Ideología de Género: examen crítico de su difusión
Este artículo tiene tres secciones: primero va un examen de algunas incoherencias lógicas en el discurso usual del lobby LGBTI; segundo, una denuncia sobre la manipulación del sistema legal, con la que se consigue que algunas posturas, muy particularmente las propias de la Iglesia Católica, sean siempre las que pierden; y tercero, un análisis sobre la estructura general de las propuestas de este lobby en sus muchos frentes.
Si Usted considera lógico, bueno o inevitable el cambio social que nos quieren imponer, simplemente le invito a que lea hasta el final.
1. ¿Al fin qué: natural e irreversible o cultural y maleable?
Los intentos de introducir como norma social que todo comportamiento sexual debe ser aceptado contienen numerosas contradicciones en su argumentación.
Uno de los modos de tratar de convencer a la gente de que la homosexualidad es natural es presentarla como algo que está determinado desde el principio de la existencia de cada persona, ya sea por los genes, por los procesos epigenéticos prenatales, o por otra causa que no se explicita. Ese es el lenguaje que subyace al famoso ejemplo “viral” del hombre que ha estado encerrado o “prisionero” en un cuerpo de mujer, o viceversa. Cuando se dice que una persona nació en un cuerpo que no es el suyo, se está diciendo que su identidad–y su drama–han quedado determinados por su realidad interior y corporal al momento de nacer.
Pero luego la gente del lobby gay quiere que admitamos que, como dijo Humberto de la Calle, negociador del gobierno colombiano ante las FARC, “no se nace hombre ni se nace mujer.” Esta vez la idea que hay es que cada persona, en su libertad absoluta, puede redefinir su “género” más allá de las imposiciones de la cultura. En consonancia con esta otra línea de pensamiento, la cultura tradicional es presentada de la peor forma posible: es machista, sexista, patriarcal, discriminatoria, homofóbica, etc. Sobre ese fondo tenebroso se afirma entonces que el ser humano, desde su individualidad soberana, puede y debe construir su identidad sexual.
Obsérvese entonces lo que tenemos: por un lado nos quieren decir que hay mujeres que NACIERON “encerradas” en cuerpos de hombres, o viceversa; para los seguidores de la ideología de género esto implica que practicar la homosexualidad es algo natural, tan natural como que mi cuerpo sienta sueño o experimente sed. Lo homosexual, según esta línea, es natural y “así nacieron” algunas personas. Por consecuencia, sería brutalmente injusto maltratar a los que así nacieron. Eso nos dicen, por una parte.
Pero por otra parte, la proclamación desorbitada de la libertad individual conduce a decir que UNO NO NACE NADA, ni hombre ni mujer ni nada, de modo que habría que convencer a los individuos de que tienen el derecho y la capacidad de convertirse y ser lo que quieran.
Creo que se nota la patente contradicción: los defensores de la normalización social del comportamiento homosexual (o bisexual o intersexual…) quieren que por un lado o por otro, es decir, como sea, admitamos su postura. Si decimos que en esas prácticas hay algo que no es natural, nos hablan de que la gente nace así; y luego, si les decimos que hay un bien social en el matrimonio natural, nos echan a la cara la libertad que cada quien debe tener para construir su “género” como le plazca. Pero al pretender argumentar las dos cosas A LA VEZ en realidad muestran que no hay coherencia en su pensamiento. No es entonces la verdad ni lo verdadero lo que los mueve. Son entonces otros intereses.
Todo esto me hace recordar un antiguo chiste que vi en la televisión española hace muchos años. Una señora es llevada al tribunal por haber asesinado a su esposo. Y el fiscal le pregunta: “¿Es cierto, sí o no, que Usted asesinó a su esposo con este puñal?” Y responde la señora: “Totalmente falso. Ni yo lo maté ni fue con ese puñal…” A veces de tanto defenderse termina uno mostrando su propia culpabilidad.
Si aquella gente fuera lógica se daría cuenta de esto: No se puede decir que la homosexualidad es algo con lo que se nace porque entonces eso contradice que el género es una pura construcción de la voluntad humana en diálogo o bajo presión de la cultura. Y tampoco se puede decir que el género es pura construcción individual porque entonces hay que admitir que cuando la gente nace no tiene de por sí una tendencia homosexual. Porque si la tuviera de nacimiento, habría que admitir que también de nacimiento alguien nace “hombre” o nace “mujer” y eso contradice de plano la teoría de género.
Mas la gran mayoría de ellos cuando no tienen argumentos, abundan en insultos. La gente del lobby gay no quiere oír argumentos. Es una experiencia muy dura intentar dialogar con muchos de ellos, que sólo sienten la urgencia de imponer sus ideas ,y sobre todo sus leyes.
Si yo, que soy hombre, heterosexual, sacerdote católico y miembro de la Orden de Santo Domingo, voy a hablar de estos temas, estos son los insultos que suelo recibir, sin ningún argumento adicional:
- “¡Machista!": Porque no me avergüenzo de ser hombre.
- “¡Sexista!": Porque soy heterosexual convencido cn razones y datos del bien de la complementariedad entre los dones de los hombres y los de las mujeres.
- “¡Homófobo!": Porque no estoy de acuerdo con sus contradicciones lógicas y numerosas falacias, que nos quieren vender como argumentos.
