Movimientos llamados ultra-católicos.- 1. - Opus Dei

La Iglesia es, como es sabido por todos, rica en carismas y en movimientos que le dan, por decirlo así, vida y la hacen accesible a la humanidad entera.

También es sabido que muchos de estos movimientos son motejados de ultras eclesiales, de fundamentalistas y lindezas por el estilo, por aquellos que no quieren que la Iglesia desarrolle las amplias posibilidades que Cristo le dio cuando la fundó.

Hagamos, pues, un recorrido por los cuatro que son, eso pienso yo, de los más significativos e importantes y que son, seguramente por eso, los más atacados por los laicistas o, simplemente, por los que, dentro de la Iglesia, no admiten más opinión que la suya.


Movimientos llamados ultra-católicos
1.- Opus Dei

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Seguramente, uno de los movimientos más atacados de los que en la Iglesia católica hay, sea el Opus Dei.

Fue creado, por inspiración divina, por el actual santo, san Josemaría Escrivá de Balaguer el 2 de octubre de 1928 mientras se encontraba en unos ejercicios espirituales. Por tanto pronto se cumplirán ochenta años desde su creación.

Posteriormente, el 14 de febrero de 1930, celebrando una Santa Misa, Dios da a entender a san Josemaría que en el Opus Dei también tenían cabida las mujeres por lo que no puede decirse, por ejemplo, que ni al Fundador ni sus sucesores se les pueda acusar de ser misóginos (aunque estoy seguro que, ahora mismo, más de una persona ya lo está pensando)

Muchos avatares ha tenido que pasar la Obra a lo largo de los años desde que se creó, muchos los ataques sufridos (tanto en su mismo principio como en los años posteriores), siendo acusada de todo tipo de tropelías como, por ejemplo, preferir, sobre todo, el poder –tenerlo- e, incluso, ejercer un dominio sobre las personas que pertenecen a tal movimiento católico muy cercano a la pertenencia a una secta.

Sin embargo, nada de esto es cierto, porque, en verdad, el problema (es un decir esto, claro) que presenta el Opus Dei para ciertas mentalidades progres dentro de la Iglesia (seguramente no tanto fuera de ella) es que, por ejemplo, tiene arraigada, en su seno, una espiritualidad muy profunda. La misma lleva a sus, digamos, miembros (también a los que, sin serlo, estiman como bueno su carisma y su espíritu) a cumplirla y como, muchas veces, se tiene de la oración y del rezo un sentido, digamos, equivocado (por creer que se trata de pura beatería) pues, en realidad, lo que es devoción y amor se transforma (para ciertas mentalidades) en falta de iniciativa propia o cosas por el estilo.

Y si hay algo que no se le puede achacar al Opus Dei es que, por ejemplo, se aparte a las personas que pertenecen a él, como ya he dicho antes, como si una secta fuera (que no lo es) porque, por ejemplo, el mismo hecho de llevar una vida de oración los une con el resto de la cristiandad de tal forma que, por decirlo así, la constituyen en gran parte pues, como dice el Apocalipsis, tenemos que llenar las copas con las oraciones de los santos (“Cuando lo tomó, los cuatro Vivientes y los veinticuatro Ancianos se postraron delante del Cordero. Tenía cada uno una cítara y copas de oro llenas de perfumes, que son las oraciones de los santos” se dice en Ap 5:8)

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Tras el fallecimiento del Fundador el 26 de junio de 1975 le sucedió mons. Álvaro del Portillo (a la izquierda) y tras el fallecimiento de éste, el 23 de marzo de 1994, el actual Prelado del Opus Dei es mons. Javier Echevarría Rodríguez (a la derecha), es nombrado, por Juan Pablo II, Prelado el 20 de abril del mismo año.

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¿Qué es?

El Opus Dei es, eclesialmente hablando, una Prelatura Personal de carácter internacional. Fue erigido por Juan Pablo II, con tal específica característica, mediante la Constitución Apostólica Ut sit del 28 de noviembre de 1982, que fue ejecutada el 19 de marzo de 1983.

Aquí voy a hacer una copia literal de la citada Constitución porque, en realidad, es la mejor forma de entender qué es el Opus Dei.

Constitución apostólica por la que la Santa Sede erigió al Opus Dei como la primera Prelatura personal de la Iglesia católica.

Juan Pablo Obispo
Siervo de los Siervos de Dios
Para perpetua memoria

Con grandísima esperanza, la Iglesia dirige sus cuidados maternales y su atención al Opus Dei, que por inspiración divina el Siervo de Dios Josemaría Escrivá de Balaguer fundó en Madrid el 2 de octubre de 1928, con el fin de que siempre sea un instrumento apto y eficaz de la misión salvífica que la Iglesia lleva a cabo para la vida del mundo.

