Atea, judía o morir

«Mi madre y yo hemos decidido tajantemente que no me voy a quitar la cruz. No renunciaré a mi fe. No existe ningún precio capaz de comprar a Cristo»

Alina Milan cursaba el quinto año de Derecho en la Universidad estatal de Moscú. Nacida en 1988, disfrutaba de una vida estudiantil serena… hasta que le detectaron Hidatidosis alveolar hepática, una enfermedad que consume el hígado, llevando a quien lo padece a una muerte segura.

Urgida de un trasplante de hígado, Alina y su madre decidieron buscar soluciones, pues en Rusia no se practica aún ese tipo de operaciones. Consultando, volaron a Israel en octubre del 2011, concretamente al The Tel-Aviv Sourasky Medical Center. Ahí, Alina se sometió a unas pruebas preliminares, que lanzaron su veredicto: o se hacía un trasplante urgente o le quedaba, cuando mucho, dos semanas de vida.

Madre e hija regresaron a Moscú con un serio dilema. Ese tipo de cirugías eran muy costosas y la familia no tenía medios para financiarla. Pero había una oportunidad que podría solucionar todos los problemas. Si Alina obtenía la ciudadanía israelí la operación se efectuaría de modo gratuito, pues implicaba el libre acceso a la atención médica estatal.

En un principio, todo parecía simple, pues Alina tenía ascendencia judía. Pero, sin embargo, había un "pero". En el cuestionario de ciudadanía que debía rellenar, una de las preguntas era el tipo de religión que profesaba. De acuerdo con las leyes vigentes, sólo quienes profesan el judaísmo o que se consideraban ateos podrían ser ciudadanos de Israel. Por ello, si Alina ponía “judío” o “ateo”, obtendría la ciudadanía inmediatamente. Pero si ponía cristiano, todas las puertas se le cerrarían.

Alina decidió preguntar a su director espiritual, el P. Alejandro Naruszewa, qué debía hacer. Así lo relata el mismo sacerdote:

«Me llamó por teléfono y me preguntó qué hacer, pues los médicos le habían dicho que sólo contaba con dos o tres semanas de vida. Teóricamente, para mí la elección era simple: o la mentira, eligiendo renunciar a su fe con la esperanza de poder sobrevivir, o la plena confianza en Dios». Sin embargo, no se sentía quién para decidir en el destino de la joven «y no sabía qué decir… aunque sí lo sabía en realidad». Con estos sentimientos encontrados, se fue al hospital para ver a la joven.

Ahí se encontró con la madre de Alina, que lo esperaba en la antesala de la zona de reanimación: «Incluso antes de entrar, la madre de la enferma me dijo que ella y su hija habían ya decidido qué hacer. Y antes de que pudiera decir nada, me cambió el tema de conversación, porque veía que yo podría tener miedo de escuchar algo que sería horrible para mí como sacerdote y cristiano».

Por fin, entraron en la sala. Delante de él, el P. Alejandro se topó con «una joven delgada, de color amarillo, muy poco parecido a lo que la joven de 22 años debería ser». Sonriente, con ojos claros y serenos, Alina miró al sacerdote y le dijo sin ningún preámbulo: «Mi madre y yo hemos decidido tajantemente que no me voy a quitar la cruz. No renunciaré a mi fe. No existe ningún precio capaz de comprar a Cristo».

Ante tan grande valentía, el P. Alejandro decidió buscar dinero por todos los medios posibles. Entre los amigos de la Universidad juntaron una buena cantidad de dinero, pero no llegaron a los 300,000 dólares que cuesta la operación. Y así, el 14 de marzo del 201, Alina dejaba este mundo.

Antes de su muerte, Alina se las arregló para escribir una carta para sus amigos:

«No muestro ningún heroísmo. En realidad, no tengo otra opción, pues ya había hecho mi elección hace tiempo: soy cristiana ortodoxa. Tengo ante mí un documento del Ministerio de Interior de Israel. Un apartado reza así: “Acepto la ciudadanía / la ley / religión del país”. Y tienes que firmar. ¿Elijo?

«Para mí, lo importante no es lo que queda en el papel, sino ¿qué pasa con mi alma? La confianza en Dios es más fuerte que cualquier valor, que cualquier derecho, país, diagnóstico o cualquier tiempo terrible. Incluso en los días más oscuros no me deja la sensación de que Dios sostiene mi mano. La única opción que hice por mi fe en Dios hace ya mucho tiempo no está vinculada a ninguna nacionalidad. Y no me importa qué venga: yo le daré gracias por aquello que suceda en mi vida».

