En el Cerro de los Ángeles algo daba vergüenza, Majestad.
El pasado domingo, 21 de junio, se produjo en el Cerro de los Ángeles, algo inaudito (según los tiempos y personas que corren): se renovó la consagración de España al Sagrado Corazón de Jesús.
Y esto, al parecer, para según quién, es algo de poca importancia o de lo que, simplemente, había que huir.
“Consagración…. Sagrado Corazón de Jesús…” esto huele a demasiado religioso, muy alejado de la corrección política, debió pensar alguna alta instancia española o quien controle sus actos oficiales.
Y así sucedió.
He consultado tres medios de información religiosos para encontrar algo.
En ninguno de ellos lo he visto.
Y me refiero a la presencia, en la celebración de la renovación de consagración, del Rey de España.