Sigue el lío con la Amoris Laetitia (y lo que te rondaré morena)
Los documentos papales se supone son para animar, confirmar en la fe, aclarar, unir, hacer iglesia. Je.
Amoris Laetitia ha conseguido ser el documento papal no sé si más leído, aparte algún párrafo y alguna nota a pie de página, pero desde luego el que ha conseguido más polémica, más confusión, más división. Desde el principio de ese sínodo de la familia celebrado en dos partes si algo aparecía por todas partes era confusión, relativismo, manos negras, manipulación y diversas artes cuando menos discutibles. Estoy generoso.
Sorprendente que esta exhortación post sinodal haya ido recibiendo apoyos y contra apoyos en forma de recogida de formas, campañas de adhesión inquebrantable, otras de reprobación sistemática. Un lío en toda regla. Los estudios, algunos serísimos sobre el asunto, tampoco es que hayan aportado mayor tranquilidad. Todo lo contrario.
Tras las firmas de todo titirimundi, llegaron las, digamos, cualificadas. En julio conocimos una carta en contra de cuarenta y cinco intelectuales, entre laicos y religiosos, muy fundamentada, que se posicionaba claramente en contra. Hace apenas unos días conocíamos los criterios de interpretación lanzados por los obispos de la región eclesiástica de Buenos Aires, y el aval del papa Francisco a la misma. Pues pareciera que todo claro, tanto que incluso algún arzobispo español ha declarado solemnemente en la web de su arzobispado que si, que amén, y que esa es la interpretación válida de Amoris Laetitiae.
De nuevo je, porque los obispos de Alberta y Northwest Territory, en Canadá, interpretan la cosa de manera diametralmente opuesta a sus hermanos de Buenos Aires, y tan obispos son unos como los otros. Y todo esto a la espera de más que va a salir y de instancias de cierta altura.
En otros tiempos, algunos hubieran hablado de madurez eclesial, sentido crítico, legítima pluralidad, apertura evangelica y sensus fidelium. Más aún, las discrepancias provenientes de mitradas testas hubieran sido presentadas como opiniones de obispos tan obispos como el de Roma. Pero ¡ay Señor! han cambiado los tiempos y hoy discrepar de algunas cosas del papa Francisco es sinónimo de disidencia, infidelidad al sucesor de Pedro y voluntad de dinamitar la iglesia desde dentro.
Vistas como están las cosas, más nos hubiera valido que el sínodo y el post sínodo hubieran sido solo un sueño, que aquí no ha pasado nada y que yo no recuerdo nada sobre la familia en los últimos años. Pero no. Queríamos lío y ahí lo tenemos, pero lío del malo: follón, jaleo, división, discrepancia, oposición y tú más.
A estas alturas de la película lo único que digo es que se ha liado. Que esto no es bueno, que tanto jaleo no hay quien lo aguante y que vaya papelón nos dejan a los curas, porque se nos han dado argumentos para que, se haga lo que se haga, todo sea igualmente válido y todo tenga sus apoyos episcopales, una cosa y la contraria. A lo mejor eso es el evangelio. ¡Ay!
74 comentarios
En Roma querían "lío", pero éste tipo de "lío" le va a costar muy caro.
Satanás a metido un gol impresionante.
¿Qué nos dice; Que haría usted en el caso que un o una de estos divorciados se acercaran al sacramento de la Comunión?
¿Y quién peca más: El que como en este caso comulga indignamente, O el, pastor sabedor en cuestión, que se presta a que se consuma este sacrilegio?
El cura "garganta profunda" de El Plural duda de que el arzobispo toledano no sea conocedor del estado civil de Cospedal ya que es "es vox populi que la señora presidenta tuvo un hijo por fecundación in vitro, es divorciada y su esposo, también" y además se atreve a pronosticar que si "don Antonio (Cañizares) o don Marcelo (cardenal primado fallecido en 2004) hubieran estado en la catedral el jueves, le hubieran negado la comunión como cuando don Marcelo lo hizo con la nieta de Franco en la primera comunión de sus hijos".
No, el que ha conseguido que esa confusión y división halla sido reconocida por todos. La confusión y división hace décadas que estaba allí y además creciendo cada vez más. en todas sus facetas.
Si a principios del s.XXI se admitían dos tendencias principales en la Iglesia (conservadora y progresista), pero que, todavía la conservadora mantenía el control de las cosas. Con estos documentos papales lo que se demuestra es que cada uno dice lo que le parece.
El conservador de ayer, ya no lo es tanto hoy, o si, según se levante, y el antipapa de la semana pasada hoy es un papólatra para según qué cosas.
La culpa no la tiene el sínodo, ni las encíclicas del Papa. Ni es algo que lleva ocurriendo desde que Francisco es Papa. Lo que ocurre es que Francisco está destapando y mostrando lo que antes estaba escondido.
Está forzando de manera indirecta a que cada uno se posicione, y vaya, ¡sorpresa! lo que sale no nos gusta, porque la torre de Babel parece un reloj suizo al lado del espectáculo que estamos viendo.
Y me pregunto, ¿qué se esperaba?. ¿No es acaso lo que se ha estado viviendo durante décadas en la iglesia?.
¿Acaso no se han estado celebrando, tolerando y hasta aprobando liturgias que unos creen muy santas y otros heréticas?
¿Acaso los feligreses no se han ido encontrado parroquias donde se les negaba un sacramento y en otras ni les solicitaban el más mínimo papel?
¿Acaso la doctrina social de la Iglesia es mencionada en según que ambientes?
Así, en todas las facetas y enseñanza de la Iglesia. ¿De verdad Vd. piensa que la moral sexual de la Iglesia ha sido enseñada más o menos igual en todas partes?. ¿De verdad Vd. cree que solo era un problema de los sectores eclesiales "disidentes"?
Desde que me alcanzan los recuerdos, no hay una sola coma del Magisterio de la Iglesia en el que hay visto una fuerte unión eclesial.
También comprendo que es duro apoyar a un obispo como el de Granada - teniéndole como bastión de la doctrina, etc y etc..- y que luego nos salga con que asume algo que hace cinco años esta página web hubiera declarado sin ningún resquicio como inadmisible.
Pero es lo que hay.
