Maniobras militares de la Guardia Suiza en el Adriático

Según ha podido saber InfoCatólica, durante toda la semana que hoy acaba, la Guardia Suiza ha realizado una serie de maniobras militares en aguas del Adriático con el fin de preparar una inminente invasión de España. El objetivo de la misma no sería otro que imponer a todos los españoles aquello que piensa la Iglesia Católica. El presidente del Congreso, Pepe Bono, que del negociado militar sabe mucho, ya ha dejado caer la idea de que existe una confabulación imperialista vaticana, que por vía de sus satélites en Añastro ha estado intentando desestabilizar la normalidad democrática de la nación al sur de los Pirineos. Las maniobras anfibias del ejército vaticanista han venido a confirmar lo que el CNI (Centro Nacional de Inteligencia) lleva sospechando desde que el experto en el cuidado de patos Alberto Saiz se hizo cargo de su dirección.

La cosa es tan grave que Rodríguez Zapatero ha llamado esta misma noche al embajador de España ante la Santa Sede, Paco Vázquez, para pedirle que esta misma mañana haga de penitente y se cruce de rodillas toda la plaza de San Pedro para implorar al Santo Padre que pare la invasión. “¡Paquiño!, mueve el trasero que estos nos invaden y tenemos a todas las tropas repartidas por esos mundos de Dios", le ha dicho ZP al ex-alcalde de La Coruña. El gallego ha sugerido al presidente que emprenda el Camino de Santiago como gesto de buena voluntad.

Por su parte, el cardenal Sistach ha llamado al Secretario de Estado del Vaticano, monseñor Tarcisio Bertone, para rogarle encarecidamente que la invasión no tenga lugar en la desembocadura del Ebro ya que “se vería mal que la invasión empezara por Cataluña, que es parte del `Estado´ pero no de España". En la madrugada del sábado al domingo se han visto movimientos sospechosos en la montaña de Montserrat y se baraja con la posibilidad de que los religiosos y religiosas del Sinaí nacional-catalanista (otrora nacional-católico) envíen voluntarios a La Moncloa para plantar cara a las hordas vaticanistas. Al frente de las mismas estaría el insigne Hilari Raguer, dejando a sor Teresa Forcades el papel de capitana de la sección femenina de la resistencia. Por supuesto, la monja benedictina repartiría gratuitamente píldoras del día después a las que muestren mayor combatividad.

En caso de que los aguerridos miembros de la Guardia Suiza lleguen a los aledaños de la capital, Entrevías pasará a ser un puesto clave para los combatientes españoles. Desde allá se repartirán miles de rosquillas que endulzarán los últimos momentos de la desdichada vida de los que se opongan infructuosamente al imperio papista. No se descarta que en esa barriada al sur de Madrid tengan lugar espectáculos de variedades para subir la moral de las tropas anti-vaticanistas, con Zerolo haciendo de vedette mayor y el gran Wyoming imitando a Chiquito de la Calzada.

Un último teletipo ha llegado a nuestras oficinas. En el mismo se dice que Pepe Bono ha llamado al cardenal Cañizares para pedirle que interceda por España en recuerdo a la gran amistad que les une. Bono ha informado a sus colaboradores más cercanos que don Antonio “… me ha dicho no se qué de retirarse a la trapa y me ha colgado".

Seguiremos informando….

InfoCatólica