Desde sus comienzos, en efecto, esta Institución se ha esforzado, no sólo en iluminar con luces nuevas la misión de los laicos en la Iglesia y en la sociedad humana, sino también en ponerla por obra; se ha esforzado igualmente en llevar a la práctica la doctrina de la llamada universal a la santidad, y en promover entre todas las clases sociales la santificación del trabajo profesional y por medio del trabajo profesional. Además, mediante la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz, ha procurado ayudar a los sacerdotes diocesanos a vivir la misma doctrina, en el ejercicio de su sagrado ministerio.

Habiendo crecido el Opus Dei, con la ayuda de la gracia divina, hasta el punto de que se ha difundido y trabaja en gran número de diócesis de todo el mundo, como un organismo apostólico compuesto de sacerdotes y de laicos, tanto hombres como mujeres, que es al mismo tiempo orgánico e indiviso -es decir, como una institución dotada de una unidad de espíritu, de fin, de régimen y de formación-, se ha hecho necesario conferirle una configuración jurídica adecuada a sus características peculiares. Fue el mismo Fundador del Opus Dei, en el año 1962, quien pidió a la Santa Sede, con humilde y confiada súplica, que teniendo presente la naturaleza teológica y genuina de la Institución, y con vistas a su mayor eficacia apostólica, le fuese concedida una configuración eclesial apropiada.

Desde que el Concilio Ecuménico Vaticano II introdujo en el ordenamiento de la Iglesia, por medio del Decreto Presbyterorum Ordinis, n. 10 -hecho ejecutivo mediante el Motu propio Ecclesiae Sanctae, I, n. 4- la figura de las Prelaturas personales para la realización de peculiares tareas pastorales, se vio con claridad que tal figura jurídica se adaptaba perfectamente al Opus Dei. Por eso, en el año 1969, Nuestro Predecesor Pablo VI, de gratísima memoria, acogiendo benignamente la petición del Siervo de Dios Josemaría Escrivá de Balaguer, le autorizó para convocar un Congreso General especial que, bajo su dirección, se ocupase de iniciar el estudio para una transformación del Opus Dei, de acuerdo con su naturaleza y con las normas del Concilio Vaticano II.

Nos mismo ordenamos expresamente que se prosiguiera tal estudio, y en el año 1979 dimos mandato a la Sagrada Congregación para los Obispos, a la que por su naturaleza competía el asunto, para que, después de haber considerado atentamente todos los datos, tanto de derecho como de hecho, sometiera a examen la petición formal que había sido presentada por el Opus Dei. Cumpliendo el encargo recibido, la Sagrada Congregación examinó cuidadosamente la cuestión que le había sido encomendada, y lo hizo tomando en consideración tanto el aspecto histórico, como el jurídico y el pastoral. De tal modo, quedando plenamente excluida cualquier duda acerca del fundamento, la posibilidad y el modo concreto de acceder a la petición, se puso plenamente de manifiesto la oportunidad y la utilidad de la deseada transformación del Opus Dei en Prelatura personal.

Por tanto, Nos, con la plenitud de Nuestra potestad apostólica, después de aceptar el parecer que Nos había dado Nuestro Venerable Hermano el Eminentísimo y Reverendísimo Cardenal Prefecto de la Sagrada Congregación para los Obispos, y supliendo, en la medida en que sea necesario, el consentimiento de quienes tengan o consideren tener algún interés propio en esta materia, mandamos y queremos que se lleve a la práctica cuanto sigue.

I
Queda erigido el Opus Dei como Prelatura personal de ámbito internacional, con el nombre de la Santa Cruz y Opus Dei o, en forma abreviada, Opus Dei. Queda erigida a la vez la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz, como Asociación de clérigos intrínsecamente unida a la Prelatura.

II
La Prelatura se rige por las normas del derecho general y de esta Constitución, así como por sus propios Estatutos, que reciben el nombre de “Código de derecho particular del Opus Dei".

III
La jurisdicción de la Prelatura personal se extiende a los clérigos en ella incardinados, así como también sólo en lo referente al cumplimiento de las obligaciones peculiares asumidas por el vínculo jurídico, mediante convención con la Prelatura a los laicos que se dedican a las tareas apostólicas de la Prelatura: unos y otros, clérigos y laicos, dependen de la autoridad del Prelado para la realización de la tarea pastoral de la Prelatura. a tenor de lo establecido en el artículo precedente.

IV
El Ordinario propio de la Prelatura del Opus Dei es su Prelado, cuya elección, que ha de hacerse de acuerdo con lo que establece el derecho general y particular, ha de ser confirmada por el Romano Pontífice.

V
La Prelatura depende de la Sagrada Congregación para los Obispos y, según la materia de que se trate, gestionará los asuntos correspondientes ante los demás Dicasterios de la Curia Romana.

