Foros, blogs, chats, listas de correo y otras hierbas....

Diez años de presencia en Internet dan para mucho, especialmente si, como es mi caso, el internauta es de los que se conecta a diario. Durante todo este tiempo puedo decir que he hecho en la red prácticamente de todo menos concertar una cita a ciegas para mantener una relación apasionada de una noche. Confieso, sin embargo, que me he dado cuenta de lo relativamente fácil que es establecer una relación personal con una persona del otro sexo que, si se prolonga en el tiempo y no se toman medidas, puede acabar con un matrimonio incluso aunque el mismo esté asentado. He conocido varios casos de esos en que la cosa acabó mal.

Y es que la red consigue algo que en la vida diaria no siempre se logra entre seres queridos: comunicación y diálogo. Esto tiene una explicación fácil. Si tú te sientas con una persona en una misma habitación puede que hables con ella o puede que no, pero si entras en un chat de Internet o, sobre todo, usas habitualmente uno de los programas tipo ICQ o Messenger, lo normal es que acabes siempre hablando con el que tienes al otro lado de la pantalla. Es posible que haya personas que entran a los chats sólo a leer lo que dicen los demás pero no es lo habitual. De hecho para muchas personas es más fácil comunicarse con los demás de esta manera que no personalmente. Eso está creando no pocos problemas de personalidad en individuos inmaduros y también en adolescentes pero me temo que poco se puede hacer para impedirlo.

Debemos aceptar el hecho de que Internet cambiará y moldeará nuestra sociedad occidental de forma tan radical o incluso más que lo que consiguieron la radio y, sobre todo, la televisión. Yo no soy una persona partidaria de entrar en chats masivos. Nunca me han gustado porque suelen ser como un gallinero donde se ha introducido a una zorra. A pesar de eso, hay personas que hoy son muy importantes en mi vida a las que conocí en un chat, como es el caso de mi director espiritual, el padre Joaquín Climent, que se convirtió en padrino de mi confirmación cuando recibí ese sacramento al poco de regresar a la Iglesia Católica. Pero han sido los foros donde he conocido a más personas con las que todavía hoy mantengo contacto "virtual" y no tan virtual. Fray Nelson Medina O.P, el padre Guillermo Juan Morado, Antonio, Arturo, Isaac…. la lista es larga y para mí muchos de ellos son ya auténticos amigos, dentro del límite que la propia red pone a eso tan bello que es la amistad humana.

Hace años la mayoría de mis contactos eran protestantes evangélicos. Hoy tengo bastantes más contactos católicos. Y, aparte de familiares y ex compañeros de trabajo, creo que sólo uno no es cristiano: un joven de Venta de Baños con el que coincidí bajándome un mp3 por el ya fallecido edonkey. A los cristianos les conocí a través de los múltiples foros religiosos en los que he participado. Me acuerdo lo mucho que me hizo reír Fray Nelson cuando hace años me llamó "forum-man", pero no le faltaba razón. Miles y miles de horas y de mensajes he dedicado estos años a debatir sobre doctrinas, citas, políticas y movidas personales. Las listas de correo tienen un funcionamiento que se puede considerar similar a un foro pero en mi opinión no enganchan tanto. Otro día intentaré contar lo que he vivido en cada uno de esos foros en los que he dejado tanto tiempo de mi vida. Cada foro tiene su propia personalidad, marcada más por el tipo de foristas que participan que por la actitud de sus moderadores, aunque dicha actitud también puede moldear en buena medida el transcurrir de la vida de un foro. No ocurre igual en los blogs donde, a pesar de que los comentaristas fijos forman en cierta forma parte de su identidad, lógicamente influye más la forma de ser del blogger.

También creo necesario hablar sobre el papel que la red de redes puede tener en la vida de la Iglesia y su labor evangelizadora. Aunque poco a poco va mejorando la situación, creo que hace falta un esfuerzo mucho mayor, en especial a nivel de diócesis y parroquias. Aunque las hay bastante potables (p.e la de mi diócesis) las webs de la mayoría de las diócesis españolas son como para echarse a llorar desconsoladamente. Es preferible no tener una web a tenerla mala y sin actualizar. Invertir tiempo e incluso dinero en tener una buena web debería formar parte de los proyectos de toda diócesis que se precie. Es más útil que la hoja diocesana que sólo leen unos cuantos.

Por tanto, estimados obispos, espabilen o hagan espabilar a los responsables de las webs de sus diócesis, que no puede la Iglesia desaprovechar las oportunidades que nos da Internet. Es más, como ya dije en un post de hace unas semanas, tienen un ejemplo a seguir en el Cardenal Arzobispo de Boston, que se ha creado su propio blog personal. Sólo lo actualiza una vez a la semana excepto cuando hay alguna noticia importante que el cardenal quiera comentar. Pero ya es mucho más de lo que hacen en la red el resto de los obispos católicos de todo el orbe. A ver quién se anima a seguir sus pasos.

Luis Fernando Pérez Bustamante

5 comentarios

  
Bitácora
Veo que eres un experto en estos temas. La pregunta es ¿vale la pena dedicarle tanto tiempo y esfuerzo?.
¿No sería mejor dedicar el tiempo a ser útil de una manera más real?.
Es algo que todo bloguer debe plantearse. Aunque la labor de difusión tenga su importancia
20/10/06 1:30 PM
  
Luis Fernando
Sí, merece la pena. Trae frutos
20/10/06 3:01 PM
  
José Luis
Ya veo Luis Fernando, que me has hecho recordad en que cuando yo por primera vez entre en Internet. Me dije: "Pues me voy a dedicar a anunciar el mensaje de Cristo", con la intención de aprender de los mejores cristianos, y me he encontrado con bastantes, sacerdotes, religiosos, seglares muy responsables y llenos del amor de Dios, del amor a la Iglesia Católica, disfrutando yo de la Sabiduría de Dios que iba mostrando en esas benditas almas.

Yo tenía también un problema personal, mi impaciencia, por la que todos se llenasen del amor de Dios, pero no conseguía mis propósitos y yo comenzaba a protestar de tal forma, porque no soportaba que Cristo fuese ofendido por tan pensamientos que no correspondían al sentir de la Iglesia Católica. Todavía sigo quejándome, cuando mejor debería callar y seguir el ejemplo de los mejores.
21/10/06 9:56 AM
  
José Luis
Voy a escribir una reflexión sobre mis recuerdo en Internet y la enviaré aquí:

SANTA IGLESIA CATÓLICA:

http://espanol.groups.yahoo.com/group/Santa_Iglesia_Catolica/

Una lista que me hice y la tenía un tanto olvidada, pues a veces escribo más cosas en otros espacios que no en lo que yo me preparo.

Por el momento no tengo mucho escrito en esa lista.
21/10/06 9:59 AM
  
jan
estoy buscando el camino que me lleve a
lo que intuyo,pueda ser la razon por la que vine aqui, sin pedirlo, viendo en mi interior las paredes que me rodean de la cotidianedad, sin poder ver a su traves si existe ese algo que me inquieta, esa trascendencia, ese destino final, que si se me permite expresarlo asi, nada tiene que ver con el polvo que pisamos.mientras tanto me consuela, que en mi andadura, tengo el proposito, que por otra parte lo siento de forma natural, de no hacer daño a los demas y de lo poco que aporto sin esfuerzo, para hacerles mas llevadera la existencia.
y siento que solo eso no es la verdad.



18/01/07 9:36 PM

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