De Juana, paradigma del socialismo español
Érase una vez un terrorista sanguinario, llamado José Ignacio De Juana Chaos, al que las fuerzas de seguridad del estado detuvieron y encarcelaron cuando había cometido 25 asesinatos. Como ya no podía matar a más gente, se dedicó a celebrar fiestas cada vez que sus camaradas asesinaban a inocentes. Llegó a escribir lo siguiente cuando mataron al matrimonio Becerril en Sevilla:
"Me encanta ver las caras desencajadas de los familiares en los funerales. Aquí, en la cárcel, sus lloros son nuestras sonrisas y acabaremos a carcajada limpia. Esta última acción de Sevilla ha sido perfecta; con ella, ya he comido para todo el mes."
Debido a la irresponsabilidad de toda la clase política que nos ha gobernado durante la democracia, ese sujeto tendría que haber salido a la calle hace un par de años debido a las nefasta legislación anti-terrorista existente antes de la reforma que realizó el gobierno de Aznar con el apoyo del PSOE. Lo que ocurrió es que de la misma manera que la cabra, cabrón en este caso, tira al monte, De Juana hizo lo único que sabe hacer y amenazó a jueces y funcionarios del Estado por medio de un artículo en Gara. Aquello paró su excarcelación porque la fiscalía le acusó de amenazas terroristas y tuvo que quedarse en la trena.