1. El Sínodo de las Familias se pensó el 2013, se desarrolló el 2014-2015 y se documentó el 2016 con Amoris laetitia.
2. La Amoris laetitia propone en sus numerales 299 y 300, junto con el 305 y nota 351, que los adúlteros pueden participar en los ministerios laicales y recibir la comunión y la absolución.
3. Lo anterior va contra el numeral 1650 y 84 del Catecismo y la Familiaris consortio.
4. El Catecismo es de superior jerarquía normativa que Amoris laetitia, dado que es la única verdadera enseñanza oficial de la Iglesia y fue aprobado por una Constitución Apostólica.
5. Se va perfilando con la toma de postura de los obispos del mundo (Alberta, Granada, Buenos Aires) una división profunda de la Iglesia en el tema de la comunión de los adúlteros, almenos entre dos tipos de Iglesia: la Iglesia verdadera y la Iglesia cismática. Y quizás, en lo profundo, aparece una segunda cabeza de la Iglesia cismática: una falsa Iglesia que aparenta ser verdadera pero es cismática.
7. En mi opinión, la responsabilidad de Amoris laetitia reside en el primer círculo teológico de Francisco, dado que es imposible que él haya redactado un documento de 56.600 palabras.
8. El silencio de Francisco puede interpretarse en el sentido de que responde a una posible estrategia de no definirse para no romper él la Iglesia con un pronunciamiento explícito, dado que si confirmara la imposibilidad de la comunión de los adúlteros o se decantara por lo contrario, entonces causaría un cisma con un cruce de excomuniones, abriendo un período de grave confusión en la Iglesia.
9. Todos obispos de la Iglesia verdadera, tradicional y moral según la doctrina, deben de ayudar a Francisco de una manera muy fácil y sencilla, tal como lo han hecho los de Alberta: decretar solemnemente que la verdadera doctrina de la Iglesia sobre la comunión y la confesión de los adúlteros es la contenida en los numerales 1650 y 84 del Catecismo y de la Familiaris consortio.
10. La finalidad última y suprema de la comunión de los adúlteros es la destrucción de la Eucaristía, dado que si los que han celebrado un matrimonio sacramental válido, rato, consumado, separado, divorciado, sin reconciliación posible, con segundo matrimonio civil, y con práctica activa y habitual de actos maritales (convivencia more uxorio) que son un acto intrínsecamente perverso y malo, entonces implicaría la apertura de la comunión y de la absolución al resto de pecadores mortales.
“Esta carta versará sobre la virtud de la obediencia. Uds. pueden saber más que yo acerca de ella, y la Carta de N P a los de Coímbra es un tratado completo. Pero puede no ser superfluo refrescar algunos conceptos de ella, basándose en la doctrina de Santo Tomás y la Escritura. Estos conceptos son: la obediencia religiosa está enderezada a la perfección evangélica; sólo puede producirse en el clima de la caridad; y el abuso de la autoridad no solamente la hace imposible, sino que constituye una especie de profanación o sacrilegio.
La definición de "obediencia" de Santo Tomás es "oblación razonable firmada por voto de sujetar la propia voluntad a otro por sujetarla a Dios y en orden a la perfección".
Esta definición contiene claramente los límites de la obediencia porque no hay que creer, A. H., que la obediencia es ilimitada. Todo lo ilimitado es imperfecto. La obediencia religiosa es ciega, pero no es idiota. Es ciega y es iluminada a la vez, como la fe, que es su raíz y fuente. Sus dos límites son la recta razón y la Ley Moral. Ambos límites están también fijados por San Ignacio al afirmar a una mano que físicamente es imposible asentir a algo absurdo, y a otra, que no hay que obedecer cosa en que se viese pecado, no ya mortal solamente, sino de cualquier clase. No se puede ejecutar virtuosamente ninguna cosa donde exista la más mínima porquería, relajamiento, vileza o claudicación moral.
¡No podemos salvarnos al tenor de la conciencia de otro! ¡No podemos eximirnos de discriminar exactamente con nuestra razón el bien y el mal moral, uno para tomarlo y otro para lanzarlo! ¡No puede ser nuestro guía interior la razón ajena: los actos morales son inmanentes y su “forma” es la racionalidad! Si bastara para salvarse hacer literal y automáticamente lo que otro nos dice ¿cuál sería entonces la función de la fe, de la oración, de la meditación, de la dirección espiritual, del examen y del estudio?”
Se sabe cuál es la doctrina católica y no es la que propaga Francisco
Si el post hubiera sido sobre el proceso de Nüremberg, en el que la frase más repetida fue "yo obedecía órdenes" y yo cito este comentario de Agustín, gringo habría reaccionado con grandes aspavientos,sofocos y un inadecuado desplazamiento de su supuesto tricornio.
En una cocina, hay tres cosas difíciles de ocultar: El humo, la tos, y la verdadera intención de los comentarios de gringo.
Es la última vez que le honro con una referencia a su hipocresía mal disimulada.
Lucas 16; 17-18: Más fácil es que el cielo y la tierra pasen, que no que caiga un ápice de la Ley.
Todo el que repudia a su mujer y se casa con otra, comete adulterio; y el que se casa con una repudiada por su marido, comete adulterio.
Gálatas 1; 8-10 Pero aun cuando nosotros mismos o un ángel del cielo os anunciara un evangelio distinto del que os hemos anunciado, ¡sea anatema!
Como lo tenemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os anuncia un evangelio distinto del que habéis recibido, ¡sea anatema!
Porque ¿busco yo ahora el favor de los hombres o el de Dios? ¿O es que intento agradar a los hombres? Si todavía tratara de agradar a los hombres, ya no sería siervo de Cristo.
La confusión, el relativismo y la manipulación ya están desde mucho antes en la Iglesia, no han aparecido a causa de Amoris Laetitia. En ese sentido, los dos sínodos han ayudado a hacer más evidente esa confusión, relativismo y manipulación, lo que es bueno, pues ayuda a estar alertas y combatirlo.
