Los publica la Pave the Way Foundation

Nuevos documentos prueban la firme oposición al nazismo por parte de la Iglesia Católica en Alemania

Nada de «Papa de Hitler». Nada de colaboradores voluntariosos del nazismo. Algunos documentos encontrados en Alemania por la Pave the Way Foundation (PTWF) prueban que ya desde septiembre de 1930, los obispos católicos habían excomulgado al Partido Nazi de Hitler. De los documentos hallados por Michael Hesemann. Colaborador de la PTWF, en septiembre de 1930, tres años antes de que Adolf Hitler subiera al poder, la archidiócesis de Maguncia condenó de forma pública al Partido Nazi. Según las normas publicadas por el Ordinario de Maguncia, estaba «prohibido a cualquier católico inscribirse en las filas del partido nacionalsocialista de Hitler».

(Zenit/InfoCatólica) También aparece como disposición que “a los miembros del partido hitleriano no se les permitía tomar parte en grupo en funerales u tras celebraciones católicas similares” y que “mientras un católico estuviera inscrito en el partido hitleriano no podía ser admitido a los sacramentos”.

La denuncia de la archidiócesis de Maguncia fue publicada en primera página por “L’Osservatore Romano” en un artículo publicado el 11 de octubre de 1930.

El título del artículo es: “El partido de Hitler condenado por la autoridad eclesiástica”.

En él se declaraba la incompatibilidad de la fe católica con el nacionalsocialismo. Ninguna persona que se declarara católica podía convertirse en miembro del partido nazi, bajo pena de la exclusión de los sacramentos.

En febrero de 1931 fue la diócesis de Münich la que confirmó la incompatibilidad de la fe católica con el partido nazi.

En marzo de 1931 también la diócesis de Colonia, Parderborn y las de las provincias de Renania denunciaron la ideología nazi, prohibiendo de modo público cualquier contacto con los nazis.

Indignados y furiosos por la excomunión emitida por la Iglesia católica, los nazis enviaron a Hermann Göring a Roma con la petición de audiencia al Secretario de Estado Eugenio Pacelli. El 30 de abril de 1931, el cardenal Pacelli rechazó encontrarse con Göring, que fue recibido por el subsecretario, monseñor Giuseppe Pizzardo, con el encargo de tomar nota de todo lo que los nazis pedían.

En agosto de 1932, la Iglesia católica excomulgó a todos los dirigentes del Partido nazi. Entre los principios anticristianos denunciados como herejes, la Iglesia católica alemana mencionaba explícitamente las teorías raciales y el racismo.

Siempre en agosto de 1932, la Conferencia Episcopal alemana publicó un documento detallado en el que se daba instrucciones de cómo relacionarse con el Partido Nazi.

En el documento, publicado por la Conferencia Episcopal Alemana, está escrito que estaba absolutamente prohibido a los católicos ser miembros del Partido Nacionalsocialista. Quien desobedeciera sería inmediatamente excomulgado.

En el documento de la Conferencia Episcopal encontrado por la PTWF está escrito que “todos los Ordinarios han declarado ilícito pertenecer al Partido Nazi”, porque “las manifestaciones de numerosos jefes y publicistas del partido tienen un carácter hostil a la fe” y “son contrarias a las doctrinas fundamentales y a las indicaciones de la Iglesia católica”.

En enero de 1933 Adolf Hitler llegó al poder y las asociaciones católicas alemanas difundieron un folleto titulado “Un llamamiento serio en un momento grave”, en el que consideraban la victoria del Partido Nacionalsocialista “un desastre” para el pueblo y para la nación.

El 10 de marzo de 1933, la Conferencia Episcopal alemana reunida en Fulda escribió un llamamiento al Presidente de Alemania, el general Paul L. von Beneckendorff und von Hindenburg para expresar “nuestras preocupaciones más graves que son compartidas por amplios sectores de la población”.

Los obispos alemanes se dirigieron a von Hindenburg manifestando su temor de que los nazis no respetasen “el Santuario de la Iglesia y la posición de la Iglesia en la vida pública”.

