Crónica de la primera misa ad orientem en la parroquia
El día en que anuncié que comenzábamos una misa semanal ad orientem en la parroquia, no faltaron comentaristas que me pidieron que hiciera el favor de contar cómo había ido. Pues encantadísimo de hacerles llegar noticias del evento.
A mi modo de ver hubo una asistencia más que notable de fieles. Tengamos en cuenta que se trataba de la primera misa del domingo, la de las 9:30 h., a la que suelen asistir entre treinta y cuarenta personas. Ayer no exagero si digo que andaríamos rondando los cien asistentes, si no más. Es decir, que había expectación y ganas. En las fotos se ven huecos. Normal. Sentados caben en la iglesia más de trescientos fieles.
Al acabar la celebración, fueron numerosos los fieles que se acercaron a dar las gracias por la celebración y a dar rienda suelta a sus emociones. Al menos los que se acercaron a dar su parecer, muy contentos con la experiencia, sin más pega que la hora, que las 9:30 de un domingo para mucha gente resulta temprano.
Copio dos WhatsApp que me llegaron ayer mismo:
“Muchas gracias por la Eucaristía tan profunda. Se Ha vivido con una gran intensidad. Se siente que Cristo es el dentro de la misa”,
“Me ha gustado mucho. Efectivamente, como decías, te centra más en lo único importante. Me ha transmitido mucha emoción desde que hemos rezado todos juntos el credo mirando al altar. No creo que nadie pueda poner pegas. Y no supone un cambio que pueda incomodar a nadie. Al revés, resulta más auténtica. Mi opinión, que deberías mantenerla después del adviento”.
¿Y el celebrante cómo lo ha vivido? Con mucha emoción, tanta que hasta he de confesar que dormí mal la noche anterior. Para mí ha sido una misa como nueva. Especialmente ofertorio y consagración.
Mi sensación ha sido sobre todo la de sentirme cara a cara ante el misterio de Dios. Como cuando Moisés se encontró con Dios cara a cara y el pueblo estaba expectante. Todos ante Dios y yo, el sacerdote, el primero, con el corazón encogido mientras me atrevía a pronunciar las palabras de la consagración. Como en una nube envolvente de misterio. Solo ante Dios, pero con una soledad asentada en la presencia y participación de los fieles que se han sentido contagiados por esa aura de misterio y profundidad y con su oración y su estar apuntalaban y sostenían mis súplicas.
Ayer en la misa creo que me di cuenta muy especialmente de que dejaba de ser Jorge para ser un sacerdote. Solo eso, sacerdote de Cristo. Impresionante.
Rezar en nombre de todos. Ofrecer lo de todos. Estar en Dios. He sentido, porque se percibe, aunque uno no lo vea, o quizá precisamente por eso, un silencio profundo, lleno de fe, participativo, porque la gran participación ayer en la eucaristía no fue hacer cositas, inventar gestos o soltar una gracia. Participar es entrar en la celebración. Ayer nadie estaba fuera. Y eso se percibe en las respuestas, se nota, no me digan exactamente cómo, pero se nota.
¿Mi valoración final? Que fue una gracia de Dios la misa de ayer. Hubo adultos y también algunos jóvenes. A nadie dejó indiferente. Seguiremos, con la gracia de Dios.
109 comentarios
Si la Iglesia lo hizo así durante siglos seria por algo,
¿Animado a hacerlo así algun dia en misa mayor?
Sin duda fue una gracia de Dios lo de ayer. Ad multos annos.
No me extraña nada que D.Jorge se haya sentido acompañado, lo estaba, y los fieles, han sentido que participaban en una conmemoración, se sintieron Eklesia. De eso se trata.
Saludos y nos encomendamos a sus oraciones.
La iglesia me gusta, con esa cruz tan grande y la imagen de Jesús presidiendo todo el espacio, prefiero las iglesias antiguas por sus obras de arte, pero hay iglesias modernas muy bonitas, como la que tienen en el Paseo de las Delicias y por último, celebro que la misa ad orientem tuviera tanta aceptación. Un saludo a todos y feliz semana.
se ataca a la religión de muchas maneras, me parece que de manera principal se intenta erosionar el dogma de la divinidad de Cristo. La misa Ad Orientem no deja la menor duda que el sacerdote y el pueblo ofrecen el sacrificio y sus oraciones a Dios, esto es, a Jesucristo Crucificado.