Las cartas de los obispos de Buenos Aires y de los obispos de Alberta no son diametralmente opuestas, de hecho no se oponen en nada. La diferencia está en que los obispos de Buenos Aires tocan el tema del discernimiento, que está presente en el capítulo VIII, que pastoralmente es muy importante y necesario, y doctrinalmente está perfectamente integrado en la enseñanza de la Iglesia, por ejemplo el numeral 1860 del Catecismo. Los obispos de Alberta prefirieron obviarlo en su carta, tal vez porque consideran más apropiado tratarlo en otra instancia con sus sacerdotes, pero no tener en cuenta la necesidad de ese discernimiento es una falta de caridad, como también lo es la de provocar escándalo con respecto a la indisolubilidad del matrimonio, u omitir el deber de formar adecuadamente la conciencia de los fieles con respecto al sexto mandamiento.
Y para acabar con la primera nota de la Iglesia: una.
Ya no hay una Iglesia católica sino tantas como Conferencias episcopales interpreten a su modo lo que el nefasto Capítulo VIII permite: la comunión de los adúlteros sin continencia ni propósito de enmienda.
La obediencia cesa cuando el que manda ordena algo contra la moral, la fe, el magisterio de la Iglesia o promueve el pecado.
Ya no se permiten las ordalías como antaño, pero !vive Dios¡ que la cuestión actual lo merecería si fuesen vigentes ahora tales juicios de Dios.
De una parte, por ejemplo, el cardenal Kasper, como campeón de la causa pro comunión en pecado de adulterio, y de otra cualquier fiel piadoso y rigorista contrario a tal cosa, y el que quedase indemne del paso del fuego, sin más disputas ni líos resolvería la cuestión.
Bueno, eran otros tiempos, y ahora nos tendremos que acostumbrar, quiera Dios que no sea por largo tiempo, a esta caótica situación. Tal vez sería conveniente hacer un mapa eclesial en el que quedasen marcadas en color rojo las Diócesis pro comunión sacrílega y en azul las pro comunión santa y conforme al Depósito de la Fe, para saber por que territorio de la Iglesia andamos y a qué atenernos en cada sitio.
Pues sí, presbítero Don Jorge, ha descrito Vd. magníficamente la situación: Estamos en un buen lío eclesial. Que San Miguel Arcangel y toda la corte celeste nos asista.
EL ARZOBISPO FULTON SHEEN DIJO EN 1950:
“Estamos viviendo en los días del Apocalipsis, los últimos días de nuestra era. Las dos grandes fuerzas del Cuerpo Místico de Cristo y el Cuerpo Místico del Anticristo están empezando a elaborar las líneas de batalla para el concurso catastrófico.”
También dijo: “El Falso Profeta tendrá una religión sin cruz. Una religión sin un mundo por venir. Una religión para destruir las religiones. Habrá una iglesia falsa. La Iglesia de Cristo (la Iglesia Católica) será una. Y el Falso Profeta va a crear otra. La falsa iglesia será mundana, ecuménica y mundial. Va a ser una federación de iglesias. Y las religiones formarán algún tipo de asociación global. Un parlamento mundial de iglesias. Vaciadas de todo contenido divino y será el cuerpo místico del Anticristo. El cuerpo místico en la tierra hoy tendrá su Judas Iscariote, y él será el falso profeta. Satanás lo reclutará de entre nuestros obispos.”
En su libro titulado El comunismo y la conciencia de Occidente, el Arzobispo Fulton John Sheen advirtió que: «El Anticristo no será llamado así; de lo contrario, no tendría seguidores. Él no va a usar medias rojas, ni vomitará azufre, ni va a llevar un tridente ni agitar una cola con forma de flecha como Mefistófeles en el Fausto. Esta mascarada ha ayudado a convencer a los hombres que él diablo no existe. Cuando nadie lo reconoce, más poder él ejerce. Dios se ha definido a sí mismo como «Yo soy el que soy», y el diablo como «yo soy el que no soy».
En ninguna parte de la Sagrada Escritura hallamos justificado el mito popular de que el Diablo es un bufón que se viste principalmente de "rojo". Más bien se le describe como un ángel caído del cielo, como "el príncipe de este mundo", cuya misión es que nos diga que no hay otro mundo. Su lógica es simple: si no hay cielo no hay infierno, y si no hay infierno, entonces no hay pecado, y si no hay pecado, entonces no hay ningún juez, y si no hay juicio entonces el mal es bueno y lo bueno es malo. Pero por encima de todas estas descripciones, Nuestro Señor nos dice que va a ser tan parecido a sí mismo que engañaría aun a los escogidos, y, ciertamente, ninguna imagen del diablo visto en libros jamás podría engañar aun a los escogidos. ¿Entonces cómo va a entrar en esta nueva era para ganar adeptos a su religión? La creencia de Rusia pre-comunista es que él vendrá disfrazado como un Gran Humanitario; él hablará de paz, de prosperidad y de abundancia no como medios para llevarnos a Dios, sino como fines en sí mismos.
La tercera tentación en la cual Satanás tentó a Cristo para adorarlo y que todos los reinos de la tierra serían suyos, se convertirá en la tentación de tener una nueva religión sin una cruz, una liturgia sin un mundo por venir, una religión para destruir la religión, o una política que es una religión una que hace que se le dé al César, incluso las cosas que son de Dios.
En medio de todo su amor aparente para la humanidad y su verborrea de la libertad y la igualdad, tendrá un gran secreto que él no le dirá a nadie: él no va a creer en Dios. Debido a que su religión será la hermandad sin la paternidad de Dios, va a engañar aun a los escogidos. Él creará una anti-iglesia que será el mono de la Iglesia, porque él, el diablo, es el mono de Dios. Contará con todas las notas y características de la Iglesia, pero a la inversa y vaciado de su contenido divino. Será un cuerpo místico del Anticristo que en todas las cosas externas se parecerá al cuerpo místico de Cristo.
Pero el siglo XX se unirá a la anti-iglesia porque afirma ser infalible cuando su cabeza visible habla ex cathedra, de Moscú sobre el tema de la economía y la política, y como pastor principal del comunismo mundial. (Arzobispo Fulton J. Sheen, tomado del libro: “El comunismo y la conciencia de Occidente. (pág 24-25).
Leo sus artículos o post, me gustan, algunos echan chispas, ¿no siente miedo o reparos? Que el Señor le bendiga y le guarde.
Paz y Bien.
Y ha llovido desde entonces. Nihil novum sub sole.
Me hace gracia lo de las disidencia, y lo de volar la Iglesia desde dentro. Sobre todo cuando viene de algunos que llevan años en ello. Apártate de que me tiznas dijo la sartén al cazo.
