Consejos a tener en cuenta por si salimos de la crisis económica
Puede que en un par de años las cosas en España empiecen a ir mejor. Aunque la recuperación del empleo será lenta, más que nada porque no se van a construir casas sin ton ni son y ese sector no tirará del resto, es probable que los que sí tengan trabajo se sientan con ganas de caer en los mismos errores que cometimos casi todos en los años de bonanza económica. A saber:
1- Endeudarnos neciamente. Hubo años en que la gente aceptaba hipotecas por encima del valor de las viviendas para poder comprarse un coche, electrodomésticos de última generación, muebles nuevos, etc. Si algo hemos de aprender de lo ocurrido es que no se puede pensar en dedicar el sueldo de unos de los cónyuges a pagar préstamos. Porque si luego uno de los dos se queda en paro, ¿qué ocurre? Lo que hemos visto. Es mejor vivir en alquiler con holgura que vivir ahogado el resto de la vida. Eso de gastar más de lo que se tiene, en la esperanza de que más adelante podremos pagar lo que debemos, ha demostrado ser una soberana necedad.
2- No ahorrar. En el capítulo 41 del Génesis vemos que el faraón de Egipto tuvo un sueño, que fue interpretado por el bueno de José. Lean ustedes ese pasaje de la Biblia. Dado que no hemos vivido un sueño sino una pesadilla, no estará de más que tomemos nota de lo que hay que hacer para que no nos atropelle una futura crisis. Obviamente aquellos que ganan lo justo para ir tirando no pueden ahorrar dinero. Pero es mejor tener 1000 euros en una cuenta de ahorro que ninguno. Y mejor 10.000 que 1.000.
3- Consumir demasiado en ocio. Vivimos esclavizados por ofertas de todo tipo. Hace 25 años la gente vivía la mar de bien jugando al mus y la brisca, sin un móvil de última generación, sin una conexión a internet de sopotocientos gigas, sin una televisión último modelo de tres dimensiones con gafas incorporadas, etc. Tampoco se cambiaba de coche cada 3-4 años. Hoy parece que no se es persona si no se tiene móvil, tablet, portátil, ordenador de sobremesa, TV de alta definición, coche híbrido, consola con los últimos juegos del mercado y televisión de pago.
4- Maleducar a los hijos en materia económica y de responsabilidad. Atrás quedaron los tiempos en que los Reyes Magos -o el gordo vestido de rojo que va en reno- te podían echar carbón si llegabas a casa con malas notas. Hoy las broncas de los padres por la falta de resultados escolares se las suele llevar el profesor en vez del mal alumno. Y los niños y adolescentes se han acostumbrado a que tienen derecho a tener todo sin dar nada a cambio. Que es el camino directo para que de mayores sean unos irresponsables que le echan la culpa a Papá estado por todo.
5- Olvidar que el sistema financiero no tiene alma o está vendida al príncipe de este mundo. Recomiendo vivamente verse películas como Wall Street, de Oliver Stone, y Margin Call, de J. C. Chandor. Nadie da duros a pesetas y nadie sensato ofrece intereses desorbitados por guardar nuestro dinero. No digo que se guarden los billetes debajo del colchón (véase la parábola de los talentos), pero ojito con dejar nuestro dinero en manos de los maestros de la especulación.
6- Votar a quienes han demostrado que son incapaces de impedir el cataclismo económico o no saben evitarnos lo peor de la crisis. Supongo que cada país tiene ejemplos de gobernantes que han demostrado ser malos gestores y de otros que son buenos o menos malos. Y si todos son malos, póngase una vela a San Judas. Es altamente recomendable huir de populismos baratos que prometen lo que se sabe que no pueden conceder y que tienden a echar la culpa al resto del mundo por los errores propios.
Ni que decir tiene que mucha de la culpa de lo ocurrido la tiene la mala gestión de bancos y gobiernos. Pero de poco vale lamentarnos por lo mal que lo hacen otros si nosotros mismos nos convertimos en cómplices activos de un sistema perverso.
Y, en todo caso, recordemos el proverbio: “Más que las riquezas vale el buen nombre; más que la plata y el oro, la buena estima” (Prov 22,1). Dios sabe darnos el pan nuestro de cada día, pero también hemos de saber que cuando rezamos aquello de “hágase tu voluntad así en la tierra como en el cielo", eso incluye que nosotros cumplamos dicha voluntad en nuestras vidas. También en el área económica. Y sabiendo siempre que es más rico el que es fiel a Dios que el que tiene la cuenta llena de dinero.
Luis Fernando Pérez Bustamante
24 comentarios
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LF:
Todo lo que sea un vicio es malo. Pero el pasaje del Génesis que he citado demuestra que no tiene nada de malo ahorrar algo en previsión de malos tiempos.