Los progres seguramente están que trinan, ellos buscan que se vea la Segunda persona de la trinidad como un "buen hombre", de hecho, ellos se definen "cristianos" porque consideran a Cristo un ejemplo a seguir (escogiendo solo algunas de sus enseñanzas y, por supuesto, malinterpretándolas), pero sin aceptar su divinidad y en consecuencia su INFALIBILIDAD en todos los casos sin excepción y sin fecha de caducidad para lo que se dignó revelarnos.
Los modernistas pasarán del argumento "cristianismo original" al extremo opuesto "hay que interpretarlo conforme al signo de nuestros tiempos" conforme convenga a sus intenciones, sin el menor empacho.
Si me admite un consejo, para la celebración ad Orientem cambie la disposición de las velas a la parte frontal trasera del altar. En los laterales queda un poco extraña la disposición.
Misa del Gallo, que pilla cerca, ¿quizás?...
Los sacerdotes debe aumentar su amor a Cristo, y esto es un buen ejemplo, que debe llegar a todas las almas.
Ojalá que todas las demás iglesias de España, Europa tengan también esta determinación para adorar sin tacañería al Señor nuestro Dios. Esto es generosidad para con Dios, no es egoísmo. Y necesitamos que aumente el número de los fieles creyentes. Que la mundanidad en los corazones cristianos, mueran, para que dejen crecer los auténticos valores de nuestra fe cristiana, esto es, la de la Santa Madre Iglesia Católica.
Es que a veces cosas como celebrar "ad Orientem" parecen más una postura ideológica --como el latín también-- cuando en realidad son elementos que justamente apuntan a una "pedagogía" litúrgica y que obtienen ese "no sé qué" que uno va percibiendo en la Misa, en uno mismo y en los fieles.
Se trata más bien de un "Vengan y vean" evangélico que de otra cosa.
Me alegro mucho por ud, padre. Lo principal es que fortalezca su vida sacerdotal y la vida espiritual de los fieles.
siempre se ha de buscar la perfección, el estancamiento en la fe no ayuda a las almas, Muchos que no somos sacerdotes, nos alegra eso, de ver como el celebrante tiene fija su mirada en un solo punto, donde está Cristo Jesús. Alguien ha compartido una foto bastante curiosa a modo de ejemplo, el conductor de un autobús no está mirando a los viajeros cuando conduce, sino que tiene puesta su mirada en la carretera. Los ocupantes del autobús no se sienten molesto. Se ha de mirar por donde se va. Pasa un tanto mejor en la celebración eucaristía. No debemos pensar que el sacerdote nos da la espalda cuando celebra «ad orientem», esto no tiene por qué inquietarnos. Es el demonio quien se siente molesto, porque si el sacerdote está por delante de nosotros, teniendo su mirada fija en Cristo, también nosotros.
No pocas veces, en mi barrio, tiempo atrás, el sacerdote que estaba mirando a lo feligreses, las distracciones le llegaba incluso, hasta fuera de las puertas de la iglesia, hacia la calle, o mirando a los feligreses, y cometiendo innumerables errores, descuidos sobre las rúbricas, poniendo más atención fuera de las celebraciones litúrgicas. Esto debe ponerse fin en definitiva. La Misa de cara al público, no está ayudando a la feligresía, repito, son infinidades de distracciones... Y lo que si en verdad buscamos a Cristo, la Santa Misa «ad orientem» ya por sí, es una verdadera inspiración del Espíritu Santo, que nos ha recordado en su tiempo el cardenal Sarah. Negarse a esto, es negarse a renovarnos espiritualmente.
Ahora, me pregunto si puede ser "sencilla y llanamente impresionante" el momento de la consagración que no se haga en silencio, me pregunto si no molestan las palabras dichas en alto durante la consagración, o si solo el silencio es posible cuando "La humanidad se estremece, el universo entero tiembla y el cielo exulta".