VI
Cada cinco años, el Prelado presentará al Romano Pontífice, a través de la Sagrada Congregación para los Obispos, un informe acerca de la situación de la Prelatura y del desarrollo de su trabajo apostólico.

VII
El Gobierno central de la Prelatura tiene su sede en Roma. Queda erigido, como iglesia prelaticia, el oratorio de Santa María de la Paz, que se encuentra en la sede central de la Prelatura.

Asimismo, el Reverendísimo Monseñor Álvaro del Portillo, canónicamente elegido Presidente General del Opus Dei el 15 de septiembre de 1975, queda confirmado y es nombrado Prelado de la Prelatura personal de la Santa Cruz y Opus Dei, que se ha erigido.

Finalmente, para la oportuna ejecución de todo lo que antecede, Nos designamos al Venerable Hermano Romolo Carboni, Arzobispo titular de Sidone y Nuncio Apostólico en Italia, a quien conferimos las necesarias y oportunas facultades, también la de subdelegar en la materia de que se trata en cualquier dignatario eclesiástico, con la obligación de enviar cuanto antes a la Sagrada Congregación para los Obispos un ejemplar auténtico del acta en la que se dé fe de la ejecución del mandato.

Sin que obste cualquier cosa en contrario.

Dado en Roma, junto a San Pedro, el día 28 del mes de noviembre del año 1982, quinto de Nuestro Pontificado

¿Quiénes lo integran?

En cifras, que siempre suelen ser muy clarificadores de la situación de una institución en el mundo, el Opus Dei lo forman y constituyen más de 87.000 personas, de las que, más o menos, 1.900 son sacerdotes. El resto son laicos, alrededor de la mitad son mujeres y la mitad hombres, siendo la distribución por continentes, aproximadamente, la siguiente:

África: 1.800

Asia y Oceanía: 4.800

América: 29.400

Europa: 49.000

¿Cuáles son sus carismas, creencias y actividades?

La idea principal y lo novedoso del Opus Dei es lo que el fundador llama santificación del trabajo”. Esto, dicho por Monseñor José Gómez, que fue Obispo auxiliar de Denver y ahora es Arzobispo de San Antonio, resume lo que, en verdad, es el carisma del Opus Dei.

Pero, con motivo del XXV aniversario de la erección del Opus Dei como Prelatura personal, el Prof. Carlos José Errázuriz pregunta a don Javier Echevarría, Prelado del Opus Dei lo siguiente: “¿Cuál es la misión de la prelatura del Opus Dei? ¿Qué hay de peculiar en esa misión que no se encuentre en otras realidades de la Iglesia?, a lo que el Prelado responde:

La misión de la prelatura del Opus Dei es la misma misión salvífica de toda la Iglesia, llevada a cabo conforme a un carisma específico de santificación y apostolado en el trabajo profesional y en el conjunto de la vida ordinaria. Lo peculiar de ese carisma y de esa misión

Por otra parte, el Opus Dei se caracteriza, sobre todo y además, por lo siguiente: Filiación divina. “La filiación divina es el fundamento del espíritu del Opus Dei”, afirma su fundador; Vida ordinaria. “Es en medio de las cosas más materiales de la tierra donde debemos santificarnos, sirviendo a Dios y a todos los hombres”, decía san Josemaría; Santificar el trabajo que supone, sobre todo, el tratar de llevar a cabo el mismo con profesionalidad y perfección, santificándolo; Oración y sacrificio , a lo que antes ya se ha hecho referencia, llevado a cabo, esto, con el uso de unos medios de formación que hacen hincapié tanto en una cosa, la oración, como el sacrificio; Caridad, sobre la que afirma el fundador lo siguiente: “Al esforzarnos codo con codo en los mismos afanes con nuestros compañeros, con nuestros amigos, con nuestros parientes, podremos ayudarles a llegar a Cristo”. Y esto, que pudiera parecer no tiene nada que ver con la misma caridad se confirma, en lo contrario porque cuando se da a conocer a Jesucristo se contribuye, así, a tener conciencia de las necesidades ajenas.

Pero si hay algo que resulta imprescindible destacar es la denominada Unidad de vida.

Supone tal Unidad el hecho mismo de que la persona que se dice cristiana y católica lo sea con todas sus consecuencias. Por lo tanto, lo caben componendas con la mundanidad (decía san Josemaría que “hay que estar en el mundo pero no ser mundanos”) ni hacer venir a menos la catolicidad.

Por último, también es importante destacar la Libertad que determina que los fieles del Opus Dei gozan de la misma y que, en su vida ordinaria actúan con responsabilidad personal no pudiendo, además, presentar sus decisiones como las únicas congruentes con la fe.

