Noticias del 10 de Noviembre de 2011
El Obispo de Ratisbona advierte que puede llegar el fin del ecumenismo con los protestantes
El Obispo de Ratisbona, Mons. Gerhard Ludwig Müller, acusó a los representantes de la iglesia protestante alemana de «dividir» a la Iglesia Católica. En una entrevista a PNP, el Obispo responsable del movimiento ecuménico en la Conferencia Episcopal Alemana atacó las «declaraciones controvertidas» durante la visita del Papa a Alemania y cuestionó el ecumenismo católico-protestante. Müller fue particularmente crítico con el obispo protestante de Berlín, Markus Dröge, quien escribió que Benedicto XVI «no tiene ni idea del ecumenismo»
El Papa visitará México y Cuba en primavera del próximo año
Como informa Andrés Beltramo, es casi un hecho que Benedicto XVI viajará en 2012 a México y a Cuba. El P. Lombardi ha asegurado que en los últimos días los nuncios en México y Cuba han informado a las más altas personalidades civiles y religiosas de esos países, «de que el papa está estudiando un proyecto concreto para visitar ambos países en la próxima primavera». La confirmación definitiva llegará muy probablemente el 12 de diciembre. Será el segundo viaje apostólico que realice el Santo Padre a América Latina, tras su visita a Brasil en 2007.
La Iglesia inscribe sus bienes no para hacer negocio sino para respetar la verdad y la seguridad jurídica
En el Simposio sobre «Régimen legal de los lugares de culto. Nueva frontera de la libertad religiosa», el profesor de Derecho Canónico de la Universidad de Navarra, Jorge Otaduy, se ha referido a las críticas contra la inscripción registral de los templos católicos. Ha afirmado que la Iglesia reclama la titularidad de su patrimonio «por respeto a la verdad y fidelidad a su historia, no para 'privatizar' los templos y hacer negocio».
Benedicto XVI: «Cumplir la ley de Dios, es el secreto de la felicidad del hombre justo»
En la audiencia general de ayer miércoles, el Papa Benedicto XVI meditó sobre el salmo 118, del que dijo que «está impregnado de tal modo del amor hacia la Palabra de Dios, que celebra su belleza, su fuerza salvífica, su capacidad de dar alegría y vida. Porque la Ley divina no es yugo pesado de esclavitud, sino don de gracia que hace libres y conduce a la felicidad».