- “¡Hipócrita! ¡Pederasta!": Porque soy sacerdote católico. No importa lo que mi boca diga; si lo dijo un sacerdote, queda descalificado porque en la sociedad “tolerante” que ellos predican no hay que dejar hablar a los que ya sabemos que son engendros perfectos y totales de maldad, hipocresía y pederastia.
- “¡Inquisidor! ¡Torquemada!": Porque soy dominico, teólogo y predicador.
2. El juego de los derechos
Una estrategia muy socorrida para imponer leyes con apariencia de legalidad es la manipulación oportunista de dos líneas jurídicas diferentes. Por un lado, la democracia privilegia el parecer de la mayoría; por otro, los gobiernos deben proteger a las minorías. Claramente las dos cosas tienen sentido y merecen un lugar en una sociedad democrática. El problema no son esas leyes o criterios legales sino el uso astuto y discriminatorio que se hace de ellas.
En Irlanda, por ejemplo, el matrimonio llamado “igualitario” se convirtió en ley debido a un proceso de referendo: puesto que la mayoría de la población que votó quería matrimonio igualitario, la voz católica quedó sepultada. El discurso en este caso es: “Puesto que estamos en un régimen democrático y la mayoría de la población votó en contra de lo que ustedes los católicos quieren, ustedes deben someterse a la ley.”
Con un criterio semejante se aplican leyes más y más opresivas en muchas partes, siempre en perjuicio de la parte católica. Así por ejemplo, las leyes británicas condujeron a la desaparición de los centros de adopción de los católicos porque una ley, aprobada por mayoría del Parlamento, impide que estas agencias pongan como criterio que los niños deben ser adoptados por parejas heterosexuales.
Es decir, que queda claro que la mayoría tiene derechos, y que esos derechos crean ley. ¿Correcto? No. Si resulta que la mayoría es católica, entonces se aplica el otro criterio, el de que hay que defender a las minorías.
Las historias sobre esa supuesta defensa de las minorías la conocemos muy bien. Ejemplo: en cierto colegio público hay una mayoría aplastante de alumnos católicos que vienen de familias católicas. Las familias quieren que en los salones y otros lugares públicos sean visibles algunos signos de su fe, por ejemplo, un crucifijo, porque estiman que un ambiente así señalado es parte de la formación integral de sus hijos. Surge entonces la voz del gobierno que esta vez no va a convertir en ley lo que la mayoría quiere sino que, a nombre de las minorías, exige que se quite el crucifijo. ¿Resultado? Los signos religiosos deben desaparecer de los lugares de la administración pública.
Es decir, que si el católico es minoría, pierde porque le ganó la mayoría; y si es mayoría, pierde porque hay que defender a las minorías. Lo importante es que la Iglesia sea arrinconada, humillada, y sobre todo: que salga de una buena vez del ámbito público. Que se hunda en sus oquedades y termine de morirse en sus mazmorras.
Con una anotación adicional: si protestas (como por ejemplo, escribiendo un artículo como este) es que pretendes defender los privilegios de la Iglesia, estás tratando de imponer tu fe a todos, y has olvidado que Constantino ya se murió y que a Franco ya lo enterraron. Todo indica que algunos de los que así se expresan consideran honestamente que han respondido a nuestras razones cuando solamente han escupido prejuicios y groserías.
Dicho de otro modo, lo que queda para el católico es: abraza la injuria, trágate el insulto, y aquí no ha pasado nada.
Tanto se ha difundido este modo de hablar que algunos cristianos ya lo han hecho parte de su propia forma de pensar. Tantas veces les han dicho que ser católico es un asco, que se han convertido en cómplices útiles del nuevo “orden” mundial, convencidos como están de que hacer desaparecer a la Iglesia de lo público producirá una generación de “auténticos” cristianos. El único problema con tal postura es que la autenticidad del cristianismo no puede renunciar a instaurar en Cristo todas las cosas, sean tan privadas como la sexualidad o tan públicas como la educación, y ya sabemos que de lo uno y de lo otro se quiere a expulsar a Cristo como diciéndole: “No te metas con mi vida privada y no asomes a la vida pública.”
Otras formas de juego legal tienen que ver con la palabra “libertad.” El resumen es: si el católico dice algo de los LGBTI, está atentando contra la dignidad de ellos; si ellos u otros blasfeman o profanan lo más sagrado de nuestra fe, la Eucaristía, todo es “libertad de expresión.” En la vida en sociedad es frecuente que colisionen derechos y por eso es sencillo para un gobierno, si así lo desea, hostigar a todo un sector de la población, como por ejemplo: los católicos, haciendo prevalecer siempre el derecho o ley que deja en peor condición a los hostigados. Lo cual demuestra cuán ingenuos o cuán crueles son los que van diciendo con simplista irresponsabilidad: “Y si el católico se siente ofendido, que vaya a los tribunales…” En los tribunales les espera esa clase de parcialidad, que añade nuevas injurias.
3. La conexión marxista
Llama la atención la facilidad con la que muchos aceptan lo que no tiene consistencia ni científica, ni lógica, ni histórica. Sobre todo si la única respuesta a las objeciones consiste en insultos, multas, ostracismo y variadas formas de difamación y calumnia.
