(Zenit) El Papa aseguró que las palabras de Jesús siempre «nos ponen en crisis; en crisis, por ejemplo, ante el espíritu del mundo, ante la mundanidad».
«Pero Jesús», indicó el Santo Padre, «ofrece la clave para superar la dificultad; una clave hecha con tres elementos».
- Primero, su origen divino: Él ha bajado del cielo y subirá allí donde estaba antes.
- Segundo, sus palabras se pueden comprender solo a través de la acción del Espíritu Santo, Aquel que «da la vida». Y es precisamente el Espíritu Santo el que nos hace comprender bien a Jesús.
- Tercero: la verdadera causa de la incomprensión de sus palabras es la falta de fe: «hay entre ustedes algunos que no creen», dice Jesús. En efecto, desde ese momento, dice el Evangelio, «muchos de sus discípulos se alejaron de él y dejaron de acompañarlo». Ante estas defecciones, Jesús no hace descuentos y no atenúa sus palabras, aún más obliga a realizar una opción precisa: o estar con Él o separarse de Él, y dice a los Doce: «¿También ustedes quieren irse?».