Al final, da gracias por quienes se preocupan por ella, volviendo a resaltar que no es un héroe. Aunque el verdadero heroísmo consiste precisamente en dejar a un lado tus cosas para cuidar a los demás. Y justamente sus últimas palabras fueron para sus amigos, invitándoles a optar por Dios siempre, sean cuales sean las dificultades en su vida.

P. Juan Antonio Ruiz, LC

19 comentarios

Isaac
¿No estaréis justificando el antisemitismo con este tipo de notas? Israel es el último baluarte de Occidente.
25/04/12 7:39 PM
Luis Fernando
O sea, contamos la verdad de un caso y por eso justificamos, ni más ni menos, que el antisemitismo.

Yo creo que más bien son los comentarios como el tuyo, Isaac, los que favorecen dicho antisemitismo
25/04/12 8:36 PM
willyrapido
No existe ningún ánimo de antisemitismo en este caso.
Lo que sucede es que un estado, ( de Israel), que impone sus condiciones, (profesión de la religion) evidentemente no es un estado democrático, ni teocrático, como algunos pretenden idealizar. No es el último bastión de Occidente. Es sencillamenye un estado capitalista, que utiliza la "torah", como máscara de "su religion virtual", para buscar una justificación historica, de su existencia, basado en el Pentateuco. Y nada más.
25/04/12 8:50 PM
Francisco Javier
Siempre que se habla de gente judía haciendo cosas injustas saltan los listos: "ANTISEMITA"!!!!!!!


¿Es que los judíos no matan, no roban, no mienten, no extorsionan, no cometen injusticias...?

¡Por favor! No seamos irracionales...

Es evidente que la legislación de Israel es INJUSTA proporcionando la ciudadanía inmediata a los de raza judía "judíos o ateos" pero no cristianos. ¿Eso significa que odiemos a todos los judíos por denunciarlo? Pues obviamente NO.
25/04/12 9:04 PM
juvenal
Esta noticia tiene todas las papeletas para ser más falsa que una moneda de cinco euros.
- La hidatidosis hepática se trata de diversas formas, no siendo el trasplante una de ellas.
- Las normas de retorno del estado de Israel no dicen nada de declararse ateo o judío.
- Las fechas que se indican en el artículo son imposibles. Esta noticia lleva circulando por medios católicos polacos desde comienzos de 2011 (http://ekai.pl/wydarzenia/z_prasy/x39942/nie-porzucila-swej-wiary/)
25/04/12 9:54 PM
Juan
Isaac: ¿tomaste tu medicación hoy?
25/04/12 11:36 PM
Luis Fernando
Juvenal:

1- El trasplante es necesario cuando la enfermedad no ha sido detectada a tiempo y el hígado está ya hecho trizas.

2- Hace años leí varios testimonios de judíos mesiánicos (o sea, cristianos) que no recibían la nacionalidad israelí precisamente por ser cristianos. No sé si habrá cambiado esa realidad últimamente, pero que eso ocurría es algo que no admite discusión.

3- Sí es posible que haya un problema con las fechas ofrecids por el P. Juan Antonio, pero en el enlace que nos has puesto aparece L´Osservatore romano como fuente de la noticia, lo cual hace altamente improbable que estemos ante algo falso.
25/04/12 11:50 PM
Luis Fernando
Veo que en el 2008 hubo polémica por la cuestión de la concesión de nacionalidad israelí a cristianos descendientes de judíos:

http://cgeneral.blogcindario.com/2008/08/00044-israel-no-acepta-la-inmigracion-de-cristianos-etiopes-descendientes-de-judios.html
25/04/12 11:56 PM
Ángeles
Lo que debe ponderarse es la fe que demuestra esta joven, qué valor y fortaleza !!! encomendémonos a ella para que interceda por nosotros ante Dios y Él nos ayude a superar nuestras cobardías al confesar y prácticar nuestra fe. Dios les bendiga!
26/04/12 12:20 AM
juvenal
LF:
¿No te resulta sospechoso que esta noticia tenga su origen en páginas polacas?, parece raro siendo la protagonista rusa. El nombre Aleksandra Naruszewa no me parece muy ruso, yo diría que es polaco y de una mujer.
Las normas para adquisición de la ciudadanía israelí las puedes ver aquí: http://www.mfa.gov.il/MFAES/Facts+About+Israel/Adquisicin+de+la+Nacionalidad+Israel.htm
Lo de no pertenecer a otra religión sólo es aplicable cuando eres un converso, no cuando eres hijo o nieto de judío.
Esta noticia me parece tan falsa como la historia de Juan Pablo II y Meir Lau.
26/04/12 9:06 AM
Luis Fernando
¿Qué más da que la noticia aparezca en la edición polaca de L´Osservatore?