En cuanto a las actividades que lleva a cabo el Opus Dei y sus fieles, cabe destacar, por ejemplo, los Centros médicos creados a lo largo del mundo, los Colegios, las Universidades y las actividades de pura Promoción Social (como, por ejemplo, Morro Velho (Brasil), Braval (España), Jarales (México), Siramá (El Salvador), El Salto (Chile), Metro Achievement Program (Estados Unidos) o Junkabal (Guatemala)

Y todo esto aplicando, exclusivamente, el carisma que le es propio que, en verdad, no está nada mal para ser considerado un movimiento ultra dentro de la Iglesia católica y, sobre todo, porque me dejo datos (decenas de ellos) que avergonzarían a cualquiera que, criticando al Opus Dei, no quiera ver las cosas como son.

Y, en realidad, si es algo extremo el Opus Dei lo es por lo siguiente: el que esto escribe vio en una producción de vídeo (con ocasión de la ceremonia de canonización de san Josemaría) algo que dijo el fundador del Opus Dei que explica, a la perfección, el sentido de lo ultra: “Dicen que estoy loco… sí, pero por el amor de Cristo”.

Y para finalizar, y como diría el mismo santo Fundador del Opus Dei, a mí me da la “gana” (”Realizar las cosas según el querer de Dios, porque nos da la gana, que es la razón más sobrenatural” dice en Es Cristo que Pasa, 17) acabar con la oración que a él se dirige para implorar su intercesión. Dice lo siguiente

SJ

ORACIÓN

Oh Dios, que por mediación de la Santísima Virgen otorgaste a San Josemaría, sacerdote, gracias innumerables, escogiéndole como instrumento fidelísimo para fundar el Opus Dei, camino de santificación en el trabajo profesional y en el cumplimiento de los deberes ordinarios del cristiano: haz que yo sepa también convertir todos los momentos y circunstancias de mi vida en ocasión de amarte, y de servir con alegría y con sencillez a la Iglesia, al Romano Pontífice y a las almas, iluminando los caminos de la tierra con la luminaria de la fe y del amor. Concédeme por la intercesión de San Josemaría el favor que te pido… (pídase). Así sea.

Padrenuestro, Avemaría, Gloria.

Y es que, en verdad, para un católico, no hay nada mejor para alimentar el alma, que una buena ración de humildad ante los santos.

24 comentarios

  
FZlacain
Me resulta muy entrañable alguna grabación de San José María que hay por ahí en la que, después de décadas viviendo en Roma, sigue hablando con el mismo acento aragonés de siempre.

87.000 no son muchos. Quizás no toda la gente "relacionada" con el opus dei sean miembros formalmente de la prelatura aunque participen en las actividades de la obra y no están reflejadas en la contabilidad oficial.
06/08/08 11:52 AM
  
Eleuterio
FZlacain

Sobre las grabaciones de san Josemaría son accesibles muchos en la siguietne dirección:

http://www.opusdei.es/ssec.php?a=3520

Efectivamente seguramente son muchas más las personas las que, sin ser fieles-miembros del Opus Dei lo son, al menos, de corazón y, lo que es muy importante, llevando el espíritu de la Obra a sus vidas. O, al menos intentándolo.

Creo que me explico con claridad.
06/08/08 12:13 PM
  
Anido
Estimado Eleuterio:

Tengo verdaderos problemas con el carisma central del Opus Dei: "Santificar el trabajo que supone, sobre todo, el tratar de llevar a cabo el mismo con profesionalidad y perfección, santificándolo"

Entre otras cosas porque dicha santificación me supone, por una parte judaizar y, por otra, un resabio calvinista.

En cuanto a lo primero, en el libro del rabino Neusner, elogiado en el "Jesús de Nazareth" de Benedicto XVI, se hace una exposición acerca de lo nuclear del judaísmo en contrate con el cristianismo: para él, y para el pontífice, el judaísmo tiene como nuclear la obligación de la santificación de la vida cotidiana. Para él lo importante es lo santo no lo bueno, mientras que el cristiano unifica las dos. Si podemos santificarnos por el trabajo, al margen del trabajo que sea, rompemo con Cristo para volver con Moisés; y si importa el tipo de trabajo, entonces nos santificamos por hacer el Bien, no por hacer bien el trabajo.

Además, y aquí va mi segunda objeción, el hecho de plantear que haciendo nuestro trabajo podemos acercarnos a Dios, corre el riesgo de deslizarse hacia planteamientos calvinistas que identifican el exito profesional con la gracia divina. Lo que es de todo punto inaceptable.

