(Fides) La resolución, presentada por el republicano Jeff Fortenberry en nombre de sus colegas, lleva la fecha del 9 de septiembre de 2016. Dicha resolución argumenta e introduce su solicitud con una lista de 16 consideraciones que hacen referencia a las campañas llevadas a cabo en los últimos meses para exhortar al gobierno de Estados Unidos y a otras instituciones políticas occidentales a aplicar la definición de «genocidio» a las diversas formas de brutalidad y opresión realizadas por los militantes del auto-proclamado Califato islámico (Daesh) contra los cristianos y otros grupos minoritarios.
Entre otras cosas, se hace referencia a la declaración del Secretario de Estado, John Kerry, que después de una campaña parlamentaria insistente, el 17 de Marzo del 2016 reconoció el Estado Islámico como «responsable por el genocidio contra grupos en las zonas bajo su control, incluidos los yazidis, cristianos y musulmanes chiítas». En otro pasaje, la resolución recuerda que «en 2003 en Iraq, había un millón y medio de cristianos, y ahora son menos de 350 mil». En esta referencia a la disminución drástica del número de cristianos en Iraq, registrada a partir del 2003, no se menciona la intervención militar internacional liderada por Estados Unidos diseñada para derribar el régimen de Saddam Hussein en 2003.
La resolución, cuyo texto ha recibido la Agencia Fides, afirma que «las comunidades indígenas de la región iraquí de la Llanura de Nínive - cristianos asirios, sirios y caldeos, yazidis y otros - tienen el derecho a la seguridad y a la auto-determinación, en el contexto de la República de Iraq». En la parte final, la resolución pide que «los Estados Unidos y la comunidad internacional apoyen al Gobierno del Iraq en la ejecución de la decisión de crear una provincia de la Llanura de Nínive, conforme a la disposición del gabinete del gobierno iraquí del 21 de enero de 2014, y que apoyen a la nueva administración provincial en la realización de su pleno potencial, en línea con la expresión jurídica de la auto-determinación de las poblaciones locales».
Esta resolución apoyada por los parlamentarios de Estados Unidos, se trata de una intervención decidida en el debate en curso sobre el futuro de la Llanura de Nínive. En los últimos meses también se han realizado una serie de acciones y declaraciones de los líderes y militantes de las fuerzas políticas locales sobre el futuro político y administrativo de la zona que aún está bajo el control del Daesh. En agosto, algunos representantes de los partidos políticos guiados por activistas cristianos, como el parlamentario nacional Imad Youkhana, pidieron que se reconociese para la zona de Nínive la autonomía garantizada por la constitución iraquí, permitiendo que los componentes locales puedan gestionar sectores tales como la seguridad.
Pero ya a finales de julio, el político sunita Atheel al Nujaifi, ex gobernador de la provincia de Nínive y líder del partido político al Hadba, había declarado que la provincia de Nínive, una vez liberada de la influencia yihadista del auto proclamado Estado Islámico (Daesh), se transformará en una región autónoma, dividida en provincias - entre seis y ocho – dotadas cada una de ellas, con un cierto grado de autonomía administrativa. Estas declaraciones planteaban una vez más el proyecto – lanzado hace tiempo – de una «provincia autónoma de mayoría cristiana», que podría crearse en la Llanura de Nínive para reconocer a las comunidades cristianas locales - que han tenido que abandonar sus pueblos ante el avance yihadista - una papel en el funcionamiento de las instituciones administrativas y en el ámbito de la protección y la seguridad.
Las «promesas» - dirigidas sobre todo a los cristianos - sobre el futuro de la Llanura de Nínive se están convirtiendo en tema de propaganda de proyectos de gestión política que están en competencia entre sí. Anteriormente el líder kurdo Masud Barzani, presidente de la región autónoma del Kurdistán iraquí, en una reunión con los políticos cristianos, que se celebró en Erbil, había presagiado la creación de un «Estado cristiano» en la Llanura de Nínive y la posterior convocatoria de un referéndum para permitir que los habitantes de tal entidad administrativa autónoma pudiesen elegir su propio marco político bajo el gobierno de un Kurdistán iraquí independiente, en lugar de bajo el gobierno federal con sede en Bagdad.