Repito que a los judíos falasha que eran cristianos se les denegó la nacionalidad israelita. Punto final al debate sobre la veracidad del caso.
26/04/12 9:31 AM
Manuel de María
Sólo hay un perseguido. Sólo hay un odiada, que tratarán todos de destruir. Por desgracia Occidente se suicidó hace tiempo y no tiene ningún baluarte. La odiada parecerá haber desaparecido, muerta. Pero como el Perseguido resucitará y le será dado al mundo un tiempo de verdadero Shalom. Esta historia horrible y maravillosa es un perfecto anuncio de ese futuro seguramente muy próximo. Surrexit Dominus vere, alleluia!
26/04/12 6:25 PM
Gregory
No considero que esta historia sea una promoción del antisemitismo, es claro que es una denuncia a una practica concreta en el estado de Israel que como sabemos nunca ha sido teocratico.
26/04/12 6:59 PM
Javiergo
Ya estoy harto de escuchar la solemne tontería de que "Israel es el último baluarte de Occidente", que es el argumento de toda la extrema derecha europea y de los sionistas neocon como Aznar. Criticar no a los judíos, ojo, sino a la política de asentamientos ilegales del Estado de Israel, junto a sus atropellos de los derechos humanos y su incumplimiento sistemático de las resoluciones de la ONU no es "antisemitismo", es atenerse a la verdad sin respetos humanos. Todo lo que está mal es criticable y no se pueden poner puertas al campo, pese a quien pese. Por cierto, antes de la creación del Estado de Israel, ya Occidente gozaba de excelente salud y tenía baluartes en todo el mundo con el colonialismo. No nos engañemos más con tópicos falsos y manidos.
26/04/12 8:50 PM
Padre Juan Rodríguez
Después de la Shoá y de 'Dignitatis Humanae', no corresponde a un cristiano divulgar este tipo de noticias a todas luces tendenciosa y antisemita.

Nuestros hermanos mayores han sufrido mucho a manos de los cristianos. Tienen todo el derecho del mundo a no aceptarnos en sus centros médicos sin el pago correspondiente y a atender en forma gratuita a los miembros del Pueblo Elegido de Israel.

Lo de esta chica es una locura; no es martirio, ni ejemplo de santidad. Por no firmar una papeleta, se suicidó. Ha pecado contra la Vida. Ha pecado contra la Humanidad. (Independientemente de las circunstancias eximientes que existan en este caso concreto y la malformación en una espiritualidad integrista ya superada.)
26/04/12 10:09 PM
Kairós
Los Falashas son judíos, no cristianos. Son judíos negros, de Etiopía, reconocidos como tales no hace más de 50 años. Según parece descienden de la relación de Salomón con la reina de Saba.

Si es cierta la noticia... que razón tienen los que me dicen que Israel es un país ateo.
26/04/12 10:33 PM
P. Juan Antonio Ruiz J., LC
Agradezco a todos sus comentarios e interés. Mi intención con este artículo es más de carácter de testimonio de fe: cómo una joven es capaz de renunciar a su propia vida con tal de mantener algo que, para ella, es más sagrado, su fe. Las circunstancias que lo rodean son totalmente secundarias.

En medio de un mundo en el que muchos reniegan fácilmente de su fe ante la primera dificultad de cambio, ejemplos como los de Alina creo que pueden ayudarnos a ver que VALE LA PENA cualquier sacrificio con tal de alcanzar la vida eterna con Dios... incluso si eso conlleva morir. ¿Una locura? Sí, es la locura de los héroes, de los mártires. Una locura que necesitamos hoy más que nunca.

Les mando a todos un fuerte abrazo y sepan que están en mis oraciones. Gracias de nuevo por todo.

P. Juan Antonio Ruiz J., LC
27/04/12 12:22 PM
P. Juan Antonio Ruiz J., LC
Agradezco a todos sus comentarios e interés. Mi intención con este artículo es más de carácter de testimonio de fe: cómo una joven es capaz de renunciar a su propia vida con tal de mantener algo que, para ella, es más sagrado, su fe. Las circunstancias que lo rodean son totalmente secundarias.

En medio de un mundo en el que muchos reniegan fácilmente de su fe ante la primera dificultad de cambio, ejemplos como los de Alina creo que pueden ayudarnos a ver que VALE LA PENA cualquier sacrificio con tal de alcanzar la vida eterna con Dios... incluso si eso conlleva morir. ¿Una locura? Sí, es la locura de los héroes, de los mártires. Una locura que necesitamos hoy más que nunca.

Les mando a todos un fuerte abrazo y sepan que están en mis oraciones. Gracias de nuevo por todo.

P. Juan Antonio Ruiz J., LC
27/04/12 12:23 PM
InfoCatólica
Ante la politización del tema, cerramos comentarios.
27/04/12 12:24 PM

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