Por esto pidieron al Presidente una “urgente protección de la Iglesia y de la vida eclesiástica”. Los obispos católicos habían previsto esto, pero no fueron escuchados.

Los documentos encontrados por la PTWF son de notable importancia porque ponen fin a las repetidas calumnias que quisieran manchar a la Iglesia católica como diligente colaboradora del nazismo, cuando en realidad fue la primera en denunciar su peligrosidad.

23 comentarios

"En agosto de 1932, la Iglesia católica excomulgó a todos los dirigentes del Partido nazi. Entre los principios anticristianos denunciados como herejes, la Iglesia católica alemana mencionaba explícitamente las teorías raciales y el racismo.
Siempre en agosto de 1932, la Conferencia Episcopal alemana publicó un documento detallado en el que se daba instrucciones de cómo relacionarse con el Partido Nazi.
En el documento, publicado por la Conferencia Episcopal Alemana, está escrito que estaba absolutamente prohibido a los católicos ser miembros del Partido Nacionalsocialista. Quien desobedeciera sería inmediatamente excomulgado."
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Una Conferencia Episcopal emitiendo documentos sobre cómo relacionarse con un Partido Político (PP) y prohibiendo a los católicos ser miembros del mismo bajo pena de excomunión.
¡Qué interesante!
¡Suerte que ahora ya no muere nadie a causa del racismo!
(ni del aborto, ni de nada.)
2/10/09 8:45 AM
Xristoforos
Para Carlo:
Menuda parida, te habrás quedado a gusto.
Auschwitz fue la culminación de décadas de exaltación de la raza blanca como civilizadora y superior a las demás razas inferiores. Solo hay que fijarse en las teorías "científicas" racistas que pululaban por el siglo XIX y principios del XX. Y esa superioridad exigía inconscientemente la eliminación de personas inferiores, labor que empezó el nazimso al atacar a la raza semita, y a gente de raza blanca no adecuada: minusválidos, personas con problemas psíquicos, homosexuales, gitanos y cristianos.
2/10/09 10:32 AM
enkibilal
¿Nuevos documentos?
Ya se sabía que antes de 1933 la IC ya disponía que:
+Los católicos no podían pertenecer al Partido Nazi ni asistir a sus concentraciones.
+Los miembros de dicho partido no podían recibir los sacramentos ni ser enterrados en suelo sacro.
+Los nazis no podían asistir uniformados a los actos católicos ni siquiera funerales.

Pero, después de las elecciones de marzo del 33, Hitler recibió el apoyo parlamentario necesario del Zentrum (partido católico) para recibir poderes dictatoriales, gracias a las negociaciones "cocinadas" por el Secretario de Estado Vaticano Pacelli para firmar el concordato.
La IC recibía, entre otras ventajas y prerrogativas el kirchensteuer, el impuesto religioso que cedía a la IC el 9% del salario bruto de todos los trabajadores católicos.
A cambio Hitler consiguó la autodisolución del Zentrum y la lealtad de la jerarquía. Cada vez que era nombrado un nuevo obispo, debía recitar: "Juro ante Dios y sobre los Santos Evangelios y prometo, al convertirme en obispo, ser leal al Reich alemán y al Estado. Juro y prometo respetar al gobierno constitucional y hacerlo respetar por mis clérigos."
Además se permitió a los católicos afiliarse al Partido Nazi y a éstos asistir a las celebraciones católicas.
Tras la firma del concordato, se celebró en la catedral de Berlín una misa presisida por el nuncio Orsenigo, donde los nazis asistieron uniformados y cantaron su himno, el Horst Wessel Lied:
".../todos estamos listos/ pronto hondearán las banderas de Hitler/...".
2/10/09 11:27 AM
José María
Lo más curioso, par ver la envergadura de la mentira, es que se hable de Conferencia Episcopal Alemana, cuando las Conferencias Episcopales no existían antes del CVII.

