Arrebatos eclesiales

Vamos a ver si conseguimos no hacer más tonterías que las imprescindibles. La situación nos supera y nos rebasa. Los muertos por coronavirus, especialmente en España, nos abruman cada día. A estas horas llevamos más de ocho mil muertos y nos acercamos a los cien mil contagiados. Además de todo esto, nos llegan los reproches de muchas personas y colectivos acusando a la Iglesia de no estar aportando nada ante esta situación. Ya sabemos que no es así, pero estas cosas duelen.

El riesgo de que se nos junten las dos cosas es que nos veamos en la apremiante necesidad de soltar ocurrencias y posibles acciones que pareciendo una panacea pequen de lo peor: populismo, ineficacia y agravamiento de la situación.

Un ejemplo. Leo esta mañana que el cardenal Tagle, ante esta pandemia y la profunda crisis económica que se nos viene y que, como es natural, afectará más a los más pobres, propone “un Jubileo especial por el coronavirus, durante el cual los países ricos supriman las deudas a los fuertemente endeudados”. Entiendo que estas cosas caigan bien, pero lo mismo sucede que este remedio pudiera ser peor que la enfermedad, porque si al que presta se le “obliga” a condonar, lo mismo para la próxima dice que más garantías y mayores compensaciones, o que, si no, no se vuelve a arriesgar, lo cual supondría dejar al pobre sin deudas hoy, pero con un futuro aún más incierto.

Alguna vez he dicho que, en términos muy generales, los clérigos de economía sabemos poco y que tenemos la mala costumbre de fiarnos de economistas escorados a la izquierda, que, curiosamente, sostienen unas ideas que acaban empobreciendo más a los pobres. Todavía no me he recuperado de aquel folleto de Cáritas que, ante el grave problema de la gente sin hogar, entre otras cosas proponía la dación en pago y la ocupación de viviendas vacías. Necesitaríamos los clérigos fiarnos de unos asesores económicos de solvencia acreditada, fe sólida y experiencia real en el mundo.

Llevamos unos días, casi semanas, en los que se nos bombardea desde el gobierno con toda una serie de medidas económicas que merecería la pena estudiar y ante las cuales bien podríamos como Iglesia ofrecer una reflexión al pueblo de Dios. Sin prisa, por supuesto, pero sin pausa.

Habría que hacer una seria reflexión sobre lo que hoy se está proponiendo y que, a la vez que unos dicen que es la panacea, otros afirman que será la ruina de España para años. Por eso digo que necesitamos economistas juiciosos, empresarios, autónomos, sindicalistas capaces de una reflexión medio sensata sobre lo que se nos viene encima.

Es fácil proclamar la necesidad de condonar la deuda externa de los países pobres, exigir que a los ricos se los fría a impuestos, seguir forzando a la banca, rescatada en su momento, es verdad, especialmente las entidades dirigidas por políticos, machacar con gastos a los empresarios, prohibir los despidos o los desahucios, que a lo mejor hay que hacerlo. Lo difícil es hacer un plan que, a medio plazo, resucite la economía de un país, y de esto los clérigos sabemos poco, entre otras cosas, porque no tenemos familia que mantener ni sabemos lo que es no llegar a fin de mes.

En estos días creo que nuestro papel es otro, y ya se está haciendo: poner todos nuestros medios a disposición del gobierno, ayudar económica, personal y materialmente con todo lo que sea posible ¡benditas monjas, algunas casi coetáneas de Matusalén cosiendo mascarillas!, rezar, atender a enfermos, moribundos y familias, poner a Cáritas a tope. Pero, de verdad, lo de la economía, mejor lo dejamos, que no es lo nuestro.

29 comentarios

  
Haddock.
Yo de economía sólo sé que el euro fue una estafa, y que condonar la deuda a los países pobres y hacer macroconciertos para Etiopía o Bangladesh sirvieron para que ese dinero acabara al mes en cuentas en Suiza de los dirigentes de los gobiernos respectivos.
Como usted bien dice, la Iglesia debe limitarse a lo suyo: Ofrecer los Sacramentos y dar compañía, consuelo y ayuda al enfermo o desvalido.

