(InfoCatólica) El acto tuvo lugar en el Festival de Eid de MAC Ottawa, organizado por la Asociación Musulmana de Canadá (MAC), una de las principales organizaciones islámicas del país.
El presidente de MAC, Murad Mhiri, recordó durante su discurso el papel de la organización, que presta servicio a más de 200.000 musulmanes en todo el país a través de mezquitas y centros comunitarios. Asimismo, expresó su preocupación por el sufrimiento continuo en Gaza y urgió al Gobierno canadiense a abogar activamente por la paz y la justicia. Animó a los musulmanes del país a seguir contribuyendo de manera positiva a la sociedad canadiense.
El primer ministro Carney se hizo eco de sus palabras y expresó su pesar por el dolor que provoca el sufrimiento en distintas partes del mundo -especialmente en Gaza- y por el odio que enfrentan muchos canadienses musulmanes.
Durante su discurso, Carney pronunció unas palabras que se han convertido en virales:
«Este es un día especial, y el mensaje de la Fiesta del Sacrificio resuena en esta sala, en toda la ciudad, y —puedo decirlo— debería resonar entre todos los canadienses.
Es una historia que muchos hemos escuchado con nombres algo distintos: algunos hablan del profeta Ibrahim, otros de Abraham; unos dicen Ismael, otros Isaac. Pero las lecciones y los valores de esta celebración son los mismos.
Canadá —nuestro Canadá— es un país diverso, orgulloso de sus múltiples lenguas, creencias y culturas.
Son precisamente esas diferencias las que nos hacen únicos y fuertes.
Podemos orar de forma distinta, reunirnos en diferentes lugares de culto, pero todos podemos unirnos —y debemos unirnos— en torno a los valores que esta fiesta representa: valores de comunidad, de generosidad y, sí, de sacrificio.Esos son valores musulmanes. Esos son también valores canadienses.
Gracias.»