Un católico no incurría en excomunión por pertenecer al NSDAP, tanto es así que no hay ningún documento de la Iglesia por el cual se excomulgue, por ejemplo, a Hitler. Repito niguno. Y la Iglesia de aquel entonces no era parca en públicos escarmientos para públicos herejes y/o pecadores.
2/10/09 11:38 AM
Alexis
Enkibilal eres injusto con la verdad, Mit brennender Sorge (alemán: con viva preocupación) es una Carta encíclica del Papa Pío XI sobre la situación de la Iglesia en el Reich Germánico, publicada el 14 de marzo de 1937. En esta encíclica se condena claramente el nazismo y precisamente fue Paceli quien cocinó esta condena.
2/10/09 12:52 PM
Javier López
Habrá que ver esos "nuevos documentos", pero sean lo que sean, parece que de nuevos tienen poco, y sobre todo no van a simplificar la historia de una relación, la de la Iglesia y el nazismo, que fue cualquier cosa menos sencilla.

A mí me interesa mucho el tema, y sobre él escribí hace unas semanas un comentario en uno de los blogs. Creo que puede ser interesante reproducirlo aquí, si se me permite, y recomendando a los no interesados que se salten mi "ladrillo"
2/10/09 1:24 PM
enkibilal
Alexis:
El titular de la noticia es injusto con la verdad.
Ni se trata de nuevos documentos ni se refiere a toda la historia del nazismo.
La IC según circunstancias y conveniencias fue dando bandazos en su relación con el Partido Nazi.
Antes del concordato las relaciones eran hostiles, tras la firma del mismo y hasta 1937 las relaciones se trataron de mejorar, y tras la encíclica, las relacione fueon tensas pero nunca de abierto enfrentamiento.
El concordato no se anuló, a los católicos se les siguió permitiendo militar en el Partido Nazi, ningún dirigente nazi fue jamás excomulgado, y encima tras la guerra, a través de la llamada "ruta de las ratas" o "ruta de los monasterios", miles de criminales de guerra fueron ayudados por la jerarquía eclesiástica para huir de los juicios de Nuremberg.
Fue el caso del archiconocido doctor Menguele, a quien el obispo austríaco Alois Hudel proporcionó documentos falsos para huir a la Argentina.
El Vaticano había entrado en la Guerra Fría y ayudaba a muchos nazis a huir a Sudamérica para ayudar acombatir la subversión comunista.
Otros criminales como Pavelic, el líder de los ustachi croatas, responsable de genocidio de medio millón de serbios y judíos encontraron refugio en la España nacionalcatólia de Franco.
2/10/09 1:25 PM
Javier López
"El artículo me parece muy interesante, aunque creo que se le pueden aportar algunos matices. El primero se refiere a la enorme complejidad de las relaciones del movimiento nacionalsocialista con el Cristianismo en general y con la Iglesia Católica en particular. Para empezar, no están claras las ideas religiosas del propio Hitler, que parece ser que era teísta, que creía en un Dios personal al que solía invocar en sus discursos, pero que es dudoso que creyese que esa deidad fuera la Santísima Trinidad. Nunca apostató de la Iglesia Católica, pero nada en su vida ni en su muerte parecen indicar que diese importancia a su condición de católico. Es más, parece haber declaraciones privadas suyas que revelan cierta actitud "librepensadora" o cientificista hacia los dogmas católicos. Pero su pensamiento nos resulta en todo caso contradictorio y poco claro, y de ninguna manera pueden bastar burdas simplificaciones que reducen todo al tan traído "paganismo nazi".

De otra parte, hay que recordar que el nacionalsocialismo es ante todo un movimiento ultranacionalista alemán. Y que en el nacionalismo alemán el influjo septentrional y prusiano, pero no sólo él, tenía un ingrediente anticatólico. Entre otras causas, se exaltaba a Lutero como uno de los artífices de la nación alemana, frente al carácter romano y por tanto supuestamente no germano de la Iglesia Católica; y ello enlaza con el antirromanismo de ese nacionalismo alemán, que se pretende afirmar en la enemiga de romanos y germanos en la Antigüedad (Arminio, etc.). Hay que decir que Hitler, desde los inicios de su carrera política, se distanció de ese anticatolicismo, dejando claro que para él lo germano no se contraponía a lo católico sino a lo judío. Esta actitud le valió severas críticas de personajes que representaban a ese nacionalismo que inexactamente he llamado "prusiano", y no impidió que muchos otros nazis mantuvieran esas tradicionales posturas anticatólicas. Luego hubo otros nazis que asumieron directamente una posición anticristiana (Rosenberg, Martin Bormann), y un sector minoritario pagano, dejando aparte las curiosas veleidades esotéricas y paganoides de Himmler y su círculo. Pero éstas no fueron las ideas oficiales del movimiento nazi, ni tampoco del propio Hitler. La postura oficial fue no identificarse con ninguna de las confesiones, aunque es cierto que en general había mucha más simpatía hacia el protestantismo por ser supuestamente más germánico, más nacional y no depender del Vaticano al que no dejaba de verse como un poder exterior.