Es el caso que todo lo que no respalde la presión gay es considerado homofóbico. Si se hace una marcha por la familia; si uno se atreve a decir: “yo pienso distinto,” de inmediato la marcha es calificada de discriminatoria y anti-gay. ¿Se percibe algo de aspecto o de olor a comunismo? Nadie debe extrañarse: estamos efectivamente ante la eclosión arrogante de un nuevo marxismo con tácticas harto semejantes a las que le sirvieron a los antiguos discípulos del autor de Das Kapital.
La transición del antiguo al nuevo marxismo es evidente en algunos autores como Leonardo Boff, que pasó sin mucho traumatismo de lo que él llamo defender a los pobres, a luego defender la grandeza “misteriosa” del amor, que haría perfectamente razonable la unión entre homosexuales (ver, por ejemplo, este video en portugués). Pero la demostración mayor es el caso de los partidos de izquierda, que se han apropiado de la imagen de defensores de los pobres, de las mujeres maltratadas y ahora, por supuesto, de la población LGBTI “excluida.”
El marxismo de siempre ha considerado a los pobres como víctimas que tienen que unirse para odiar, derribar y anular a sus antiguos amos. La predicación del odio es una constante utilizada abundantemente por los Castro, Ortega, Chavez, Maduro, Correa, Morales en Latinoamérica, y por los podemitas, entre otros, en España. El comunismo no tiene fuerza que no venga del odio pero es un odio que se disfraza de redención de la clase oprimida, es decir, puro pretexto para descargar su golpe contra la clase social que ellos llaman opresora. Por supuesto, el vacío creado al eliminar esa clase dominante deben llenarlo con toda lógica los defensores de los oprimidos. Deja que estos representantes del pueblo se sienten en sus tronos y no podrás sacarlos de modo alguno. Haz la pregunta en Cuba o mira el drama en tiempo real en Venezuela. ¿Habrá todavía alguien serio que hable de democracia en Cuba o en Venezuela? La democracia fue la escalera para subirse los que ahora están. Puestos en su pináculo de poder, saben bien que deben aserrar esa escalera para que nadie más suba.
En el párrafo anterior cambia “pobres” por el llamado “colectivo” o la llamada “comunidad” LGBTI, y tienes las mismas estrategias. Predicación sofística del odio; ansia de poder; calumnia y difamación descaradas: el esquema es el mismo. Por supuesto, la igualdad económica del marxismo de antes ha quedado reemplazada por el igualitarismo sexual de este nuevo marxismo. Y así como el marxismo económico contó con algunos teólogos y sacerdotes que se consideraban profetas y fieles voceros del Dios que habla por la Biblia, así, en estos movimientos recientes, no faltan tampoco los acólitos que utilicen las palabras de la Escritura para dar apoyo sacrílego al nuevo marxismo. Antes se manciló una palabra tan bella como los “pobres,” palabra que fue digna de una bienaventuranza de Cristo; ahora no se teme manosear palabras como amor, o incluso, misericordia.
La situación presente es, sin embargo, más grave que lo que había en la primera oleada marxista, y por eso conviene examinar también las diferencias entre uno y otro modo de buscar el poder y de imponerse sobre naciones enteras. Hay que recordar al respecto que, como profeta, Marx fracasó estrepitosamente: anunció el rápido triunfo del comunismo en Inglaterra y no ocultó su desdén hacia Rusia. Esto hace pensar que su antropología reduccionista, que trata de leer todo lo humano desde lo económico, sólo podía tener un éxito muy limitado. En efecto: con todos sus defectos de egoísmo, el mundo capitalista supo resistir a los sofismas de la Internacional Socialista. Algo debe haber cambiado para que, en cambio, la ideología de género avance a gran velocidad por mentes, leyes y corazones de millones de personas.
El nuevo marxismo ha aprendido que mostrar tantos puños, hoces y martillos, como estilaban los comunistas de antes, puede ser contraproducente, por un principio político bien conocido: si empiezas a producir “mártires” le estás dando fuerza a la oposición. Además, los encarcelados del socialismo, como es el caso ahora mismo de Leopoldo López en Venezuela, son claramente nuevos oprimidos, de modo que nuevas fuerzas sociales te pueden repetir lo que tú hiciste: fortalecerse a partir de la solidaridad humana con aquel a quien se niegan sus derechos. Desaparecer la gente, como pasó tantas veces en Cuba, tampoco es buena idea porque casi toda persona humana tiene quien la recuerde y quien lamente su partida.
Por todo ello el nuevo marxismo esconde su odio en diversos ropajes, por ejemplo, en una legalidad llena de trampas y prevaricaciones. Haz una ley de educación que impone ideología de género, y luego empieza a multar a los colegios que no cumplan con esa ley, la cual no se discute porque simplemente… es ley del país. El efecto neto es el mismo, y así puede seguir ondeando la bandera arcoiris. Y sin embargo, el odio y la represión están ahí, bien orquestados por los medios de comunicación. Estos mismos medios se encargan de perpetuar la idea de que las víctimas son siempre las que conviene que sean: cualquier caso de ataque físico a un homosexual será difundido, repetido, recocinado, impreso, fotocopiado, levantado en efigie, llorado en largo lamento público. Y la maquinaria funciona: se llama neomarxismo rosa.