Sinceramente espero que no sea "Ad multos annos." sino lo mas breve posible y que don Jorge se decida cuanto antes a pastorear con la Misa antigua, la de siemprte, la eterna.
Qué majestuosa, qué solemne Consagración.
Los que hemos conocido sólo la Misa actual, tenemos la desagradable sensación de que los invitados de anoche se llevaron la cubertería de plata, las joyas de la abuela y saquearon la bodega.
El rito en el Templo de Jerusalén claro que no era "de cara al pueblo", como tampoco los sacrificios de los animales, sino "cara a Dios".
Ahora, si ud quiere hacer de la Misa una Cena judía, pues empiece también por circuncidarse y comer kosher. Y eso sí, la Iglesia desde los primeros siglos (cuando fue codificando la liturgia y la celebración ad Orientem) estuvo confundida (todos los ritos, en Oriente y Occidente). Hasta 1970.
El Pueblo de Dios se une a esta “doble” expresión de la celebración: En las misas en que el sacerdote celebra de “cara al pueblo”, es Dios en realidad el que mira a sus fieles. En las misas en la que el sacerdote celebra mirando a la Cruz, es el pueblo, el que mira… ¡al Padre!, uniéndose a las miradas de Cristo Redentor, a quien nuestros sacerdotes representan.
Hace tiempo, interpreté como “banquete” la misa “de cara al Pueblo”, y como peregrinación, la misa “de espaldas al Pueblo”. También, pensando sobre el misterio de nuestra fe, interpreté la “doble” consagración con ese sentido, el Cuerpo de Cristo, como alimento dirigido al pueblo, y la Sangre de Cristo, como Sacrificio redentor dirigido al Padre pero al que se une el Pueblo de Dios, que colabora por invitación del mismo Cristo. Ya sé que Cuerpo y Sangre equivalen totalmente, pero pedagógicamente hablando, me sugirieron esa explicación.
Muchos, poco informados, interpretábamos que “ad orientem” significaba mirando a Jerusalén, lo mismo que los musulmanes miran hacia la Meca. Y me parecía una imitación fuera de lugar. Pero si no entiendo mal, de lo que se trata “coincide” con celebrar la misa a espaldas del Pueblo, aunque no sea eso lo que se persiga.
Pero ¡claro!. Oriente está en cada Iglesia, donde está la Cruz.
El Sagrario y el Altar tienen misiones distintas y no deben confundirse, ya que el Sagrario es continuación del Altar, y la reserva es, de alguna manera, continuación de la misa ya celebrada. Y no al revés. La Cruz (Cristo crucificado) es el Sacerdote Eterno, el que, en realidad, celebra, y a quien el sacerdote celebrante “sustituye” en el sentido de que todo sea sensible y no escondido para los asistentes a la misa.
La Cena de Pascua anterior a la Cruz, es cuando el Sacramento de nuestra fe se instituyó para nuestra participación real, sin el cual no tendríamos ni sacerdocio ministerial ni comunión.
Cuando se celebra misa, no debemos poner nuestra atención sobre el Sagrario sino sobre el altar, y en lo que en él está sucediendo. El altar donde se celebra es símbolo del Altar divino: Cristo, sacerdote, víctima y altar.
Por último, todas las celebraciones son auténtica celebración. Lo que importa es nuestra disposición interior.
Que se me corrija si no es así. Que el Señor nos bendiga.
Que hermoso lo cuenta y me da profundo gusto que haya sentido el fervor de todos. Cuando dice usted que sentia como una misa nueva es que realmente fue nueva en su corazon y con otro espiritu; un espiritu de mas hambre por Dios y totalmente renovador. Pues nada, ojala tambien pueda vivir una Misa asi algun dia.
Yo soy laico y padre de familia, pero entiendo que un cura es cura por esto y para esto: el hombre del Altar, el hombre del Sacrificio, el hombre que tiene la potestad inaudita de perdonar los pecados, el que actúa in persona Christi.
Y no, no es lo mismo volverse al pueblo o al oriente. No lo es.
