El Papa a los dominicos: «Es la Palabra de Dios la que quema por dentro e impulsa a salir para anunciar a Cristo»

Se cumplen ocho siglos de la fundación de la Orden

El Papa a los dominicos: «Es la Palabra de Dios la que quema por dentro e impulsa a salir para anunciar a Cristo»

El Papa recibió ayer a los participantes en el Capítulo general de la Orden de los Predicadores que se acaba de celebrar en la ciudad italiana de Bolonia. «Con un corazón agradecido por los bienes recibidos del Señor para vuestro Orden y para la Iglesia, los animo a seguir con alegría el carisma inspirado a santo Domingo», dijo el Pontífice.

(InfoCatólica)  

Discurso del Santo Padre a los dominicos

Queridos hermanos y hermanas:

Hoy podriamos describir este dia como «Un jesuita entre frailes»: a la mañana con ustedes y en la tarde en Asís con los franciscanos: entre frailes. Les doy la bienvenida y agradezco el saludo que Fray Bruno Cadoré, Maestro general de la Orden, me ha dirigido en nombre propio y de todos los presentes, ya culminando el Capítulo general, en Bolonia, donde desean reavivar sus raíces junto al sepulcro del santo Fundador.

Este año tiene un significado especial para vuestra familia religiosa al cumplirse ocho siglos desde que el papa Honorio III confirmó la Orden de los Predicadores.

Con ocasión del Jubileo que celebran con este motivo, me uno a ustedes en acción de gracias por los abundantes dones recibidos durante este tiempo. Además quiero expresar mi gratitud a la Orden por su significativo aporte a la Iglesia y la colaboración que, con espíritu de servicio fiel, ha mantenido desde sus orígenes hasta el día de hoy con la Sede Apostólica.

Y este octavo centenario nos lleva a hacer memoria de hombres y mujeres de fe y letras, de contemplativos y misioneros, mártires y apóstoles de la caridad, que han llevado la caricia y la ternura de Dios por doquier, enriqueciendo a la Iglesia y mostrando nuevas posibilidades para encarnar el Evangelio a través de la predicación, el testimonio y la caridad: tres pilares que afianzan el futuro de la Orden, manteniendo la frescura del carisma fundacional.

Dios impulsó a santo Domingo a fundar una «Orden de Predicadores», siendo la predicación la misión que Jesús encomendó a los Apóstoles. Es la Palabra de Dios la que quema por dentro e impulsa a salir para anunciar a Jesucristo a todos los pueblos (cf. Mt 28,19-20). El padre Fundador decía: «Primero contemplar y después enseñar». Evangelizados por Dios, para evangelizar. Sin una fuerte unión personal con él, la predicación podrá ser muy perfecta, muy razonada, incluso admirable, pero no toca el corazón, que es lo que debe cambiar.

Es tan imprescindible el estudio serio y asiduo de las materias teológicas, como todo lo que permite aproximarnos a la realidad y poner el oído en el pueblo de Dios. El predicador es un contemplativo de la Palabra y también lo es del pueblo, que espera ser comprendido (cf. Evangelii gaudium, 154).

Transmitir más eficazmente la Palabra de Dios requiere el testimonio: maestros fieles a la verdad y testigos valientes del Evangelio. El testigo encarna la enseñanza, la hace tangible, convocadora, y no deja a nadie indiferente; añade a la verdad la alegría del Evangelio, la de saberse amados por Dios y objeto de su infinita misericordia (cf. ibíd, 142).

Santo Domingo decía a sus seguidores: «Con los pies descalzos, salgamos a predicar». Nos recuerda el pasaje de la zarza ardiente, cuando Dios dijo a Moisés: «Quítate las sandalias de los pies, pues el sitio que pisas es terreno sagrado» (Ex 3,5). El buen predicador es consciente de que se mueve en terreno sagrado, porque la Palabra que lleva consigo es sagrada, y sus destinatarios también lo son. Los fieles no sólo necesitan recibir la Palabra en su integridad, sino también experimentar el testimonio de vida de quien predica (cf. Evangelii gaudium, 171). Los santos han logrado abundantes frutos porque, con su vida y su misión, hablan con el lenguaje del corazón, que no conoce barreras y es comprensible por todos.

Por último, el predicador y el testigo deben serlo en la caridad. Sin esta, serán discutidos y sospechosos. Santo Domingo tuvo un dilema al inicio de su vida, que marcó toda su existencia: «Cómo puedo estudiar con pieles muertas, cuando la carne de Cristo sufre». Es el cuerpo de Cristo vivo y sufriente, que grita al predicador y no lo deja tranquilo. El grito de los pobres y los descartados despierta, y hace comprender la compasión que Jesús tenía por las gentes (Mt 15,32).

Mirando a nuestro alrededor, comprobamos que el hombre y la mujer de hoy, están sedientos de Dios. Ellos son la carne viva de Cristo, que grita «tengo sed» de una palabra auténtica y liberadora, de un gesto fraterno y de ternura. Este grito nos interpela y debe ser el que vertebre la misión y dé vida a las estructuras y programas pastorales. Piensen en esto cuando reflexionen sobre la necesidad de ajustar el organigrama de la Orden, para discernir sobre la respuesta que se da a este grito de Dios.