Para ser una carga económica a cambio de un interminable blablablá ya tenemos a nuestros políticos.
31/03/20 5:35 PM
  
Cordá Lac
¿Qué tal una receta sencilla?
Las Administraciones Públicas para atención de la vida terrena y la Iglesia para atención de la vida eterna.
31/03/20 6:32 PM
  
Parmandil
¿Por qué se mete el cardenal a hablar de economía, si por lo que leo no ha estudiado económicas? ¿Desde cuándo la condonación de la deuda forma parte de la Doctrina social de la Iglesia?
31/03/20 6:34 PM
  
Horus the Hawk
Hay purpurados que les gusta chapotear en charcas agenas más que a un tonto, una tiza.
31/03/20 7:02 PM
  
Desde Madrid Capital
No entiendo. Entre los países más endeudados hay países "ricos". Japón por ejemplo debe como 2 veces y media todo su producto interior brito de un año. ¿Quiere Tagle que alguien menos endeudado le pague la deuda a una potencia industrial como el Japón? No hablemos de EEUU, que hace poco llegó al billón* de USD en deuda.

De todas maneras, Tagle lleva 4 años de presidente de Caritas Internationalis, así que algo del tema sabrá. Y dudo que un cardenal, muy popular en su católico país, tenga especial interés en complacer a grupúsculos internacionales de izquierda.


*1.000.000.000.000 de dólares
31/03/20 7:27 PM
  
doiraje
En lo inmediato, hay dos enormes frentes abiertos que es un deber afrontar. El primero, el sanitario, en el que en general todos los países van dando palos de ciego, y en España, con nuestro gobierno de advenedizos, los palos no sólo son de ciegos, sino de mancos, de paralíticos y, sobre todo, de incapaces, por no decir de imbéciles.

El segundo, es el económico. Vamos a salir casi todos muy dañados en este aspecto. Y dañados querrá decir para una proporción enorme de trabajadores por cuenta ajena, emprendedores, pequeños empresarios, autónomos y clase media, literalmente arruinados. Yo apenas tengo un colchoncillo económico que se va diluyendo con el paso de los días; espero que no se diluya hasta el punto de que las pérdidas sean totalmente irrecuperables, o incluso que desaparezca por completo. Como no cuidemos el tejido empresarial con medidas inteligentes y factibles, podemos irnos al carajo como país, después de haber sobrevivido al virus al coste altísimo de miles y miles de vidas. Un país como España, y en esta situación, no puede ser dirigido por un gobierno de inútiles, de comunistas y de simples canallas narcisistas.

En el terreno de lo no inmediato, en el ámbito de lo espiritual, la tarea pendiente es no menos importante: ¿volveremos a ser cada uno de nosotros como antes? ¿Habremos aprendido ética y espiritualmente de todo este sufrimiento? Está muy bien ser socialmente buenos, incluso muy buenos, como estamos viendo, pero toda esta tragedia, más allá de la solidaridad ejemplar que se está dando, ¿nos servirá a efectos de convertirnos? Nadie lo puede saber, salvo Dios; pero soy de los que piensan que nada volverá a ser como antes. Pero como será, ya lo iremos viendo...

Lo de Tagle no tiene la menor importancia: los cardenales pueden tener ocurrencias como cualquiera de nosotros, y manejar mal la angustia que nos desborda a todos de una manera u otra. Yo no haría demasiada sangre de la tontería que ha propuesto. Todos estamos muy tocados ahora.
31/03/20 7:41 PM
  
Javier [accademico ortolano]
Ave Maria, gratia plena, Dominus tecum.
Benedicta tu in mulieribus, et benedictus fructus ventris tui, Iesus.
Sancta Maria, Mater Dei, ora pro nobis peccatoribus,
nunc, et in hora mortis nostrae. Amen.