Me gustaría, si es posible, que despejase mis dudas, pues si el Opus Dei está admitido por la Iglesia, es evidente que debo estar equivocado.
06/08/08 12:37 PM
  
Apolinar
Indagando un poco, es patente que el opus hace mucho bien en la Iglesia, y que quienes lo critican suelen hacerlo desde posiciones que no son las de la Iglesia. Además, si el País y toda la progresía hablan mal del opus resulta obvio que se trata de una cosa formidable.
06/08/08 12:42 PM
  
Eleuterio
Anido

En "Conversaciones" dice san Josemaría algo que, quizá, puede explicar, además de lo de la santificación del trabjo, porque, como Ud. dice, tal realidad espiritual puede ser común a algún postulado de los hermanos separados. Dice que:"El deseo de buscar la perfección cristiana y de hacer apostolado, procurando la santificación del propio trabajo profesional; el vivir inmersos en las realidades seculares, respetando su propia autonomía, pero tratándolas con espíritu y amor de almas contemplativas; la primacía que en la organización de nuestras labores concedemos a la persona, a la acción del Espíritu en las almas, al respeto de la dignidad y de la libertad que provienen de la filiación divina del cristiano; el defender, contra la concepción monolítica e institucionalista del apostolado de los laicos, la legítima capacidad de iniciativa dentro del necesario respeto al bien común: esos y otros aspectos más de nuestro modo de ser y trabajar son puntos de fácil encuentro, donde los hermanos separados descubren —hecha vida, probada por los años— una buena parte de los presupuestos doctrinales en los que ellos y nosotros, los católicos, hemos puesto tantas fundadas esperanzas ecuménicas. (Conversaciones, 22)


Pero yo creo que una cosa es llevar a cabo un trabajo profesional lo más adecuadamente posible, poniendo todo el empeño en hacer lo mejor posible el mismo (y, así, en tal sentido, se santifica) y otra, muy distinta, es creer que se identifique el trabajo profesional con la gracia divina. Yo creo que entre una cosa y la otra hay una gran diferencia.

Apolinar

Aunque no siempre pase eso que Ud. dice, por lo general cuando un medio de comunicación claramente ateo y contrario a la religión católica, como es El País, dice palabras negativas sobre alguna realidad de la Iglesia católica es porque, seguramente, es buena. Y cuando dicen alguna positiva es que, seguramente, quieren llevarla a su lado malo y negativo.

Y eso funciona, casi siempre, así.
06/08/08 1:03 PM
  
max kolbe
Eleuterio, los primeros que criticaron al Opus Dei, allá por sus inicios, fue el clero tradicionalista que no veía con buenos ojos a) la doctrina sobre la santificación en el trabajo b) tanto protagonismo a los laicos c) y unos años despùés, que sacerdotes y seminaristas vistiesen clergy en vez de sotana para ir por la calle (también le pasó eso a los legionarios).
Pues bien, todavía hoy cierto tradicionalismo critica al Opus Dei. Les puedes preguntar a los de Germinans que critican (no recuerdo si en Gernminans o en su antecesor De Bello Pallico) a los sacerdotes del Ous Dei en Cataluña (por ejemplo a D. Juan Costa, parroco de la Virgen del Rosario de Barcelona) por nacionalistas. Aunque no se lo creen ni ellos. El peligro de criticar tanto es que se acaba criticando a todos y, así, se acaba perdiendo credibilidad en la crítica, incluso en aquella que sí es veraz.
Saludos fraternales.
06/08/08 2:31 PM
  
Eleuterio
max kolbe

Es bastante lógico que, al principio del Opus Dei tuviera muchas críticas porque era un movimiento difícil de encajar dentro de la mentalidad de aquella época.

Por cierto, yo no conozco a don Juan Costa pero no creo que, siendo del Opus Dei, tenga tal calificación de nacionalista y, por eso, no puedo decir nada más sobre tal caso.

Sin embargo sí que admito que criticar mucho, a veces, puede tener malas consecuencias.
06/08/08 2:38 PM
  
RNA


Hola Eleuterio: He visto el tituar de hoy y me he dicho. Con toda la simpatía que, a pesar de las profundas dicrepancias, haya crecido en mí por Eleuterio en los ó 3 últimos días, esto es demasiado. A poco que me ayas leído alguna intervención en otros blos o en el tuyo propio, sabes que el Opus es un tema en el que tengo tanto tanto, tanto que decir, que mejor me callo, si quieres que nos mantengamos ese mínimo de simpatía. Para no enganchrame a un tema que me es tan ingrato y en el que siento tanta implicación, he optado por no leer tu post ni las intervenciones de tus lectores y fans. Comencé por la introducción y vi estos dos despropósitos iniciales tan tuyos:

-"....por aquellos que no quieren que la Iglesia desarrolle las amplias posibilidades que Cristo le dio cuando la fundó" (falso,no es ese el motivo)

- "... por los que, dentro de la Iglesia, no admiten más opinión que la suya" (raro motivo: los que hacen eso son justamente los miembros de los mvimientos fundamentalsias).