No hay que olvidar que el Estado de Hitler admitía en su seno mucha más pluralidad de que se suele creer, y que en ámbitos de tanta importancia como el Ejército o la diplomacia había importantes personajes reconocidamente no nazis y aun críticos del sistema. Goebbels, pese a su anticlericalismo y heterodoxia, se consideraba católico. Hubo muchísimos fervientes católicos que sirvieron a su patria bajo el régimen de Hitler: el embajador Von Papen, el general Halder, el mariscal Von Leeb, o el heroico piloto Werner Mölders (el primer hombre que derribó cien aviones). Es, como he dicho, un fenómeno enormemente complejo.

Cuestión aparte, y la que a los cristianos más inadmisible nos puede resultar del régimen nacionalsocialista, es el brutal relativismo moral a que condujo su ultranacionalismo. Los dirigentes nazis, y Hitler en particular, no eran hombres sádicos ni crueles, pero consideraban que ningún freno moral debía detener un acto, por criminal que fuera, si lo creían en provecho de la grandeza de Alemania. Algo que los católicos, ni entonces, ni ahora ni nunca podemos aceptar.

Por otra parte, al considerar las relaciones de la Iglesia con el III Reich, creo que no pueden dejar de considerarse los aspectos positivos de aquel régimen que, no lo olvidemos, tenía el masivo y rotundo respaldo de la población alemana, incluidos los católicos que, si bien mucho más reticentes que los protestantes al partido nazi, eran en su mayoría fuertemente leales a Hitler como caudillo nacional de Alemania.

Así, hay que recordar que la encíclica "Mit brennender sorge" condena aspectos del movimento nazi ciertamente deleznables, pero que no tenían carácter oficial. Es más, no hay una condena del nacionalsocialismo como tal, ni del Estado de Hitler, en la encíclica. Ni siquiera cuestiona la afiliación obligatoria a la Hitlerjugend, elogiando incluso sus "cantos de libertad" y su fomento del amor a la patria; sí condena que se utilizara para alejar a los jóvenes de la doctrina y la práctica religiosa. La encíclica está fechada el día 14 de marzo de 1937, y exactamente cinco días después el mismo Papa Pío XI anunciaba otra, "Divini Redemptoris", en la que, en marcado contraste con la anterior, condenaba sin ambages el comunismo como "intrínsecamente perverso".

Puede que el nazismo fuera brutal y que muchos de sus dirigentes y seguidores fueran hostiles a la Iglesia. Pero en una época en que el marxismo difundía sus salvajes ideas materialistas y anticristianas, y destruía los cimientos mismos de la Civilización Occidental, los nazis fueron capaces de disputarles con éxito el favor de las masas y de aplastar el comunismo en la nación más importante de Europa. Por erróneas y criminales que fueran algunas de sus facetas, su actitud frente al cristianismo, que repito fue muy compleja, siempre fue más favorable que la del comunismo o la de las corrientes progresistas que dominaron la "cultura" en la era de Weimar.

Por todo ello, la Iglesia y el Estado nacionalsocialista nunca dejaron de reconocerse entre sí."
2/10/09 1:29 PM
José Ángel Antonio
Que Enkibilal llame "colaboración" a las relaciones de la Iglesia con Hitler después del 33 es como llamar "colaboradores de ETA" a los empresarios que pagan impuesto revolucionario con una pistola en la sien.