Conclusión
Ni desde el punto de vista de la coherencia del discurso, ni desde la evidencia científica, ni desde un régimen jurídico que pudiera llamarse imparcial, tiene cimiento o razón la propagación acelerada de la ideología de género. Ciertamente carece de razones pero no carece de motivos ni de aliados ni de fuerza. Cuando todavía gozamos de un poco de libertad de expresión, es necesario hacer esta clase de denuncias. Quizás algunos despierten y comprendan que estamos ante uno de los retos más formidables del siglo XXI. Lo que está en juego es la familia, los niños, y con ellos, el futuro mismo de la sociedad. Claramente lo que se pretende con la ideología de género va más allá de los placeres o afectos de gays o lesbianas; la meta real es suprimir toda instancia entre el indviduo y el Estado, para poder controlar a los individuos totalmente, y como sucede que tanto la familia como la Iglesia son estorbos odiosos en al consecución de esa meta, contra ellas se vuelca con ira el colectivo LGBTI, según se ve en sus burlas sacrílegas a la feen casi cada una de sus marchas.
Quiera Dios que muchos despierten, y que algunos puñados de valientes redescubran la grandeza de la sana doctrina que expone, por ejemplo la Iglesia Católica en el Catecismo:
2357 La homosexualidad designa las relaciones entre hombres o mujeres que experimentan una atracción sexual, exclusiva o predominante, hacia personas del mismo sexo. Reviste formas muy variadas a través de los siglos y las culturas. Su origen psíquico permanece en gran medida inexplicado. Apoyándose en la Sagrada Escritura que los presenta como depravaciones graves (cf Gn 19, 1-29; Rm 1, 24-27; 1 Co 6, 10; 1 Tm 1, 10), la Tradición ha declarado siempre que “los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados” (Congregación para la Doctrina de la Fe, Decl. Persona humana, 8). Son contrarios a la ley natural. Cierran el acto sexual al don de la vida. No proceden de una verdadera complementariedad afectiva y sexual. No pueden recibir aprobación en ningún caso.
2358 Un número apreciable de hombres y mujeres presentan tendencias homosexuales profundamente arraigadas. Esta inclinación, objetivamente desordenada, constituye para la mayoría de ellos una auténtica prueba. Deben ser acogidos con respeto, compasión y delicadeza. Se evitará, respecto a ellos, todo signo de discriminación injusta. Estas personas están llamadas a realizar la voluntad de Dios en su vida, y, si son cristianas, a unir al sacrificio de la cruz del Señor las dificultades que pueden encontrar a causa de su condición.
2359 Las personas homosexuales están llamadas a la castidad. Mediante virtudes de dominio de sí mismo que eduquen la libertad interior, y a veces mediante el apoyo de una amistad desinteresada, de la oración y la gracia sacramental, pueden y deben acercarse gradual y resueltamente a la perfección cristiana.
34 comentarios
Nota de fray Nelson: No creo que el uso de unos términos sea declararlos vencedores. La crítica debe ser inteligible para ser crítica. Nota, además, las numerosas "comillas" y restricciones semánticas que utilizo.
He leído numerosos articulos sobre la ideología de género, hija del Padre de la Mentira, pero ninguno tan inteligible como el suyo.
Le felicito.Paz y Bien.
Si yo, heterosexual de toda la vida, me planteo hacerme homosexual, bisexual, transexual o lo que sea... empezarán con el argumento de que es mi elección y nací así. Si pepito, homosexual de nacimiento y por elección, decide que ahora quiere elegir otra cosa... pues a la hoguera con el y con quien le ayude, en un arranque de tolerancia, claro.
En fin, otra cosa en la que no se aclaran: es cuestión de elección pero cuidadito con lo que elijes que eso de elección... pues depende.
Un experto en psiquiatría se lo explicará mejor que yo.
Nota de fray Nelson: Conozco la diferencia. Sobra el consejo no pedido. Por favor, lea bien.
-Tampoco entiende que en algunos colegios los católicos son minoría y en otros mayoría, y que no hay simbologia religiosa en ninguno porque el estado debe ser neutral.
Nota de fray Nelson: ¡La neutralidad del Estado! Ahora sí llegamos al chiste más cruel de este blog. Por favor, lea y asimile bien la parte de los "juegos legales."
-No sabía que los conservadores británicos fueran neomarxistas rosas, mientras que en Corea del Norte deben ser capitalistas feroces pues allí la homosexualidad es delito.
Nota de fray Nelson: Por favor, lea bien. Bastante claro dejé que el neomarxismo rosa opera mayormente donde fracasó el marximo de puño en alto, tipo Corea del Norte. No nos haga gastar tiempo por causa de una lectura superficial o deficiente. Gracias.
No le parece raro que conservadores, democristianos, socialdemócratas, liberales, estén empeñados en una supuesta conspiración totalitaria?.
Y quienes defienden entonces nuestra libertad, los islamistas y norcoreanos?.
Nota de fray Nelson: ¿A qué llama Usted "conservadores"? En España, por ejemplo, salvo partidos electoralmente marginales, eso no existe. El PP es una vergüenza, por ejemplo: una panda de oportunistas que cuentan a una Cifuentes entre sus filas. Con una lectura más atenta, es decir: si Usted hubiera leído bien, Usted se hubiera dado cuenta de que dije que el neomarxismo rosa avanza a mayor velocidad que lo que logró en su tiempo la Internacional Socialista, entre otras cosas porque estos neomarxistas son mucho más astutos y la gente tarda mucho en darse cuenta a qué horas le han secuestrado el cerebro a ellos mismos y sobre todo a sus hijos. De ningún modo he propuesto como modelo a norcoreanos ni a islamistas, ni a ningún tipo de grupo fanático. Argumentos, razones, denuncias de incoherencias, datos verificables: eso es lo que propongo y lo que espero.