El problema no es de obediencia o de desobediencia. El hecho de que haya cada mes un documento nuevo, algunos de conferencias episcopales o teólogos pontificios, haciendo interpretaciones de la exhortación, y que lleguen a conclusiones tan dispares, nos da la clave del problema.
Es un documento confuso y ambiguo. Precisamente lo opuesto de lo que debe ser una carta que pretende instruir y enseñar.
En cambio, se acomoda muy bien a un programa político para elecciones legislativas, o presidenciales, o algo así.
Esa tara acompañará a AL para siempre, y a la vuelta de unos años habrá provocado su total devaluación. Será olvidado, o corregido, o aclarado por un documento mejor.
Ahora discutimos sobre qué diablos quiere decir AL. Nuestros hijos no lo harán.
Eso sí, mientras tanto habremos perdido un poco más de tiempo alejados del objetivo de la Iglesia.
Obediencia, sí, pero no obediencia ciega. Hay que obedecer a Dios antes que a los hombres (Hechos 5:29). Quién obedezca al error caerá al hoyo, así que hay que estar bien despiertos tal como nos dijo Jesucristo, "sean mansos (que no mensos) como palomas, pero astutos como serpientes". Cristo hablaba muy claro, y nos lo pide también a los demás "que tu palabra sea sí sí o no no...". "Cuidaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos los conoceréis".
Bula “Cum ex apostolatus officio”, de Paulo IV: “Si en algún tiempo aconteciese que un Obispo… o electo Pontífice Romano que antes de su promoción al Cardenalato o asunción al Pontificado, se hubiese desviado de la Fe Católica, o hubiese caído en herejía, o incurrido en cisma, o lo hubiese suscitado o cometido, la promoción o la asunción, incluso si ésta hubiera ocurrido con el acuerdo unánime de todos los Cardenales, es nula, inválida y sin ningún efecto…”.
Santo Tomás Cayetano, O.P. Teólogo y Cardenal señala que el famoso axioma “Ubi Petrus, ibi Ecclesia” (Donde esta Pedro esta la Iglesia) es válido sólo cuando actúa y se comporta como un Papa, porque Pedro “está sujeto a los deberes de la Oficio” de otra manera, “tampoco ni la Iglesia está en él, ni él está en la Iglesia.”
“San Roberto Belarmino, cardenal y Doctor de la Iglesia, De Romano Pontifice, II, 30: "Un papa que se manifieste hereje, por ese mismo hecho (per se) cesa de ser papa y cabeza, así como por lo mismo deja de ser un cristiano y miembro de la Iglesia. Por tanto, él puede ser juzgado y castigado por la Iglesia. Esta es la enseñanza de todos los Padres antiguos, que enseñaban que los herejes manifiestos pierden inmediatamente toda jurisdicción".
San Antonino (1459): “En el caso en que el Papa se convirtiera en un hereje, se encontraría, por ese solo hecho y sin ninguna otra sentencia, separado de la Iglesia. Una cabeza separada de un cuerpo no puede, siempre y cuando se mantenga separado, ser cabeza de la misma entidad de la que fue cortada. Por lo tanto, un Papa que se separara de la Iglesia por la herejía, por ese mismo hecho en sí, dejaría de ser la cabeza de la Iglesia. No puede ser un hereje y permanecer siendo Papa, porque, desde que está fuera de la Iglesia, no puede poseer las llaves de la Iglesia” (Summa Theologica, citado en Actes de Vatican I. V. Frond pub.).
S.S. León XIII, Papa: “Retirarse ante el enemigo o callar cuando por todas partes se levanta un incesante clamoreo para oprimir la verdad, es actitud propia o de hombres cobardes o de hombres inseguros de la verdad que profesan. La cobardía y la duda son contrarias a la salvación del individuo y a la seguridad del Bien Común, y provechosas únicamente para los enemigos del cristianismo, porque la cobardía de los buenos fomenta la audacia de los malos. El cristiano ha nacido para la lucha”.
El Evangelio, el Catecismo y el Magisterio de la Iglesia por estos dos mil años. Nadie puede contrariar esto. Dios no se muda, es el mismo ayer, hoy y siempre. Ya lo dijo Jesucristo, ay de aquel que cambie ni una coma...
Con AL Francisco no ha querido hablar claramente para NO ser considerado hereje y ha dejado un texto ambiguo de una manera intencionada, cuando en el avión se le preguntó sobre la interpretación de AL, remitió a la explicación dada por el cardenal de Viena (.aica.org/22785-el-papa-recomienda-leer-la-presentacion-del-card-schonborn-sobre.html) y ahora tampoco habla abiertamente sino que respalda la interpretación de los obispos de Buenos Aires sobre el tema, "sabe bien nadar y guardar la ropa". Yo también era de las que no osaba criticar a un Papa, y cuando Francisco salió elegido me encantaba su humildad y sus detalles, pero cuando veo que en sus vídeos no aparece Dios por ninguna parte, sino un humanismo o un ecologismo, y cuando veo que pretende dar el Cuerpo de Cristo a personas en pecado grave no puedo sino denunciarlo, tengo suerte de NO ser sacerdote porque difícil papel les veo en estos momentos. Pero de Dios no se ríe nadie y el que coma y beba el Cuerpo de Cristo indebidamente come y bebe su propia condenación, lo malo es que sean los que deben custodiarlo quienes lo van a profanar de esa manera.
Sería interesante abrir una encuesta entre todos los católicos, a ver si tenemos claro cual es el objetivo de la Iglesia. Posiblemente, mucha gente diría que "ayudar a los pobres" es su principal función; según s. Mateo, la misión de la Iglesia es : "Vayan y hagan a todas las gentes mis discípulos, bautizándoles en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo, y enseñándoles a poner en práctica todo lo que yo les he mandado" (cito de memoria, pero más o menos). Así que si la enseñanza de lo que nos dijo Cristo no es clara, ya estamos fallando en el objetivo de la Iglesia. No es verdad que un documento eclesial poco claro sea inocuo.