La campaña nazi contra la Iglesia fue constante y al llegar al poder en 1933, evidente: en 1933, último año de elecciones, hubo 34.000 apóstatas católicos y 57.000 protestantes. En 1937, después de cerrar las escuelas cristianas y afiliar a todos los menores a organizaciones nazis, apostataron 104.000 católicos y 338.000 protestantes. En total, de 1932 a 1944, dejaron la fe oficialmente 648.000 católicos y 2.050.000 protestantes, seducidos o presionados por el nazismo.

Recomiendo 2 links muy útiles:
Himmler: del paganismo nazi al Holocausto
http://www.larazon.es/noticia/himmler-del-paganismo-nazi-al-holocausto

Y este recopilatorio de fechas en el blog de Elentir:
http://www.outono.net/elentir/?p=4005

Las fechas Elentir las saca de libro de Barbara Koehn "La resistencia alemana contra Hitler" (2003), que recoge una serie de datos que evidencian la represión de Hitler contra la Iglesia Católica
2/10/09 3:21 PM
manuel morillo
Me parece excelente cualquier forma de rechazo del nazismo (heredero del Hegelianismo) y una forma mas de nacionalismo y de socialismo (ambos hijos del liberalismo)

Pero me parece inncesario hacer constantes recordatorios de esos documentos

No veo ningún partido nazi en el mundo con posibilidades de acceder al poder y gobernar un Estado, ni con influencia en los Media importantes, etc.. es decir no son una amenaza peligrosa para la Verdad y la Libertad.

Es más, cuando se sigue atacando unas ideas que desde hace 65 años está acabada me suena a que en vez de hacer un ejercicio de denuncia real es una forma de rendir pleitesia a los actuales podereres que son otras ideologías tan malas o peores, el marxismo y el liberalismo, cuyo único argumento es que ganarón la guerra. Es decir que se mantienen porque supieron usar la fuerza mejor.

El verdadero peligro es el marxismo que tiene bajo sus garras más de un cuearto de la humanidad en forma de estado y más de la mitad en su dominio "cultural", y el liberalismo que tiene a la otra mitad sometida-
Entre ambos difunden a través de los organismos internacionales que controlan, la "cultura de la muerte"

Ambos tienen bajo su responsabilidad millones de muertos, no hace 13 lustros, sino cada año, también en el actual, en forma de eutanasia, aborto, hambrunas, querras injustas, etc...

Me parecería más necesario, y útil para el alma y la inteligencia de sus fieles, que la Iglesia recordara sus documentos y advertencias contra el liberalismo y el marxismo
2/10/09 3:41 PM
enkibilal
José Ángel Antonio:
Donde sí tenían la pistola en la sien los obispos era en la URSS, y eso no impidió a Pío XII en 1949 excomulgar a todos los comunistas. ¿Por qué esas dos varas de medir? ¿tal vez porque los rojos perseguían explícitamente a los cristianos, mientras los nazis molestaban sólo a los que se salían del tiesto?
Claro que hubo algún Max kolbe, pero mientras los nazis se limitaban a gasear judíos, maricas y rojos, la norma en la Iglesia era mirar para otro lado.
Pío XII no tenía miedo de las repleslias de Hitler, como no tuvo miedo de las replesalias de Stalin. Lo que le daba pánico era que el partido comunista llegara al poder en Italia tras la guerra. Porque a diferencia de fascistas y nazis, los comunistas no firmaban concordatos.
2/10/09 3:56 PM
enkibilal
Y de todas formas lo cómico es cómo se salta de un argumento a otro según convenga.
Primero nos intentan colar unos documentos ya conocidos como "nuevos", que parece como si unos arqueólogos hubieran descubierto los manuscritos del Mar Muerto, cuando son documentos que tratan de cuestiones públicas y notorias.
Segundo que esos "nuevos" documentos hablan de la época anterior al concordato, como si el nazismo no hubiera pasado del año 33.
Y tercero que cuando se desmiente que la Iglesia se opusiera frontalmente al nazismo, se vuelven a las manidas excusas de que eran tiempos difíciles, las circunstancias, las presiones...
Aquí lo escandaloso no es lo que pasara hace 70 años, sino que los cristianos de ahora mienten al presentar medias verdades y documentos antiguos como lo que no son.
2/10/09 4:05 PM
Enkibilal, dices 3 mentiras por frase, así a ojo, y refutarlas da igual porque ni lo vas a leer, así que... pero al menos dos cosas me hacen gracia de las chorradas que has escrito:

"cuando se desmiente que la Iglesia se opusiera frontalmente al nazismo"

A ver... excomuniones, sermones, protestas, quejas, denuncias... ¿no te parecen suficiente oposición? Para ti ¿qué debería haberse hecho para mostrar "oposición frontal"? ¿Invadir el Reich con los 100 soldados de la Guardia Suiza?