Por otra parte, en asuntos de liturgia (no dogmáticos), un concilio puede corregir o modificar a otro, y son muchos posteriormente los que han dado lugar a los gestos y moniciones de la misa actual.
En concilio de Nicea prescribió muchas disciplinas adecuadas para aquel momento, que no se conservan: p.ej no admitir a comunión a los militares, o no ordenar a los castrados, o no permitir obispos itinerantes.
Una cosa es tradición, y otra arqueología.
No me imagino yo a Jesús partiendo el pan de espaldas, aislado y sin mirar a nadie.
Además si Cristo es el centro, debería estar en el centro de la asamblea, no tapado por el cuerpo del cura, que parece que lo esconde para que nadie lo vea.
Sinceramente el video me ha dado mucha tristeza.
Un "bravo" en tono elevado por esta admirable iniciativa...
Ojalá que muchos sacerdotes puedan seguir su ejemplo.
Un fuerte abrazo desde Argentina.
Las representaciones pictóricas del pasado que plasman la misa, esas fotos que recogen patéticamente las misas en catedrales recién bombardeadas, las imágenes de cine que captan misas de campaña en los frentes o en el interior de buques de la guerra del Pacífico, con esos fieles jóvenes que aceptan tranquilos la posibilidad de morir... todas tienen un elemento que añade sobrecogimiento al contemplarlas: la figura dignísima y anónima del oficiante vuelto hacia Dios. Algo tendrá el agua cuando la bendicen...
Por lo demás, enhorabuena, D. Jorge, y le animo a seguir profundizando en esta experiencia tan enriquecedora.
Saludos
Por cierto, en Valencia hace años que se celebra diariamente misa ad orientem; lo que ocurre es que es bilingüe, castellano-valenciano, y claro, no está bien vista...
SI lees bien lo que he escrito verás que no pongo "el concilio" sino TRAS EL ULTIMO CONCILIO.
El cara al pueblo me parece adecuado para conservar el sentido comunitario de la Eucaristía sin perder el Sacrificio que es, por supuesto, lo más importante.
Hermenegildo, la expresión Misa Novus Ordo no la usan nunca la doctrina de la Iglesia, solo los tradicionalistas (que no los tradicionales. No es lo mismo). La terminología que usa la Iglesia es Misa en forma ordinaria y Misa en forma extraordinaria.
A alguno le puede parecer insistente mi decisión de criticar siempre este mal uso de los términos, pero es que me parece un abuso que los tradicionalistas se apropien de la Tradición de la Iglesia. Como si Lefebvre y similares, y no la Santa Sede, fueran los que definen qué es Tradición y qué no lo es.
Pues por un lado, qué feo e innecesario comentario!
Por otro lado, no olvide que la Misa durante más de 1500 años se celebró así, a Oriente (y en Oriente hasta el día de hoy).. Ud está diciendo que el santo rito Eucarístico de la Misa no tiene ningún atractivo y es tremendamente frío.. Qué poco amor a la Eucaristía y a la tradición de la Iglesia decir eso de la celebración de los Sagrados Misterios! Y qué ignorancia!
En algunos comentarios se intuye una cara avinagrada, como denuncia el Papa Francisco, que ha celebrado públicamente ad Orientem en dos oportunidades..
Seguramente por una falta mía de comprensión, he creido deducir de sus palabras que la "Liturgia renovada" después del Concilio Vaticano II goza de una especial inspiración del Espíritu Santo, de la que hipoteticamente habría carecido la anterior. Es así?
En todo caso, me encuentro algo confuso: se refiere a la Consitución "Sacrosantum Concilium", o a los resutados de "Consilium ad exsequendam etc..". Lo digo por que dudo que ud. ignore las profundas divergencias entre las dos, y la inmediata reforma que sufrío la reforma del Misal.
Creo que se olvida lo que es teológica y verdaderamente la Misa: Sacrificio incruento renovado del Sacrificio cruento del Calvario.
No es una "cena", estar con el Señor que nos sirve (también pero no es lo primero) etc.