Así que medije: mal empezamos y, si sigo leyendo, Eleuterio conseguirá enredarme en descalificaciones (los dos párrafos que te he copiado arriba ya son descalificaciones gratuitas y falsas contra quienes no tenemos mucho apecio ni al opus ni a otros movimientos).

Así que,Eleuterio, tendrás que practicar para no perder cintura con otro sparring. Esta vez, al menos esta vez, y recisamente prque has acbado cayéndome bien, creo que es mejor no aceptar tu reto e invitación al debate, si queremos mantener esa simpatía. Y apara no enzarzarme, es mejor no seguir leyendo algo que ya desde la introducción empieza con provocaciones gratuitas.

:-)




06/08/08 2:59 PM
  
RNA
hayas, no "ayas", uf

:-P
06/08/08 2:59 PM
  
ruso
Hace mucho que ya no tengo contacto con la obra, lo que veo es que algo que daba la importancia debida a la oración y a la santidad, fracaso al imponer a los laicos, sobre todo a los célibes numerarios y agregados, un modo de vida lleno de normas y obligaciones, como si fueran religiosos.
También los perdió su afán proselitista, se paso de lo que decía S. Josemaría: "Las puertas son pequeñas para entrar y grandes para salir", a plantear la vocación de una manera masiva a todo aquel que se ponía a tiro, a veces empleando "la santa coacción, daba igual que solo tuvieran 14 o 15 años, lo importante eran los números, se decía que los buenos permanecerían, al final se ve que de las escasas vocaciones, pocas terminan siquiera el centro de estudios.
Por otro lado, lo que tuvo que ser un movimiento laical, esta controlado por sacerdotes, aunque la mayoría de sus miembros son laicos, la visión de un movimiento clerical es cada día más evidente, son los sacerdotes quienes trinchan y cortan. Esto contradice otra vez al fundador, cuando decía que una vocación sacerdotal, era un impedimento para entrar en el Opus Dei.
Además, esta la siempre controvertida figura de S. Josemaría, su veneración se lleva al paroxismo. Esto es común entre otros movimientos y congregaciones actuales, en casi todas se alaba exageradamente a sus fundadores, pero en el Opus Dei es extremo, hasta el punto de que hechos de su vida nada defendibles, como el marquesado de Peralta o su gusto por las cosas lujosas, encima son presentadas como algo positivo. Ante todo fue un hombre con sus luces y sombras, en su afán de presentarlo como don perfecto, cuando no lo fue, para mi S. Josemaría no es ejemplo de nada. Para colmo, lo que el dejo dispuesto es intocable, bastarían unas pequeñas reformas. p.e. que puedan entrar aquellos que sus padres no estuviesen casados o hacer voluntaria la mortificación corporal, pero como "El Padre" S. Josemaría lo dispuso así, así se queda.
A lo que dice Max Kolbe, no se a que texto de Germinans alude, pero si debo decir que buena parte del Opus Dei de Cataluña, es fuertemente nacionalista, el IESE de Barcelona, se apresuro a dar su visto bueno al nuevo "estatut", incluso antes de que cambiasen aquello de incluir el aborto y la eutanasia como derechos fundamentales, claro que no se dieron cuenta, les paso por apresurarse a aplaudir a sus amigos nacionalistas. También hay nacionalistas en el País Vasco, pero no dominan como en Cataluña.
06/08/08 4:31 PM
  
FZlacain
Una cosa Eleuterio:

Lo de ultra. En realidad nuestros amigos progres utilizan el término ultra-católico.

No sé si es por ser ultra y además católico o bien por ser muy católico.

06/08/08 5:12 PM
  
Eleuterio
RNA

Entiendo tu postura porque, seguramente, tendrás mucho que criticar del Opus Dei (como de otros movimientos) pues ya he visto en el Blog de Bruno que algún comentarista se metía contigo por la aversión que pareces tener hacia los llamados nuevos movimientos que han aparecido en la Iglesia católica



ruso

Es cierto que alguna cosas del mismo Fundador podrían criticarse. Él también era una persona y, estoy seguro de ello, era consciente de los fallos que podía tener y de lo que podía ser podado para mejorar como cristiano.

Sin embargo, tales cosas no empecen de la importancia del Opus Dei y de lo que ha hecho y hace en el mundo. Creo que eso no se puede tirar por tierra.

FZlacaín

He puesto lo de ultra para no entrar en ninguna calificación más pero estoy seguro de que lo dicen (lo de ultra-católicos) porque creen que, a lo mejor, se toman (los movimientos y las personas que somos conscientes de lo que supone ser católico) muy en serio su fe. La verdad es que los críticos o, como yo les llamo, disidentes, lo que les pone es adaparse a las circunstancias de la vida a costa de la religión porque, al fin y al cabo, como no se puede tocar no es materia y todo lo que no es materia es, simplemente, despreciable.
06/08/08 5:52 PM
  
Juanjo Romero
Eleuterio, creo que el Opus Dei no es un movimiento, como tampoco lo son los legionarios.