- Feri del Carpio Marek. Ese discernimiento del que hablan la Amoris Leticia, los obispos argentinos y ud. me parece más dificil de hacer (sin incurrir en injusticias) que hablar con claridad de física cuántica. Igual que no se pueden saber con exactitud las propiedades físicas de las partículas cuánticas, tampoco se puede saber con claridad la culpa interna de la otra persona, que es lo que se tiene que discernir. ¿Cómo, si el interior lo ve sólo Dios? El sacerdote tendrá que hacer un acto de fe en lo que le dicen las personas... y ¿por qué creer en la culpa de uno y en la inocencia de otro, sólo por lo que me digan? ¿El discernimiento dependerá de: lo bien o lo mal que le caigan al cura; de lo bien o lo mal que se exprese o sepa mentir la pareja; de las pruebas que pueda presentar... o no... de su fuero interno?
Igual que las partículas cuánticas a veces están y a veces no, el discernimiento de estos casos va a acabar siendo: "tú si; tú no".
Creo que debemos reconocer sin aspavientos ni histerismos la cruda realidad de que tenemos un Papa incurso en herejía. Permitir, aunque sólo sea en algunos casos especiales, que reciban la comunión eucarística los que están es situación objetiva de pecado grave va contra el Depósito bimilenario de la Fe. El que indignamente come el Cuerpo de Cristo y bebe su Sangre, está comiendo y bebiendo su propia condenación.
Parece que el punto álgido y conflictivo está principalmente centrado en la comunión de los divorciados vueltos a casar.
No digo que la cuestión no tenga su importancia, pero puestos a meternos en estos jardines también habría que preguntarse ¿pueden comulgar los que no comparten sus bienes? Porque aquí comulgan ricos, pobres y medianos sin que nadie analice ni se escandalice.
¿Y las palabras de Jesús que dicen "que el que no renuncie a sus bienes no puede ser discípulo mío"? ¿puede (o podemos) comulgar sin haber renunciado a nuestros bienes?
Y ahora vienen las tropecientas interpretaciones que se han hecho con el tema este de los dineros de los cristianos "se puede ser rico y no tener el corazón apegado al dinero", "depende de como se utilice", o "depende de la cantidad".............parece que en esto todo es relativo, interpretable, y yo diría también confuso.......sin que nadie se preocupe mucho.
Esto no suscita escándalo ni polémica, mientras que la comunión por cuestiones sexuales pues sí. No lo acabo de entender, el porqué unas cosas tanto y otras tan poco.
Y que conste que no apruebo la comunión de los divorciados vueltos a casar; pero ¿y lo otro? Porque Jesús también es muy radical con el tema del "money".
Que alguien me lo explique, porfa. Porque hasta ahora lo que he oído sobre este asunto no me convence.
"Vengo pronto. CONSERVA lo que tienes" (Ap. 3,11)
Discutir sobre novedades sólo lleva a perdernos en discusiones inútiles o perdernos en algo peor. Aferrarnos a la sólida doctrina de la Biblia, la Tradición y los Padres no sólo es pisar sobre terreno seguro; es una obligación impuesta por el Señor, que por supuesto conocía a qué estado de desconcierto doctrinal y moral iba a llegar su Iglesia poco antes de su segunda venida.
El tema de los bienes como el del concubinato está muy claro. Son temas que el Magisterio de la Iglesia hace siglos que dejó zanjados.
No es fácil explicarlo en un post porque tu duda toca muchos ámbitos que se nota que desconoces. Por eso, antes de decir nada es mejor que expliques de donde te viene la duda de esa renuncia a los bienes de forma generalizada, y no planteas la misma duda con el tema de la mujer y los hijos, o el del hombre que quiere enterrar a su padre y parece que no puede hacerlo si quiere ser cristiano.
Por no hablar de que por esa misma regla de tres tods tendríamos que habernos arrancados los ojos hace tiempo....
¿De donde me viene la duda de esa renuncia a los bienes de forma generalizada? Lee Lc, 14, 33 , así como de otros pasajes donde aparece el desapego TOTAL a todo tipo de riqueza.
¿Que a lo largo de la historia esto se ha interpretado de cien formas? Por supuesto que sí. Hasta el punto de hablar de diferentes grados de pobreza, según el estado de vida que tengas. O sea, interpretación.
Cuando Jesús dice que "todo aquel que mira con deseo a una mujer casada ya ha cometido pecado en su corazón", por supuesto que también es muy radical; pero tanto como cuando habla de los bienes o riquezas. Pero en este caso parece que lo "interpretamos" menos.
Ahí voy yo ¿porque unas cosas sí y otras no?.
Tenemos los católicos hoy día un serio problema, pues un Papa progre modernista ha sido colocado en el Solio de Pedro.
Roberto: estoy contigo que también habría que plantear la cuestión de la riqueza excesiva para poder comulgar (no me resulta creíble que alguien muy rico esté haciendo todo lo posible por los pobres con su riqueza). Pero son temas distintos. El adulterio no es un tema sólo sexual, sino que va más allá. Renunciar a la riqueza está expresado en el evangelio de la misma manera que el renunciar a los afectos (padre, madre, esposa, hijos), que no es abandonarlos sino poner a Dios en primer lugar. En cuanto al adulterio, Jesús habla en otros términos más tajante: el que abandona a su conyuge y se va con otro comete adulterio. El adulterio es un pecado; la pobreza es un consejo evangélico. Es distinto.
- JOSE IGNACIO LESACA: A mí no me parece fácil, y también he leído varias veces ese capítulo. Más bien, si no se aclaran las cosas y se deja al arbitrio de un imposible discernimiento de cada sacerdote, me parece que se abre la puerta a unas situaciones, cuando menos injustas. Injusta para el que quede con el "No" del cura; injusta para los hijos y el conyuge anterior, (que también tiene derecho a arrepentirse, incluso aunque hubiera sido culpable de la ruptura); injusta para tantos matrimonios que luchan durante tantos años de forma heroica, por el bien de su matrimonio y de sus hijos; injusta para tantos que han aceptado de la Iglesia el separarse y el vivir como hermanos, porque entienden que la Iglesia es Madre. Injusta, en fin, para tantos sacerdotes que han acompañado el dolor de tantas parejas diiéndoles que no pueden comulgar, entendiendo que lo que dice la Iglesia y Cristo es lo mejor para ellas, sin tirar por el camino fácil, que es darles la comunión.