Entiendo que le dé rabia que se apruebe en referéndum el matrimonio gay, pero despreciar eso llamándolo totalitarismo parece una pataleta.
A ud le gusta tanto la hipérbole...
Nota de fray Nelson: Usted puede testificar, Gringo, que no he cambiado una palabra de lo que Usted escribió. Revise ahora mi escrito. Por quinta vez le digo: LEA BIEN. Busque en mi post la palabra "totalitarismo." NO APARECE. Que yo llamé a la situación actual "totalitarismo" sólo existe en su cabeza. Es la palabra que Usted ya tiene cuando empieza a leerme y quizás por estar oyendo las palabras de su cabeza no oye lo que yo digo. Si desea comentar algo más, espero datos, argumentos, razones que demuestren que ha entendido lo que se expone. El tema es grave.
Lo cierto es que la crisis económica y el que, posiblemente, no volvamos a alcanzar el poder adquisitivo perdido hacen necesario inventarse algo que parezca importante, dé un vuelco a la sociedad y la abrume con problemas psicológicos. No somos felices, no porque no encontremos trabajo, porque la vida se haya complicado mucho o por otras causas evidentes, sino porque no sabemos quiénes somos ni lo que queremos y, naturalmente, el estado colabora para que superemos las disfunciones personales que, previamente, se han inventado. Naturalmente el hecho de que se trate de una ideología ya indica la autoría intelectual de gente que se puede encontrar fácilmente en internet, la mayoría procedente de universidades de EE.UU y de las ciencias sociales no de las naturales o biomédicas.
Luego aunque no haya usado literalmente la palabra totalitarismo, acusa a esa ideología de ser una nueva forma de totalitarismo.
Nota de fray Nelson: Lo del control total no me lo invento. Haga Usted la prueba de vivir con los marxistas antiguos, tipo Corea del Norte o Venezuela, o mire las posibilidades de respuesta o disenso con las imposiciones actuales. De nuevo: hay que leer la parte de la manipulación de leyes. Si eso se llama totalitarismo, lo determinará cada cual pero no es lo mío centrar todo en disputas de palabras.
-Si entendiera la diferencia entre homosexualidad y transexualidad, no diría que la ideología de género nos quiere hacer creer que algunas mujeres nacen encerradas en cuerpos de hombre para justificar la homosexualidad.
Nota de fray Nelson: Por supuesto que la entiendo, y por eso tengo bien claros los ejemplos de personas que se dicen homosexuales y que justifican lo suyo como asunto que ha venido desde siempre en sus vidas. Esa es la parte del argumento que quiere afirmar lo homosexual como "natural." Pero luego viene la otra teoría que afirma la libertad humana hasta el extremo del la escogencia de "género." La contradicción es clara.
-Encontrar contradicciones entre dos personas (que no son expertos en psiquiatria) sobre el origen de la homosexualidad, no hecha abajo todo el edificio de la llamada ideología de género.
En cualquier caso si ud no tiene contradicciones y lo ve todo claro, díganos cuál es el origen concreto de la homosexualidad y de la transexualidad.
Ya que pide datos y verificaciones predique con el ejemplo.
Nota de fray Nelson: Yo no he dicho que lo veo todo claro ni de eso se trata en un artículo de esta naturaleza. Lo que hay que pedir en un post es que la argumentación dentro del tema presentado, sea clara y cierta. Creo que mi artículo cumple esas condiciones. Que pueden escribirse otros artículos sobre otros temas, no lo dudo.
-Si se queja de lo difícil que es conversar con partidarios del lobby gay y de que recurren al insulto a falta de argumentos, igual podría ser más moderado cuando habla del PP y lo tacha de "vergüenza" y de "panda de oportunistas".
Nota de fray Nelson: Confío en que Usted lee los diarios del país en que vive. Quizás me he quedado corto con Cifuentes.
Por otra parte, la ideología cuenta con la participación de intereses capitalistas (nada sospechosas de neo-marxismo) como la industria farmacéutica, la del entretenimiento, y la de mass-media, sin la cual no contaría con el caudal económico y político del que goza.
Lo que quiero comunicarle, además de mi simpatía por sus esfuerzos, es que la IG va más allá que una evolución marxista, tiene un componente neo-liberal-modernista-relativista bastante acomodado al mundo de la oferta y la demanda.
Y me atrevería a decir: la IG parece más un gran negocio del liberalismo, usando como arma propangandística, la retórica trasnochada marxista adaptando el matrimonio homosexual a lo que otrora era la reforma agraria, es decir, sacando del baúl el populismo ya cadavérico del comunismo, e irónicamente, usándolo como ariete propagandístico en el lucrativo negocio ultrafascista del aborto, la FI y las operaciones de cambio de sexo. Y la izquierda, feliz, porque tiene una reinvindicación de su viejo discurso para obtener escaños electorales, tan bien les va que ya han creado otras minorías, aumentando las letritas al lobby... y los votos.