"mientras los nazis se limitaban a gasear judíos, maricas y rojos, la norma en la Iglesia era mirar para otro lado"

Cuando los nazis y otras democracias impecables eliminaban "enfermos" o los esterilizaban y mutilaban sin permiso, la Iglesia ya lo denunciaba... Suecia solo pidió perdón a finals de los 90. Repasa este link:

http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=9965

El BULO CRISTIANOFOBO de que la Iglesia no hizo nada por ayudar a los judíos perseguidos (y muchos otros) no te lo refuto yo: te lo refutan estos 13 LÍDERES JUDÍOS, algunos contemporaenos a los hechos, otros historiadores:

http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=7929

¿Qué, Enkibilal? ¿Los judíos contemporáneos a los hechos se equivocan al reconocer la ayuda de la Iglesia mientras que tú, desde tu sofá, tienes razón... porque tú lo dices?

Total, qué sabrán los judíos que vivieron esa época... Enkibilal sabe más, que lo ha leído en un cómic...
2/10/09 5:02 PM
Esteban
Enkilbal no miente, mucho de lo que dice es cierto, porque se pretende manipular la historia, cuando todos sabemos que el Nacional socialismo por X o por Y no fue condenado explicitamente por la Iglesia, aun si el Papa, varios obispos y sacerdotes ayudaron a rescatar judìos, y refugiaron comunistas, judìos y demàs disidentes en los monasterios de Roma, eso no quita que los nazis tuvieran el apoyo de Nuncios y obispos, asì como sacerdotes

Tambien es mentira que los catòlicos miembros del partido nazi estuvieran excomulgados ahì esta Von Papen para contradecir esto
2/10/09 6:53 PM
OS dejo aquí un enlace a un artículo de mi blog en el que podéis ver dos mapas que muestran la relación entre el número y el voto al partido nazi.

http://blogs.periodistadigital.com/bokabulario.php/2007/09/02/p113619#more113619

A más católicos, menos voto a los nazis.

Eso de la 'ruta de las ratas' es otra mentira como la connivencia de Pío XII con los nazis.

Escribe Enkibilal:
"Pío XII no tenía miedo de las repleslias de Hitler, como no tuvo miedo de las replesalias de Stalin. Lo que le daba pánico era que el partido comunista llegara al poder en Italia tras la guerra."

Pues qué inteligencia. Los nazis dominaron Roma totalmente varios meses (entre septiembre de 1943 y junio de 1944) y algunos jerarcas nacionalsocialistas propusieron apoderarse del Vaticano y de la persona del Papa.

Lo que pasa es que hay que desprestigiar a Pío XII como sea por su anticomunismo.

Aquí lo cuenta un antiguo comunista:
http://www.conoze.com/doc.php?doc=1234
2/10/09 7:13 PM
José Ángel Antonio
Esteban... ponme algún link que demuestre que Von Papen era miembro del partido. No digo que no, no lo sé. Pero demuéstralo.

Mucha gente servía a Alemania en el régimen de Hitler sin ser del partido: generales o señoras de la limpieza.
2/10/09 7:23 PM
enkibilal
A ver si queda bien clara m posición respecto al papel de la IC durante el nazismo:

+Yo no soy de esos cristianófobos como se me ha llamado que dicen que Pío XII fue el papa de Hitler.

+Pero tampoco soy de esos ingenuos o mentirosos que ahora pretenden hacernos creer que la Iglesia se opuso frontalmente a Hitler.

+la IC convivió con el nazismo, al principio hostilmente (1923-1933), luego hubo un breve romance(1933-1937) y posteriormente un matrimonio de conveniencia con sus altibajos.