Sé que es un intento de categorizar, pero la categoría más general que causa menos confusión es la de nuevas realidades.

Movimientos son el Camino, Comunión y Liberación, San Egidio y un sin fín, pero los dos primeros no. Es un detalle menor, pero como estoy bastante de acuerdo con lo que dices y quería poner un comentario, pues ahí queda.
06/08/08 7:01 PM
  
Javi
Juanjo Romero: Ya que veo que precisas sobre las nuevas realidades, sólo me gustaría añadir que el Camino tampoco es un movimiento propiamente dicho sino que es un itinerario de formación católica.

Sin más, un saludo a todos los miembros del Opus Dei que durante tantos años han sido vejados y perseguidos. No conozco personalmente a nadie de la Obra, pero tienen toda mi admiración.

La Paz
06/08/08 7:15 PM
  
Apolinar
¿resabio calvinista?

Antes de detectar "resabios calvinistas" en el opus creo que convendría especificar un poco qué se entiende por eso. Que yo sepa, en el Opus se santifica el trabajo no por su productividad, sino porque es una parte fundamental de la vida que debe ofrecerse a Cristo y estar al servicio de los demás, como deben ofrecerse a Cristo la totalidad de los actos de la vida del cristiano. Creo que hablan de algo así como de poner a Cristo en la cumbre de todas actividades humanas. Si esto es calvinista, me parece que se trata de algo en lo que calvinismo acierta.

06/08/08 7:55 PM
  
Apolinar
De la web del opus:

Su misión consiste en difundir el mensaje de que el trabajo y las circunstancias ordinarias son ocasión de encuentro con Dios, de servicio a los demás y de mejora de la sociedad. El Opus Dei colabora con las iglesias locales, ofreciendo medios de formación cristiana (clases, retiros, atención sacerdotal), dirigidos a personas que desean renovar su vida espiritual y su apostolado.
06/08/08 8:11 PM
  
Eleuterio
Juanjo

Vale. No te voy a discutir lo que dices sobre que ni el Opus Dei y los Leginarios de Cristo son movimientos. Yo lo decía porque tenía entendido que así se decía de ellos una característica propia. Pero es, ciertamente, mejor la denominación de "nueva realidad" de la Iglesia porque, en verdad, los carismas que cada uno de ellas (como nuevas realidades) son vistos, eso es cierto, con el nuevo prisma que le da el haber aparecido en un siglo, el XX, que tan convulso fue. Eso es lo que, sobre todo, les ha dada esa característica de ser, efectivamente, algo que siendo realidad en la Iglesia, es nueva.


Javi

Estoy totalmente de acuerdo con compartir, y añadir el mío, un saludo para los fieles de la Obra que, durante tanto tiempo, han sido, como poco, insultados.

Apolinar

Sobre lo del calvinismo ya he dicho lo que pienso de tal apreciación en un comentario anterior. No creo que tenga el mismo sentido lo que dice el Opus Dei y que, por cierto, es recomendable para cualquier persona, pertenezca o no a la Obra y lo que diga el calvinismo que yo, con franqueza, no lo sé. Y, claro, si es así la igualdad de pensamiento es que, sin duda, el calvinismo acuerda con lo católico, y no al revés.

06/08/08 9:14 PM
  
blogall

Javi, no soy de la Obra, pero soy uno más de esos muchos "relacionados" (como decía FZlacain) con ella por mis relaciones familiares y de amistad con gente que sí pertenece al Opus Dei. Veo a diario lo que significa ser de la Obra a través de la vida de estas personas cercanas, y por eso le tengo un gran cariño.

Así que te agradezco tus amables palabras, y te devuelvo el piropo: yo sí conozco a algunas personas del Camino, y son gente estupenda. Si seréis buenos, que habéis conseguido que El País recientemente os haya colocado en su diana. Buena señal.

(una curiosa coincidencia: te despides con la expresión "La Paz"; la gente de la Obra se saluda con la expresión "Pax")

07/08/08 3:20 AM
  
terciario98
Max Kolbe, si por clero tradicionalista te refieres a la Compañía de Jesús, tienes toda la razón. Fueron ellos los que persiguieron política (utilizando los resortes del poder en España) y eclesiásticamente (con difamaciones sobre la promiscuidad de sus miembros) que llevó, al fin, a dar un puñetazo a la mesa (literal) a Pío XII y decir a los jesuitas que cómo tenían la poca vergüenza de acusar injustamente de lo que ellos mismos fueron objeto en el siglo XVI, y ahí se acabó todo, por lo que a la autoridad eclesiástica se refiere.