En síntesis, lo peor de ambos mundos, lo peor del liberalismo individualista y del totalitarismo marxista, la avidez de ganancia coludida con las ansias de poder y de reinvidicación electorera. Un producto creado para el consumo de sociedades nihilistas y con valores light.
En el campo de lo religioso, los comunistas se han infiltrado también. Antes un comunista decía "¡La RELIGION es el opio de los pueblos!" Ahora se disfrazan de pastores y dicen algo que es casi lo mismo: "¡Cristo si, RELIGION no!" La enorme semejanza es imposible de ignorar.
Algunas observaciones: Cuando la mayoría no quiere (por ejemplo California votó en referendum contra el matrimonio del mismo sexo) a este se lo impone vía fallos de un Tribunal que considera inconstitucional esa prohibición... por ende mismo resultado totalitario
Hasta hace unos años pensaba que el "matrimonio" del mismo sexo era una bandera, junto al aborto, de la izquierda que había perdido las económicas. Pero ahora es de todos los partidos. Parece que la sombra lo cubrió todo...
Dios puede cambiarlo toda
Me gustó lo del "marxismo rosa", yo había escuchado de la "inquisición rosa" por aquello de la intolerancia de los "apóstoles" de la tolerancia.
Efectivamente los rojos que luego fueron verdes, ahora son rosas. El "lado oscuro" del mundo no para en su afán de oscurecerlo todo "porque sus obras son malas".
También coincido con el comentario sobre la perversión del lenguaje, mucha gente dice "género" como sinónimo de "sexo", cuando no lo es: p. Ej. "Igualdad de género" o "perspectiva de género". El uso continuo y machacón del término, planta sus reales en el lenguaje cotidiano y acaba por aceptarse como válido.
Las cosas tienen género (en gramática masculino, femenino o neutro), "la pluma", femenino; "el libro", masculino; no denota sexualudad alguna en la pluma o en el libro. En los animales a veces sí se denota la sexualidad, como "el toro", "la vaca", "el gallo", "la gallina". Pero en otros casos no, como "la ballena", femenino, debemos agregar "la ballena macho" (o hembra) para designar su sexo; y así podríamos seguir con muchos ejemplos (foca, pulpo, hormiga, mariposa, etc.).
Para mayor confusión, "la masculinidad" o "la hombría" son palabras femeninas y "el ciclo menstrual" es típicamente masculino, gramaticalmente hablando.
La música también tiene géneros y no tiene, como la gamática, relación con el sexo.
"Género", pues, no es sinónimo de "sexo".
Las personas tenemos sexo, no género, como nos quieren hacer creer, y genéticamente determinado en todo nuestro ser, en cada célula de nuestro cuerpo (XX o XY), desde nuestra concepción (y para la eternidad, para el desasosiego de los inconformes con su sexo; esto lo sabemos - la eternidad de nuestro sexo - porque Cristo resucitó y está en el cielo como varón y María fue asunta y está en el cielo como mujer. En la resurrección seremos sexuados, aunque - por lógica - infértiles "como los ángeles en el cielo").
Felicidades, Padre. Esperamos más artículos suyos para instruirnos en la fe y la razón. Gracias y que Dios le bendiga.
Nota de fray Nelson: Su agnosticismo religioso está fuera de lugar como comentario en este artículo que no trata ni de la existencia de Dios ni las credenciales de la Palabra de Dios. Sí quiero comentarle algo: el argumento naturalista sobre la homosexualidad está devaluado desde que se descubrió que hay arañas hembras que matan a la araña macho con la que acaban de copular. ¿Autoriza eso algo o justifica algo para las mujeres? Por otra parte, supongo que en el mar de discursos políticamente correctos parece agresivo hablar con argumentos que uno no está dispuesto a entregar así no más. Pero le sugiero que no llame a eso soberbia.
El problema que ocurre en el tema de «la ideología de género, es que se acepta con pasmosa indiferencia los hechos, “el mundo es así”, “la gente se moderniza”, “se veía venir” Es decir un pasotismo, renuncia a la investigación, abordada como fastidio, ambigüedad axiológica en general propia de la posmodernidad.
Por otra parte que las leyes la hagan otros, peligrosa forma de pensar, que enferma la sociedad.
Finalmente, este escrito abre la apertura a buscar más sobre «la ideología de género».
Gracias Fray Nelson.
Puede haber personas homosexuales que sientan que siempre han sido así, y puede haber otras que se han vuelto así con el tiempo y por determinadas causas.
Por ejemplo yo puedo tener diabetes por llevar una dieta horrible durante décadas, o puedo tener una predisposición genética.
Por qué no puede haber varios tipos de homosexualidad? .
Es ud el que se atreve a decir que una opción invalida la otra y que alguien debe estar equivocado.
Nota de fray Nelson: Los atrevimientos no son míos. Frases tan rotundas y tan absurdas como "mujer encerrada en cuerpo de hombre" (negada por genetistas y biólogos, entre otros), o "no se nace hombre ni mujer" no son mías. Si los del lobby gay tuvieran la mesura que Usted intenta en sus palabras, otra cosa sería. Pero no la tienen y usted no los representa aunque quiera defenderlos.