Nuestro Señor podía haber instituido este Sacrificio después de la Resurrección. Cuando ya estaba hecho el sacrificio de la Cruz, y podía haberlo hecho fácilmente porque consta que comió con los apóstoles en más de una ocasión. Pero prefirió hacerlo antes, estando entre ellos en su carne aún no resucitada, porque para El no existe el tiempo pero, insisto, es anticipación del sacrifico de la Cruz y la Misa es renovación de ese sacrificio . Ocurre como con el Dogma de la Inmaculada, fue preservada la Santísima Virgen, "en previsión de la muerte de su Hijo", redimida antes. Dejemos el protestantismo larvado que quiere convertir la Misa en simplemente la cena y la fraternidad; con esto se quita el verdadero significado, se pasa fácilmente a la negación de Cristo realmente presente, se convierte en una fiesta ( a veces llena de ruido y cierto paganismo o estulticias, etc.). El sacrificio ofrecido a Dios por el sacerdote en el altar siempre se ha hecho con el pueblo detrás, no en plan de "compartir y vernos" . La comparación con el "locus" real del Calvario no tiene sentido porque son distintos los presentes y el único y Eterno Sacerdote , que muere realmente, pero tiene en ese misterio de la asunción de nuestra carne el acompañamiento de su Madre , de algunas mujeres y de San Juan pero, el acto principal (¿alguien lo pondrá en duda?), es su Sacrificio cruento por la salvación de los hombres.
Vd., yo, el cura párroco de mi pueblo y los lefevristas hablan, o debieran hablar de tradición (con minúscula): esta es cambiable. Pero ese cambio tiene también su orden y sus límites y , esos límites, a los que nos quieren hacer tragar en ocasiones, no se han respetado o se respetan a veces y, obviamente, no hablamos de simples rúbricas. El calado en el pueblo y en la fe, desde la psicología y la sociología, tienen consecuencias y muy graves en el pueblo y en la Fe; a las pruebas actuales comparativas me remito.
Sigo con interés todas las cosas que está haciendo y que comparte con todos nosotros. Creo que es una excelente idea el que, al menos en una misa, se pueda celebrar de la manera en la que ha empezado a celebrar en la misa de las 9,30h.
Ha iniciado muchas cosas, y si son del agrado del Altísimo, creo que se irán viendo los frutos de ello. Espero que esos frutos surjan en su parroquia. Saludos.
A los contrarios a la Misa hacia el Altar les pediría, ya que son incapaces de aceptar argumentos y tradiciones bimilenarias, que dejen de dar el coñazo y respeten a sacerdotes y laicos que quieran asistir a Misa de esta forma.
La expresión "Novus Ordo Missae" fue empleada por los eminentes Cardenales de la Santa Iglesia Romana Ottaviani y Bacci, en su "Breve examen crítico del Novus Ordo Missae". El Cardenal Ottaviani fue varios años Secretario del Santo Oficio y luego Pro-Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, por lo que de no se puede dudar de la ortodoxia de sus afirmaciones. Por su parte, el Cardenal Bacci era un eximio latinista, por lo que sabía perfectamente qué decía al utilizar una expresión latina como "Novus Ordo Missae".
Me han impresionado sus palabras, Padre. Hoy en día que todo el mundo va, vamos, tan corriendo, tan desaforados por la vida, que un sacerdote tenga esa sensibilidad y humildad: "Todos ante Dios y yo, el primero," como reconociendo nuestra pequeñez ante el Ser Supremo...
Gracias Padre porque todos sus escritos, aún en los de apariencia más intrascendente, encierran siempre, una gran enseñanza moral.
Y dígame..... Que le parecería ir introduciendo la misa Tridentina, aunque por el momento solo fuera en español.......
La experiencia para todos seria maravillosa, ya que uno se siente como en el cielo por ese tiempo que dura la Santa Misa......
Saludos desde México
a) Benedicto XVI no dijo en ningún momento que la excomunión a Lefebvre y sus cómplices fue un error. Lo que hizo fue levantar la excomunión. Levantar una excomunión no significa declarar que fue un error. Significa que estaban excomulgados y ahora, por el motivo que sea, se concede la gracia de levantársela. El motivo lo explica muy bien el Decreto que lo hizo, y fue facilitar la vuelta al diálogo. Léelo, por favor, y verás que ni de lejos se dice que eso fue un error.
