Mons. Vives tiene razón: El Papa fue claro en su visita a Barcelona
Tal y como cuenta el periodista Jordi Llisterri en el blog que tiene en catalunyareligio.cat, el arzobispo Joan-Enric Vives, obispo de Urgell y copríncipe de Andorra, pronunció hace unos días una conferencia en el histórico Romea de Barcelona, invitado por la Fundación del teatro para hablar de “La aportación del catolicismo en la cultura catalana”.
Cito las palabras del prelado y ruego disculpen si la traducción al castellano no es perfecta:
Nadie duda de que Cataluña tiene una cultura propia, los obispos de Cataluña asumimos que se le puede aplicar las enseñanzas de Juan Pablo II sobre cultura y nación. Sin arraigarse en la cultura catalana la fe sería foránea, espuria. Es evidente que los obispos deseamos por encima de todo y principalmente anunciar el Evangelio de Jesús a todos. Esto es lo primero. Un cura primero lleva el Evangelio. Quiere comunicar una buena noticia que se hecha de amor, de respeto a la dignidad de la persona, de respeto a hombre y mujer, de felicidad, de eternidad. Esto es el núcleo duro. Lo que queremos. Pero después esto no se contradice con un catalanismo democrático, respetuoso y positivo; que valore la apertura católica a todas las demás naciones y lenguas. Si esto no fuera así, resultaría que todos los católicos del mundo podrían ser patriotas menos los fieles de Cataluña. En este sentido ha sido muy clarificadora la visita de Benedicto XVI a Barcelona.
Pueden leer un resumen del resto de lo que dijo en el siguiente enlace.