Y en la parábola del hijo pródigo, vemos lo que le pasó cuando se gastó todo lo que había heredado.
Gracias!
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LF:
La caridad hacia los pobres está antes que cualquier otra cosa. Pero no vayamos a olvidar, como dice San Pablo, que la caridad empieza por los de la propia casa.
A una sociedad podrida como la nuestra sólo la salva una intensa y extensa conversión, reconocernos pecadores, y más que ante el prójimo o la sociedad, ante Dios. Y eso no se va a dar, ni aunque venga algún remedio extraordinario del Cielo. "Si no han escuchado a Moisés y a los profetas no harán caso ni aunque resucite un muerto" (Lc. 16,31)
Siento pensar esto, pero creo que el camino de perdición que ha tomado el mundo es irreversible. Como Vd. suele citar a menudo "El perro ha vuelto a comer lo que había vomitado, y la cerda lavada torna a revolcarse en el cieno" (2 Pe. 2,22)
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LF:
Las posibilidades de que unos cuantos millones de españoles crean que salir de la crisis es algo que se debe agradecer a Dios son más bien escasas.
"Mirad y guardaos de toda codicia, porque, aunque alguien posea abundantes riquezas, estas no le garantizan la vida." (Lc 12, 15)
"No andéis preocupados por vuestra vida, qué comeréis [...] Mirad las aves del cielo: no siembran, ni cosechan, ni recogen en graneros..." (Mt 6, 25)
"Vended vuestros bienes y dad limosna. Haceos bolsas que no se deterioran, un tesoro inagotable en los cielos..." (Lc 12, 33)
Y el Magisterio de la Iglesia también va más allá.
"En las relaciones mercantiles el principio de gratuidad y la lógica del don, como expresiones de fraternidad, pueden y deben tener espacio en la actividad económica ordinaria" (CV, 36).
"Hoy es necesario decir que sin la gratuidad no se alcanza ni siquiera la justicia" (CV, 38).
Por eso, habrá que ver si lo mejor es ahorrar esos 1000 o desprenderse de ellos en favor de los pobres, al menos de una parte.
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LF:
Ahorrar no supone dejar de dar de comer al hambriento y de beber al sediento.
Un saludo cordial.
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LF:
Pues largo me lo fiáis, me temo.
Hay quien es muy dadivoso con los extraños poniendo en peligro la seguridad de los propios. También existe lo contrario : so pretexto de cuidar y amar a los hijos, familiares, etc., todo nos parece poco para ellos, olvidándonos de lo que padecen necesidad. Es un egoísmo encubierto. Por tanto : PRUDENCIA.
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LF:
Exactamente.
De acuerdo, salvo por:
1.- Pensar que el progreso es malo y que era mejor la vida de antes que la de ahora porque existan televisores en 3D o tabletas, no es un argumento consistente. Cuestión de gustos. El verdadero problema es creernos que necesitamos ciertas cosas para nuestras vidas. Habrá quien pueda pagar "caprichos" y otros que no.
2.- "El sistema financiero no tiene alma". El sistema financiero realmente no existe, existen las personas que interactúan en los mercados, y esas sí tienen alma. Evidentemente que gente mala hay en todos los lados y que nadie debe fiarse de nada, pero eso de "la culpa es del sistema" suena a soflama populista para tapar nuestros errores individuales ¿acaso el sistema financiero obligó a tantas personas a endeudarse por encima de sus posibilidades? Pues evidentemente no.
Por último, muy optimista tu post con los tiempos que corren. Que el gobierno de pacotilla que tenemos nos venda humo a diario no quiere decir que la realidad sea esa. El nivel de deuda por las nubes (estarán pagándola nuestros tataranietos si es que llegan a nacer), una tasa de paro que no bajará por lo menos hasta dentro de 5 años, un déficit público sin control por culpa de un sistema político fallido, empresas que sobreviven gracias a la exportación (y si caen esos países ¿qué?), un sistema impositivo que avergonzaría al mismo Carrillo ,... Podría seguir así sine die.
Y lo peor de todo...¿alguien se acuerda de Dios si no es para pedir?¿alguien se acuerda de ciertos valores que hicieron de occidente faro del mundo? Ah, que no, que el ser humano es muy malo y cómo va a existir un dios que crea algo tan malo. (modo irónico off)
Y para colmo, los pastores, sin darse cuenta ¿Qué hacia ayer el señor cardenal Cañizares con toda la ralea política? En fin, que nada cambia y nada cambiará.
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LF:
1- No digo que el progreso sea malo. Solo digo que no podemos vivir esclavos de los avances tecnológicos. Hay otras prioridades económicas antes que estar "a la última".
2- El sistema financiero, que evidentemente depende de las personas que lo hacen funcionar, ha sido perverso en los últimos años. Supongo que no hace falta que lo explique. Eso no significa que haya que cargarse los bancos, las bolsas, etc, o que la solución sea el comunismo.