-Leo los diarios del país tanto impresos como digitales, y le puedo asegurar que ningún partido se ajusta a la doctrina católica, porque los pequeños partidos extraparlamentarios que dicen estar en contra del aborto y el matrimonio gay tipo VOX, DEMOCRACIA NACIONAL, SOLUCIONA, etc. también tienen una retórica racista y xenófoba y una tendencia a la extrema derecha fascista.
Así que los católicos deben escoger lo que les parezca menos malo.
Nota de fray Nelson: Si algo "debemos" los católicos es ser católicos buenos. Gracias por su tiempo y decencia, Gringo.
Hoy hay una pugna en Perú entre el Cardenal Cipriani, que pide que las nuevas leyes de ingeniería social, manipulación ideológica y genocidio intrauterino sean sometidas a referéndum, y el presidente del país, que se niega a convocarlo.
La razón de la negativa está clara: sabe que todavía hay una mayoría de peruanos que rechazaría esa propuesta, dado que aún no han tenido tiempo de corromper esa sociedad lo suficiente como para que apoye mayoritariamente semejantes cosas:
www.aciprensa.com/noticias/peru-mayoria-rechaza-proyecto-de-union-civil-gay-14904/
Siempre suele suceder lo mismo: cuando una sociedad está aún sana, quienes quieren corromperla jamás someterán sus corruptores planes a consulta, ya que las sociedades sanas rechazan de plano lo tóxico. Así, obran por la fuerza y la vía de los hechos consumados, promulgando por decreto leyes inicuas que, como no podía ser de otro modo, generan un amplio rechazo social.
Pero eso solo sucede al principio: con el tiempo, la sociedad se va aplacando, y las leyes siguen vigentes (solo retirarían las reformas si se enfrentasen a una enorme violencia, cosa nada esperable de parte del sector sano y civilizado de la sociedad; no así a la inversa, donde se envalentonan tanto más cuanto mayor sea la impunidad con que actúen; ¿imaginan que la justicia imputase de oficio un delito de denuncia falsa a quienes se dedican a denunciar a diario a Cañizares o a Reig Pla por delito de incitación al odio, de lo que son una y otra vez absueltos? No caerá esa breva). Poco a poco, mucha gente tibia e ignorante empieza a asociar "legal" con "moral, justo, legítimo, sano", y aceptan acríticamente el cambio.
Y es en esa aceptación donde se produce la corrupción de esa sociedad: en el momento en que se produce la inversión de valores por la que se pasa a considerar bueno lo que es malo (y ahí cito la frase del Papa Francisco: "pecadores sí, corruptos no").
A partir de ese momento, da igual que se convoquen los referendos que se quiera: cuando la sociedad está ya corrompida, ya no es capaz de expresar en las urnas otra cosa que vómito.
Un saludo.
¿Se ha Ud. dado cuenta que el Estado colombiano estaría obligado a incluir la ideología de género en todas sus políticas?
Eso dice el acuerdo firmado entre el gobierno de su país y las FARC en La Habana, que se someterá a plebiscito en Octubre. Lo dice 113 veces, pero principlamente en la página 4, en donde se lee:
«El Acuerdo está compuesto de una serie de acuerdos, que sin embargo constituyen un todo indisoluble, porque están permeados por un mismo enfoque de derechos, para que las medidas aquí acordadas
contribuyan a la materialización de los derechos constitucionales de los colombianos; por un mismo enfoque diferencial y de género, para asegurar que la implementación se haga teniendo en cuenta la diversidad de género, étnica y cultural, y que se adopten medidas para las poblaciones y los colectivos más humildes y más vulnerables, en especial los niños y las niñas, las mujeres, las personas en condición
de discapacidad y las víctimas; y en especial por un mismo enfoque territorial.»
Y se sabe que hay obispos colombianos, no todos, que se han manifestado a favor de apoyar ese acuerdo.
[...editado...]
Gracias.
Muchas gracias.
Que Dios Bendiga todo su trabajo en bien de la familia, los niños y los jóvenes, esto es, en bien de la sociedad.
es la transexualidad.
Porque la transexualidad no tiene que ver directamente la genética ni la biología, sino con la psiquiatría.
El sexo no es sólo genital, el órgano sexual más importante es el cerebro, y hay personas que no se sabe bien por qué pero su cerebro les dice que tienen un sexo distinto al de su cuerpo.
Da igual que genéticamente hayas nacido hombre o mujer.
Decir que los genetistas niegan la transexualidad es como decir que los químicos niegan que Shakespeare escribiera todas sus obras, simplemente es que no es su campo de estudio y no tiene sentido que se pronuncien.
-Datos y hechos son que absolutamente todas las denuncias del lobby gay en España contra el cardenal Cañizares, y contra el obispo de Alcalá se han archivado argumentando que los prelados ejercían la libertad de expresión.
Igualmente la concejal "podemita" de Madrid Rita Maestre fue condenada por el asalto a una capilla universitaria.
Por tanto no me parece a mí que la neutralidad del estado sea un chiste, que el lobby gay sea tan poderoso, ni que haya persecución.
Nota de fray Nelson: A menudo he expresado mi gratitud cuando lectores como el que aquí firma "Gringo" sacan de su tiempo para escribir. Es un camino invaluable para recibir las opiniones, reservas y posturas contrarias, y todo ello hace bien.
