(Navarra.com) Cientos de pamploneses habían salido a arropar a la Virgen en su tradicional traslado, cuando desde un tercer piso, según testigo presenciales, han comenzado a proferir insultos.
Los asistentes han mirado hacia arriba para tratar de detectar a las personas, pero se ha mantenido el silencio y no ha habido respuesta ante una nueva ofensa contra los cristianos en Pamplona.