Cuanto más se salga a saciar la sed del prójimo, tanto más seremos predicadores de verdad, de esa verdad anunciada por amor y misericordia, de la que habla santa Catalina de Siena (cf. Libro della Divina Dottrina, 35). En el encuentro con la carne viva de Cristo somos evangelizados y recobramos la pasión para ser predicadores y testigos de su amor; y nos libramos de la peligrosa tentación, tan actual hoy día, del nosticismo.

Queridos hermanos y hermanas, con un corazón agradecido por los bienes recibidos del Señor para vuestro Orden y para la Iglesia, los animo a seguir con alegría el carisma inspirado a santo Domingo y que ha sido vivido con diversos matices por tantos santos y santas de la familia dominica. Su ejemplo es impulso para afrontar el futuro con esperanza, sabiendo que Dios siempre renueva todo... y no defrauda. Que Nuestra Madre, la Virgen del Rosario, interceda por ustedes y los proteja, para que sean predicadores y testigos valientes del amor de Dios. Gracias!

 

8 comentarios

LM
Yo tengo entendido que el que quema por dentro es el mismo SATAN, y no DIOS, por eso es necesario los axorcistas, para expulsarlo de dentro al exterior y aliviar así al poseido. Seria eso lo que queria decir Bergoglio?, lo digo porque como es tan contradictorio y AMBIGUO en sus comentarios....
5/08/16 10:26 AM
antonio
Que alegria ver a la una orden, de las que más estimo,discípulos de Santo Domingo,San Alberto Magno,Santo Tomas de Aquino!!,Santa Catalina de Siena!!!Fray Luis de Granada,San Pio V,San Martin de Morres, San Juan Macias,Santa Rosa de Lima, y muchos más.
Aparte del Carmén a que pertenezco, El Padre Royo Marin, Garrigou Lagrange, el Padre Philipon, Arintero, una de las espiritualidades más seguras que conozco, no cansan con un solo Santo, la libertad interior!!!, hablan en sus libros, de todos los Santos de la Historia de la Iglesia, otra forma de conocerla,San Francisco de Sales etc

Que dios los bendiga y lo haga con la iglesia.
5/08/16 11:35 AM
Excelente.
5/08/16 11:54 AM
antonio
Es una Espiritualidad muy buena y muy teológica, muy relacionada con el Carmén.

El padre Philipon, y Sor Isabel de la Truinidad, la mirada de un teologo sobre la espiritualidad,todos en sus grandes obras tratan la infancia espiritual, de Santa Teresita, y el cultivo de inhabitación trinitaria en el alma, estas Santas muy tratadas, en la Biblia de Monseñor Straumbinger, en sus famosos comentarios.

Discipulos de Santo Tomas claro!!!
5/08/16 12:13 PM
Francisco Javier
Me ha dado risa el comentario de LM a pesar que por dentro siento tristeza por el actual papado y el daño que esta haciendo tanta ambigüedad.
5/08/16 3:35 PM
Vladimir
En mi país latinoamericano, lamentablemente, la Orden de Predicadores, está muy ideologizada por la Teología de la Liberación, en sus aspectos negativos, como son la relativicación de la Doctrina, la Disciplina y la Liturgia de la Iglesia.
Se ve mucho hablar de los pobres, que no está mal; pero poco evangelizar sobre Cristo como centro de nuestras vidas y sobre la necesidad de ser liberados del pecado, que es la más radical de todas las opresiones.
Que Santo Domingo de Guzmám los vuelva al sentido original de su fundación, que fue el de predicar la Verdad, pero en su sentido integral: salvación de alma y cuerpo.
5/08/16 3:42 PM
Charo García
Querido o querida LM; (esto si que me sonó ambiguo)
Con el debido respeto; y cómo un símbolo de fraternidad entre quienes nos reconocemos cómo seguidores de Cristo.
Me permito informarte que; el FUEGO del Espíritu Santo de Dios, SÍ QUEMA POR DENTRO!. (....)
Y aparecieron unas lenguas cómo de fuego que se repartieron y fueron posándose sobre cada uno de ellos. (He 2, 3) Palabra de Dios
Francamente; aunque tu comentario sea frío, se escucha como atizado por el enemigo, quien aparentemente ha logrado alterar en ti el "termostato de la fe".
Bergoglio no sé cómo sería; pero Dios ya le ha cambiado el nombre y ahora se llama Francisco.
El Papa Francisco; quien con la mayor encomienda posible para un hombre de Dios, nos pide orar por él.
Algo que te recomiendo hacer; hasta por simple obediencia o para evitar en pecado caer; pues de Satan en frío o en caliente, sembrar cizaña es su deber; buscando así la división entre los creyentes, que quieren entregar a Dios, desde el fondo de su alma todo su ser.
Saludos; DTB.

P.D. Y por favor no me vayas a contestar que el fondo es del diablo; sólo porque es algo profundo. Y tal parece que coincide con la dirección del infierno. :/
5/08/16 5:56 PM
Beatriz
Charo, muchas gracias por tu comentario. Qué alegría encontrar personas que defienden al Papa y cómo debe agradarle al Señor!
5/08/16 11:40 PM

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