Y San Pablo nos dice que "si alguien tiene bienes de este mundo y viendo a su hermano pasar necesidad le cierra sus entrañas, ¿cómo puede morar en él la caridad de Dios?"
Y San Jerónimo llega a decir que "el rico o es un ladrón o un heredero de ladrones." Terribles palabras.
Pero vamos a ver, existe la posibilidad de que exista un papa hereje¿? A mí no me gustó desde un principio, porque relaciona pobreza con humildad y eso es un error grave, a mi parecer. Desde el primer momento siempre ha andado con ese rollo infumable progresista pseudocristiano.
Ahora bien, qué ocurre cuando un papa incurre en herejía, es eso posible¿? Actuó mal el espíritu santo en su elección??? es legítimo? Me gustaría que respondieran.
Por otra parte, quién juzga en la tierra al papa de hereje, si no tiene superior?? O vamos a volvernos conciliaristas?
Yo por mi parte siempre bajo Pedro, aunque Pedro no sea digno de serlo, ya se le juzgará, pero le debo obediencia, es la cabeza de la iglesia, vicario de cristo y sucesor de Pedro, ya vendrán tiempos mejores, lo bueno es que los papas suelen ser de avanzada edad.... aunque viendo a los cardenales...
JMRJ
(sin ánimo de contradecir a S. Agustín, pues uno es uno y su circunstancia)
En este caso podemos decir que cabe la posibilidad de que el Papa sea materialmente hereje. En todo caso es una posibilidad solamente.
Otra cosa es la herejía formal. Por ejemplo, que Francisco dijera abiertamente que la Iglesia va a dejar de evangelizar a hombres de toda raza,'pueblo y nación porque ahora eso del proselitismo va contra Cristo.
En el caso de herejía formal dejaría ipso facto de ser Papa, vale... Pero ¿qué significa eso exactamente? Ahí hay muy diversas opiniones y la más probable es que, pese a todo, mantuviese su munus de gobierno y jurídico, lo cual implica que ni aún en el caso de herejía formal podría ser depuesto. Situación complicada ciertamente.
Francisco es el Papa, guste o no. Cabe la posibilidad de que sea materialmente jereje, quizás como el obispo de tu diócesis o tunpárroco, pero no ha proclamado formalmente ninguna herejía, ni ex cathedra ni en magisterio ordinario, aunque sí en un documento privado. ¿Y? ¿Nos hacemos ortodoxos, o coptos, o agnósticos?
Al Papa no lo elige Dios, sino un Cónclave. La elección del Papa no es infalible y el Papa como persona tampoco es infalible. Sólo es infalible el EJERCICIO del Primado de Pedro en circunstancias muy concretas y restrictivas, entre ellas la COMUNIÓN con el colegio episcopal. Y esto NO es conciliarismo, sino la FE de la Iglesia.
Te hice esa pregunta porque tu modo de aprender doctrina es protestante. Por eso no lo entiendes.
Perdona que sea directo, no pretendo ofender, ni pasarme de listo, pero tú mismo me dices que lea tal o cual o que esto se ha interpretado de mil formas a lo largo de la Historia.
El católico puede y debe leer la Biblia, pero no tiene libertad para interpretarla. La interpretación de las Escrituras es potestad del Magisterio.
El Magisterio, una vez que se define de forma definitiva en una tema, ya no cambia. No cabe entonces aquello de las "mil interpretaciones". Sobre este asunto hay que estudiar la Doctrina Social de la Iglesia:
vatican.va/roman_curia/pontifical_councils/justpeace/documents/rc_pc_justpeace_doc_20060526_compendio-dott-soc_sp.html
Como ves, tu respuesta no cabe en un post.
Recuerda que ha habido muchos hombre ricos y poderosos que han sido santos, empezando por Abraham e incluyendo a varios reyes de todas las épocas.
Sí, ya se lo del Magisterio y conozco la Doctrina Social de la Iglesia (que por cierto, no crea tantas problemáticas como los temas de moral sexual; ¿por qué será? no lo sé; o miento, si que lo sé; porque a la DSI se le da menos importancia y relevancia que a la moral sexual. Es así, y también está menos difundida, por cierto).
Al final, me quedo un poco como al principio.
"Obedece más a los que enseñan que a los que mandan".
S.Agustín
Curioso, resulta que el propio S.Agustín reconoce que puede haber más de uno mandando, y que por tanto se hace necesario seleccionar a quién se obedece, o lo que es lo mismo, se hace obligado desobedecer a alguien.
Porque la obediencia es obligada, pero eligiendo bien a quién se obedece, que no se nos pide ser tontos.
Por su parte, Bruno M., en blog de Catholic.net, señala cuatro matizaciones a la cuestión, que de algún modo perfilan el asunto, diría que con acierto desigual. Afirma este en su blog:
1- La obediencia cristiana nunca puede ir contra la ley de Dios.
2- La obediencia cristiana nunca puede ir contra la propia conciencia.
3- La obediencia cristiana tiene sus propios ámbitos, que no puede sobrepasar.
4- La doctrina y la moral no son objeto de obediencia, sino más bien de fe.
Para contextualizarlas, enlazo la página en caché de Google, ya que no parece estar online:
webcache.googleusercontent.com/search?q=cache:qZWsKXle_ncJ:es.catholic.net/op/articulos/56320/enviado56320.html+&cd=1&hl=es&ct=clnk&gl=es
El primer matiz está claro: quien manda es Dios y no se puede obedecer en su contra. Imagino que no habrá objeciones a este punto.
La segunda tiene sus dudas, ya que la propia conciencia solo es guía fiable cuando está bien formada. Hoy abundan quienes tienen por "conciencia" un conjunto de convenciones sociales más o menos criminales (como el aborto, por ejemplo, que algunos apoyan apelando a la "conciencia"), y a estos no puede aplicar este matiz. En cambio, una conciencia que no haya sido corrompida sí es guía fiel, previo discernimiento, y como tal debe negarse obediencia en su contrario, oponiendo la objeción de conciencia.
