Via Crucis: VI Estación

VI estación: LA VERÓNICA LIMPIA EL ROSTRO DE JESÚS

El odio quiere verte; más aún
el amor. El odio para destruirte;
el amor para cuidarte.

Estás desfigurado, cubierto
de tus propios desgarros, eres
irreconocible. Al odio le basta esto;
al amor, tu rostro
inmaculado.

Una mujer se acerca, Verónica,
y limpia cual caricia tus heridas.
Ante la devoción humana
nunca quedas sin respuesta:
tu piel desgarrada,
tu sangre, tu sudor, tus lágrimas,
darán forma indeleble a tu faz santa,
regalo a esta mujer sobre su paño.

Cuando tu amor más nos conmueve,
cuando tu luz penetra más hondo,
cuando tu vida se derrama sobre tu muerte,
no nos basta compartir tu cruz.
Queremos besarla, besarte.

__________

Eduardo Jariod.

Los comentarios están cerrados para esta publicación.