Lo del cardenal Tagle no tiene remedio, pero me consuelo con que al menos usted padre tenga la cabeza de un castellano tradicional. No quiera Dios que tengamos que sufrir al cardenal y sus ocurrencias, un retiro le vendría muy bien, treinta o cuarenta años meditando en una cueva sobre el trabajo y el ahorro, aunque sea leyendo a Esopo.


___________________________VINCEMMO, VINCEREMO. ✠
31/03/20 7:46 PM
  
claudio
Estimado Padre lo más sencillo es meterse en lo que no se conoce o en temas para los cuales no se está preparado, es de manual, ocurre en el fútbol y en todas las actividades humanas, son opiniones generales agradables a los oídos y que quedan bien, no sirven para resolver ningún problema pero es lindo decirlo, a los que conocen la pobreza en serio y en forma cotidiana esas afirmaciones les golpean en lo más profundo "de su sensibilidad humana" pero bueno es lo que hay.

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Aprovecho la oportunidad y tu generosidad para recordar el Decreto de la Penitenciaría Apostólica del 20.03.2020 de Indulgencias (especialmente aquellos que no tendrán acceso sacramental).

Parte final del Decreto:

"La Iglesia reza por los que estén imposibilitado de recibir el sacramento de la Unción de los enfermos y el Viático, encomendando a todos y cada uno de ellos a la Divina Misericordia en virtud de la comunión de los santos y concede a los fieles la Indulgencia plenaria en punto de muerte siempre que estén debidamente dispuestos y hayan rezado durante su vida algunas oraciones (en este caso la Iglesia suple a las tres condiciones habituales requeridas).
Para obtener esta indulgencia se recomienda el uso del crucifijo o de la cruz (cf. Enchiridion indulgentiarum, n.12)”.

Ver Indulgentiarum doctrina, Norma 18.
Norma 18. Si no se pudiera tener en la hora de muerte un sacerdote para administrar los sacramentos y la bendición apostólica con su indulgencia plenaria, de la que se habla en el canon 468, § 2, del Código de Derecho Canónico, la Iglesia, Madre piadosa, concede benignamente al que esté debidamente dispuesto la posibilidad de conseguir la indulgencia plenaria in articulo mortis, con tal que durante su vida hubiera rezado habitualmente algunas oraciones.
Para conseguir esta indulgencia plenaria se empleará laudablemente un crucifijo o una cruz.
El fiel podrá ganar esta misma indulgencia plenaria in articulo mortis aunque en el mismo día haya ganado ya otra indulgencia plenaria.
31/03/20 7:46 PM
  
Tannhäuser
Magistral, Pater. Le rezo su Avemaría.
31/03/20 7:47 PM
  
nicodemo
el problema delos marxistas como Tagle es q sus recetas económicas producen hambre y muertte
31/03/20 8:28 PM
  
Enrique
Don Jorge, me parece correcto lo que dice.

Permítame una precisión. El gobierno español no rescató a la banca en la crisis de 2008. Esa es un modo de decir que impuso la izquierda, muy experta en propaganda, para ocultar una realidad. Lo que se rescataron fueron cajas de ahorros, no bancos. Los bancos no necesitaron rescate. Solo uno entró en crisis, que fue el Banco Popular, y se dejó que cayera (y me parece bien). El resto de los bancos supieron hacer bien las cosas y salieron adelante sin ayudas públicas.

Las cajas de ahorros españolas se caracterizan por ser entidades similares a bancos muy intervenidas por el poder político. Casi todas necesitaron rescate, solo La Caixa de las grandes se libró.

