(AyO/Abc) La nota oficial asegura: «En cumplimiento de la invitación realizada por el presidente de la República, Marcelo Rebelo de Sousa, cuando se desplazó a la Santa Sede en su primera visita internacional nada más tomar posesión de su cargo [el 17 de marzo de este año], Su Santidad vendrá en peregrinación al Santuario de Fátima, señalando así el centenario de las apariciones de la Cova da Iria».
El obispo auxiliar de Lisboa, Mons. Nuno Brás, ya había dicho hace varias semanas que el propio Pontífice se lo había confirmado personalmente.
Incluso antes de certificarse cuántos y qué días estará el Papa en Portugal, las reservas hoteleras ya se agotaron en la zona, según adelantó este periódico a comienzos del verano.
Cuando Rebelo de Sousa tomó el relevo de Aníbal Cavaco Silva como inquilino del Palacio de Belém, su primera intención no fue solo ir al Vaticano (y después a España), sino cursar una invitación formal para que el Papa Francisco pueda estar presente en los actos de Fátima, de gran importancia para el país vecino.
Será el cuarto jefe de la Iglesia católica que desembarcará en suelo portugués, pues antes lo hicieron Pablo VI en 1967, Juan Pablo II (1982, 1991 y 2000) y Benedicto XVI (2010).