+Pacelli fue antes que pastor, un diplomático. Uno de esos que creía poder domesticar a la fiera, y el plan le salió mal.
Esas cosas pasan en la historia, los EEUU apoyaron a los muyaidin en Afganistán para fastidiar a los rusos y al final acabaron estampando aviones contra las Torres Gemelas. Y decir esto no significa acusar a Reagan de islamista.
La IC aupo a Hitler al poder dictatorial obligando al Zentrum a votar a favor de la Ley de Plenos Poderes que lo convertía en dictador, a pesar de saber ya muy bien quién era y cómo las gastaba.

+Pacelli no era tonto y salvando judíos aparte de acallar su conciencia, salvaba la cara ante la historia y ante los aliados en caso de posible victoria. Pero la misma persona que ayudaba a los judíos a refigiarse en monasterios y huir fuera de Europa, en la posguerra como mínimo consintió que se usara es misma infraestructura para sacar de Europa a criminales nazis como Menguele o Klaus Barbie "el carnicero de Lyon". ¿Por qué? ¿A cambo del dinero robado a judíos y otras víctimas? ¿Para participar en la Guerra fría y combatir el comunismo en Sudamérica? No lo sé, no soy inestigador.

+Podeis buscar excusas sobre las posibles replesalias de Hitler, pero derrotado el ejército alemán y liberada Italia, Pacelli no excomulgó ni a nazis ni a fascistas, sí a los comunistas. A día de hoy o conozco ningún decreto de excomunión a católicos que militen en partidos de extrema derecha.

+Y durante la IIGM se pudo ser católico y nazi sin impedimento de recibir los sacramentos. Y desde luego no deja de sorprenderme que a pesar de todo la IC no rechazara seguir cobrando el impuesto religioso, a pesar de ser un dinero manchado de sangre.
2/10/09 7:45 PM
Efectivamente, Enkibilal, no eres investigador. Hay un hecho irrefutable: los representantes de los judíos, desde Eugenio Zolli -que se convirtió al catolicismo, a Golda Meir, agradecieron a Pío XII su comportamiento.

¿Que hubo católicos que obraron mal? Sí, y también ha habido agún comunista que ha sido buena persona.
2/10/09 8:37 PM
enkibilal
Pedro Barbadillo:

Tú tampoco eres investigador (oye, si me equivoco y has publicado algo, dímelo).
Como no me trago lo de los nuevos documentos y la oposición total y frontal al nazismo, tampoco me creo que "los representantes de los judíos" agradezcan a Pío XII su labor.
Desde luego en el Museo del Holocausto no tiene muy buena imagen del pontífice.
Si nos ponemos exquisitos con la Historia, hay que decir que algunos destacados judíos opinan positivamente sobre el papel de Pío XII durante la guerra.
Aunque sería interesante preguntar a algún líder judío sobre el papel de Pacelli como nuncio en Alemania y Secretario de Estado Vaticano "cocinando" el concordato, y como Papa en la posguerra ayudando o mirando para otro lado con la fuga de los nazis.
En cualquier caso, tampoco se puede resumir la cosa diciendo que "algunos católicos obraron mal". No estamos hablando de algunos cristianos anónimos, sino de Papas, nuncios, obispos, de la Iglesia como institución y de la Santa Sede.
Hechos irrefutables son:
+El único partido que votó en contra de la Ley de Plenos Poderes fue el socialdemócrata (SPD). Los comunistas no pudieron porque Hitler los había encarcelado.Todos los demás incluido el católico Zentrum, se retrataron para la Historia.
+Cuando se firmó el concordato ya existían campos como Dachau donde se encerraba a presos políticos y "asociales" (homosexuales,enfermos mentales,etc). Los sindicatos y partidos políticos estaban prohibidos y las libertades fundamentales suspendidas.
+Por muchas encíclicas y muchas palabras que se dijeran contra los nazis, la Iglesia seguía llenándose los bolsillos con el impuesto religioso.
+La única opción política considerada incompatible con el catolicismo por Pío XII fue el comunismo, al cual no le daba miedo que Stalin pudiera tomar represalias contra los millones de católicos de Europa del Este.
+Jamás un dictador católico, simple bautizado o devoto ha sido excomulgado: Hitler, Mussolini, Franco, Pavelic, Salazar, Batista, Pinochet, Somoza,etc. etc.
+En el índice de libros prohibidos han figurado "Los miserables" de Victor Hugo, "Madame Bovary" de Flaubert, "Ética" de Spinoza, "Discurso del método" de Descartes, "El contrato social" de Rousseau... pero no el "Mein Kampf". Los ojos de algún católico han pecado por leer a Victor Hugo pero no a Hitler.
2/10/09 10:59 PM
Hermenegildo
La Iglesia excomulgó al Partido Nazi, pero la Santa Sede firmó un concordato con la Alemania de Hitler.
2/10/09 11:35 PM
Tulkas
Estando en general de acuerdo con enkibilal (la actitud política de Roma optó por el apaciguamiento y no se condenó ni se actuó con la dureza que ahora consideramos hubiera sido deseable), los dos puntos últimos me parecen dudosos.

