.
Niegan el Infierno, no hay que asustar!!!!!!El Purgatorio, La Castidad aleja a la personas, Bienaventurados los limpios de Corazón porque verán a Dios, no se predica también, no en todos los casos evidentemente, porque no se puede predicar, lo que no se ama, y siempre hacerlo con compasión, comprendiendo a los que estan enfrente.Puede ser, que no entiendan, hay que orar siempre antes por ellos, frente al Sagrario!!!!Pascendi, San Pio X, sin juzgar su intenciones que solo dios puede juzgar los inluimos en los peores enemigos de la Iglesia.
Que Dios te bendiga y lo haga con la Iglesia.
Que Dios te bendiga y lo haga con la Iglesia,
San Agustin Oraba a Dios que quería ser casto pero no ahora!!,, tuvo un hijo, Santa Mónica, la Madre sus oraciones, como las de Michael.Y después fue San Agustin, tengo una gran biografia del santo durante sus cuarenta años de obispo en hipona,se desvivía, por todos, a los deficientes mentales, les hacia un pequeño catecismo, velando siempre por la Salvación de todas las almas que tenia en su diocesis tanto tiempo.El Hijo fue Sacerdote, alipio victima de sus maldades de jovén Agustin, fué San Alipio, Defensor enorme de la Ortodoxia Católica!!
Una de la cosas que tenemos los conversos es que nos tomamos las cosas en serio, quizás exagerados.Defendemos la ortodoxia, pero, comprendemos a los pecadores, quizás más que no los que no la metieron nunca!!
Saludos a tus niños,y seguimos estando sumisos.
Es interesante la relación entre la Oración Santa Teresa y San Agustin, que lo buscaba por afuera y lo encontro por adentro,Oración de Recogimiento, Libro de Tomas de Osuna.El alma Tiene Ojos, el diablo la tenia engañada, y comienza a Orar!!!!!!!La Humanidad de Cristo, Medito en San Francisco, y otros Santos y se diió cuenta de la importancia, y asi comenzo a Orar, requiere mucha limpieza de corazón.
También tiene un periodo del que se arrepiente, antes los libros de caballeria, como a San Ignacio, antes de conversión prodigiosa, hacián mal los envanecián, miraba a las mujeres como es lógico y normal.
Yo siempre digo aunque me gusten todas, miro a una, Mi Mujer.
Odiar al Pecado, a la Mentira!!!!!y Amar al pecador, San Agustin!!!!!!!
Temas interesantes
Que bellos son los niños!!!!!
Y siempre mi mujer me dice que ha sido fiel a mi.Ella llevaba de pequeña vida interior.
De todas maneras es ciero lo qe San Pablo dice en la carta a los romanos, es muy realista La Palabra de Dios, el que las hace, hombre y/o mujer quiere hacer caer a los que no las hacen.Por eso hay que estar atento.
Como exprese en este momento puedo escribir en está página, antes no podria, parece que es un momento, que Dios, quiere que exprese las verdades, que conozco.
Es La Voluntad de Dios, un abrazo a los pacientes, que quiero tanto.
Por ellos estudio, por ellos oro, son el sentido de mi vida, como me dijo una paciente muy estimada, usted tiene una misión que cumplir.
Es cierto y siempre para el bien común, que es una gran forma de caridad, aparte por supuesto de mi familia.
Y concluyend cuando fui una bomba molecular y la Carmelita, me dijo es la Cruz, siempre segui con los Sacramentos,con imperfecciones, pero tratando de agradar a Dios.Es cierto lo que se refiere el Padre Iraburu en los Santos que cita, uno en ese momento podia estar más cerca de Dios, que ahora.Las Enfermedades y Santa Teresa, aumentaron su unión con el Señor.Son ejemplos claros contra la moral de situación.Es Incleible que no se respete al Magisterio, que es DIOS, MISMO!!!!!
Un abrazo, Saludos a los niños, son hermosos.
Porque está claro que Jesús hace a sus discípulos una pregunta personal para que se la plantee así cada uno de ellos, tras haberles hecho pensar sobre lo que otros decían de él.
Y nos la sigue haciendo a nosotros hoy. Nadie dice que haya que ser originales, ni que todas las respuestas sean válidas, sino que hay que planteársela personalmente como una pregunta dirigida por Jesús a tu corazón.
Tú verás si tu respuesta personal es la que Jesús da por buena.
Pedro responde personalmente, y si su respuesta es la acertada es porque ha sido inspirada por el Espíritu, dice Jesús.
Cada uno de nosotros que se haga la pregunta y conteste lo mismo:" tú eres el Hijo de Dios vivo", sabe que su respuesta es la que Jesús da por válida, que es la de Pedro, que está inspirada por el Espíritu. Porque das la misma respuesta de Pedro, estás en la Iglesia y no al revés.
Es decir, ¿por qué iba yo a priori a creer en la Iglesia Católica en vez de creer en el Islam o en los testigos de Jehová o cualquier otra religión que aseguran también ser las únicas verdaderas?
Si soy católica es porque mi encuentro con Jesús me lleva al catolicismo y no a otra religión. Contesto personalmente como Pedro, porque así lo ha querido Dios, luego soy de Pedro, soy de la Iglesia católica - no al revés. (es decir, no me encuentro en la obligación de decir que Jesús es el Hijo de Dios porque lo diga la Iglesia Católica sino en la obligación de ser católica porque creo que Jesús es el Hijo de Dios y que dijo "tú eres Pedro y sobre esa piedra edificaré mi iglesia.")
Pero el planteamiento de Jesús es personal para llevar a cada uno personalmente a la respuesta acertada.
Saludos en Cristo.
"Es un tema importantísimo, al que apenas se presta atención. No hay nada que ayude más a vivir bien la Misa que un sacerdote que celebre "como quien ve al Invisible" y que se de cuenta de que, en el altar, está pasando lo más importante del mundo.
No soy más que un laico, pero, si me permiten la osadía, a esos sacerdotes beneméritos que están desesperados por lograr que los fieles acudan a la parroquia e inventan todo lo inventable para conseguirlo (y hacen muy bien), me gustaría aconsejarles esto: empieza por celebrar la Misa como si estuvieras en el Calvario y no sólo cambiará tu vida, sino que antes o después los fieles sedientos de Dios acudirán a millares."
Vieras en mi parroquia! Aplausos para el del cumpleaños, para los que cumplen años de casados, interminable rito de la paz con todos los niños asistentes y el sacerdote, mientras el coro entona "el canto de la paz???"... la reverencia por los suelos: comulgando en shorts y chancletas...pero yo soy el fariseo....
Creo que la pregunta tiene mas sentido del que ud. cree.
Claro, su esposa es una mujer de determinada edad, ejerce tal profesión. Pero, ¿quién es su esposa para usted.? Lo mismo pasa con cristo.
Creo que cada individuo debe aprender a disponer por completo su ser interior; (alma) para lograr edificar a través de la Gracia del Espíritu Santo, (efectivamente, como Templo del Espíritu) el Reinado de Cristo en su corazón.
Pues considero que de ese modo, la fe en la razón, va abriendo la razón por la fe verdadera en Cristo; a través de “seguros y/o candados” que resguardan para bien del ser humano., el Tesoro de la Sabiduría del Espíritu Santo de Dios, como la “llave maestra” que abre la puerta angosta del Cielo; alcanzando a través de la humildad, la Salvación., para la Gloria Eterna del Creador. ♾️
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