La tercera parece inicialmente clara, en tanto se ejemplifica con un caso absurdo (que el párroco ordene la marca de coche que hemos de comprar), pero esto es solo apariencia: normalmente nuestras acciones no tienen tienen solamente consecuencias inmediatas, sino que hay también otras que son más indirectas, menos evidentes, y que plantearían más dudas morales si se considerasen. De ahí que el ámbito de lo que es ordenable, y a lo que por tanto se debe obediencia, también puede ser algo difuso, habiendo razones no evidentes para la obediencia en cuestiones que, a priori y con una visión superficial, cabría considerar fuera del ámbito de la obediencia cristiana (pongamos por caso que no hay por qué obedecer al párroco en la marca de un coche, pero sí en el rechazo de un empleo que obligue a algo inmoral).
La cuarta es directamente falsa: la doctrina y la moral es Ley, y por tanto objeto de obediencia cristiana (la falacia del enunciado está en que se refiere a la "obediencia cristiana", que presupone una fe, de modo que el enunciado es circular y acaba diciendo que la doctrina y la moral son subjetivas -no sujetas a obediencia-, lo cual es falso). Así, la obediencia es obligada no solo a la doctrina y la moral reveladas sino también al Magisterio de la Iglesia y a la Tradición que lleva dos milenios clarificando, depurando y precisando. Por tanto, el problema no sobreviene a la hora de obedecer o no obedecer, sino a la hora de elegir entre dos obediencias contrapuestas, como sucede ahora con, de un lado, "la única interpretación posible" que dice el Papa en una carta privada (que no es un texto pastoral, magisterial, ni nada de nada), y del otro lado con los dos milenios anteriores de Biblia, Papas, Doctores, Concilios, Encíclicas, dogmas, tradiciones, etc.
Obedecer esa "única interpretación posible" de los obispos de Buenos Aires es, exactamente, una "hermenéutica de la ruptura", que es la que NO se debe seguir (en palabras de Benedicto XVI), mientras que seguir las orientaciones de los obispos de Alberta es una "hermenéutica de la continuidad", que es la adecuada.
PD: Señalo algo que, aunque evidente, no sé hasta qué punto se ha tomado en consideración:
Es evidente que AL tiene varias interpretaciones posibles, y de hecho distintos obispos y teólogos exponen esas diversas interpretaciones. Así pues, la frase del papa afirmando que una interpretación concreta es "la única interpretación posible" es simplemente falsa en sus propios términos, como la evidencia demuestra.
Un saludo.
No se puede comulgar en SITUACIÓN OBJETIVA DE PECADO. Otra cosa es que cada uno coja la vara y vaya decidiendo que menganito o zutanito son muy pecadores, y si yo que me acuesto con una que no es mi señora pero nos queremos mucho no podemos, ellos tampoco pueden (ale, ale y ale, falta decir). Luego a decir a los demás que se miren la paja en su ojo...
La teología es una cosa seria, porque nos jugamos la salvación. No se trata de quien puede consumir una tortilla seca o no puede, sino de comer nuestra propia perdición eterna si comulgamos sacrílegamente, Roberto. Eso es muy grave. No es una coña para cometarios de papel couché.
Jesucristo, y por supuesto la Iglesia, han determinado los pecados graves que rompen la relación con Dios de forma total, y entre ellos están el adulterio, el robo o el homicidio.
Sí, si el cura sabe que quien se acerca a comulgar es ladrón o asesino y no ha regularizado su situación con Dios por el sacramento de la reconciliación bien hecho (contricción, confesión de culpa, dolor de los pecados, penitencia, etc), NO DEBE DARLE LA COMUNIÓN. Como a los adúlteros.
Lo que ocurre acá es que mientras los ladrones y asesinos se guardan habitualmente de proclamar públicamente su condición (y si comulgan en esa situación, se condenan, por cierto), los adulteros recasados consideran que, ya que la socedad apóstata aprueba su adulterio, la Iglesia también debe de hacerlo. Y por ende, van públicamente con su pecado a comulgar.
Ese es el asunto. Y esa es la importancia.
Lo de cogerse la Biblia en plan libre examen y decidir quién puede o no comulgar según la interpretación personal de las Escrituras se termina ipso facto: en la Biblia, Cristo no dice nada de quién puede comulgar o no.
Es la Iglesia la depositaria de tal poder. Y lleva 20 siglos enseñando este tema con claridad, contra persecuciones mucho más severas que la actual.
Así que te haces protestante y acabas más pronto que con todas esas disquisiciones interminables.
Si te has leído y estudiado el compendio no deberías tener dudas. Siempre hay una casuística límite que no a todo el mundo le es dado resolver, pero en términos generales, debería serte sencillo comprender por qué tener bienes no es pecado.
Deberías serte sencillo comprender que tener bienes no es sinónimo de tener apego a los bienes, y viceversa, que no tenerlos no significa no tener apego.
Bastante obvio resulta el peligro de las riquezas, pero reflexiona un poco porque me parece que te fijas mucho en otras riquezas y no en la tuya.
Si mañana falleces - Dios no lo quiera - los grandes reyes y emperadores, hombres poderosos de todos los siglos que hayan podido ser condenados por su apego a los bienes y su riqueza podrían clamar ante Dios:
Nosotros fuimos condenados por nuestra riqueza, por cegarnos a las necesidades de los demás, y ¿este, no va a sufrir lo mismo que nosotros?
- ¿Cuándo tuvimos nosotros la variedad de manjares y comida que este compra al lado de su casa?
- ¿Cuándo tuvimos hogares tan confortables, frescos en verano y calientes en invierno a voluntad?
- ¿Cuándo disfrutamos de unos viajes tan placenteros, sin peligros y tan rápidos y pudimos pasar nuestro descanso en tantas partes del mundo?
- ¿Cuándo gozamos de unos médicos tan eficaces, medicina indolora, cirujanos precisos y medicamentos accesibles?
- ¿Cuándo tuvimos ni la décima parte del entretenimiento que ha disfrutado este en su último año de vida?
A nosotros se nos ha condenado por pasar por ricos, pudiendo haber dado la mitad de nuestras riquezas por bienes que ahora disfrutan los pobres de ese mundo.
Y este ¿acaso comparte su confortabilísima casa con los pobres?
¿Acaso renuncia a su médico para curar a otros?
¿Acaso renuncia a su lujoso descanso y a su cómodo transporte?
¿Acaso come todos los días pan con arroz y patatas?
Dime Roberto, entonces tú, ¿Cómo te defenderías?.