Por cierto que la excomunión no fue levantada para Lefebvre y De Castro, lo cual no hubiera ocurrido de ser un error. El hecho es que estos dos murieron excomulgados.
b) Benedicto nunca declaró que la situación anterior a 2007 respecto al Misal de Juan XXIII era un error. Lo que hizo fue declarar que ese Misal nunca fue abrogado. Parece que desconoces la distinción que hace el derecho canónico entre derogar y abrogar. Y lo que hace es declarar lícito el uso del Misal de Juan XXIII desde ese momento, no porque había un error, sino por el afecto de muchos fieles a ese Misal. Una vez más, lee el documento del Papa y verás que ni de lejos habla de error.
Una prueba más te doy: Benedicto XVI cita las normas anteriores de Pablo VI y Juan Pablo II, que prohibían usar ese Misal, y en ningún momento dicen que eran erróneas, lo cual debería decirlo si fuera un "grave error con responsabilidad papal", como tan atrevidamente dices.
c) Cuando Francisco apruebe esa Prelatura, si es que lo hace, hablamos. Y mientras deberás reconocer que la FSSPX son simplemente unos rebeldes. Y las Misas que celebran son ilícitas. Serán muy bonitas, pero ilícitas. Lo siento, pero es la pura verdad.
Por lo tanto, me parece bien que te adhieras a Benedicto XVI, pero al de verdad, no a esa construcción imaginaria que te has hecho.
Hacer eso es usurpar a la legítima autoridad eclesiástica sus funciones, y por ello es un verdadero cisma.
Y la FSSPX no es cismática. No niegan un solo dogma.
Joseph Ratzinger, "Mi vida", pág. 24.
¿Se deduce de esto que sólo "motivos de afecto" justifican la restitución de la Misa Tradicional? Me parece que no. ¿Se deduce de esto que fue un error prohibir la Misa milenaria de la Iglesia Católica? creo que perfectamente, sí. Estas cosas se deducen de pensamientos de Joseph Ratzinger.
Gran lucidez, la del futuro Papa Benedicto XVI. Efectivamente, han sido trágicas las consecuencias de la prohibición de la Misa de siempre, y sólo grandes Gracias y Bendiciones pueden tener la recuperación y la revitalización de esta Santa Misa, que ayudarán muy eficazmente a superar la terrible crisis en que se encuentra sumida la Iglesia, en abusos litúrgicos, falta de sacralidad y espiritualidad en las celebraciones.....
Recomiendo a quien no la conozca, que se interese por esta Misa. Sólo hace falta un poco de interés y sensibilidad espiritual para captar su grandeza, su belleza y su profundidad.
Ayer en Radio María se habló de la misa Ad Orientem. No he sabido de nadie que haya iniciado ya, pero seguramente en un futuro próximo se hará realidad en mi país.
Juan Stuse: afirmar que "Espíritu Santo condujo a la Iglesia a una renovación de la liturgia tras el último concilio" es una posible interpretación y quizás correcta. También habrá quien diga que fue un error, y quizás hasta el límite de hacer referencia al "Humo de Satanás" al que se refería Paulo VI y quizás sea ésta la correcta.
¿Como saber quien tiene la razón? Por los frutos....... Satanás es muy astuto y puede torcer el entendimiento, pero viendo el resultado sabemos que es lo inspirado por el Espíritu Santo y que no lo es.
El Espíritu Santo inspira la marcha perfectiva de la Iglesia siempre. Inspiró en su momento la Misa Tridentina y últimamente su renovación en el aspecto comunitario, sin descuidar su realidad de Sacrificio:
"La Iglesia procura que los cristianos no asistan a este misterio de Fe como extraños y mudos expectadores" .
(Sacrosantum Concilium, 48)
Veritas Liberavit
·"No hay duda de que la reforma litúrgica del concilio ha tenido grandes ventajas para una participación más consciente, activa y fructuosa de los fieles en el Santo Sacrificio del altar..."
