(ACEprensa) La iniciativa más importante en este sentido ha sido el Frente Parlamentario por la Familia y a Favor de la Vida, una coalición de parlamentarios (casi 200 entre diputados y senadores) de más de diez partidos.
Esta coalición lleva años defendiendo la importancia de la familia y el matrimonio tradicionales, y ha logrado frenar iniciativas encaminadas a difundir la ideología de género.
Uno de sus logros más conocidos fue la retirada de unos cursos de educación sexual que iban a impartirse en las escuelas públicas de secundaria del país. Los contenidos incluían una defensa de la homosexualidad contra la «homofobia».
Red Cigüeña
Otra victoria importante fue la creación de la «Red Cigüeña», un protocolo sanitario para ayudar a las mujeres embarazadas desde la fase inicial del embarazo hasta que el bebé cumple dos años.
En cambio, el Frente no consiguió evitar que en 2012 se aprobara un tercer supuesto de despenalización del aborto: en caso de «condición severa» del feto.
En cualquier caso, la negativa de la presidenta Rousseff a introducir la discusión sobre el matrimonio homosexual y otros temas polémicos ha decepcionado a quienes la veían como una «campeona» de los derechos de la comunidad LGTB.
En parte, la actitud de la presidenta está condicionada por el hecho de que en la coalición de partidos que sostienen su gobierno militan muchos parlamentarios pro-vida, de distintas confesiones cristianas –el cristianismo evangélico está creciendo fuertemente entre la población en los últimos años–.