Completamente de acuerdo hasta aquí.
"entre ellas la COMUNIÓN con el colegio episcopal"
No, ahí no estoy de acuerdo.
"enseñamos y definimos ser dogma divinamente revelado que el Romano Pontífice, cuando habla ex cathedra, esto es, cuando, ejerciendo su cargo de pastor y doctor de todos los cristianos, en virtud de su Suprema Autoridad Apostólica, define una doctrina de Fe o Costumbres y enseña que debe ser sostenida por toda la Iglesia, posee, por la asistencia divina que le fue prometida en el bienaventurado Pedro, aquella infalibilidad de la que el divino Redentor quiso que gozara su Iglesia en la definición de la doctrina de fe y costumbres. Por lo mismo, las definiciones del Obispo de Roma son irreformables por sí mismas Y NO POR RAZÓN DEL CONSENTIMIENTO DE LA IGLESIA." (mayúsculas mías)
Para usar su autoridad infalible no es necesario estar en comunión con el el resto del episcopado.
"Al Papa no lo elige Dios, sino un Cónclave. La elección del Papa no es infalible"
También es cierto, ya lo dijo BXVI cuando era cardenal. Esa premisa la acepto. No me expresé bien en el anterior comentario, ya que según Ratzinger:
"yo no diría que el Espíritu Santo elige al Papa, pues no es que tome el control de la situación sino que actúa como un buen maestro, que deja mucho espacio, mucha libertad, sin abandonarnos»"
Y
"«hay muchos Papas que el Espíritu Santo probablemente no habría elegido»"
Muy sugerente lo que dices, pero sigo viendo que a las palabras de Cristo sobre está cuestión les ponemos "sordina" (no a otras, claro).
Si lees lo que dicen los Padres de la Iglesia sobre estos temas (algo sabrás porque se te ve una persona formada), una alucina por su radicalismo y determinación por lo que dicen.
Por supuesto que está la cuestión de que ·entendemos por "rico", pero te digo que aunque no me gusta hablar de mis cosas personales por alusiones he de decirte que yo NO he renunciado a todos mis bienes (no se si pocos o muchos), aunque no llevo una vida consumista y lujosa y he dados muchos donativos a través de organizaciones para proyectos de desarrollo y gente necesitada y lo sigo haciendo, no se si poco o mucho. Aunque soy mileurista. Y con un futuro laboral incierto. Ahí lo dejo.
Pero vuelvo a la cuestión anterior, yo no puedo comulgar porque NO soy pobre de verdad, tal como nos pide Cristo a TODOS, creo. Y no juzgo a nadie, cada uno verá lo que hace.
Y sin embargo, NO PUEDO vivir sin EL.
Al margen de todo eso, afirmar que es necesario ser pobre para salvarse o acceder a los sacramentos es una herejía. Desde los valdenses a los fraticcellis, la pobreza evangélica mal entendida lleva a errores muy perniciosos. Hay multitud de bulas papales que explican estas cosas, le aconsejo que las lea para comprender mejor a los padres de la iglesia.
Pablo Velasco ha insistido más sobre el tema. Repito, "Recuerda que ha habido muchos hombre ricos y poderosos que han sido santos, empezando por Abraham e incluyendo a varios reyes de todas las épocas." Se me olvidó incluir a varios Papas y a algún Padre de la Iglesia.
Mira, rondas un peligro serio. El demonio usa de las cosas que nos crean confusión para crear primero desafección y luego rechazo. Del rechazo a un tema particular fácilmente se extiende a otros muchos más, y tu amor a la Iglesia se debilitaría mucho o incluso se rompería totalmente. No sería ni el primero ni el último caso.
Hay que entender que nuestro juicio es falible, torpe e ignorante. Solo cuando esto se comprende de verdad es cuando se puede avanzar con pasos firmes en la doctrina. No nos podemos extrañar de que nos cueste entender las cosas o que las entendamos mal.
Si no lo entiendes no pasa nada, pero obedece el Magisterio de la Iglesia. Por tu propia seguridad.
Está claro que ser pobre no salva, o por lo menos no salva eso solo. Pero también estarás de acuerdo en que el estar apegado al dinero o a los bienes salva mucho menos. Y te aseguro de que cuando tenemos "algo", aunque sea poco, enseguida se nos pega el corazón a eso. Te lo digo por propia experiencia. No se cual será la tuya.
libro:
Me dices que muchos hombres ricos y poderosos han sido santos, incluyendo a varios reyes de todas las épocas. ¿Muchos? Sinceramente dudo que sean tantos.
¿Y las palabras de Jesús que dice "es mas fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que un rico entre en el Reino de los cielos"?
Mas claro agua, es que le estamos dando muchas vueltas a este asunto cuando las palabras de Cristo son muy claras. Solamente hay que leer los Evangelios. No son invenciones mías. No digo más.
Si yo no me refiero al tema de los pobres y ricos. Eso, respecto a lo que a ti te pasa, es muy secundario.
Deja aparcado el tema. Tu duda es saber si eres, o no, católico. Cuando lo descubras, seguimos hablando de lo que quieras. Y si no lo descubres, no tardarán en empezar a salirte dudas como esa por todas partes.
Aquí nadie está para erigirse en interprete de las palabras de Cristo. El que lo intenta sin tener que hacerlo, se convierte en un juguete del demonio.
En eso estoy de acuerdo... Pero entraríamos en la siguiente discusión, los pobres están más o menos apegados al dinero? Quizá haya un rico menos apegados a los bienes que un pobre. No se da cuenta de la profundidad de las palabras?? Es el amor a las riquezas por encima de Dios, no las riquezas en sí. Y le aseguro, conozco a gente con mucho dinero, que es muy libre de él.
Seas rico o pobre, pregúntate de vez en cuando dónde está tu corazón.
De acuerdo contigo; el término "rico" es un tanto relativo. El mal no está tanto en la riqueza en sí sino en el apego a ella.
Pero es muy difícil que un rico no se apegue a la riqueza, pues de lo contrario no tendrían sentido las palabras de Cristo: "Más fácil es que un camello entre por el ojo de una aguja que un rico en el Reino de los Cielos."
Si fuese fácil al rico no apegarse a la riqueza, los ricos se salvarían facilmente, y por tanto resultarían falsas las palabras de Cristo.
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