San Juan Pablo II Ecclesia de Eucharistía, 10.
Con esto cierro por mi parte una polémica que no era mi intención crear, ya que respeto la iniciativa del P. Jorge, que sigue las indicaciones del cardenal Sarah. .
Bello es este pasaje: «En ella estará el trono de Dios y del Cordero, y sus siervos le darán culto, verán su rostro… » (Ap 22,4). « verán su rostro », hoy en la liturgia, el sacerdote debe tener la mirada fija en el Señor. Hay otros textos de la Sagrada Biblia; «No extingáis al Espíritu, ni despreciéis las profecías; sino examinad todas las cosas, y retened lo bueno » (1Tes 5, 19-21), es lo que está sucediendo ahora. La Misa «ad orientem », es lo bueno que se practica, y los frutos espirituales tiempo a tiempo ya se irá notando, el fervor de las personas. Otra enseñanza de San Pablo, y bien podría servirse para defender el progreso espiritual de la Sagrada Liturgia, dice: «Os exhorto, por tanto, hermanos, por la misericordia de Dios, a que ofrezcáis vuestros cuerpos como ofrenda viva y santa, agradable a Dios este es vuestro culto espiritual. Y no os amoldeis a este mundo, sino por el contrario, transformaos con una renovación de la mente, para que podáis discernir cual es la voluntad de Dios, que es lo bueno, lo agradable y perfecto» (Ro 12,1-2).
Por ahí va la inspiración del cardenal Sarah, y que ha puesto en práctica el P. Jorge, la renovación espiritual, buscando y haciendo realidad las inspiraciones del Espíritu Santo.
Muchos cristianos no quieren salir de esos “experimentos” sobre la liturgia: “de cara al pueblo”, la Palabra de Dios nos enseña que el creyente debe siempre estar de cara a Dios, y hablando al pueblo, sin dejar de atender a Dios, y por eso necesitamos mirar a Dios ya en este mundo, comenzando por la Sagrada Liturgia, y nuestra vida de fe cristiana como hijos e hijas de la Iglesia Católica.
Haciendo realidad «lo que es bueno, perfecto, agradable a Dios», no lo que a mí me parece que viene de Dios, sino tomarnos en serio lo que procede del Espíritu Santo.
Hay otro pasaje muy importante, que se debería reflexionar en serio, no leerlo y olvidarlo: «Esta ciudad ha estado provocando mi ira desde que la edificaron hasta el día de hoy. Así que la apartaré de mi presencia, por causa de todas las maldades que hicieron para irritarme los hijos de Israel y los hijos de Judá, ellos, sus reyes, sus nobles, sus sacerdotes y sus profetas, los hombres de Judá y los habitantes de Jerusalén. Me dieron la espalda en vez de la cara. Aunque Yo los adoctrinaba sin cesar, ellos no quisieron escuchar ni aceptar la instrucción» (Jeremías 32,31-32)
Digamos que tiene relación con el Misterio Eucarístico. Hubo un tiempo, que a muchos les parecían bien, eso de que el sacerdote en vez de cara al Señor: «ad orientem», sería mejor de “cara al pueblo”, este error ha llevado a la decadencia de la fe cristiana, hasta la vileza del espíritu protestante, de mal en peor, siempre. Hasta el desprecio total de la Sagrada Misa, por parte de muchos que ya no tienen a Cristo en su corazón.
El cristiano siempre ha de buscar los intereses de Cristo, que es la perfección en todas las cosas que hace. No dejarse engañar por la modernidad; no dejarse esclavizar por el relativismo.
También creo que la gente se convertía no por las celebraciones sino por sus obras.
Debemos de tener cuidado.
Hay citas del Evangelio diciendo que la letra mata, pero la teología es una ciencia que se enorgullece de ser muy precisa en el uso de las palabras.
Es totalmente gratuito por tu parte atribuirle al Papa una intención que no manifiesta ni explícita ni implícitamente. Y es muy grave por tu parte cuando deduces (porque lo dices expresamente, que es una deducción tuya) nada menos que pretende corregir graves errorres de otros Papas.
