Reírse es muy sano

Entre los artículos de tema religioso, los hay muy buenos, buenos, regulares… y luego hay otros que, si no sirven para otra cosa, al menos nos permiten reírnos un poco, que también es muy sano.

Leo en multi-Religión Digital un artículo de los de esta última categoría. Se titula “El celibato denostable” y es para estar riéndose bien a gusto durante todo el día. El autor ofrece lo que considera que es un argumento irrefutable para rechazar el celibato sacerdotal y supongo que se queda muy satisfecho después de instruirnos a los demás, pobres cavernícolas ignorantes.

¡Pásmense ustedes! El argumento genial viene a ser que el celibato sacerdotal debe abolirse porque se ha incumplido muchas veces a lo largo de la Historia. Es impresionante el silogismo: Puesto que a) el celibato sacerdotal podría eliminarse y b) se incumple en ocasiones, entonces c) debe eliminarse. Aristóteles se habría maravillado de esta lógica.

Vamos a aplicar el razonamiento a un campo secular. Por ejemplo, las normas de tráfico. Es indudable que las normas de tráfico se han incumplido mucho o “masivamente” como dice el autor del artículo. También es indudable que esas normas podrían no existir (basta darse una vueltecita, por ejemplo, por El Cairo y ver cómo se conduce allí). Luego, según la lógica del “celibato denostable”, las normas de tráfico son denostables y deberían eliminarse. Hay que ver lo que se aprende leyendo artículos de multi-religión.

Para el autor, sin embargo, la lógica no parece ser muy importante. Lo importante es acabar con el celibato sacerdotal, porque mantener algo que se incumple es una “concepción de la sexualidad, cuando menos poco realista”. Supongo que también serán poco realistas el matrimonio indisoluble, la fidelidad matrimonial, la igualdad de la mujer o el respeto de la vida humana, porque, a lo largo de la Historia, ha habido infinidad de divorcios, adulterios, machismo, abortos e incumplimientos de prácticamente cualquier otra norma moral, eclesiástica o civil.

Además de lo anterior, que, como digo, es más para reírse que otra cosa, el artículo también tiene una parte triste, en mi opinión. Aparentemente, ha sido escrito por un cura secularizado y casado del MOCEOP (el “Movimiento por el Celibato Opcional”). Nada tengo yo que decir a un sacerdote por haberse secularizado, eso queda entre él, Dios y la Iglesia. El único sacerdote secularizado que conozco es una bellísima persona y me cae muy bien. Sin embargo, cuando uno, por la razón que sea, incumple una promesa solemne hecha ante Dios y ante los hombres, yo diría que lo adecuado es quedarse calladito sobre el tema. Mejor no meneallo, que diría Cervantes.

En fin, entiendo que, en multi-Religión Digital, se considera publicable cualquier artículo que hable de sexualidad, especialmente si es contra la doctrina de la Iglesia o criticándola (basta ver los artículos de hoy de los dos responsables del portal: “La Iglesia católica (sic) no quiere curas gays, pero…” y “Sexo por todas partes”). Sin embargo, en algún sitio habrá que poner el listón, digo yo.

Arqueológico Brutote