Es un cinismo que hoy la izquierda podemita hable del rescate de los bancos para intentar repetir la fórmula que ya sabemos que funciona mal, que es la intervención política de los bancos.
31/03/20 9:30 PM
  
Manuel d
Don Jorge,
Como graduado en economía le puedo decir con toda la tranquilidad del mundo que su feligresa doña Joaquina sabe infinitamente más que todos los dirigentes políticos que nos llevan al hoyo. Por eso, a pesar de que no sepa usted de economía, es afortunado de poder a buen seguro contar con expertas en la materia. Ah! Me apuesto una cena a que doña Joaquina no tiene el graduado escolar.
(Se puede sustituir a doña Joaquina por don Hernán, aunque de éste señor no tengo noticias).
Alabado sea el Señor, por siempre bendito y alabado.
31/03/20 10:17 PM
  
Pep
Gracias por su comentario. Con esta crisis del coronavirus muchas vergüenzas están quedando al aire. Y más que quedarán, puesto que, sin ser yo experto en nada, me da la sensación de que estamos todavía en los inicios. Y entre las múltiples vergüenzas, las de la Iglesia no serán las menores.

Como siempre, por una parte tenemos sacerdotes y religiosos, que a título individual están ayudando a files, espiritual y materialmente. Muy meritorio, aunque por otra parte es lo que una oveja espera de su pastor, si el pastor es bueno.

Y como siempre, una Iglesia oficial, callada, amedrentada, irrelevante... prescindible. Una Iglesia oficial que parece limitarse a “colaborar” con las autoridades civiles, en lo que le pidan. Sobre todo, no molestar. Una Iglesia oficial que ve el coronavirus como una desgracia, que nada tiene que ver ni con Dios ni con ella, que a ver si pasa cuanto antes sin dejar demasiado rastro, para así poder seguir hablando de “sus cosas”: la ecología, las puertas abiertas a los inmigrantes, los acompañamientos a los homosexuales, las diaconisas... Con mil muertos al día se hace obsceno hablar de esos temas mundanos, pero como llevan una década sin hablar de otra cosa, pues ahora no saben de qué hablar.

Por otra parte, ¿nadie en la Iglesia es capaz de dar una explicación teológica a lo que estamos viviendo? Vimos el otro día al Papa en la Plaza De San Pedro, con una custodia, por una plaza completamente vacía. Seguramente esa imagen no se había visto en dos mil años de Historia De la Iglesia. ¿Nadie interpreta nada a partir de esa imagen? ¿Nadie ve ningún mensaje de nada? Si esto no es un signo de nada, ¿qué lo será?

Por otra parte, se habla de solidaridad, de justicia económica, de recuperación económica posterior... pero aquí nadie habla de los enfermos ni de los muertos. ¿Por qué? Yo creo que porque a la Iglesia oficial se le ha olvidado qué es lo que tiene que decir.

Vemos también a los ancianos que caen a decenas en las residencias, de la manera más triste que se pueda imaginar. ¿Nadie tiene nada que decir sobre cómo hemos abandonado a nuestros mayores? ¿Merecen morir solos y abandonados por nosotros, porque se han convertido en una molestia para nuestra forma de vida egoísta y ridícula? ¿Es suficiente con salir a las ocho a aplaudir al balcón durante dos minutos, para dar las gracias a quien los esté cuidando, que no sabemos ni quién es? ¿Tiene algo que decir la Iglesia oficial de esto?

En fin, como digo, me parece que queda mucho de esta crisis. Por favor, recen por los enfermos y los muertos. Si no lo hace la Iglesia oficial háganlo ustedes.

Para terminar, les diré que he estado ingresado en un hospital de Madrid algunos días por el coronavirus, gracias a Dios estoy ya en mi casa recuperándome. Lo único que les pido es que recen y se cuiden, y sobre todo cuiden a los mayores que no se infecten.
31/03/20 10:31 PM
  
Daniel Argentina
Padrecito, lamento escribirte para disentir. Es un poco mas complejo.
La UE y los EEUU estan viendo entre sus medidas para evitar la Mega Recesión la compra de bonos de sus deudas e inyectar dinero.
El tema es que el comercio y prosperidad mundiales no solo dependen de ellos mismos, hoy día. Si los "emergentes" no se levantan, mala cosa. Entonces sería sensato, no condonar las deudas, si no ver mecanismos similares a gran escala, e incorporando al Banco Mundial y al FMI.
Además hay un dato que normalmente se olvida: la moneda de intercambio mundial es el dólar. EEUU va a emitir billones pero no tendrá inflación por ese motivo, lo cual es un poco perjudicial para el resto de los países.
31/03/20 11:10 PM
  
Enrique
Daniel de Argentina:

Como bien dices, la cosa es un poco más compleja. Pero te digo que otros piensan que el mejor modo de salir de esta problemática, es exactamente al contrario de los que dices.

