(Fides) El informe, publicado a mediados de febrero, ha verificado: controles inadecuados sobre la asignación de fondos; pagos a hospitales sin ninguna evidencia de que el dinero se haya destinado a los salarios de médicos y enfermeras en primera línea en la asistencia a los enfermos, que a su vez son propensos a contraer la enfermedad; el pago de fondos a los directores de los hospitales y otros organismos y no a las arcas de los entes que estos presiden y otras irregularidades.
El informe ha examinado el período de mayo a octubre de 2014 y se refiere a los fondos del gobierno generados a partir de los ingresos fiscales y de las donaciones de personas e instituciones en su mayoría de los habitantes de Sierra Leona. Sin embargo han quedado excluidos los fondos donados por instituciones internacionales como la ONU y las Ong extranjeras.
En la vecina Guinea, otro país golpeado por la emergencia ébola, se han alzado voces para abrir una investigación similar para comprobar la correcta utilización de los fondos asignados por el gobierno y los donantes nacionales e internacionales para ayudar a los pacientes y combatir la propagación del virus.