En la muerte de Miguel Delibes

Hay libros que entretienen y hay libros que transmiten. Los primeros pasan por nuestras manos, nos divierten, pero sus historias y argumentos se disipan en las estanterías y en la memoria. Los segundos, por alguna extraña razón, dejan en nuestra conciencia una impresión que marca nuestra forma de ver las cosas.

Apenas conozco a Miguel Delibes, nací cuando los “best seller” ya eran de importación. Supongo que fallecido el gran escritor, escribirán sobre él amigos, familia y literatos o críticos, que desmenuzarán su estilo, su obra y su temperamento. A esto yo no tengo nada que aportar, más que lo percibido en lo poco que he leído, de quién sin duda es uno de los escritores que considero imprescindibles.

Creo que es en el trasfondo de la trama. Por allí Delibes camina en casi todas sus novelas, haciendo partícipe al lector de cuestiones verdaderamente profundas, que en un planteamiento cercano, conmueven y hacen reflexionar.

Cuando el marco temporal de la historia discurre por toda una vida en clave de recuerdos, como en “Señora de rojo sobre fondo gris” o “Cinco horas con Mario”, Delibes nos descubre con la mejor prosa un alegato, a veces pesimista y a veces idealizado, al papel de las relaciones humanas en la felicidad, el amor o la familia. Es la muerte, con crudeza, la que viene a ponerlo de relieve, siendo la ausencia la que muestra las pequeñas y grandes cosas de la vida.

Indiscutiblemente ha muerto uno de los grandes, de los que estudiarán en las escuelas siglos adelante, cuando ya nadie recuerde nuestro nombre. Vayan para él toda mi admiración, y mi oración.

Javier Tebas
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4 comentarios

  
Amfortas
Gracias por este reconocimiento, Javier. Las novelas de Delibes son, sin duda, de las que dejan huella. A mí me impresionó mucho "La sombra del ciprés es alargada". Y también produce una impresión semejante a la de esta novela el final de "El hereje".

Descansa en paz, paisano y maestro Delibes.
12/03/10 4:48 PM
  
un admirador creyente
Hacía tiempo que no escuchaba un testimonio tan claro, nítido y creíble de un Laico Creyente. En el link de rtve.es en las noticias de hoy de castilla y león, aparece una entrevista a un Delibes mayor y decrépito que dice clara y nítidamente lo que espera de la vida: "Tengo la soberbia esperanza de encontrarme con Cristo en la última curva del camino". Para que luego digan que en España los intelectuales no dan tesimonio del Evangelio. Vaya panda de jerarcas imbéciles que tenemos cuando no saben ver esto. Ahí se va uno al cielo y, sin duda, se encontrará con Cristo y su mujer en la última curva del camino. Descanse en paz.
13/03/10 12:27 AM
  
Tulkas
Gracias a Dios no le dieron el Nobel.

Requiescat in pace.
14/03/10 1:11 PM
  
Ana
Era provida y defendía la vida con toda claridad,decía lo que le parecía el aborto sin ningún respeto humano. Se le veía siempre a favor del débil. Que Dios le haya premiado buena literatura y mejor persona
15/03/10 6:44 PM

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