Pero no importa.

La cuestión de fondo que (intuyo) introduce D. Jorge, es que si hay alguien que debe decir cómo salir de esta crisis que viene, no es un Obispo, por muy Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos que sea. Son los economistas, los políticos, etc.: los profesionales de la materia. Los eclesiásticos que se dediquen a lo suyo. Es una aplicación de al César lo que es del César.

Está muy bien que este Cardenal quiera el desarrollo humano de los pueblos desfavorecidos, pero quizá otros proponen otras medidas. Y es legítimo. No lo dice d. Jorge, pero yo sí digo que los católicos que opinen que no se debe perdonar la deuda a los países deudores, pueden hacerlo, están en su derecho.

Por si las dudas, escribo desde Buenos Aires. Conozco muy bien la situación de este país. Tengo mi opinión sobre la deuda de este país (me parece que muy distinta de la tuya) pero no la digo, respetando lo que acabo de decir: no es este el lugar de un debate político, ambas posturas son para un católico legítimas.
01/04/20 12:55 AM
  
sofía
Ave María
Paz y Bien.
01/04/20 3:04 AM
  
Horacio Castro
Padre Jorge. Es un tema muy polémico la defensa del pago de la deuda externa (para algunos parecería que son buenos los gobiernos para contraerlas ilegítimamente con los cómplices acreedores). Agradezcamos a Dios que nos ofrece gratis la salvación para la vida eterna, que como felicidad continúa siendo nuestra esperanza más concreta.
01/04/20 3:27 AM
  
rastri
Don Jorge: Independientemente de que para el "honrado especulador que lo son todos", el dinero que no produce dinero no es dinero que valga ni exista para el "honrado especulador".

Don Jorge: el dinero, y mejor si es con cheque el portador que ocupa poco lugar, lo inventó el Demonio para que el especulador de turno, en justa y merecida fortuna pudiera comprar sin limite cuerpos y almas en la triste necesidad.
01/04/20 10:37 AM
  
F C Romero
Ave María Purísima D Jorge y los demás enclaustrados. Hoy siento discrepar de Ud en algo, pero mire creo que de economía la Iglesia sabe y mucho , pues sigue o debiera de seguir aquello de "Vestir al desnudo, dar de comer al hambriento, dar de beber al sediento, enterrar a los muertos..." y completa sus programas con otras "ideicas" tales como "Consolar al triste, dar buen consejo a quien lo hubiera menester..." y todo eso para cumplirlo, ¿no es entender de economía? ¿no es entender de las necesidades humanas?
Los hombres, como hombres, opinan de las cosas de los hombres, aunque afectan a Dios de aquella manera, pero Dios, cuando da sus convicciones a los hombres, que no opiniones , y que son cosas suyas propias, sabe lo que dice y lo que hace. Es la diferencia.
Que Dios nos conserve la salud, acoja a los que se han ido de este mundo y sea benévolo en su justicia para con todos, que la Virgen interceda por todos y nos ilumine siempre y San José nos ayude a transitar por este camino de la enfermedad sin ningún mal para el alma y para el cuerpo, anime y cure a los enfermos, de ánimos a los médicos y sanitarios para seguir en su maravillosa labor, consuelo a aquellos que han perdido a sus seres queridos y acompañe a todos aquellos que se esfuerzan en ayudarnos a todos desde el más humilde hasta el que está en lo más alto. Que el Señor le bendiga en su labor D. Jorge.
01/04/20 10:58 AM
  