Si ocurrió, fue un hecho de fuero interno. De fuero externo lo que sabemos es que fue excomulgado por el Papa, solo él tenía potestad de levantarle esa excomunión en el fuero externo, y eso no sucedió. Por ello, en el fuero externo murió excomulgado y como tal debe ser tratado. Por ejemplo, se le debían haber negado las exequias. Pero ya sabemos que para los de la FSSPX eso de la obediencia a las normas no es su fuerte.
Algún día nos deberías explicar los lefebrstas por qué os dan sarpullidos cada vez que llamáis forma ordinaria a la Misa de Pablo VI.
Ya es curioso que en esta misma discusión otro lefebrista se empeñe en pedirme que respete la voluntad de Benedicto XVI (la que él interpreta), pero en esto la voluntad del mismo Papa, bien clara y expresa, se la pasa por cierta parte. ¿En qué quedamos? ¿Hay que respetar la voluntad de benedcto XVI o no hay que respetarla?
Y la Divina litúrgica en rito oriental, bizantino o mas concretamente la liturgia de San Juan Crisóstomo no permite el arrodillarse en ningún caso, y no es arqueología sino que la Tradición está viva porque admite variantes que se originan en disposiciones temporales que luego el Espíritu Santo canoniza o no.
No dudo que usted coincidirá conmigo que en consecuencia no debe admitirse en que se quiera imponer que un gesto de un rito lo hace más santo que el de otro. Y menos afirmar que mi preferencia por uno u otro es porque "me siento mejor" o peor aún hacerlo causa de una división en el Cuerpo de Cristo.
Que Dios lo bendiga.
No entiendo la alergia que algunos tienen a arrodillarse ante el Creador y Salvador. Es indignante.
Ya ves que yo no supongo nada. Me atengo a la terminología que sí usa el Papa Benedicto, no a las suposiciones que tan gratuitamente haces.
En serio, ¿por qué te cuesta usar el término que sí usa el Papa Benedicto y el Papa Francisco? ¿Por qué, para evitar ese término, tienes que recurrir a mil suposiciones para llegar a un término que jamás ha usado el Magisterio?
La realidad es que el centro de la Eucaristía está fuera de ella, es el culto razonable... no digo más.
No dijo Cristo que Él estaba en medio de dos o más reunidos en su nombre? ¿Dar la espalda a los que se reúnen en su nombre no es dar la espalda a Dios, que está en medio de los fieles, por mirar a una estatua?
Entiendo la belleza de la misa tradicional, el hecho de mirar hacia una escultura tiene importante valor simbólico, pero por wué se le llama cara a Dios? Teológicamente no tiene mucho sentido y es bastante ilustrativo de la idea de Dios que se quiere dar.
Por otra parte a partir del momento de la consagración está claro dónde está Cristo.
La misión de la Iglesia es salvar, no condenar, Cristo no condenó.
A ver si vamos a estar buscando a Dios en el lugar equivocado...
Hoy hay secerdotes que no se atienen al libro que tiene en el altar, sino que de vez en cuando se saca de !a manga una parrafada que sobra y otros muchos defectos que son no litúrgicos. Eso no se puede hacer y se hace, y lo bueno del caso es, que la jerarquía lo sabe y no pone coto a esta forma de proceder. Sabe cuales son y no me voy a parar a detallar cosas que no se deben de hacer ni decir. Por cierto, quizás apartándome un poco de este tema, leo el Evangelio que se ha leído sobre la madre de los los hijos del trueno, Juan y Santiago, cuando la madre se lo pide al Señor, y el Señor después de aclararle las ideas les pregunta a los hermanos: "sois capaces de beber el cáliz que yo he de beber". Siempre se contesto: "lo somos", que creo que gramaticalmente es lo correcto. Pego un salto cuando oigo (a pesar de ser sordo) "podemos". Me quedé tieso. Vamos, que hasta los de Podemos se han metido en los Evangelios. No me gustan los nuevos leccionarios, porque se han eliminado palabras que si para ciertos oídos son molestos, lo cierto es que fue así. Perdón por el chiste. Creo que me habrá entendido. Paz y Bien
Dejar un comentario