No soy especialmente optimista. El titular del post está en condicional.
En España gracias en parte al papanatismo europeísta nos hemos cargado la agricultura, ganadería y pesca y ya todo es sector servicios con lo cual aun se incentiva mas ese fragor consumista por que dependemos mas de el.
Creo que es casi una ecuación el que a mas riqueza mas oscurecimiento de Dios pero claro esta tampoco seria moral ser pobres por serlo hay que buscar la mejora de las condiciones sociales y tampoco podemos negar que los adelantos técnicos sean malos per se.
Solo desde la conversión de cada corazón podemos dar con la salida de esta encerrona dejar de ser ciudadanos aislados y parecernos lo mas posible a las primeras comunidades cristianas.
Una pregunta LF ¿se debe practicar la caridad antes con un cristiano que con alguien que no lo sea??
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LF:
A tu pregunta, la respuesta es sí, en caso de que ambos estén igual de necesitados. No recuerdo ahora cuál es el versículo pero está en las epístolas de San Pablo.
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LF:
Es que esa, Wall Street, es muy buena. No recomendaría otras de ese mismo director. De hecho, no recomiendo la secuela, aunque la parte en la que Gekko da una conferencia es perfecta para entender lo que ha pasado con la crisis financiera.
Y en todo caso, la verdad es la verdad la diga Agamenón o su porquero.
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LF:
¿Le parece poco Zapatero?
Excelente tu post. Por cierto, yo también recomiendo la película 'Wall Street'.
Un saludo en el Señor
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LF:
Exactamente. Ese es. Vale no solo para la familia en la carne sino también para la familia en la fe.
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LF:
La DSI es bastante clara y tiene mucha consistencia. La Escuela de Salamanca, -que no es Magisterio, dicho sea de paso- suele ser mencionada por los que justifican las bases del liberalismo económico, lo cual me parece un error pero no me llega al conocimiento como para debatir sobre ello.
El asunto es que el sistema económico y financiero mundial está tan arraigado, que la aplicación práctica de la DSI en todos sus puntos puede suponer, siquiera sea al principio, una ruptura con dicho sistema que puede llevar a una nación a quedarse fuera del "circuito", con las consecuencias económicas nefastas que eso conlleva. Un político católico debe intentar desarrollar la DSI de forma sabia y prudente, sin caer en posturas maximalistas y sin refugiarse en un pragmatismo minimalista. Pero a ver quién le pone ese cascabel a ese gato. Para empezar, se cuentan con los dedos de una mano los políticos católicos.
Poner en práctica estos consejos:
VIRTUDES TEOLOGALES:
FE: me fio de Dios, no de los políticos, ni de los sindicatos, ni de los salvadores y mesías de este mundo, ni de justicieros sociales, arreglalotodo y cantamañanas, que "venden" su "redención de los pobres" a precio de oro.
ESPERANZA: espero en Dios, en su divina Providencia, busco la seguridad en Dios, no en el dinero, ni en los planes de jubilación y asistencia social, que se van a ir todos al garete.
CARIDAD: amo a Dios, no al mundo ni al príncipe de este mundo ni sus bienes.
VIRTUDES CARDINALES O MORALES:
PRUDENCIA: no hacer nada ni emprender nada sin antes meditar sobre sus frutos, ganancias, consecuencias y riesgos.
JUSTICIA: cumplir con esmero nuestras obligaciones, para poder exigir y hacer valer nuestros derechos.
FORTALEZA: no dejarse vencer por el miedo a la crisis, paro, recortes,..etc. somos HIJOS DE DIOS, nos ha dado unos dones y capacidades, ..manos y cerebro, EL MIEDO ES LA PRINCIPAL CAUSA DE LA POBREZA.
TEMPLANZA: ser moderados en el consumo, consumir SOLO LO QUE VERDADERAMENTE NECESITAMOS y siempre menos que nuestros ingresos.
Carísimos hermanos, sed ahorradores mas no codiciosos. Acordaos de que Cristo dijo que le basta a cada día su afán.
Pero veremos a ver. Veremos si podremos ahorrar tanto como nos puedan recortar.
A ver si tendrás que incluir la dieta como uno de los consejos. Ya que el ayuno no se practica, pues entonces la dieta. Como cuando aquel quiso llenar el estómago con algarrobas.
Estamos preparados.
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LF:
No se puede hacer un corralito dentro del euro.
Pero como yo creo que de la crisis, no vamos a salir y es más, las crisis siempre desembocan, en revoluciones, revueltas y guerras yo daría unos consejos para LOS TIEMPOS DE CRISIS QUE NOS TOCAN HOY
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-Miguel: Aunque no sepas porqué lo sabes. Tú sí que sabes.
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LF:
Porque la política monetaria está en manos del Banco Central de Europa.
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