templario
Me gustaría saber porque dice que la Iglesia no nos ha abandonado, cuando han cerrado prácticamente todas las Iglesias, dejándonos sin los sacramentos, sobre todo la Misa dominical, imcumpliendose con ello el tercer Mandamiento.
Me da la impresión de que se le está dando mas importancia al cuerpo que al alma.
Deberían tomar ejemplo de los que obedecen a Dios como es el caso del Obispo de Alcalá de Henares, que sigue celebrando Misas públicas.
Un saludo.
01/04/20 11:19 AM
  
pedro
El personal sanitario desprotegido, el infectado, el fallecido, con un gobierno de izquierdas, son héroes aplaudidos; con un gobierno de derechas, víctimas reivindicadas.
01/04/20 11:48 AM
  
jesus I
El obispado de Osma Soria ha puesto a disposicion de la autoridades una casa de retiro, muy bien acondicionada. 100 camas
Dios te salve, Maria....
01/04/20 1:03 PM
  
veritas liberabit
Lo que vd. dice sobre la economía es una realidad. Pero verá, (como siempre) "la culpa la tiene la Iglesia". Comprenderá que mi afirmación , teniendo una parte de verdad que explicaré, es de sorna.
La Iglelsia, que en su misión principal, tiene que predicar el Evangelio, que incluye una moral, una realidad material concreta, de actuación, de la fe que profesa. Si muchos de los pueblos del tercer mundo, tuvieran un mínimo de moral, incluidas en sus leyes que fueran garantistas (y no marxistas al albur del gobierno de turno), hábitos de honradez, no promiscuidad y abandono de familia, etc. etc. se habría paliado mucho la pobreza. Primero, por que el orden social y el trabajo, al estilo de la Iglesia C a t ó l i c a, repercute en el beneficio personal, familiar , social. Segundo porque los paises más ricos invertirían sin miedo a perder, como vd. apunta. Veamos, hay fondos de pensiones o de inversión internacionales que no saben qué hacer con sus fondos. Y tienen todo el derecho a existir: son fruto del trabajo y el ahorro de millones de personas, no "capitalismo" malo, sino bueno. Y quieren invertir sabiendo que: 1) van a cobrar un interés legítimo (ver la teoría de Santo Tomás sobre el "alquiler" de un bien) 2) Y el más importante, van a poder recuperar su inversión. Algo se comprende ahora de mi echar culpa a la Iglesia pero, claro , sé que áun predicando muchos no oyen, pero como van a oir y creer si no se les predica , o haciéndolo no se les enseña y reptie pedagógicamente donde está el bien y el mal.
Y , finalmente, la Iglesia muy mayoritariamente se está aplicando a los "pobres", "desfavorecidos", marginados, "descartados" y un largo etc. En el fondo una ideología marxista. ¿Y qué hace la Iglesia predicando casi sólo eso? Empobrecer el presente y el futuro de los demás y de ella misma. ¿Quién va a atender todas estas cosas si no hay "eclesiásticos", vocaciones de hombres y mujeres que, por amor a Dios, se dedican al prójimo? ¿Quién va a educar a los ciudadanos para ser misericoridiosos sino hay congregaciones de enseñanza, sólo el "voluntarismo" marxista que fracasa a la larga? Una Iglesia en "salida"...¡y tan en salida que se van todos!...El último que cierre la puerta.
01/04/20 1:06 PM
  
veritas liberabit
En contestación a "Enrique". "...Solo uno entró en crisis, que fue el Banco Popular, y se dejó que cayera (y me parece bien).".
Pues no sé si bien o mal pero mire, qué curioso, se da la circunstancia que minetras a otros les rescataron a éste no. Y se da la circunstancia de que estaba indirectamente vinculado a una institución de la iglesia, el Opus, y que muchos de ellos tenía allí sus ahorros en forma de inversión a través de sociedades de inversión.
Y se da la circunstancia que el último presidente, el que remató la jugada, venía de un Banco directamente maracado por su pertenencia a la masoneria (sería él o no de esa nefanda institución, no lo sé)
Que contra el bien y la Iglesia, y hoy más, todo vale. No seamos ingenunos sino cautos, que nos avisó el Fundador: "mirad (es decir atención), que os envío como ovejas en medio de lobos sed cautos como serpientes..."
01/04/20 1:12 PM
  