a.-Habría que presentar libros contemporáneos a Mein Kampf que fueran prohibidos, para poder comparar.

b.-Habría que ver si Mein Kampf lidia con una cuestión puramente política o afecta a una concepción global de lo humano.
2/10/09 11:39 PM
eduardo
No encuentro nada nuevo que agregar sólo podría incidir en algunos puntos:
1. Resulta un hecho clarísimo que la Iglesia pactó con el partido nazi a efectos de viabilizar la ley de plenos poderes, el clérigo Kaas presidente del Zentrum (partido católico de centro)era intimo amigo del cardenal Pacelli, para entonces secretario de Estado de Vaticano. El Zentrum en pleno votó a favor de otorgarle a Hitler esa prerrogativa, imposible pensar en casualidad.
2. El Zentrum fue disuelto por voluntad propia 15 días antes de firmarse el concordato dejando el parlamento a merced de los nazis.¿Otra casualidad?.
3.El clérigo Kaas fue invitado por Pacelli a la firma del concordato ¿Más casualidad?.

Encuentro ridículo que se conciba a Hitler y al nazismo como el MAL ABSOLUTO, no habría que olvidar que de no ser por ellos el comunismo ateo hubiera barrido con toda Europa y por otro lado tanmpoco hay que olvidar que Hitler tuvo durante varios años un masivo y rotundo respaldo de la población INCLUIDOS LOS CATÓLICOS.
A la fecha en que sólo interesa resaltar lo negativo y que toda alusión favorable es considerada apología, las condiciones no estan dadas para ahondar libre, serena y racionalmente en los hechos históricos que se protagonizaron en la Alemania nazi, en sus principales lideres y en sus consecuencias.
25/10/09 1:04 AM
eduardo
En relación a la oposición católica al nazismo cabría recordar las palabras siguientes:

HITLER"El gobierno del Reich considera que el cristianismo es el fundamentio inamovible de la moral y del código de conducta de la nación, atribuye el máximo valor a sus relaciones amistosas con la Santa Sede y se está esforzando por desarrollarlas.".
MONSEÑOR PREYSING, OBISPO DE MUNICH: "Las declaraciones que el canciller del Reich (HITLER) hizo el 23 de marzo ante el parlamento autorizan a los obispos a suspender, en los momentos actuales, la oposición que han mostrado hasta ahora."
HITLER:" Realmente estoy convencido del gran poder y profunda significación del cristianismo y no permitiré que se promueva en Alemania ninguna otra religión.
CARDENAL FAULHABER:"En un tiempo en que los jefes de Estado del mundo se oponen a Alemania con una fria reserva o un mayor o menor celo, la Iglesia católica el más alto poder moral de la tierra, reafirma por medio del concordato su confianza en el nuevo Gobierno alemán."
VICE CANCILLER ALEMAN GFRANZ von PAPEN : "El Tercer Reich es la primera potencia mundial que no solo reconoce sino que pone en práctica los elevados principios del papado."

Esto es solo una muentra de la "oposición" católica al nazismo
25/10/09 1:29 AM

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