El motivo era que el Opus Dei era visto como competencia directa de las Congregaciones marianas jesuitas dirigidas a jóvenes universitarios. A ver si repasas la historia de la Iglesia, Max.

Y me gustaría dejar una cosa clara con respecto a todo esto. El Opus Dei es un camino de santidad, es decir, un ejercicio constante de la ascética cristiana. No es sólo poner un crucifijo en la mesa de trabajo y santificarlo es cumplir un Plan de Vida, que no es otra cosa que una Regla. El que es miembro del Opus Dei se ha comprometido a hacerse santo (no es grupo de gente buena que se reune para hacer buenas cosas, sino para hacerse santos), y eso lleva como mínimo, el compromiso para con Dios de, por lo menos:

-Oración. Misa diaria, o al menos comunión diaria. Preparación o meditación de la misa con un Misal de fieles. Confesión quincenal o mensual. Lectura espiritual. Ciertos actos diarios de consagración o devoción personal. Rezo del Angelus y del Rosario, si es posible en familia, Laudes y Vísperas. Visitas al Santísimo, Adoración Nocturna. Dirección espiritual. Asistencia a Retiros, primeros Viernes, Ejercicios espirituales anuales. Jaculatorias y oración continua. Etc.

-Ayuno. Moderación total en comida, vestidos, sueño, cuidados corporales. Limitar curiosidades vanas, en charlas, medios de comunicación, lecturas. Uso de la televisión -no verla, no verla nunca solo, no ver sino lo elegido previamente en programa-. Austeridad en gastos y adquisiciones, eliminación de lujos, restricción o supresión de las ocasiones peligrosas -espectáculos, revistas, bailes, piscinas y playas, ciertos viajes-. Alejarse de costumbres mundanas -en planes de vacaciones, conducta entre novios-. Etc.

-Limosna. Dedicaciones de tiempo y de trabajo, en la familia, en el estudio, en el centro laboral. Ayudas materiales -económicas, serviciales- al prójimo. Posibles diezmos. Ayudas espirituales al prójimo, en casa, en catequesis, en la parroquia y otras asociaciones. Colaboración con grupos apostólicos o benéficos. Cuidado de ancianos y enfermos. Procura de familia numerosa. Servicios al bien común de la sociedad civil, de la Iglesia. Etc.

El que presenta el camino de santidad como una rosa sin espinas engaña.
07/08/08 8:33 AM
  
marcus
yo también conozco a muchísima gente del Opus Dei, y, como en todos los lados, hay de todo.
Es un camino reconocido por la Iglesia: nada que objetar.
La realidad del dia a dia de los miembros llamados Numerarios dista mucho de la laicidadque se predica. Se pueden leer testimonios muy elocuentes buscando en Google por opuslibros.org. Muy interesante para saber mas.
un saludo
08/08/08 8:35 PM
  
Mikiroony
@Ruso: Creo que llegamos a la misma conclusión, y es que no se pueden hacer inventos. Eso de imponer a laicos un estado de vida eclesial es, como poco, un derroche de posibilidades. O eres laico o eres religioso, pero un camino entre medias no lo veo yo muy claro.

Quiero aclarar que no formo parte de la obra, que los conozco bien porque tengo amigos, pero vamos, que no es lo mio.

Ah, y si podéis explicarme lo de 'tradicionalistas', lo agradecería: para mi son los partidarios de la Misa Tridentina entre los que no se cuenta de forma manifiesta la obra.
09/08/08 3:46 PM
  
Eleuterio
luz

Si que siento, de verdad, que Ud. pueda decir eso. No sé yo si se
trata de personas particulares las que le hicieran tomar su
decisión de abandonar el Opus Dei.

Sería muy conveniente que, sin decir nombres, nos pudiera decir
qué es lo que le pasó. Esto lo digo sin ningún ánimo de cotilla
sino por conocer y, si es posible, poder corregir quien
corresponda.

Gracias, de todas formas por su testimonio.
05/09/08 1:03 PM
  
Josu
Eleuterio,
Hace algún tiempo que una persona que conozco anda despotricando de todo lo que no sea "tradicionalista" en el sentido que lo emplea Mikilrony. Es decir, que el Papa, los obispos, y toda la Iglesia está condenada por no celebrar la misa en latín- cito textualmente-. Además han creido recibir un espaldarazo con Benedicto XVI y la anulación de excomunión a obispos lefebvristas.
No percibo en ellos ni unápice de caridad, sino todo lo contrario, odio.
¿Existe alguna condena expresa del Vaticano o algún obispo a estas actitudes?

espero que este mensaje no llegue a mal puerto.
22/01/09 12:37 PM
  
Margarita Sanchez
Me gustaría pertenecer . Participar en el movimiento, vengo de México y no sé dónde o cómo localizarlos. Gracias
09/02/19 11:39 PM

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