Emilio
Dice un proverbio que es más importante enseñar a pescar que dar un pez. Pero, claro, a lo mejor esto último da más votos: hambrunas ha habido provocadas para sacar réditos. Y, como han apuntado más arriba, ¿dónde terminan tantas donaciones que se han hecho a nivel mundial con ocasión de grandes catástrofes, y los países que las han sufrido siguen años después en la miseria más absoluta, v. gr. Haití, por señalar alguno?. Seguro que vosotros tenéis otros en mente.
01/04/20 1:23 PM
  
Diáconus
https://www.outono.net/elentir/2020/04/01/las-mas-de-150-iniciativas-de-la-iglesia-catolica-contra-el-coronavirus-en-espana/
01/04/20 3:44 PM
  
Enrique
Estimado veritas liberavit:

No sé si ese banco está ligado al Opus Dei.

Tampoco sé si su último presidente estaba ligado a la masonería.

Lo que sí sé es que si ese banco (o sus accionistas, directos o indirectos, por usar una expresión que tú usas) elige mal a sus directivos, son ellos los que deben pagar las consecuencias. No todos los españoles mediante rescates. Que elijan bien a sus gestores, que aprendan a no conceder hipotecas imposibles de cobrar, etc. No sé por qué el Banco Popular iba a ser excepción, pertenezca a quien pertenezca.

El Banco Popular cayó por sus propios errores. En muy pocos años pasó de ser el más rentable de Europa, un modelo de gestión que se envidiaba, a arruinarse. No lo tiró una conspiración masónica. Cayó solo.
01/04/20 5:22 PM
  
Lorenzo Valla
Estos días de confinamiento estoy leyendo disparates de todos los colores y tamaños por parte de la progresía rampante. Por ejemplo, que se hagan menos iglesias y más hospitales o que el 0,7 % que los católicos damos a la Iglesia en nuestra declaración de Hacienda, a partir de ahora sea para Sanidad, sin tener en cuenta que para Sanidad ya estamos pagando todos --sí, todos-- a través de nuestro IRPF, con o sin 0,7. Es la hora de la demagogia y del coro de loritos, que repiten a una las consignas de los últimos de la clase. ¡Vaya tropa!
02/04/20 1:24 AM
  
Oscar Ignacio
Lo mismo Lo mismo que afirma el Cardenal Tagle lo enseña la tradición bíblica, eclesial y el magisterio de la iglesia con San Juan Pablo II a la cabeza, los Obispos españoles…. en el camino trazado por el Vaticano II. Hay unas materias teológicas, como la moral social y la doctrina social de la iglesia, que enseñan todas estas cuestiones socio-económicas, una ética de la economía que tiene la misma importancia que la bioética o la moral sexual. Por ejemplo, los Obispos Españoles transmiten que "el Papa Juan Pablo II, de feliz memoria, insistía en varias ocasiones en la urgencia de anular la deuda externa, como un acto de justicia, puesto que son los pobres los que más sufren a causa de la indeterminación y el retraso de las medidas que puedan liberarlos de esa carga. Y propuso la necesidad de crear una nueva cultura de la solidaridad" (Declaración de la Conferencia Episcopal Española en apoyo a la Campaña sobre la deuda externa, promovida por las organizaciones eclesiales Manos Unidas, Cáritas, Confer, Justicia y Paz y Redes). Para todo ello, claro, que hay que estudiar, investigar y liberase de las ideologías e ideologizaciones de la fe u otros integrismos
02/04/20 11:04 PM

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