Todavía se necesita más gratitud cuando sucede, como es el caso en esta última intervención de Gringo, que la persona que escribe deja ver, como por sí misma, lo absurdo de su postura. Este hombre nos dice que da lo mismo nacer "genéticamente" hombre o mujer porque todo lo sexual depende del cerebro. O sea que el cerebro humano no viene de los genes. El mío por lo menos, sí. A esos extremos se llega cuando la ideología se impone por encima del sentido común y de la ciencia. Perdí la cuenta del número de estudios que hablan de lo que sucede en el cerebro del feto debido a los cromosomas XY, incluso antes del desarrollo de las gónadas. Al respecto sirve de introducción esta nota científica. El mito del cerebro que nace neutro y que luego queda modelado por la cultura y las opciones personales no resiste análisis científico. Y el mito del cerebro que no depende de los genes, incluyendo los genes determinantes del sexo biológico, resiste todavía menos.
Termino este comentario agradeciendo a Dios que no vivo en la España que veo hoy desmoronarse moralmente ante mis ojos, aunque ello no me ahorra dolor debido al amor que siento por la Madre Patria. Tengo perfectamente claro para qué se lanzan insultos y demandas contra Munilla, Reig Pla o Cañizares: no hay esperanza de que en un futuro próximo los perseguidores logren encarcelar a estos valientes obispos pero esas bravuconadas y escaramuzas preparan el terreno para acciones mucho peores. Y ver a Rita Maestre oronda en su despacho de concejal muestra bien de qué lado están las cosas hoy por hoy en los tribunales. La respuesta, por supuesto, no será achicarnos ni callarnos. Con artículos como el presente uno hace un aporte que levanta conciencia en algunos, y de paso desenmascara a otros: sí, los mismos que dicen "no me parece a mí que la neutralidad del estado sea un chiste, que el lobby gay sea tan poderoso, ni que haya persecución."
Una táctica muy común del Lobby Gay es el hacerse las víctimas, cuando son los victimarios: las primeras víctimas son los mismos homosexuales que creen en dicho lobby, que les aseguran que es algo "normal" cuando en realidad se trata de una anormalidad estadística, tan es así que ni siquiera intentan manejar no el número de homosexuales activos (número extraodinariamente bajo, bastante menor de 1 en 10,000 de población general) , sino el número de "los que alguna vez en la vida tuvieron algún tipo de practica homosexual", incluyendo a quienes fueron forzados, engañados, violados, etc., también incluye a los niños confundidos por la propaganda del lobby experimentaron en prácticas no genitales como tomarse de la mano o darse un beso.
Escalofriante ¿verdad?
Recordar solamente que si la izquierda se ha vuelto pélvica es porque ése ha sido el precio que ha tenido que pagar a sus nuevos amos, una vez caída la URSS: el clan Rockefeller y afines.
La perspectiva de género no existiría hoy sin el apoyo de la Fundación Ford en los "colleges" norteamericanos. Fundación Ford que es fiel ejecutora de los designios de la Fundación Rockefeller en estos temas que tienen que ver con el control demográfico.
Y que tiene una larga historia de "izquierda" desde que la CIA la utilizó como tapadera para fomentar en Europa una izquierda no comunista, ante el avance de los comunistas en los años 50, cfr. el "Congress for Cultural Freedom".
Eso es lo único que explica, además, el predominio mundial actual del disparate genérico.
Esto es importante, porque muestra que es probable que la próxima (o actual) Bestia a enfrentar (no tiene porqué ser necesariamente la última) sea algo así como un capitalismo marxista o un socialismo colectivista rockefelleriano.
Engendro monstruoso y bifronte, sin duda, pero que calza a las maravillas, con perdón, con el panorama actual.
Saludos cordiales.
"Tanto se ha difundido este modo de hablar que algunos cristianos ya lo han hecho parte de su propia forma de pensar. Tantas veces les han dicho que ser católico es un asco, que se han convertido en cómplices útiles del nuevo “orden” mundial, convencidos como están de que hacer desaparecer a la Iglesia de lo público producirá una generación de “auténticos” cristianos."
Saludos cordiales.
Creo que si Gringo continua interviniendo en InfoCatólica terminará convirtiéndose (¡Ojalá!) Pero todo depende de una premisa: si lee en verdad las respuestas que le dan a sus comentarios los blogueros del portal, porque si no es así ( prejuicios?) y Fray Nelson, en éste caso, se queja de ello, todo será como un monumental arar en el mar, y no por culpa de los blogueros de InfoCatólica.
Lo otro: Fray Nelsón quizás no sepa, que en las listas nominales (los puestos con más posibilidad de acceder a una diputación a la Asamblea Nacional de Venezuela) del partido de Leopoldo López (Voluntad Popular) en las pasadas elecciones venezolanas (dic. 2015) iba la transgénero Tamara Adrian (ayer Tomás Adrian) hoy ya diputado(a) quien sería la punta de lanza (con todo el lobby del caso) para materializar el proyecto de ley sobre matrimonio homosexual, ya introducido en la Asamblea.
En torno a lo expuesto, la claridad es indiscutible, sin embargo, además del neo marxismo cultural y de los grandes intereses económicos transnacionales que hacen que el fenómeno del poder o loby gay y antifamilia sea un monstruo de dos cabezas, tenemos también como actor a la masonería. Mucho agradeceré unas palabras sobre este tercer componente y sobre otros si los hubiera. Gracias.
De lo que sí estoy seguro es de que la ideología de genero no es natural.
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